𝐂𝐚𝐩𝐢́𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟎𝟐
Después del encuentro fugaz con la chica, llegué a mi salón de clase para tomar asiento en mi pupitre, después estuve pensando por unos minutos y me quedé pensando en ella, la verdad siento que la he visto en alguna parte, pero no recuerdo en donde, debió haber pasado hace tiempo que solo me dejó esta sensación, por alguna extraña razón esto comienza a desesperarme, tengo que saber más sobre esa chica... pero ¿¡Qué estoy pensando!? ¡No debería pensar así, apenas la conozco! ¿Por qué querría saber más de ella? No debería de importarme, pero aun así no logro sacármela de la cabeza y eso que solo vi su cabello, no vi su cara como tal debido a que la tenía baja... pero esa silueta... no no alto Jake deja de pensar tanto en eso y concéntrate, estaba tan enfocado en mis pensamientos hasta que escuché que me hablaban.
—¡Jake!, ¡Hey Jake! ¿Estás ahí? ¡Responde! —lo llamó exclamando para romper la burbuja que tenía.
—Eh ¿Qué? ¿Qué decías? —pregunté confundido que de forma alarmante miré a todos lados.
—Nada relájate hermano, ¿En qué estabas pensando? Te ves muy ido, ¿Pasó algo? —preguntó mi mejor amigo curioso moviendo ligeramente su cabeza hacia un lado observándome.
—En... —iba a decirle, pero rápidamente me retracté—. Nada importante, no te preocupes —respondí indiferente que incluso desvié la mirada.
—Vamos a ti algo te pasa, no puedes ocultármelo, dime que es —insistió con curiosidad.
—"Conociéndolo sé que seguirá insistiendo en el tema, pero no quiero que me fastidie porque piense en una chica" —pensé algo frustrado intentando mantenerme lo más serio posible—. Ya te lo dije, no es nada importante —lo observé con seriedad.
—niega con la cabeza—. Jake, podrás pensar en lo que quieras, pero sabes que conmigo no tienes por qué ocultarlo —siguió insistiendo.
—solté un suspiro cansado—. ¿Desde cuándo tengo que decirte todo? Somos mejores amigos, pero seamos honestos tanto tu como yo tenemos secretos y yo por mi parte no te obligo a decir nada —respondí indiferente mientras desviaba nuevamente la mirada, él se quedó callado.
Pasaron minutos de silencio que incluso creí que por fin había desistido con el tema que hasta suspiré de alivio a mis adentros hasta que...
—¿¡Acaso se trata de una chica!? —preguntó asombrado golpeando la mesa del pupitre captando mi atención.
—No tengo tiempo para pensar en eso, deberías saberlo —respondí serio mientras me puse de pie y me dirigí a la puerta del salón—. "Aunque si se trate de eso" —pensé nuevamente, pero sacudí mi cabeza ante esos pensamientos.
—Oh vamos ¿No le puedes contar a tu mejor amigo? ¿Acaso no confías en mí?, eso duele Jake —preguntó indignado a paso apresurado tratando de alcanzar a Jake antes de salir del salón.
—Deja de ser dramático Axel —comenté con una sonrisa de lado y dándole un zape.
—¡Ay, eso dolió! —se quejó mientras se tocaba la cabeza por el golpe—. No, ya no, busca otro mejor amigo que aguante tu seriedad y frialdad, este mejor amigo se marchitó —habló dramático que se recargó en la puerta para hacer una pose exagerada de indignación.
Y así como lo ven es mi mejor amigo, desde hace años nos conocemos y nos llevamos muy bien, no ha habido alguna cosa por la cual pelear, se los describo, Axel es de mi estatura 1.80, tiene el cabello negro como la noche, tez morena y ojos de color café claro, su cuerpo es delgado pero bien trabajado, en cuanto a personalidad podría decir que es un bromista, suele ser distraído pero cuando es tiempo de seriedad se lo toma muy enserio, pero mayormente es alegre y de vez en cuando dramático, en cuanto a mí, mi cabello es de color castaño oscuro, mis ojos son de color verde esmeralda, mi tez es clara aunque un poco bronceada, en cuanto a mi personalidad tiendo a ser una persona decidida, seria, lo admito a veces imprudente pero mi determinación la verás de vez en cuando.
—Está bien, pero luego no te quejes porque fuiste tu quien lo dijo —sonreí de forma burlesca.
Vi que la expresión en su rostro cambió por completo ante lo que dije, tanto fue su sorpresa que hasta se recompuso de su pose y me sonrió bastante nervioso haciendo que una risa saliera de mi boca mientras negaba.
—¡Espera espera, era broma era broma! no me reemplaces por favor —dijo rápidamente entre nervios y riendo.
—Siempre lo mismo contigo Axel —negué y reí—. Mejor vámonos a sentar, no tardará en llegar él o la profesora y no quiero terminar regañado por estar aquí y no en mi lugar —comenté volteando en dirección a mi pupitre para tomar asiento.
—De acuerdo, vamos —comentó de manera alegre siguiéndome el paso.
Entran 3 chicos al aula...
En cuanto tomé asiento, volteé en dirección a la puerta y vi que la chica de hace rato entró junto con un chico y una chica, logré mirar con más detenimiento a la chica, sus ojos siendo marrones un poco grandes, su nariz pequeña, su cara algo inexpresiva, se la veía más bien pensativa y su boca era algo grande junto sus labios carnosos... sin duda no la había visto bien, pero aún así quería saber más de ella... estaba decidido a querer responder mi duda, después de verla por unos momentos dejé de prestarles atención, o bueno, fue hasta que la chica a su lado gritó que quería estar al lado de ella y fue cuando supe su nombre, Alleria, sinceramente es un lindo nombre, levanté la mirada y vi que él chico estaba peleando con la de cabellos rosas, suponía que era por el lugar... en ese momento noté que ella me miró, pero apartó la mirada, supongo que fue por cómo la traté hace rato, los chicos pasaron como si nada... oh bueno en teoría, debido a que el rubio en cuanto se percató de mí, me dirigió una mirada de pocos amigos, no se porque, pero me esperaba aquella reacción.
—"Este va a ser un semestre largo" —pensé mientras soltaba un suspiro, miré a Axel que estaba al parecer en su mundo.
Mientras caminábamos hacia el aula, estuvimos hablando de lo que había ocurrido con Jacob, Harith trataba de hacerme reír con sus chistes y Karina no paraba de reír, a mí de vez en cuando me hacía reír o me sacaba alguna sonrisa, cuando entramos al salón claro a risas ya que Harith seguía con sus chistes, me percaté de que alguien nos observaba, miré hacia al frente y me topé con la mirada de Jacob, quien es con él que choqué hace un rato, ¿Cómo lo sé? Pues recuerdo que él llevaba una sudadera de color vino y jeans negros, sin olvidar de los Adidas blancos que lleva... ¿Qué? A veces suelo ser algo observadora, en fin, fue hasta ese momento en que caí en cuenta.
—"Oh rayos vamos en la misma clase" —pensé con algo de fastidio.
Harith notó mi reacción debido a que me tomó de la mano haciéndome sentir más tranquila, lo miré.
—Tranquila hermosa, no pienses en eso —susurró para que lo escuchara solamente yo—. ¡Vamos aún hay lugares donde sentarnos juntos! —exclamó Harith feliz aun tomándome de la mano mirándonos a mí y a Karina.
—Harith tiene razón... miren —señala 3 pupitres vacíos—. Yo pido estar al lado de Alleria —comentó Karina súper feliz mientras me abrazaba.
—No, no yo quiero estar al lado de ella, tú siempre te sientas a su lado —dijo Harith soltando mi mano y haciendo pucheros.
—Mejor los dos van juntos y yo iré sola atrás de ustedes —comenté riendo, caminando hacia los 3 pupitres.
—Eso no es justo —dijeron ambos al unísono tristes, mirándose entre ellos para después mirarme a mí.
—Ya vamos a sentarnos —comenté frenando y volteándolos a ver con una sonrisa.
Ellos asintieron y fuimos hacia los pupitres que estaban vacíos, miré a Jake, pero aparté la mirada casi casi al instante ya que se dio cuenta, Harith lo miraba con una cara de pocos amigos, aún está enojado por lo que él me dijo en la mañana y más que no se disculpó por haber chocado conmigo, pero no es para que lo mire así, Karina estuvo indiferente, ni siquiera lo miró e hizo como si no estuviera... sin duda alguna amo su actitud, mi alivio fue que justo cuando nos sentamos llegó la profesora.
—Buenos días Chicos —saludó caminando hacia su mesa, mirando a sus alumnos con una sonrisa—. Soy la profesora Natalia y hoy les hablaré sobre...
La profesora dejó de hablar al escuchar el alboroto y los gritos que se comenzaron a hacer presentes de manera repentina, eso de cierta manera hizo que me preocupara... esa misma sensación que tenía cuando desperté se hizo más intensa...
—¿Qué fue eso? —preguntó algo asustada haciendo que todos nos miráramos.
—"¿Acaso eso es...?" —mi expresión cambió a una seria.
Una explosión se hizo presente cerca del aula haciendo que todos se sobresaltaran al no esperar eso. Me maldije en mis pensamientos... un enemigo ¿Ahora? No me queda de otra tengo que ver cómo salir. Me levanté rápidamente aunque en el proceso me maree un poco haciendo que Harith y Karina me miraran confundidos y a la vez preocupados, ellos no sabían lo que iba a hacer ya que no les he contado sobre mi otra vida, claro por regla los guardianes no pueden revelar su identidad, por lo menos aun no lo considero oportuno, aunque sé que en algún momento se van a enterar, solo espero que lo entiendan. La maestra notó mi reacción y me miró atentamente.
—Señorita, ¿Pasa algo? —preguntó la profesora con preocupación al ver que me levanté de golpe causando que todo el salón me mirara.
—cerré los ojos por un momento debido al movimiento rápido que hice para después hablar—. Maestra no me siento bien... yo ¿Puedo ir a la enfermería? —pregunté tocándome la cabeza como si estuviera mareada, aunque si lo estaba un poco.
—¿Estás bien? Si recién estabas perfectamente bien —Karina me observó con preocupación.
—¿Qué te pasa Alleria? ¿Te sientes bien? —preguntó Harith con preocupación mientras me miraba.
Negué con la cabeza, necesitaba actuar para poder salir de ahí lo más rápido posible para solucionar todo esto que apenas comenzaba, lo sabía perfectamente, Harith y Karina aún me veían muy preocupados, la maestra seguía mirándome, como si me estuviera analizando, esto me comenzaba a poner nerviosa comenzando a creer que no se había tragado mi mentira, hasta que habló haciéndome suspirar de alivio internamente.
—Claro adelante, pero con cuidado —autorizó la profesora observándome un poco preocupada—. Jóvenes mantengan la calma —pidió observando ahora a los alumnos quienes estaban algo asustados.
—Gracias —agradecí mientras salía rápidamente del aula.
¡Por dios a quien se le ocurre un ataque tan temprano solo son las 8 de la mañana! Espero que aparte de Harith y Karina nadie más haya notado algo raro, si eso pasa tendría que dar explicaciones y eso es lo que menos quiero, tengo que enfocarme en mi misión, las batallas apenas comenzaron y no sé qué es lo que me espera, pero si de algo estoy segura es que esto no se quedará así, lucharé hasta que llegue la batalla final, protegeré a la ciudad cueste lo que cueste, ahora debo darme prisa y transformarme, no sé qué tanto daño ya ha causado el enemigo, ni de quien se esté tratando pero tengo que averiguarlo. Fui a un lugar apartado, era momento de actuar... ¡Es ahora o nunca!
Una vez transformada, fui hacia donde provenían las explosiones y los gritos, necesitaba ver que estaba pasando, cuando me asomé por una puerta, vi a alguien que estaba de espaldas, me acerqué para ver quién era, me asombré al descubrir que se trataba de Loan Pierce, el guerrero y antiguo mejor amigo que nos traicionó el día que nos convertimos en guardianes, sentí gran enojo y odio en cuanto lo vi, estaba aterrorizando a algunos estudiantes, sabía quién lo había mandado, o por lo menos lo intuía, aun así estaba consciente de una cosa... esto era el comienzo de una batalla y de algunas más que se aproximaban.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro