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- ¿Estás lista? - Preguntó Alec, frotando los hombros de Jumelle para calmar sus nervios. No funcionó, pero ella asintió de todos modos. Él besó su sien suavemente y tomó su mano, tirándola hacia la salida del castillo de los Vulturi donde Jane, Felix y Demetri estaban esperando.

- ¡Jumelle!

Jumelle se detuvo rápidamente y se dio la vuelta para ver a Heidi caminando rápidamente hacia ella y Alec. Claramente impaciente, Heidi corrió a la velocidad de un vampiro y los alcanzó en un segundo.

- Um, pensé que podrías querer estos - Heidi le entregó a Jumelle algunas fotos.

- Heidi, ¿de dónde sacaste esto? - Jumelle murmuró mientras hojeaba las fotos. Había algunos de Alec y ella misma (uno de al menos cada aniversario), algunos contenían a Jane y menos a Demetri y Felix. Jumelle se río entre dientes de algunos de los más divertidos; Felix y Alec luchando (Felix ganó, por supuesto), Jane y Alec discutiendo sobre quién era más importante para Jumelle (Alec ganó esa batalla) ...

- Yo, uh ... imprimí las fotos que Jane y los chicos tomaron de algunos de estos momentos. Solo pensé que a los Cullen les gustaría ver cómo te ha ido estos últimos seis años.

- Wow, Heidi - sonrió Jumelle, abrazándola con fuerza. - Gracias. - Si bien Heidi nunca lo mostró frente a Aro, Caius y Marcus, sí tenía corazón. Una muy buena también.

Jumelle se apartó de Heidi y Alec sonrió a Jumelle mientras ella guardaba las fotos de forma segura en su túnica Vulturi.

- Me aseguraré de dejarlos con los Cullen. - Heidi asintió y rápidamente se despidió de Demetri, Felix y Jane antes de regresar al castillo.

Jumelle se volvió hacia los otros tres miembros Vulturi, todavía agarrando la mano de Alec con fuerza.

- Hagámoslo.

- Jane. Qué sorpresa.

Jumelle tragó saliva ante la voz familiar de su abuelo mientras ella y los miembros de los Vulturi estaban parados en el porche delantero de la casa de los Cullen. Alec apretó la mano de Jumelle de manera tranquilizadora; no es como si calmara los nervios locos dentro de ella.

- Vinimos a ver al niño - dijo Jane simplemente, su voz tenía el tono frío y sin emociones habitual que era cuando estaba en un trabajo.

Carlisle asintió y se hizo a un lado para invitarlos a su casa.

- Muy bien. Te esperábamos ahora.

Jane cruzó el umbral primero, seguida rápidamente por Félix y luego Demetri. Jumelle se quedó inmóvil por un momento, por lo que también mantuvo a Alec quieto. Él soltó su mano rápidamente, pero no antes de que los agudos ojos de Carlisle captaran el movimiento.

Ignorando la mirada de Carlisle lo mejor que pudo, Jumelle cruzó el umbral y entró en el hogar familiar de los Cullen. Alec gruñó detrás de ella, advirtiendo a Carlisle que dejara de mirarla fijamente, y un movimiento repentino llamó la atención de Jumelle. Su cabeza giró hacia la izquierda y sus ojos se abrieron un poco.

Emmett estaba parado allí, musculoso como siempre. Sus ojos eran un caramelo claro, revelando que había cazado bastante recientemente. Jumelle tragó saliva, recordando la época en que había cazado animales.

Alec se paró frente a Jumelle protectoramente, gruñendo de advertencia a Emmett. Emmett no hizo ningún movimiento para atacar, solo se quedó allí como una especie de barrera protectora para los otros Cullen.

Félix apareció de repente al lado de Jumelle y la agarró del brazo con fuerza, casi haciéndole sangrar. Prácticamente arrastró a Jumelle a la sala de estar, donde se sorprendió por completo al ver a toda su familia desplegada ante ella.

Ninguno de ellos había cambiado en lo más mínimo, excepto uno.

Renesmee.

La hermana gemela de Jumelle estaba sentada en el sofá, luciendo tan saludable como siempre, acunando a un bebé en sus brazos. Su bebé. Sobrino de Jumelle. El cabello de Nessie era mucho más largo que la última vez que la vio Jumelle, lo cual era de esperarse, por supuesto. Sus ojos eran una mezcla de marrón y dorado. Donde los de ella eran dorados, los de Jumelle eran rojos. Signos de alimentación en humanos.

- ¿Dónde está el niño? - Jane preguntó de repente, llamando la atención de Jumelle. Su atención ahora estaba enfocada en el bebé que sostenía en los brazos de Renesmee.

- Está durmiendo - dijo Renesmee desafiante. - Te sugiero que no lo despiertes ahora; Jacob no estará feliz.

- No nos importa lo que piense ese chucho - gruñó Alec con saña.

- Alec - susurró Jumelle, colocando una mano en su pecho para calmarlo un poco. Él reaccionó bajo su toque, relajándose ligeramente. Todos los Cullen miraron la acción, mirando la mano de Jumelle en el pecho de Alec. Obviamente Renesmee les había dicho que eran compañeros, pero claramente los Cullen no esperaban que lo mostraran durante la visita.

- No deseamos que el niño esté despierto - continuó Jane, ignorando el pequeño arrebato de Alec. - Simplemente deseamos ver al niño por nosotros mismos.

- Puedes irte al infierno. - Todas las cabezas se volvieron hacia Jacob mientras entraba en la habitación. Descansó junto a Renesmee, envolviendo un brazo protector alrededor de su cintura. Alec enseñó los dientes, obviamente pensando que iba a comenzar una pelea.

- Jacob - siseó Renesmee, tomando la misma acción que Jumelle y colocando una mano sobre el pecho de su impresora. - Cálmate, solo quieren verlo.

- Que me condenen antes de que le pongan un dedo frío.

- No lo harán - dijo Renesmee para tranquilizarla. - Yo... se le daré a.... a Jumelle.

Los ojos de Jumelle se abrieron con sorpresa. ¿Renesmee se estaba ofreciendo a darle su hijo a Jumelle? ¿Después de todo lo que le había hecho, el dolor emocional y físico de hacerla pasar por el infierno durante la ausencia de Jumelle, y todavía se ofrecía a dejarla abrazar a su hijo?

Jumelle extendió mis brazos sin saberlo, ganándose una mirada de Jacob.

- ¡De ninguna manera! - él gritó. - Después de todo lo que ella te hizo pasar, Ness, ¡¿la vas a perdonar así ?!

- ¡Jacob, ella es mi hermana! - Renesmee finalmente espetó. - Si ella no puede abrazar a su sobrino ni una sola vez, no importa cuándo o por qué, debido a que estás en el camino, entonces eso no me convierte en una buena persona, ¿verdad?

Jacob gruñó amenazadoramente mientras Renesmee continuaba caminando hacia Jumelle. Jumelle dio un cauteloso paso hacia adelante y Alec apoyó la mano en su hombro. Ella le dio una mirada, un momento de contacto visual suplicante, y él soltó a regañadientes a su pareja.

Acunar a su sobrino en sus brazos por primera vez fue el sentimiento más maravilloso. Jumelle estaba tan feliz de haber tenido finalmente al bebé de su hermana en sus propios brazos. Mostró signos de ganar el cabello y los ojos de su madre. Una mini Renesmee masculina.

Jumelle miró a su hermana con una sonrisa.

- Es hermoso - dijo finalmente. - Simplemente precioso.

Alec y Jacob se miraron el uno al otro, pero ninguno se atrevió a interrumpir el momento fraternal para recuperar a sus compañeras. Alec parecía increíblemente incómodo; Jumelle se lo iba a preguntar más tarde.

- ¿Cuál es su nombre? - preguntó en voz baja. Jane y Felix parecían impacientes, pero Demetri parecía comprensivo. Tenía una expresión de dolor en su rostro, pero comprensión en sus ojos.

- Daniel. Su nombre es Daniel Vincent. - La cabeza de Jumelle se disparó.

- ¿V-Vincent? - repitió. Renesmee miró hacia abajo, mordiéndose el labio tímidamente.

- Uh, sí ... - se calló torpemente, dejando toda la habitación en silencio. Jumelle le devolvió lentamente a Daniel a Renesmee, quien la miró con cautela.

- ¿Elle? - Ella susurró. - ¿Qué pasa? ¿Por qué te detuviste después de que mencioné...

De repente jadeó cuando algunas lágrimas escaparon de sus ojos.

Felix gruñó mientras luchaba contra la emoción que amenazaba con aflorar. Obviamente, no podía soportarlo, ya que rápidamente salió de la habitación. Demetri lo siguió lentamente, claramente sumido en sus pensamientos.

- Está bien, lo has visto. Creo que se te acabó el tiempo - dijo Carlisle rápidamente. - Ustedes puede irse ahora.

- Volveremos muy pronto - sonrió Jane con malicia. - Lo prometo. - Despegó tras Felix y Demetri. Jumelle lanzó una mirada en dirección a Alec. Sus ojos suplicaban, suplicaban que ella se fuera con él y no se quedara aquí. Jumelle negó con la cabeza con un pequeño gemido y él la alcanzó con un paso de gigante. Alec abrazó a su pareja en un fuerte abrazo y Jumelle lloró suavemente en sus brazos.

- Elle, tienes que pensar en esto - susurró Alec rápidamente, tratando de hacer que Jumelle cambiara de opinión. Ella negó con la cabeza, pero él continuó. - Por favor, JuJu. No tienes que hacer esto. - Jumelle siguió llorando y moviendo la cabeza.

- No tengo otra opción, Alec - gimió suavemente, mirando a los ojos de Alec. Sacudió la cabeza. La familia de Jumelle observó casi con disgusto mientras ella y Alec continuaban tocándose cariñosamente el rostro del otro y susurrándose cosas tranquilizadoras, tratando de cambiar de opinión.

- Lo haces, JuJu, lo haces - susurró Alec apresuradamente.

— Tú también — protestó Jumelle mientras más lágrimas escapaban de sus ojos. - No tienes que volver, incluso podemos ir a otro lugar. Yo sólo ... no puedo soportar la idea de ... volver allí cuando ... cuando mi familia, mi casa ... está aquí. Alec negó con la cabeza y cerró los ojos con fuerza.

- Elle, no lo entiendes. Se lo prometí a él, a Jane ya mí, ambos lo prometimos.

- Lo sé, pero ahora es el momento de romper esa promesa, Alec. Por favor.

Alec negó con la cabeza continuamente.

- ¡No puedo, Ju, sabes que no puedo! - siseó. - ¡Son ellos o yo!

- No puedes hacer esto, no puedes obligarme a elegir - gimió Jumelle. Su familia continuó mirando con horror mientras pensaban en la idea de que ella se quedara con ellos. - Alec, te elegiré a ti. Siempre te elegiré, y lo sabes.

- ¡Pero yo no, Ju! - Alec gritó finalmente, alejándose de su pareja. - Siempre dices que siempre soy yo, pero no lo es, ¿verdad?

- Alec, ¿qué estás ...?

- ¡Te he visto a ti ya él! - Alec señaló hacia la puerta, obviamente hablando de Felix o Demetri. Jumelle negó con la cabeza.

- Alec, tienes que estar bromeando. - Todas las lágrimas de Jumelle se habían ido ahora. Los Cullen miraron conmocionados, aun registrando desde la afectuosa conversación hasta el comienzo de una pelea y una posible ruptura.

- ¡No lo soy! ¡He visto la forma en que lo miras y la forma en que te mira!

- ¡Alec, somos compañeros!" Gritó Jumelle. "¡¿De verdad crees que te engañaría?!

- ¡No lo sé en este momento, Elle! ¡Porque seguro que así parece!

La mandíbula de Jumelle se cerró de golpe. Estaba más que enojada, estaba furiosa.

- No puedo creer que acabas de decir eso - murmuró, apartando la mirada de su mirada enojada. La expresión de Alec se suavizó instantáneamente, pero ya era demasiado tarde.

- Elle, estoy tan ...

- ¡No quiero escucharlo! - Jumelle espetó. Alec dio un paso hacia ella, pero ella dio un paso atrás, casi chocando contra Renesmee y Daniel. - ¡El daño ya está hecho, Alec!

- Ju -.

- ¡SOLO LARFATE! - Gritó Jumelle. Alec trató de dar un paso hacia ella de nuevo, pero ella gritó en protesta. - ¡LARTE, SOLO VETE YA! Ve y quédate con Heidi o lo que sea ... ya no me importa.

El rostro de Alec mostraba sorpresa e ira.

- Oh, ya veo cómo es - Salió y Jumelle miró a Renesmee, quien le había entregado a Daniel a Jacob. Su labio inferior tembló y Renesmee extendió los brazos para que su hermana colapsara, lo que hizo con gratitud.

Jumelle acababa de elegir a su familia sobre su pareja y lo lamentó al instante.