|XIII|
El karma tardará, pero siempre llega. Mientras más tarda más miserable será tu castigó
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-¡Esto no puede estar pasando! ¡Mi niego a creerlo! ¡Esto no es justo!-la castaña destruía cualquier cosa que había en su habitación.
Se encontraba haciendo un berrinche y uno de los grandes, las criadas se mantenían afuera de su habitación temblando del miedo y esperando una salvación. Temian de lo que sería capaz su princesa por su berrinche.
¿Causa?
Había leído el periódico, en dónde se hablaba de las grandes hazañas de Athanasia D'aramitz, la suma gobernante de un grandísimo imperio como Alvarez, sus conquistas sobre otros reinos e imperios habían causado que el imperio de Álvarez fuera el imperio más grande del continente, además de que era el más temido. Nadie se atrevía declararle guerra, sabiendo el resultado.
Una derrota humillante.
Athanasia D'aramitz, es una emperatriz temida, respetada y amada por todos. Hasta sus enemigo la elogiaban y respetaban por convertirse en la mujer más poderosa del continente, era intocable.
En todos lados se hablaba de ella como sí fuera una diosa.
Muchos decían que era la reencarnación de alguna diosa de guerra, otros que fue bendecida para ganar todos sus guerras.
-¡¿Esto es una puta broma?!
En el periódico se hablaba sobre la esperada boda de la emperatriz athanasia con su prometido, Lucas el archi-mago, la segunda persona más importante del imperio Alvarez seguido de la familia Lancaster, quiénes eran el escudo y espada del imperio.
-¡Esto no estaba en la historia!-arrojo un jaron al suelo, destruyéndolo completamente.
Se miró en el espejo, observando detalladamente su figura.
-¿Que hice mal?-murmuro-Yo soy la protagonista de esta estúpida historia, soy Jennette de alger Obelia la amada hija de ese estúpido cojo.
Llevó amabas manos a su rostro.
-Se supone que sería el ser más importante de este mundo ¡Pero era maldita bastarda lo arruinó todo!- jaló de sus cabellos-¡Cuándo llegué a este mundo era obvió que era la protagonista y la protagonista lo tiene todo! ¡Pero entonces porque?! ¿Porque no soy feliz? ¿No se supone que las protagonista son feliz? ¡¿Porque soy tan infeliz sí lo tengo todo?!
Lloriqueo como una niña pequeña que se le ha sido negado un juguete que tanto ha querido. Se acostó en el suelo y siguió con su berrinche.
¡Ella era la protagonista! ¡El ser más importante del mundo!
En su primer vida era Jun Ji-hyun, una chica coreana universitaria era la chica más popular de su colegio la envida de todos. Y por supuesto su ego creció hasta los cielos se había vuelto toda una narcisista de pies a cabeza nadie estaba a su altura, aplastaba a cualquier que no le agradaba y sí le gustaba un chico lo conseguía no le importaba sí ya tuviera pareja ella podía separarlos sí hacía lo deseaba. Después de todo ella era la Afrodita de su cuidad.
Pero...¿Saben del karma? ¿No?
Todo en esta vida se pagá y ella lo sabía.
Su vida se acabó a la edad de 22 años, siendo asesinada por una chica llena de rencor hacía ella por haberla humillado y atormentado por dos años. Fue apuñalada hasta la muerte. Mientras que podía escuchar todos los insultos hacía su persona.
Que muerte tan miserable había tenido.
Pero a pesar de todo el mal que había hecho, nunca se arrepintió se sentía tan injusta que haya sido asesinada por cosas tan tribales-según ella- y hacía al morir y llegar al mundo de las reencarnaciones la cuál no era bienvenida, fue enviada a un mundo dónde pagaría todos sus crímenes en vida y después sería envida al infierno a sufrir.
-¿Castigó? ¡Ja! ¡Esto es una bendición!
A la edad de 6 años había renacido como Jennette margarita, la protagonista de lovely princess. La tomó como un premió y recompensa por haber muerto tan jóven, se sentía tan afortunada de haber renacido como Jennette la princesa más amada del imperio Obelia.
Para su buena suerte-aunque algo extrañó-Su madre estaba viva y con el plan de presentarse como la madre de la única princesa del imperio, eso la emocionó por fin tendría la vida digna que merecía.
Y la obtuvo, se ganó rápidamente el amor del emperador y de cualquier que la rodeaba. Esa magia negra le era favorable y pudo conocer a la miserable athanasia, le dió mucha risa al verla vestida con harapos viejos.
-"Que niña tan graciosa"-fueron sus pensamientos al ver a athanasia quién se sentía tan avergonzada.
Athanasia se volvió su juguete de entretenimiento.
Durante tanto tiempo hasta la edad de 14 años, ella se volvió la "santa" y la princesa amada del imperio de Obelia mientras que athanasia se volvió la villana y princesa bastarda de Obelia.
Lo tenía todo, belleza, amor y poder. Un amoroso padre, una inteligente madre un prometido atractivo y servidumbre que la amaban. Todo eso lo tenía como compensación de lo que había sufrido en su vida anterior.
Pero todo ya estaba planeado, todo tiene su fin. Su castigó apenas iba empezando.
-¡Déjame salir! ¡Tu mentirosa y malvada!
Miró con molestia el gran espejo y se "vió" así misma en el espejo llorando con desesperación.
Era la verdadera Jennette.
-¡Eres tan cruel! ¡¿Cómo pudiste?!-le reclamaba la verdadera Jennette desdé dentro del espejo.
Ju Ji-hyun había engañado a la verdadera Jennette. Cuándo renació se dió cuenta que Jennette no estaba muerta si no que compartían el mismo cuerpo, dos almas y un cuerpo, obviamente eso no le agradaba ni un poco, sus planes serían arruinados. Por lo tanto durante dos meses soportando a la verdadera Jennette quién solamente hablaba sobre su amor hacía su madre, padre y hermana athanasia. Durante dos meses pudo controlar la magia negra y pudo encerrar a Jennette en alguna parte de su subconsciente y así controlar por completó el cuerpo.
La verdadera Jennette solamente podía ver con impotencia las maldades de ju Ji-hyun. No importaba cuántas veces diera pelea, ju Ji-hyun siempre le ganaba.
-¡Te maldigo ju Ji-hyun! ¡Te maldigo!-gritó la verdadera Jennette llena de rabia y la miró con furia.
-¡CÁLLATE!
Y sin importarle nada, le dió un golpe al espejo rompiéndolo por completó. Pequeños y grandes fragmentos cayeron al suelo su mano empezaba a sangrar pero no le importaba, su ira era inmensa.
-Esperó que tengas una muerte miserable.
Fue lo último que escuchó de la verdadera Jennette. Ella solamente podía rezar por una muerte miserable hacía la impostora.
-Yo soy la protagonista...
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-¡Ah pasado tiempo Bruce!- athanasia saludó al hombre delante de ella.
Un hombre alto y fornido de cabellos albinos y unos ojos ambarinos brillantes, piel clara y finos rasgos.
-Tambien me da gusto verla su majestad-le saludó de vuelta el hombre.
-¿Cómo está Adriana?
-Insoportable su majestad.
Athanasia al escucharlo se empezó a reír.
-Vamos, hay que comprenderla. Ella está viviendo su mayor anhelo, supongo que benjamín no la deja salir.
-Es verdad, madre se ha mudado con ellos para ayudarla y el viejo...bueno el solamente le está dando ánimos y dándoles consejos.
-¡Hahahaha!
Athanasia no podía parar de reír. Le encantaría ir al ducado Blackwell para ver todo el espectáculo pero no podía arriesgarse a perder la vida ante los repentinos cambios de humor de Adriana.
Estar embarazada sí que era complicado.
-"Algún día yo también..."-miró su vientre con ilusión.
Algún día ella también tendrá su anhelada familia.
Pero antes de eso, debería hacer una limpieza sí quería tener una vida pacífica.
-Obelia muy pronto caerá.
/CONTINUARÁ/
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¡ESTA HISTORIA SIGUE CON VIDA MÍS CONEJITOS PECADORES!
¡Esperó y les haya gustado!
¡¿Sorprendidos por el contenido del capítulo?!
¡Sí! ¡Que bueno!
¡Y Adriana ya salió con su domingo 7!
¿Athanasia también lo tendrá?
¡Quién sabe!
Pero bueno, ya saben que hacer voten y comenten que les pareció el capitulo.
¡Hasta la próxima mis conejitos tiernos y pecadores!
(N/A: pude que cambie la portada)
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