Pov Rosé

Con Lisa habíamos pasado toda la madrugada hablando sobre sus problemas con Jennie; me aguantaba la risa cada vez que contaba como la celaba y como hacían el ridículo en cualquier parte.

Ahora estábamos en clase a punto de dormirnos, no he sabido nada de Jisoo desde que se fue de mi casa ayer, hoy ni siquiera la vi salir; en cuanto a Jennie ni siquiera apareció por aquí, creo que está empezando a recapacitar.

---Rosie estoy por matarme---se quejó LaLisa.

---¿A quién se le ocurrió hablar de su tóxica en vez dormir?---me burlé.

---¿A quién se le ocurrió despertarme?---ríe.

Le doy un golpe discreto para que se tranquilice. El sonido de la campana anunciando el final de la jornada nos levanta el animo, guardo mis cosas y oigo como el profesor dice mi nombre. Mierda.

Me acerco a él con mi mochila en mi espalda y con el corazón en la garganta, en Australia me llamaban para felicitarme pero no sé que pasará aquí.

---Rosé---coloca una mano sobre mi hombro y me tranquilizo---Te he notado algo vacía últimamente ¿Ha pasado algo?.

Por un momento no sé que contestar, lo miro dudosa, me concentro en la respuesta que tengo que darle para no sonar tan alarmante pues no he hecho nada malo ni me ha pasado nada malo.

Abro la boca finalmente para responderle---No profesor, no me ha pasado nada ¿Por qué la pregunta?.

---Es sólo curiosidad, yo también fui joven y te entiendo perfectamente, cualquier cosa no dudes en pedirme.---Sonríe.

---Lo tendré en cuenta profesor Namjoon.

Me deja ir y voy corriendo junto a Lisa quien no duda en burlarse de mí.

Caminando por el pasillo para salir de esta prisión Jennie hace acto de presencia entre las dos.

¿¡En serio!? ¿¡Tan bonita que era la charla me la cagas ahora universo!?-pensé.

---¿Jennie? ¿que quieres?---habló Lisa con un tono frío.

Es la primera vez que la oigo hablar así, vaya que si va en serio su "ley del hielo".

Luego veo a Jennie, esta mantiene una mirada perdida y noto la angustia en ella, esta dolida por todo ese mes sin Lisa, lo sé, mira a Lisa como si esta fuera lo único en el pequeño pasillo.

Siento como un brazo me rodea la cintura, me giro hacia Lisa observandola detalladamente. Se está aguantando las ganas de abrazar a Jennie hasta que se quedé sin aliento.

Jennie nota el gesto de Lisa y aparta su mirada lentamente---Vine en paz ¿de acuerdo?---Susurra---Quería hablar con Rosé.

La miro confundida. ¿Qué debía hablar conmigo?.

---S-si, ¿que su-cede?---tartamudeo.

---Eres la vecina de Jisoo así que quería preguntarte si sabes el porqué no vino hoy a la uni.---suspira.

Entonces; la razón por la que no ví a Jisoo por los pasillos es porqué faltó a clases, tampoco la vi salir de su casa ni he escuchado los insultos y gritos de sus padres. ¡Dios y si le ha pasado algo!.

Lisa me apega más a ella en un intento de tranquilizarme pero la fiera que hay dentro de mi está lista para hacer volar algunas cabezas. Jennie empieza a preocuparse por mi silencio empezando a lagrimear en el proceso, te entiendo molesta castaña de ojos gatunos.

---Je-Jennie...---susurro---No la he visto en toda la mañana.

La castaña empieza a lamentarse debido a mi respuesta, intenta correr para salir del lugar e ir directo a lo de Jisoo; Lisa intenta detenerme pero es de mi futura novia de quien hablamos.

---¡Rosie espera!.

---¡No Lisa!---respondo---¡Es de la persona que amo de quien estamos hablando!---respiro recuperando el aire perdido---¡No puedo dejarla así como así! ¡Tu harías lo mismo si fuera Jennie!.

Me doy camino en dirección a casa de mi vecina corriendo como el correcaminos huyendo del coyote restandole importancia a los gritos y gritos de Lisa detrás mío; alcanzo a Jennie en una esquina y nos olvidamos de cualquier absurda rivalidad.

Corriamos juntas mientras oiamos los gritos de LaLisa detrás nuestro diciéndonos que nos detengamos pero simplemente no puedo hacerlo.

Jennie empieza a soltar jadeos desesperados dejando caer algunas lágrimas en el camino, aún faltaban cinco cuadras.

---¡Rosé! ¡Espera por favor!---oigo a lo lejos a la tailandesa.

No respondo.

Vuelvo a correr desesperadamente con Jennie al lado mío, ambas estábamos igual.

El aire empezaba a faltarme y la respiración a fallarme, siento que en cualquier momento podría desmayarme y todo por saber como se encuentra mi pequeña de corazón de diamante.

Había llegado antes que Jennie y golpeo la puerta sin conseguir respuesta, intento abrirla pero está cerrada con llave. Golpeó la maldita puerta una y otra vez dejando salir las lágrimas mientras golpeo.

Jennie llega y no lo duda ni un momento-¡Hazte a un lado!-me grita sacándome del medio.

Patea la sólida madera repetidas veces hasta que logra abrirla, se abre paso golpeando todo lo que se interponga en su camino; LaLisa llega unos segundos más tarde que ella pero no me importa.

Junto con Jennie llegamos a lo que parece ser la habitación de Jisoo, me sorprende que no haya encontrado a su abuela por ningún lado, esto si ya me tiene bastante preocupada.

Giro el pomo de la puerta y la veo a ella toda golpeada de pies a cabeza; la nariz sangrando, el labio partido, lo que parece ser sangre que sale de sus nudillos y un ojo morado.

¿Por qué no has aceptado la oferta de Lisa?.

---¡Chu!---grita la castaña dejando salir lágrimas de sus felinos ojos.

Se abraza a ella con tanta fuerza que me quema en el fondo ver como mi adorada Chicken corresponde con dolor en los ojos.

Me acerco a ellas cuidadosamente pero Jennie se aleja. La miro incrédula pero esta me evita, en cuanto a Jisoo con sus ojos un "auxilio" me grita.

Dejo de dudar, no lo soportó más, la tengo en frente mío y esta oportunidad no la puedo dejar pasar.

La abrazo fuertemente como si la vida se me fuera en ello y acaricio lentamente su fino cabello.

---¿Q-qué h-ha pa-pasado?---pregunto con los ojos llenos de lágrimas.

Jisoo sólo se mantiene en silencio, un tortuoso silencio.

---Rubia, debemos salir de aquí, si sus padres llegan nos echarán y le darán otra paliza---explicó Jennie.

Lisa y yo nos miramos confundidas.

La casa de Lisa quedaba algo lejos de aquí, la de Jennie igual y no creo que cierta castaña quiera ir a mi casa.

---¿Dónde se supone que la llevaremos? No creo que quieras entrar en la casa de Rosé---se quejó la tailandesa.

---No me importa... sólo quiero que Jisoo esté bien.

¡Auch! Eso tuvo que doler.

Lisa se muerde el labio cruzando su mirada con la mía, no hay opción alguna.

Suelta un bufido y se acerca a nosotras-Espero que no peses mucho Jisoo.

Intenta alzarla sin lastimarla pero la pollo suelta quejidos cuando siente los brazos de Lisa en su cuerpo.

Una vez más nos encontramos corriendo como locas despiadadas pero con la excepción de que ahora es un destino más corto.

Cruzo la calle como inmortal y pateo la puerta haciendo que esta se abra a la primera, mi padre me hará comprar un picaporte nuevo después de esto.

---¡Subela a mi habitación!---ordeno.

LaLisa con Jisoo aún en brazos me mira confundida. Mierda que acabo de decir.

---¿¡Qué esperas Lisa!? ¡anda!.

La recién nombrada sube corriendo las escaleras acompañada de Jennie; por mi parte voy corriendo al baño a buscar el botiquín de primeros auxilios.

Busco y rebusco el condenado botiquín, no lo encuentro. Me aprieto la sien tratando de recordar; me dirijo a la cocina a buscarla; nada.

---Mierda---susurro.

Sigo buscando cuando de un movimiento brusco me golpeo contra un cajón que dejé abierto. Maldigo internamente y sigo buscando. Cinco minutos más tarde lo encuentro.

Voy de corrida hasta mi habitación preparándome para la regañada que me dará la señorita "Jennie celos tóxicos Kim". Abro la puerta encuentrandome a una Lisa consolando a Jennie y a una Jisoo pues en la cama ¿donde más?.

---Hasta que llegas ardilla---ríe---pensé que fuiste absorbida por un agujero negro.-la parejita feliz suelta una carcajada con el chiste de Lisa, por una extraña razón, ah no, extraña no, por una buena razón el chiste no me causo gracia y es por que los chistes de Lisa son generalmente malos y sólo me río por la pena que da.

---Mira Lisa, sino fuera por que debo curarle las heridas a Jisoo te hubiera estampado la cara contra la pared---amenazo---O aún mejor, ¡Te hubiera cortado a júnior!.

Lisa tragó saliva ante mi amenaza y se mantiene en silencio, lo mismo pasa con Jennie mientras tanto Jisoo se mata de la risa. Pero que bella música ha llegado a mis oídos. Me le acerco con el botiquín en la mano sonriendole para hacerla sentir segura.

¡Oh por Dios!. Es más bella de cerca.

---Jen, pequeña---habla Lisa---¿Qué tal si dejamos solas a estas dos?.

---Oh entiendo, ya voy cuchurrumin.---ríe.

¿¡PERO QUÉ!? ¿¡LA LLAMÓ CUCHURRUMIN!?. Pero... ¡Ese apodo lo usaría yo con Jisoo!... como sea, le diré tiburonzin.

---Tal parece que se han reconciliado.---ríe.

---Eso parece...---susurro---Eh ¿puedo?.

Señalo sus manos ensangrentadas con algo de duda mezclada con nerviosismo con una pizca de miedo; ella sólo sonríe de lado y me pasa la mano.

-Bien Rosie, controlate.--me aliento.

Paso el algodón por sus nudillos y suelta un quejido de dolor, lo sé, sé que arde pero aguantate que no podrás comer pollo frito sino te sano los nudillos.

---¿Crees que algún día llegará mi Jennie?---pregunta de repente.

¿Qué carajos?.

---Perdona no entendí.---trate de sonar normal pero mis celos me delataban.

---¿Estás bien?---levantó una ceja-tu voz cambio de repente.

Mierda.

---Si, ¿por que no lo estaría?---cierra la boca pendeja, la vas a cagar.

---Que curioso, suenas algo molesta.---ríe.

Bien Rosie la cagaste.

---Tal vez sean alucinaciones tuyas...---cierra la boca de ardilla que tienes.

---Entonces fue una alucinación lo del día anterior.

Un momento. ¡Ya veo hacía donde va esto!.

---¿De qué hablas?---Hazte la difícil, Hazte la difícil.

---Te oí cantando hace unos días en el salón de música de la uni.---ah no eso no era.

¡Cerebro no me estas ayudando!.

---¿Ah si?---susurré apegando más el algodón a la herida.

---¡Ah! ¡Chaeng-duele!---se queja.

Río levemente y hago lo mismo.

---¡Chaeng en serio duele!---grita.

---Ops, se me pasó la mano---respondí.

Reí como niña pequeña pero a Jisoo no le causo gracia; al contrario su mirada me inspiraba miedo.

Se acerca bastante a mi quedando sólo centímetros de mis labios. ¡Ahí te voy San Pedro!.

---Vaya---sonríe nuevamente---Creo que no te importará que te diga lo mismo más adelante, jejeje.

¿¡Pero que carajos!? ¿¡A qué se-oh, ya entendí, pollo calentón.

---Bueno---trago saliva---creo que deberás esperar mucho tiempo más para averiguarlo.

Me alejo de ella para no hacer algo indebido, y ese algo indebido es saltar a besarla hasta romperle el labio. Más de lo que ya está obvio jejeje.

---¿Sabes? En ese lapso de tiempo ocurrirán muchas cosas---razona---No sé que pasará así que prefiero aprovechar este pequeño momento junto a ti.

Trago saliva por cuarta vez consecutiva mientras observo como la coreana se acerca peligrosamente hacía mí, cierra lentamente los ojos y con una de sus manos me acaricia la mejilla.

---¿Q-que ha-haces?---pregunto.

---Lo que he esperado desde hace mucho tiempo-susurra sobre mis labios.

¡Ahí te voy San Pedro!.

Intento alejarme pero me atrae más a ella uniendo nuestros labios en un suave y dulce beso; una bella danza que sólo ella y yo conocemos; era una mezcla de un sabor dulce y un toque salado por la sangre seca de su labio partido, sino estuvieras mal herida esto subiría de tono.

Dejo caer el algodón que sostenía hace un momento y me digno a seguir con ese beso de la mejor forma, no podía desaprovechar esto. Rodeo su cuello con mis brazos profundizando este tan anhelado beso, suelto un pequeño gemido mientras siento como su lengua se adueña de mi boca. Si esto no para subirá de tono pero no me importa.

---¡Ah~!---gimo al sentir su erección chocar por mi entrepierna.

---Chaeng~ yo~ ¡ah!...---noto que no puede hablar claro debido a la excitación.

---Vaya, vaya, vaya, quien lo diría---se oye una tercera voz en la habitación. Jisoo y yo nos separamos de golpe al escuchar a Lisa; le lanzó una mirada de muerte por haber interrumpido tan bello momento que quien sabe Dios cuando volverá a suceder.

---Calmate ardilla, venía a avisarte que ya nos vamos y a revisar que Jisoo este bien---ríe---se nota que está demasiado bien.

Me sonroje debido a su comentario y miro a Jisoo, esta está observando la ventana pensando en quien sabe que.

---En fin, Jisoo ya depende de ti aceptar mi oferta, tomate el tiempo que necesites para decidirlo---dice riendo---y Rosie, hablamos luego.

Lisa se retira de la habitación y segundos más tarde oigo un último portazo señalando que ya estoy sola en mi habitación, con Jisoo.

---¿Quieres ver una película?---Pregunta divertida.

---Esta bien pero déjame terminar de curarte.---río.

La contagio con mis carcajadas logrando que acepte mi oferta de curarla, sino aceptaba se me largaba de aquí.

Va a ser una larga tarde...

No conozco tu pasado ni tampoco tu futuro, no sé quién te ha lastimado ni como lo han hecho. Pero si hay algo que conozco tu presente y formo parte de este, quizá te suene loco pero aprovecharé esto para hacer que tengas un buen corazón, no uno de hielo, ni de fuego tampoco de hierro... Más bien de un diamante; tan magnífico, extravagante y único en el mundo... Como tú.

Nos leemos luego pichulas, disfruten este cap que es como un regalo por la tremenda cerrada de orto que le dio Diamond Heart a una loca película de cuarentena ;)