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𝐇 𝐰 𝐚 𝐚 火 - 14

—¿De dónde sacaron tanta información?

Incrédula de aceptar todo lo que allí había, Jihyo leía papel tras papel, sus pupilas iban de un lado a otro, leyendo cada mensaje -antes encriptados- que estaban escritos.

—Resulta que su tecnología es solo un poco más avanzado que la del resto del mundo, y al decir solo un poco son más o menos como ochenta o noventa años de ventaja que hay entre nosotros y ellos -respondió Chaeyoung, está estaba leyendo una de las múltiples hojas- Sus satélites, que obviamente son muchísimos más avanzados que los nuestros interceptaban mensajes diariamente en todo el planeta, algunos solo eran inocentes, incluso aburridos sin tener importancia alguna, aunque bueno, no todos eran simples mensajes.

—Nuestra mayor preocupación son los mensajes que Jihyo tiene en sus manos, las comunicaciones entre un tal Jeon Jungkook y varios hombres tanto en Europa como en Bosco nos han hecho preocupar demasiado.

—En efecto -agregó Soojin- El emperador Jeon ha mantenido conversaciones privadas con otros líderes mundiales, y en la mayoría de conversaciones se menciona mucho a Báltica y Seúl -dijo- No queremos generar pánico o cosas así, pero las palabras guerras e invasión también se repiten demasiado.

Jihyo asintió, está retiro los lentes de su rostro y suspiró, está miro a Soojin y a T/n.

—¿Se menciona algo al respecto de esto? -preguntó la reina- Me refiero a la llegada a Hwaa y su posterior visita a mi reino.

—Por el momento no, pero creemos que hay espías de Sendai infiltrados en el continente que podrían hablar de esto -respondió T/n, Jihyo suspiró- Hemos mantenido un sigilo total con respecto a nuestra llegada, hemos dado a entender que Hwaa es un continente tóxico y deshabitado, por lo tanto, y solo por si acaso, ellos llegarán a saber de nosotros creerían que somos enviados de otra nación pequeña e irrelevante para ellos.

—Eso se escucha bien -agregó Chaeyoung, está dejó el papel que sostenía en la pila y miró a la coreana de ojos grandes- La visita de las majestades Seo se ha mantenido en un nivel de secreto de estado, se le ha dicho a los habitantes que ellas son una comisiva de relaciones exteriores del imperio de Hiroshi, así que por ahora no hay peligro de que haya fuga de información.

—¿Y sobre los...?

—¿Los aerotransportes? -dijo Soojin.

—Si esos -contestó Jihyo.

—Los aerotransportes Dahlia y Leviatán han entrado en protocolo sigiloso, y si mal no recuerdo ahora mismo están estacionados en los polos norte y sur del continente de Báltica en modo defensivo -respondió Soojin- Hemos tomado algunas preocupaciones, nuestra llegada significó un gran peligro para todos ustedes, y para tratar de salvaguardar las vidas de toda la población, incluidas todas ustedes, tomamos posiciones de defensa. Cualquier movimiento sospechoso que esté a más de 300 kilómetros de distancia será sabido de inmediato por nuestros soldados, que a su vez le avisarán a la princesa Zhou sobre esto y si algo llegará a suceder usted sería la primera en saberlo reina Jihyo.

Jihyo se sorprendió y miró a la emperatriz mayor con sus ojos bien abiertos. Lo que Jihyo menos esperaba era recibir malas noticias, pero Soojin ya estaba preparada para cualquier cosa. Sea buena o mala.

—Wao... Eso, significa mucho para nosotros -musitó Jihyo, está recibió una sonrisa de Soojin- No esperaba que algo así pasará...

—No hay de que, es lo mínimo que podíamos hacer, nos recibieron con los brazos abiertos y en paz, proteger a nuestros aliados a todo lugar es parte de nuestra identidad como nación -respondió Soojin- Entonces, ¿Le parece si hacemos esta unión de manera oficial?

—Por supuesto -dijo Jihyo.

Horas después...

—¿Que es lo que más te ha gustado de vivir tanto tiempo? -Chaeyoung preguntó a T/n, la azabache sostuvo la copa de vino entre sus labios mientras miraba con devoción a la más baja, la azabache enarcó una ceja y Chaeyoung solo rió- Me refiero a que, has vivido más de dos mil años, has visto llegar y desparecer muchas cosas, y ni que decir de lo alguien pudo haber vivido durante tanto tiempo, ¿Cuál de esas te gustó más?

T/n, al por fin entender la pregunta apoyó su cuerpo en el barandal, luego pasó de mirar a la pequeña coreana para ver hacía las montañas.

—No son muchas cosas las que he vivido, me entrenado para poder ser una buena portadora del poder de mi familia y algún día cuando mis madres lo decidan ser una buena sucesora -esta dijo sinceramente, y aunque era algo bueno Chaeyoung la miró fijamente- Oye, es enserio...

—¿Ni siquiera algo que recuerdes y atesores con tu vida?

—Si lo dices así... -T/n hablo, está desabrochó los primeros botones de su camisa y saco un hermoso collar, todo bajo la atenta y sonrojada mirada de la menor- Cuando mi abuela y mi tía murieron y yo perdí el control este collar fue la única cosa que me mantuvo cuerda, cuando en medio de mi rabia destruí a esos hombres sentí que la energía de mi abuela me envolvió, se sentía cálido, cómo un abrazo, cuando regresé a la normalidad y mis madres me habían encontrado ellas dijeron que mi collar brillaba demasiado -esta dijo, y luego pasó de mirar al cielo para ver a la estrella que la miraba y la escuchaba atentamente- Tal vez suene estúpido, pero quiero creer que ellas me protegieron en ese entonces, que mi abuela y mi tía evitaron que yo cayera en la desesperación, que ellas aún viven, que aún nos protegen, y que este emblema, el emblema de los Seo es la manera en la que ellas pueden estar presentes aquí, conmigo.

—No creo que sea estúpido -expresó Chaeyoung, está puso su mano sobre la de T/n y la acarició tiernamente- Nunca me consideré alguien creyente o religiosa, siempre acostumbré a guiarme por la razón y en no creer en nada hasta que se demuestre que si existe, pero también creo firmemente que hay algo más allá después de la muerte, no sé cómo será en tu cultura, pero en la mía creemos que las personas que dejan este plano no se van del todo, ellas están ahí, guiandonos y cuidandonos.

T/n sonrió, agradeciendo así el gesto de Chaeyoung.

—Eso suena bonito -dijo- Creeré eso también.

Luego simplemente ambas se quedaron en silencio. El momento era hermoso, único, el cielo nocturno estaba lleno de estrellas y luces, la luna se coronaba hermosa en el centro, dándoles ese atisbo de luz que hacía al momento algo mágico.

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