Narra Chaeyoung.

Fui a la casa de Dahyun ya que habíamos quedado en ir al cine. No quería ir pero así es la vida.
Dahyun y yo éramos mejores amigas desde la infancia así que esta era como mi segunda casa.

Toqué el timbre y abrió la puerta. Hicimos nuestro típico saludo y volvió a cerrar.

—Qué temprano. Por un momento pensé que no vendrías.

—Y yo estaba esperando que me llamaras para cancelar —Me dió un codazo—. Auch. ¿Caminamos?

—Ah, ¿Por qué vamos a caminar si hay bus?

—¡Yo quiero caminar! —Hice un puchero.

—¿Lo dices en serio? —Pos sí— Dime.

—¿Qué cosa?

—¿Por qué últimamente no quieres gastar en nada Son Chaeyoung?

—Es porque estoy ahorrando el dinero de mi mesada para comprarle un regalo a la maestra Jihyo —Dahyun solo me miró incrédula— ¡Cuando te enamores me entenderás!

Sí, creo que estoy enamorada de la maestra.

—Está bien, caminemos —Y nos pusimos en marcha— ¿Sabes algo?

—¿Qué?

—Me agrada más Mina como tu novia —Rió y se echó a correr.

—¡Cállate! —La seguí.

Seguimos caminando y hablando de cosas sin sentido hasta que paró de repente.

—¿Qué sucede? —Le pregunté cuando ví que se agarraba el estómago —¡No me digas que te vino andrés justo ahora!

—¡No! —Suerte— Creo que no debí tomar esa gaseosa antes de salir de casa. Necesito ir al baño.

—Puedes ir allá cuando lleguemos.

—NO, tiene que ser ahora —Se quejó.

—Pero estamos sólo a un par de calles del cine ¿No puedes aguantarte? —Negó con la cabeza— Además dónde se supone que encontraremos un baño?

Dahyun dió unos pasos hacia adelante, creo que buscando algún lugar cerca que pudiera tener un baño y volteó.

—Aquí debe haber baños, hay personas entrando y saliendo cada rato —dijo señalando el local frente a nosotras—. Ven, vamos —Sí como no.

—Entra tú, yo espero aquí afuera —Cruzé mis brazos.

—Acompáñame, no seas así.

Me jaló del brazo y entramos. Oímos música a lo lejos del pasillo por donde caminamos. Seguimos a unos chicos para saber a dónde nos dirigíamos hasta que cruzamos una puerta y casi me quedo sorda.

Resulta que era un evento de videojuegos o algo así. Había todo tipo de juegos, desde clásicos hasta las últimas novedades, lol, Minecraft, Fornite, "el fri faier" o como se escriba, GTA, etc. También había batallas en vivo, competencias, cosplayers y otras cosas.
Eso sí, parecía que estaban experimentando con bombas porque el ruido era terrible, y el lugar estaba infestado de nerds, gamers y aficionados.

Creo que Dahyun me dijo algo pero no podía escucharla, había mucho ruído.

—¿QUE DIJISTE?

—DIJE QUE PREGUNTARÉ DÓNDE ESTÁ EL BAÑO. ESPERAME AQUÍ.

—ESPE-

Joder. Me había dejado sola en medio de toda esta gente, al parecer sin audición, porque mis tímpanos iban a estallar en cualquier momento. Para colmo nadie me notaba por mi altura y me empujaban cada dos por tres.

—¡Yo me largo de aquí! —Saqué mi teléfono y le envié un mensaje a Dahyun, le dije que la esperaría en la salida y no para golpearla.

Salí con prisa de aquel lugar cubriendo mis oídos. Corrí por el pasillo hasta la salida y sin querer tropecé con alguien. Me levanté del suelo y, para mi mala suerte, no era uno sino dos tipos que estaban por ingresar.

—Lo siento —Musité ya que se veían molestos.

—Mira lo que hiciste —dijo mostrando su casco aplastado—. Me costó mucho hacerlo y ahora ¡tú lo echaste a perder!

Retrocedí hasta quedar  fuera del local y ellos me siguieron. Joder. Joder. Joder.

—Dime, ¡¿cómo piensas pagarlo?!

—Ehh no traigo dinero.

—Si, claro. Son $200 ¡Págame!

—Bueno —Tosí— Tengo unas fichas que se pueden intercambiar por una caja de jugo en una tienda cercana. No es mucho pero almenos no estarán sedientos —Sonreí.

Carajo. Creo que la cagué.

—¿Acaso te burlas de nosotros? —habló el otro tipo.

—No, no, lo digo en serio —Mierda. ¿Chaeyoung porqué no te callas?

Solo eran un par de nerds con anteojos y acné en la cara. El problema era que medían como tres metros de altura y eso sí era intimidante para mi pequeña existencia.

Joder x765457894

—¡Págame ahora! —Se acercaron intimidándome.

Tenía dos opciones: empezar a correr o empezar a correr.
Carajo, creo que mi alma se fue por su cuenta porque mi cuerpo estaba estático.

—¡He dicho que pagues!

God por favor envíame ayuda!

¡¡DAHYUN DÓNDE CARAJOS TE METISTE!!

—¡Aléjense de ella!

¿Huh? Volté mi mirada al igual que ellos y .......no puede seeeeer.

Retiro lo que dije God.

—¿Qué? ¿Acaso son sordos?  Dije que se alejen —Era Mina y ¿Nayeon? ¿¿Sana?? ¿¿¿Mark???

Se pusieron delante de mi y los tipos retrocedieron.

—¿Y ustedes quiénes son? —preguntaron los sujetos.

—Já, ¿Escuchaste eso Mina? Se nota que no nos sigue en twicetagram —dijo Nayeon.

—¿Acaso son amigas de esta despistada?

—"AmigOs" —Señaló Mark

—Pero eres gay, es lo mismo —Ahora Sana.

—¿A quién llamas despistada idiota?

—Cállate Mina o empeorarás las cosas —Hablé bajito. Me miró confundida.

—A la chica que se esconde detrás de ustedes ¡Rompió mi  casco y ahora no quiere pagar!

—¿Es en serio nerds?  Todo este lío solo por esa porquería de cartón —En vez de ayudarme hará que nos maten.

—¡No es de cartón! Bueno, solo los bordes pero en fin ¡Págame los $200! —Repitió.

—Pero si te hizo un favor al romper esa basura —Ahora Nayeon. Genial ya estoy muerta—. Además ¿$200?, ni tu vieja vale tanto —De verdad, no sé como pueden hablar tan tranquilamente.

—Al parecer todos ustedes quieren recibir una paliza —dijo el otro tipo.

Lo sabía. Moriremos.

—No te atrevas a tocar a Chae o te jodo la existencia —Volvió a hablar Mina, esta vez seria.

—Es cierto, no se metan con Son. Si se meten con Son se meten con Mina, y si se meten con Mina se meten con Sana, y si se meten con Sana se meten con Mark. ¿Les quedó claro idiotas? —Todos rodamos los ojos.

—Nayeon, cuando salgamos de esta recuérdame por qué somos amigas ¿ok? —Habló la pingüina, digo Myoui.

—¡Basta de juegos! —Volvieron a acercarse.

A todo esto, la poca gente que pasaba por esta calle solo miraba de chusma y luego se iba.

Mina y sus amigos ya se habían puesto en pocisión de pelea así que me interpuse entre ambos bandos. No soportaba a Mina pero no por eso permitiría que les hicieran daño a ella y a los demás por culpa mía.

—¡Alto! No quiero que haya una pelea por mi culpa. Nayeon baja tus uñas.

No sabía qué hacer o decir hasta que ví el bolso del chico. Tenía un pin que decía "I ♡ fornite".

—Ya me disculpé pero ustedes quieren que les pague y no tengo dinero —dije mirándolos y asintieron. Volteé—. Y ustedes, en teoría, quieren ayudarme —Mina asintió—. Bien, ¿qué les parece un reto?

—¿Qué reto? —hablaron al mismo tiempo.

—Fornite.

—¿Eh?

—Continúa —dijeron los nerds. Creo que estaba funcionando.

—Sí Fornite. Mina sé que tienes muchos juegos en tu teléfono, los maestros siempre te llaman la atención por eso. Y tú Nayeon, mi amiga me contó que te vió haciendo bailes Fornite.

—¿Qué hay de Sana y de mí? También podemos ser útiles —agregó Mark.

—Por supuesto, pueden-

—¿Chaeyoung? ¿Qué demonios pasa aquí?

—Dahyun? —La ví— ¡Hasta que por fin apareces! ¿No que solo ibas al baño? —La miré con reproche.

—Había una fila delante de mí, ¿qué querías que hiciera? —Miró a los demás— A propósito, ¿qué hacen Mina y su squad aquí? ¿Y estos nerds?

—Pues...

—Aceptamos el reto. Una batalla. Si nos ganan te dejamos ir pero, si pierden, nos tendrán que dar $200 cada uno de ustedes.

—También acepto. Sé que ganaremos —dijo Mina. Sonreí—. Y tendrás que darme un beso de recompensa —Me guiñó el ojo.

Khá.

—Mira nada más. Te dejo unos minutos sola y ya estás en un duelo de Fornite entre nerds y populares —Me regañó Dahyun.

—Perdón —dije apenada.

—Muy bien —habló uno de los nerds cuando dejaron de murmurar entre ellos— primero iré adentro para arreglar todo pero mi compañero se quedará aquí vigilándolos.

—Okay —respondimos todos.

En cuanto se fue, Mina y sus amigos se miraron rápidamente entre ellos. Dahyun y yo nos miramos confundidas.

Todo fue tan rápido.

—¡¡¡OMFG, MIREN ESE DISFRAZ Y ESE TROFEO!!! —señaló Sana hacia la puerta del local.

No iba ni media oración cuando todos volteamos a ver. Cuando volví mi mirada, Mark se había lanzado sobre el nerd. QUÉ CARA-

—CORRE PERRA CORREEEEEEEEEEEEEE...!!! —Gritó.

Y todas empezaron a correr, Mina agarró mi mano y me arrastró con ellas, Dahyun corría también. Corrimos como dos calles y nos subimos a un auto estacionado. Me senté atrás con Dahyun y Sana.

Nayeon fue al lugar del conductor pero Mina la sacó.

—QUÍTATE PERRA.

—MALDITA SEA, NO VES QUE QUE NO ARRANCA.

—YO LO HARÉ ARRANCAR.

Nayeon se movió al asiento de atrás y se sentó arriba de Sana.

JODER, ESTOY CAGADA.

—CARAJO AHÍ VIENE MARK

Miré por la ventana y Mark vino como bala, subió y en menos de un segundo arrancó y nos fuimos.

Todas teníamos la respiración agitada hasta que todo se normalizó. Unos minutos después el alma me volvió al cuerpo.

—¡¿Qué diablos fue eso?!

—"Eso" se llama salvarte el pellejo enana —respondió Nayeon—. Todo esto es tu culpa Mina. ¡Por tu culpa sudamos como puercas!

—Es verdad, hace mucho que no hacemos una estupidez así en público jaja —Añadió Sana.

—Tenía que hacerlo para salvar a mi cachorro —Suspiró.

—¡No soy tu cachorro Myoui!

—¿Cómo sabes que me refiero a ti?  Awww, ¿ya te consideras mi cachorro?

—¡Por supuesto que no! Déjennos en la casa de Dahyun, o mejor paren aquí y nos bajamos.

—Tranquila tigre. ¿No me agradecerás Chaengie?

—Okay, gracias por hacer que dos gigantes casi nos maten!

—De nada beibi —¡Aish!

Llegamos a la casa de Dahyun y nos bajamos. Mina se despidió y me lanzó un beso en el aire.
Rodé los ojos y entré con Dahyun a su casa donde nos quedamos el resto de la tarde.

—Populares defendiendo a alguien de ser atacada por nerds. Eso sí merece una película jaja.

—Dahyun.

—Qué.

—No me jodas.