CAPÍTULO 43: FOR THE FIRST TIME IN FIVE YEARS
—— FOR THE FIRST TIME IN FIVE YEARS ——
—¿Están aquí?— Preguntó Eliana al ver que su madre había vuelto, lo que significaba que su tía y ella no habían vuelto solas como acostumbraba a pasar cuando se iban.
—Sí, todos.— Sonrió Astrid mientras terminaba de hacerla una trenza a Hope.
—¿Todos?— Preguntó la mayor de las hermanas algo asustada por lo que eso significaba, principalmente por qué de las dos, Hope era la más tímida.
—Mamá os dijo que no íbamos a volver solas.— Las recordó esta vez Taylor mientras Eliana se agarraba de la mano de su tía, para luego las cuatro dirigirse al porche, donde los demás de encontraban desayunando.
—¡Y no lo estoy pidiendo!— Gritó Klaus desde fuera, haciendo que Astrid y Taylor se mirasen viendo que algunas cosas no cambiaban, en especial los momentos en los que el híbrido se dejaba llevar por la ira a pesar de saber que sus hijas podían escucharle.
—Atención todos, mirad quienes se han despertado.— Informó Astrid mientras abría la puerta, captando la atención de todos para a continuación ambas niñas salir. Al ver a los seis, Eliana retrocedió hacia atrás quedándose detrás de su hermana mayor, mostrando que de alguna forma estaba intimidada. Por su parte, el resto de la familia miró a las dos niñas con una amigable sonrisa, a fin de cuentas eran extraños para ellas.
—Hola...— Saludo Hope algo asustada, mientras su hermana pequeña la agarraba del vestido con nerviosismo.
—Hola.— Sonrió Klaus mirando a las dos niñas sin saber muy bien como reaccionar.
—¿Mamá podemos ir a jugar al jardín?— Preguntó la mayor mientras se daba la vuelta para mirarla.
—Sí, claro.— Respondió Astrid haciendo que ambas salieran corriendo, alejándose de aquel momento tan incomodo que se había formado.
✶⊶⊷⊶⊷❍❍⊶⊷⊶⊷✶
—¿Qué cosas horribles las has contado?— La preguntó Klaus a Astrid, haciendo que la aludida le mirase con una expresión de incredulidad por su pregunta.
—Las he contado que eres un híbrido como yo, también que eres muy mayor. Solo tienen siete y cinco años, podemos evitar los detalles sangrientos.— Alegó con obviedad sin entender porque Klaus reaccionaba así, Hope tenía solo dos años cuando sucedió todo, era evidente que no se iba a acordar de su padre ni de nadie, y Eliana no había nacido todavía. Para ellas todos eran desconocidos, sí habían preguntado y escuchado hablar de su familia, pero eso no significaba nada.
—Alguien ha debido de menospreciarme, tal vez Taylor o la arpía de Mary.— Sugirió Klaus mostrando que estaba enfadado porque la reacción de sus hijas no es la que siempre había esperado e imaginado.
—Para.— Le detuvo Astrid molesta por lo que estaba insinuando, principalmente por qué Mary había corrido el riesgo ayudándolas a investigar y a cuidar de ellas, y estaba más que segura que ella no había dicho nada para que ambas tuvieran miedo de su padre. —Me he pasado cinco años protegiendolas de todo, incluidos los rumores de terror que circulan sobre ti. No conocen tu historia, lo que sí saben es que proteges a tu familia pase lo que pase.— Explicó, esperando que Klaus fuera consciente de que aunque querían evitar que supieran la larga y sangrienta historia familiar era cuestión de tiempo que lo supieran, pero a pesar de ello harían todo cuanto estuviera en su poder para protegerlas de la realidad.
—Aun así me tienen miedo.— Se quejó el híbrido sin apartar la mirada de las dos niñas, las cuales estaban sentadas en unas sillas dibujando.
—Ambas son muy sensibles, y ahora no estás tranquilo precisamente. Se consciente que es la primera vez que os ven a todos en cinco años, por mucho que las haya contado sois desconocidos para ellas.— Le recordó Astrid esperando que fuera consciente de que debía poner de su parte y ser paciente, era cuestión de tiempo que ambas cogieran confianza con todos. —Eras el príncipe de sus cuentos de hadas, Klaus. Y ahora eres real, tienes que estar a la altura.— Añadió juntamente antes de marchase esperando que fuera consciente de que algunas cosas llevaban su tiempo.
✶⊶⊷⊶⊷❍❍⊶⊷⊶⊷✶
—Lo siento, se que duele.— Se disculpó Astrid mientras la quitaba la máscara a Keelin, la cual puso una mueca de dolor.
—Ya, pero lo haces por tu familia, lo entiendo. Veo que sufren mucho.— Comentó sarcásticamente, mostrando que estaba muy enfadada por el simple hecho de que la estuvieran usando como bolsa de veneno personal, a pesar de que la habían prometió que después de ello la dejarían en libertad. —¿Los saludos del almuerzo se han quedado sin gas?— Preguntó sarcásticamente mientras la híbrida se daba cuenta de las marcas que la mujer lobo tenía en sus muñecas, las cuales no se habían curado aún.
—Tienes cortes, ¿por qué no te curas?— Quiso saber al no entender como es que una mujer lobo, con la maldición rota, era capaz de impedir la curación así como mantener a ralla sus otros instintos asesinos.
—Nunca me he tragado ese rollo de la manada, pensaba que me pasaba algo. Pero comparada contigo soy una santa, una reina loba que traiciona a su especie por unos vampiros, es repugnante.— Comentó, mirando con desprecio a la híbrida la cual mantuvo la misma expresión aunque por dentro aquellas palabras la hicieron daño, principalmente por qué nadie sabía cuánto había perdido solo por ser una criatura entre ambas especies enemigas.
—¿Por qué la has quitado la máscara? Necesitamos todo el veneno que podamos sacar.— Intervino en ese momento Freya, la cual se acercó corriendo a Keelin para volver a ponerla la máscara y así seguir extrayendo más veneno de hombre lobo.
—Necesita un descanso.— Explicó la Original, mostrando que por muy cruel que hubiera podido ser Keelin con sus palabras, Astrid solo quería ayudarla, aunque también quería ayudar a su familia, por lo que todo se convertía en un conflicto de intereses.
—Sobrevivirá.— Dijo Freya sabiendo que lo más importante era el bienestar de su familia. —Sino conseguimos más veneno para hacer más cura ninguno tendréis la misma suerte.— La recordó esperando que fuera consciente de que debían de obtener todo el veneno necesario, para que si Marcel o cualquiera con su veneno, decidía hacerles una visita, no murieran sabiendo que ya no había más cura.
—Haz lo que tengas que hacer, me ahogo aquí adentro.— Sentenció Astrid marchándose, mostrando que la daba igual lo que la fuera a pasar a la mujer lobo, a fin de cuentas la necesitaban con vida para que todos pudieran sobrevivir.
✶⊶⊷⊶⊷❍❍⊶⊷⊶⊷✶
—Deberíamos de decírselo a mamá.— Sugirió Eliana mientras pintaba con las acuarelas que había sobre la mesa.
—No la gusta que hagamos magia.— Alegó Hope sabiendo que si ambas llevaban las pulseras era para evitar que hicieran magia, pero también para que ningún brujo consiguiera dar con ellas.
—Pero...— Empezó a decir Eliana en señal de queja, creyendo que debían de decirla a su madre lo que había pasado.
—No nos va a pasar nada, mamá no lo permitirá.— La tranquilizó Hope mirando a su hermana pequeña, la cual tras las pesadillas que ambas habían tenido, se sentía asustada.
—La mujer de mis sueños también lo dice.— Murmuró haciendo alusión a la mujer que desde hacía meses veía en sus sueños y que, en más de una ocasión, había intentado dibujar.
—Qué bonito.— Comentó Klaus mientras se acercaba a las dos niñas, observando los dibujos que ambas estaban haciendo, viendo que ambas habían heredado la pasión y la habilidad para el dibujo como sus padres.
—Mamá dice que te gusta pintar.— Comentó Eliana alzando la cabeza para mirar a Klaus, el cual sonrió al ver que una de las dos le había hablado, eso era un comienzo.
—Así es, mucho.— Afirmó, haciendo que las dos niñas intercambiarán una mirada para a continuación Hope darle un folio, poniéndolo sobre la mesa delante del híbrido, para después indicarle con la mirada que se sentará. Ante aquel gesto, Klaus sonrio de nuevo mientras se sentaba en la silla y comenzaba a pintar.
✶⊶⊷⊶⊷❍❍⊶⊷⊶⊷✶
—¿Sigues con tu deseo de querer beber hasta perder la conciencia?— Inquirió Astrid mientras se acercaba a su hermano y se sentaba en las escaleras de la entrada.
—Ese deseo nunca desaparece.— Rio mientras mantenía la misma postura, mirando a un punto indefinido. —Sabes, al ver a Hope y a Eliana me recordaron a nuestra hermana y a mi, cuando éramos niños temíamos a todo el mundo.— Comentó sonriendo, viendo que en algunos aspectos todavía se mantenía vivo el recuerdo de su hermana pequeña, y no solo porque la menor tuviera su nombre.
—Espera a que cojan confianza, sobretodo Eliana.— Admitió Astrid mientras sonreía, sabiendo que si ambas actuaban así era por qué tenían miedo, pero aquello era lo que siempre habían deseado, querían conocer a su familia y finalmente su sueño se había hecho realidad aunque las hubiera asustado.
—Nunca pensé que en cinco años pudiera cambiar todo.— Murmuró mientras su hermana mayor le miraba viendo que le pasaba algo, y estaba segura que lo que le pasaba tenía relación con lo que había ocurrido. —Para nosotros es media década, para un ser humano es un cuarto de una vida.— Prosiguió sabiendo que para la más pequeña de sus sobrinas, cinco años era toda una vida donde a las únicas personas que conocía así como Hope, eran a su madre y a su tía, todos los demás eran personas que sí sabía que eran familia, pero los cuales habían estado desaparecidos. —Y tras todo lo que ha pasado..., ¿no te asusta que sepan la verdad?— Quiso saber mientras la miraba, haciendo una alusión a todas las muertes que todos, en especial sus padres, habían causado así como la fase en la que su madre había apagado su humanidad.
—La sabrán cuando sean lo suficientemente mayores como para entenderla. Ninguno de nosotros podemos ser considerados santos, así que es cuestión de tiempo que lo descubran.— Explicó Astrid sabiendo que aquella realidad la aterraba, eran muy pequeñas para entenderlo, pero también sabía que no las iba a poder proteger toda una vida menos aún podría ocultar lo que eran. Sí, eran asesinos, pero también eran una familia que a pesar de las diferencias y las peleas se habían ayudado y habían hecho frente a todo.
—Me he dado cuenta, también, de que ambas no hacen magia. Asumo que es para que no las rastreen, pero estoy seguro de que no saben como de poderosas son.— Añadió Leonidas mirando a su hermana con desaprobación, ya que privarlas de su capacidad de hacer magia era privarlas de una parte de sí mismas.
—Por mucho que quiera ayudarlas y guiarlas con la magia es diferente a la que tuvimos, el poder de Hope es como el de Freya y solo ella la podrá enseñar, pero el de Eliana... se escapa a lo que hemos conocido.— Explicó la híbrida sabiendo que lo mejor es que una bruja las enseñara, no ella que ya no tenía nada de poder. —¿A que viene este interrogatorio?— Quiso saber Astrid mientras miraba a su hermano confundida.
—En la Chambre de Chasse estuve pensando, mucho en verdad. Y me preguntaba cómo hubiera sido todo si no hubiéramos tomado algunas decisiones, en especial yo. Sino hubiera sido un idiota Yelena aún seguiría aquí.— Murmuró mientras agachaba la cabeza, haciendo que Astrid apoyará su cabeza en el hombro de su hermano al entender su dolor.
—Así que esto es por Lena...— Comentó sorprendida aunque en realidad era algo bastante evidente. —Mira, Leo, se que aún estás en una fase de duelo, tal vez de culpabilidad, donde has dejado de culpar a los demás para culparte a ti mismo. Y puede que sí fuéramos responsables de su muerte, pero el primer paso para que el dolor desaparezca es perdonarse a uno mismo.— Le explicó su hermana sabiendo por lo que estaba pasando, para su desgracia también se había culpado, de la misma forma, con las muertes de Tyrion y de Eliana, principalmente con la de su hermana pequeña. —Tu no mordiste a Lena, ni hiciste nada para ponerla en peligro. Lucien lo hizo no solo para demostrar lo poderoso que era, sino para hacernos ver que no podríamos hacer frente a ningún ataque por su parte y que jamás podría ser parado.— Le recordó esperando que fuera consciente que todo aquello sucedió como forma de venganza hacia los Originales, pero también hacia Leonidas en especial por haber sido él a quien Aurora había excogido. —No creo en la leyenda de que todo lo que queremos lo destruimos, la mayoría de las veces lo destruyen otras personas por venganza.— Afirmó la rubia sabiendo que aquello no podía ser cierto, porque entonces ellos habían terminado destruidos y no lo estaban, solo estaban rotos por todo lo que había sucedido.
—Admito que sí te echado de menos.— Comentó Leonidas sabiendo que a quien más había echado en falta había sido a su hermana mayor, ya que no sabía como pero Astrid siempre tenía alguna forma para ayudarlo y apoyarlo.
—¿Quien sino iba a soportarte?— Inquirió ella con un tono de burla.
—¿Las has hablado de Hayley y de nuestra hermana?— Quiso saber Leonidas esperando que la respuesta fuera positiva.
—No, aun no lo he hecho. He evitado detalles de peleas, guerras, muerte y mutilación.— Admitió Astrid mostrando que la que no estaba preparada para hablar de ambas era ella, principalmente por qué no quería decirlas a sus hijas que las dos mujeres que formaban el nombre de la menor habían muerto intentando protegerla.
—¿Entonces que las has contado? El noventa por ciento de nuestra historia se basa en ello.— Alegó Leonidas sarcásticamente.
—Las he contado el diez por ciento restante.— Respondió su hermana mayor con obviedad sabiendo que lo que sus hijas necesitaban saber eran las historias donde habían sido felices, no donde había dolor o ira.
★★★
Se que os he hecho sufrir casi dos semanas desde la última actualización, pero os garantizó de que merece la pena la espera, porque este capítulo es sin duda uno de los más bonitos que he leído.
Con respecto la primera escena..., bueno Klaus no puede no ser Klaus sino grita y asusta a alguien, aunque admito esa forma de protección que Eliana siente que Hope la transmite, ya que a fin de cuentas es su hermana mayor. Pero también creo que es enternecedora la escena, para todos es el reencuentro con la mayor de las hijas de Klaus y de Astrid, pero con Eliana es la primera vez que la ven todos, para ellos ha sido una desconocida, una niña que hasta hacía unos días no sabían ni que existía, y creo que eso le da el toque intimidatorio, cortante y vergonzoso de esa escena, donde ambas ven a su tan ansiada familia por primera vez.
Aunque también quiero resaltar a Klaus, el cual estaba modo "dios, son la cosa más bella del mundo" cuando las vio, pero lo que más me gusto fue hacer esa escena entre él y Astrid observando a ambas niñas de lejos. Obviamente tenía que hacer la escena donde Klaus cree que ellas le tienen miedo, y tenía que hacer que Astrid le bajará de esa nube de paranoia, para que comprendiera que tenía unos altos estándares por cumplir y a dos personas a las que no podía defraudar.
Por otro lado, la escena de Hope y Eliana, enefecto, la menor de las hermanas ve a alguien ¿quien creéis que sera?
La llegada de Klaus a esa escena es como, cuando un niño pequeño quiere hacer amigos, y me encanta el hecho de que ambas estén modo, vale puedes quedarte. Osea sin duda puedo deciros que Klaus en un futuro no muy lejano lo va a tener complicado, porque lo de ser la oveja negra de la familia se hereda, y os aseguro que una de esas dos niñas será la versión 2.0 de Kol más que de Klaus, citando al vampiro "el híbrido juega en otra liga".
Para finalizar, la escena de Leo y de Astrid, me encanta el como su hermano la recrimina que las haya privado de su naturaleza mágica, pero creo que es entendible el punto de ella. A fin de cuentas ya no es para protegerlas, sino también porque es una magia que se escapa de sus manos y que a pesar de tener conocimientos no las puede ayudar de la manera que desearía.
Dicho esto, puedo garantizar que el próximo capitulo se verán mas cosas, y que os va a encantar las escenas de Klaus y las hermanas Mikaelson, y más las de Astrid con ellas. Sin duda las de Astrid con sus hijas son de mis favoritas.
También puedo decir que queda menos para ver el lado Klaus de Astrid, porque sabemos como es cuando hacen daño a sus hermanos. ¿Pero a sus hijas? Klaus a su lado es un santo.
¿Qué os ha parecido el capítulo?
Os leo ♥️
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro