「Marca 」
YoonGi hizo una mueca de asco cuando observo a su omega devorar la mezcla de helado, mantequilla de maní y papas fritas.
Los antojos de JiMin eran bastante raros.
Desde que volvió a casa hace un mes, a estado muy pendiente de él. Amaba cumplir cada uno de sus antojos y caprichos. Adoraba mimarlo completamente.
Se acerco a él y dejó un beso en sus pomposas mejillas.
–Tendrás un fuerte dolor de estómago –dijo mientras tomaba su café colombiano.
–Dejame en paz, Alfa. Todo es tu culpa. –reclamó. –Quien te manda a dejarme preñado.
–Recuerdo que alguien me dijo que no usará condón. No quiso escucharme y no se abrigo lo suficiente en la ventisca. Ese alguien enfermó. Pero apesar de estar enfermo, aún pedía por mi nudo. –dijo burlon
–¡Oye!. No te lo tomes contra mí. No es mi culpa que sintieras miedo de criar a nuestro cachorro.
La sonrisa burlona del Alfa desapareció y observó dolido a él omega quien ahora disfrutaba de algunos pedazos de manzana.
–Lo siento. Siento haberlos alejado. Estaba tan asustado. Tenía miedo de lastimarlos como mis padres hicieron con Tae y conmigo.
El omega sintio el aire denso debido a la amargura del aroma del Alfa. Tomó un ultimo pedazo de fruta, se acercó a su Alfa y se sentó en sus piernas.
–Cariño, no es tu culpa. Nosotros entendemos, amor. –Acaricio sus pómulos– Ya dejemos esto en el pasado. –el omega lo beso.
YoonGi gruño extasiado, por el dulce sabor de estos y presiono más a su omega lo más cerca posible.
–Me hiciste tanta falta esas dos semanas. –susurró mientras se perdía en aquellos ojos zafiros. –Prometo compensarte, por el resto de nuestras vidas.
JiMin solto un suspiro.
–La única forma de compensarme, Alfa. Es estando conmigo, con nuestro cachorro, amándonos. Todos los días. Es lo único que necesito y quiero de tí. –susurró, para luego enconder su rostro en la curvatura de su cuello.
–Mmm... suena bien –dijo con una sonrisa– Una de las formas de compensación que pensaba era darte la luna de miel que mereces, pero ya que solo debo amarte todos los días...
El omega salió de su escondite.
–No te atrevas, Min YoonGi –amenazó – Quiero mi luna de miel.
El Alfa soltó una carcajada. Mientras acariciaba el vientre.
JiMin observó perdido el rostro contraído del Alfa. Su hermosa sonrisa de gomita era una de las cosas que más amaba ver en el mundo.
–Me encantas, Alfa –murmuró acariciando sus pomulos.
YoonGi solo sonrió y lo tomó de la nuca para devorar sus labios. JiMin solo gimió extasiado cuando el aroma a Madera y cerezas se volvio más fuerte.
–Quiero hacerte el amor–Informó. Mientras sus manos bajaban a sus glúteos.
JiMin solto una carcajada y tomó las manos de Alfa entre las suyas.
–Debes ir a la reunión con Yuto y Jungkook. –dijo dejando un beso en ellas.
–Ah, es cierto. Quisiera quedarme aquí contigo.
–Donde está el Alfa, al que solo le importaba el trabajo.
–Ese Alfa, esta enamorado y ahora tiene a un lindo omega y a un lindo cachorro en camino.
JiMin dejo un último beso en los labios de YoonGi y volvió a comer sus frutas.
Necesitaba que su Alfa lo marque.
Por el bien de su cachorro.
Cuando el Alfa se fue a su reunión, siguió comiendo sus manzanas y cuando terminó se dispuso a lavar los trastes, cuando sintió a su lobo débil, rogándole una marca, hasta que ya no pudo sentirlo. Se sentía débil y cayó desmayado. Si no fuera porque Taehyung fue a buscarlo ahora mismo seguiria en casa.
Soltó un suspiro recordando las palabras del médico.
–Que no haya marca afecta a tu lobo y más cuando hay un embarazo. La marca ayuda en el desarrollo del bebé. –informó– No es imposible llevar un embarazo sin la marca pero se vuelve riesgoso para tí. Podrías llegar a perder bebé. Esto afecta más cuando ya conoces a tu pareja.
La voz de su amigo lo sacó de sus pensamientos.
–Debes hablar con YoonGi. La marca afectará al bebé. –dijo mientras le tendía una taza de Té.
El omega asintió.
–No quiero presionarlo –suspiro– hace apenas un mes, dejó salir lo que realmente siente y lo ha llevado muy bien. Sabes que el no quiere estar atado a una persona para siempre.
Taehyung soltó un suspiro y le dio un sorbo a su té.
– Jim, el te quiere. Los quiere a ambos. Estoy seguro de que si hablas con él, lo entenderá.
–Lo sé. Confío en él.
Ambos omegas pasaron el día juntos, hablando y comiendo. Hasta que YoonGi paso a por él.
JiMin sonrió enternecido cuando su Alfa lo abrazo por atrás. Se encontraban en la cocina preparando la cena. Unas ricas gambas que se habían antojado al omega, con un poco de pan de ajo.
–¿Qué tal estuvo su día? –preguntó con la nariz perdida en la curvatura de su cuello.
–Fuí al hospital. – comento él omega, sin dejar de revolver la salsa.
– ¿Estas bien? ¿Nuestro bebé esta bien? –preguntó el Alfa, mientras lo volteaba.
El omega sonrio nervioso.
–No te preocupes, Alfa –dijo mientras acariciaba sus hombros– tuve una baja de presión y me desmayé. Si no fuera por que había quedado con Tae, me hubiera pasado algo.
El Alfa apagó las estufa, quitó el delantal del omega y lo levantó en modo nupcial. Lo llevó a la sala y lo hizo sentarse en sus piernas.
Y preguntó.
–¿Que dijo el doctor? ¿Por qué no me llamaste apenas despertaste?. Sabía que algo así sucedió mi lobo estaba inquieto.
JiMin suspiró.
–Me dijo que mi lobo esta débil porque aún no tiene una marca, esta perdiendo fuerza. El embarazo será riesgoso, para ambos. –el omega acaricio su cabello– no te llamé debido a la reunión. Se que es importante para tí.
–¿Llevas sintiendose así mucho tiempo? –preguntó.
El omega bajo la mirada.
–Desde que nos separamos esas dos semanas. Estuve muy débil y mi lobo lloraba todo el tiempo. Tu aroma era suficiente, pero fui empeorando.
–¿Por qué no me lo dijiste, JiMin?. Pudimos evitar esto.
–No quería presionarte.
El alfa suspiró y lo tomó del rostro.
–Omega, desde la primera vez que estuve dentro de tí, anhele dejar una bonita marca en tu cuello. –confesó entre sus labios. –Anhele sentir tu dulce aroma en mi todo el tiempo.
JiMin miró esos oscuros ojos brillantes y pudo ver amor y deseo en ellos. Amor y Deseo por él.
–Alfa, Deseo tu marca –susurró – y también... deseo marcarte.
Y lo beso y ambos se perdieron en la pasión del momento dejándose llevar por sus lobos y por el amor que sentían.
–Vamos arriba –susurró el omega.
El aire frío le acarició la piel, cuando el Alfa lo desnudo. Solto un suspiro tembloroso cuando YoonGi se alejó para observarlo.
YoonGi coloco una mano en su vientre acariciando con parsimonia donde se encontraba su cachorro. Se acercó a dejar un beso.
El omega sonrio enternecido por la acción.
El Alfa acariciaba su cuerpo con tanta delicadeza que JiMin se sintió en el cielo. Lo besaba con tanta pasión y anhelo dejándolo embobado por su sabor a ciruelas.
–Eres preciso –susurró el Alfa.
Se inclinó sobre él y le dio un mordisco a su lóbulo de una oreja antes de recorrerlo con la lengua. JiMin dio un respingo.
–Alfa –gimió el omega –por favor deja de jugar, quiero tu nudo dentro de mí.
YoonGi sintio a su miembro volverse más duro por lo que había dicho su omega y bajo a tomar sus pezones entre sus dientes mientras acariciaba sus entrada.
JiMin le clavó los dedos entre sus mechones oscuros. Cuando se sintió cerca del orgasmo el Alfa se detuvo, haciendo que suelte un gemido en queja.
YoonGi se pegó a él mientras lo miraba directamente a los ojos y lo penetro. Los ojos del omega se cerraron al sentir el miembro de su Alfa abrirlo completamente. Lo tomó de la nuca para que se inclinará a besarlo. Entrelazaron sus lenguas con delicadeza con ternura.
El omega gritó cuando él lo penetro hasta el fondo. Y pidió más mientras jalaba los mechones. Rodeó sus caderas con sus piernas y clavaba sus uñas en la espalda al llegar al orgasmo.
El placer se apoderó del omega y ladeo la cabeza dejando a la vista su cuello. Sin dudar un solo segundo el Alfa siguió dando embestidas hasta llegar al orgasmo y cuando el nudo se formó, mordio el cuello del omega. Al sentir el placer del Alfa volvió a correrse mientras gritaba el nombre del pelinegro.
Soltó un suspiro tembloroso y jalo la nuca del Alfa para ahora él dejarle su mordida ahí mismo. YoonGi solto un gruñido extasiado. En ese momento eran uno solo.
YoonGi rodó sobre el colchón dejando a JiMin sobre su torso. El omega ronroneo al sentir los dedos del alfa pasearse por su espalda. Sonrió al sentir la calma de su Alfa atravez del vínculo.
–Ahora somos uno–susurró el Alfa.
–Lo somos –confirmo el omega.
–¿No los lastime?.
–Estamos bien. –murmuró el omega dejando una leve mordida en el torso del Alfa. –Estamos más que bien. –El Alfa se removio cuando bajo el nudo, pero el omega lo detuvo– Quédate así –pidió – me gusta sentirte dentro.
YoonGi sonrio su omega era un descarado.
De pronto recordó lo que la marca de su omega conllevaba y se preocupó.
El omega lo sintió y lo observo confundido, trato de indagar pero el Alfa bloqueo la conexión, su lobo comenzó a lloriquear.
–Alfa, que sucede. –preguntó.
–Ahora veras todos mis recuerdos. –murmuró –verás todo.
JiMin suspiró y acaricio el torso de su Alfa para tranquilizarlo.
–Y tú igual veras los míos. –empezó. –No nos preocupemos por el pasado, Alfa. No nos preocupemos por nada. Solo disfrutemos del presente y de la llegada de nuestro primer cachorro y de los que van a venir más adelante.
–Tienes razón–dijo mientras bajaba sus manos más allá de sus espalda. –Ahora solo me ocupare de satisfacer a mi omega.
El Alfa se sentía en un sueño, si meses atrás alguien le hubiera dicho que estaría enlazado y esperando un cachorro le hubiera dado un buen golpe.
Estar con JiMin era alucinante, estaban conectados y se mantendrían así para siempre, en esta vida y las que venían.
–¿Qué te gustaría que fuera? –pregunto el omega, sacándolo de sus pensamientos. YoonGi lo observó confundido– Nuestro cachorro. –Aclaró– ¿Que te gustaría que fuera? ¿Niño o Niña?
–Sera una linda Niña –dijo el Alfa– Una linda niña de cabellos negros con rizos, nariz de botón con labios delgados y unos hermosos ojos zafiro como los tuyos.
El Omega lo observo perplejo por tan específica descripción.
–¿Como lo sabes? –preguntó.
– Lo soñé.
JiMin sonrió enternecido y asintió.
– Además de Arquitecto, ¿eres futurólogo? –preguntó burlón.
YoonGi fruncio el ceño y estampó al omega contra el colchón. JiMin soltó un gemido por el movimiento. El miembro del Alfa aún se encontraba dentro de él.
–No es un buen momento para burlarse de tu Alfa, cariño. Mucho menos cuando aún se encuentra dentro de tí.
JiMin solo lo beso sin ánimos de discutir y se entregaron el uno al otro de manera suave y pura. Amándose como nunca antes alguien amo.
Me encanta el detalle del sueño. Mi Papá soñó qué yo sería una niña. En mi familia es algo normal soñar con esas cosas cuando alguien esta esperando un hijo, la mayoría de veces son acertadas. Hasta yo soñé que una amiga tendría un niño.
Esta historia no es originalmente omegaverse.También las parejas destinadas no se reconocen inmediatamente y tampoco se le da mucho énfasis.
La marca del Alfa tiene la misma función que es cualquier fic, la del omega es más especial, debido a que no puede ser borrada, el Alfa pierde la capacidad de marcar a otro omega, además de eso le da la intimidad de comunicarse "telepaticamente" y ver los recuerdos del otro.
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