“artículo de Rita”...

                     RJ LEÍA UN LIBRO de los antecedentes de los Torneos de los tres magos mientras estaba sentada al borde del lago. Rolf estaba a unos metros con Ginny, jugando con los tentáculos que emergían desde las profundidades.

—¡Mira, RJ! —Ginny la llamó mientras el tentáculos la abrazaba. RJ sonrió hasta que otro tentáculo agarró a Rolf que tiró todas sus cosas, torpe como de costumbre. Ginny estalló de risa mientras Rolf gritaba, de cabeza, que tenía frío por los tentáculos helados.

RJ giró y vió a Harry caminando mientras hablaba solo, sonrió divertida y se acercó a él con disimulo.

—tontos Ravenclaw, tontos Slytherin, a Hufflepuff no lo culpo ¿Pero en serio? —Se quejaba en voz baja, sumido en sus penas sobre ser campeón.

—¿Y de gryffindor que opinas? —interrumpió divertida y Harry dió un salto alzando la cabeza y volteando a verla.

—que son contradictorios cuando les conviene —Admitió mientras comenzaba a caminar con ella —vine en busca de soledad, ya estoy cansado del silencio de Ron y la incomodidad de Hermione.

—Bueno... No soy soledad pero soy RJ, un gusto —estiró su mano en chiste y él la estrechó.

—soy un imán de problemas, un gusto —aceptó y se sentaron donde estaba antes RJ. —¿Qué hacias?

—Viendo a Rolf y Ginny ser casi ahogados —señaló a ambos que estaban a unos metros entrando y saliendo del lago porque alguien no quería dejarlos ir para seguir jugando.

—¿Eso haces en tu tiempo libre? —señaló y RJ mostró el libro.

—tambien investigo como ayudarte —admitió y él asintió.

—En tu tiempo libre podrías pasar más tiempo conmigo ¿Sabes? —Se encogió de hombros y RJ lo miró confusa —es que estás de clase en clase y de clase a la biblioteca, con tu mapa merodeador y el giratiempos...

—¡Shh! No lo digas tan alto —se quejó mientras le hacía señas, viendo a los lados —no puedo pasar más tiempo contigo, James. No compartimos clases, soy un año menor —obvió sonriendo —y...

—No me refiero a hora de clases. Ahora en tu tiempo libre estás más con Cedric que con tus amigos o conmigo —Se encogió de hombros y RJ soltó la carcajada, sonrojando al de lentes —¡Por favor! Apuesto a que no te diste cuenta que hoy pasaste a un lado mío con Cedric mientras yo salía de la clase de herbologia.

—él solo me estaba preguntando si habías puesto tu nombre en el Cáliz y le dije que no —se defendió lanzandose a abrazar a Harry que la abrazó de nuevo —no estés celoso, James. Sigues siendo mí número uno —Harry sintió alegría al oírla decir eso.

—Gracias por eso —admitió el chico y ella alzó la cabeza para verlo.

—¿Por qué? —preguntó confundida.

—por confiar en mí desde el momento uno —susurró mientras admiraba las pecas en el rostro de RJ. Ella sonrió enternecida.

—siempre confiaré en ti, James.

La pelirroja miró ambos ojos del ojiceleste, con el ruido del agua de fondo, hasta que admiró cada detalle, su nariz, su piel lisa, sus anteojos y su cabello revoltoso, mucho más largo. Se alejó un poco y subió sus manos al cabello de Harry, desordenandolo suavemente mientras él la miraba embelesado. Harry se fue acercando, lentamente a ella, a sus labios. Sintiendo que RJ era lo único real esos días. Lo único que quería.

Pero una gran ola de agua los baño.

RJ escupió el agua y volteó a ver dónde Ginny estallaba a carcajadas con Rolf que sonreía apenado. Ginny había hecho que el calamar les tire agua a los dos.

RJ miró a su hermana y se levantó rápido para correr hacia ella, Rolf golpeó el brazo de Ginny que notó a RJ y gritó antes de correr hacia el otro lado. Harry vió como RJ y Ginny corrían lejos en un juego de atrapadas y suspiró sacándose los lentes para limpiarlos mientras sentía su corazón avanzado.

RJ estaba con Ginny caminando tranquilamente, RJ iba hacia eso su tarea de pociones. Ginny no comprendía cómo su melliza podía caminar al mismo tiempo que hacía la tarea y escuchaba sus quejas, pero bueno, una de las dos debía ser la multiuso si ella no podía hacer más de una cosa a la vez porque se le cruzaban los cables.

—... Y entonces fui con Luna, pero estaba con Colin —contó mientras RJ asentía —Aveces siento que son muy unidos, más de lo que... Bueno, que es con el resto ¿No? —sonrió con sorna y RJ la miró con cejas alzadas ¿Eso eran celos?

—Ginny —comenzó RJ, hablando casual como si fuese del clima —¿Recuerdas la clase con la profesora Trelawney? —preguntó y Ginny asintio —¿Quién es ese amor correspondido?

—¡Ah! Acabo de recordar, Rolf se llevó mi libro con el suyo, ya sabes lo torpe que es, iré a buscarlo, luego...

—¿Es Colin? —la interrumpió y Ginny la miró con una mueca de asco.

—¿Colin? ¡No! Iugh —se quejó asqueada y RJ frunció su ceño. Sino era Colin ¿Quién...

La conclusión en su cabeza divina debió aparecer en la sorpresa de su rostro porque Ginny le tapó la boca antes de que grite. RJ comenzó a hablarle con la mano de Ginny en su boca que la chitaba.

Ginny bajó su mano cuando creyó que RJ se calló. Grave error.

—¡Te gusta Luna!

Ginny volvió a tapar su boca, molesta.

—oye, yo no le grité a todo el mundo que te gustaba Harry antes —la regañó bajando su mano.

—¿Por qué no me lo dijiste? ¡Yo te cuento todo! Absolutamente todo —abrazó los libros contra su pecho, indignada. Retomaron la marcha.

—Es que no... Bueno, es que es una niña y no sabía cómo reaccionarían, no tu. Sé que no te molesta, a nuestros hermanos tampoco, el problema es con mamá. —admitió caminando a su lado.

—¿Mamá? —cuestionó confundida y Ginny blanqueó los ojos.

—Ya me lo imagino diciendo: ¡Ah!... Ehm... me alegro, hija... Pero, Ginny, yo quiero nietos...  —Imitó el tono de su mamá y RJ hizo una mueca —no hagas esa cara, mamá es así.

—Yo no dije nada —se defendió RJ.

—Claro que no —se quejó Ginny y hubo algo de dolor en su voz, por lo que RJ frenó y miró a su hermana intrigada. Ginny respiró varias veces antes de hablar —No quería decírtelo porque sé cómo eres, eres empática y buena, pero, RJ... Mamá no es así de buena contigo como lo es con nosotros. Siempre está comparándonos entre nosotros, pero jamás dice nada malo de ti. “RJ es igual de brillante que Bill” “RJ tiene el gran corazón de Charlie” “RJ sigue los pasos de Percy”...

RJ sintió pesadumbre al oírla hablar así, su voz cada tanto temblaba pero no lo suficiente como para empezar a llorar aún que parecía querer hacerlo al hablar como Molly Weasley era en realidad.

—¿Y los demás? —susurró Ginny, bajando la cabeza por unos momentos —“Los gemelos son buenos... Pero no tienen futuro con las bromas, son irresponsables y revoltosos, deberían ser más como sus hermanos”, “Oh, Ron... Ron es bueno pero... Pero no resalta en nada y encima se mete en problemas. Le va bien en la escuela pero no como a los gemelos que al menos aprueban, le va bien en el Quidditch pero no es como Charlie”, y luego estoy yo... —sonrió con tristeza, viendo la aflicción en el rostro de RJ —“Ginny... Ginny debería ser más como RJ”.

—Ginny... —Su melliza retrocedió hasta sentarse en una de las bancas del pasillo al jardín, Ginny se sentó a su lado. Su melliza no se lo echaba en cara pero igual le pesaba.

—Esta bien, no es tu culpa, ni de Charlie, Bill o Percy —negó tomando sus manos —Pero nos duele ver como nosotros hacemos algo y mamá nos tacha de decepción familiar mientras que ustedes lo hacen y es como “ay, hay que entenderlos” pero a nosotros es un “Cada día se superan más”. —siguió con amargura, encogiéndose al sentir una opresión en su pecho.

—si sabía que mamá es así, ¿Cómo no hacerlo? —sonrió forzada y rió sin gracia —no me deja respirar que ya me habla asumiendo lo que voy a hacer “RJ será delegada”, si, quería hacerlo... ¿Pero y si ya no quiero? Aveces solo me fuerzo a hacerlo para no decepcionarla. Después de tirar a la basura los proyectos y los sueños de Fred y George ¿Qué haría conmigo si le dijese que no quiero ser delegada o prefecta y me gusta hacer bromas y jugar al Quidditch? Siento que se lo debo, Ginny... —susurró sin aliento —siento que... Que es mejor ser así y no causar problemas, aún veo en su mirada como teme el que... El que me vuelva a meter en problemas como en mi primer año.

RJ se acercó y abrazo a Ginny que también la abrazó. Estuvieron así, juntas unos momentos hasta que RJ se alejó y notó unas lágrimas en los ojos de Ginny, alzó sus manos y limpió el rostro de su melliza. Arthur Weasley decía que cada familia era un mundo.

—aun así no te escapas —Tiró de las mejillas de su hermana que se quejó —¿Te gusta Luna?

—si, si me gusta.

RJ movió el giratiempos una sola vuelta para que en unos segundos ya esté en momentos antes a dónde estaba. Se levantó del tapete del baño y salió de allí, saludó cortamente a Myrtle la llorona que la saludó recelosa y bajó las escaleras.

Caminó decidida, viendo en el mapa merodeador la etiqueta de su nombre en dos lugares al mismo tiempo. Sonrió al ver que estaba colocando huevos crudos en los asientos de Slytherin. Iba a guardar el mapa cuando notó a Hermione en la enfermería y a uno de los gorilas de Malfoy también, frunció sus cejas y se dirigió allí.

Se apresuró, tomando uno de los tantos pasadizos y tocó la puerta de la enfermería. Asomó su cabeza y Pomfrey la miró.

—¡Oh, RJ! ¿Qué haces por aquí, cielo? —sonrió cariñosa y RJ vió que Hermione estaba reacia a voltear.

—vine a ver a Hermione, ¿Qué pasó? —preguntó acercándose, Pomfrey cambió su rostro a uno receloso.

—¡Pelea en las mazmorras! Frente al profesor Snape, obviamente hubo consecuencias, pero Harry Potter siendo un campeón del torneo... ¡Lanzandole un maleficio a su compañero! —Regañó mientras RJ se acercaba.

La joven se asomó y aguantó la respiración al ver los largos dientes de Hermione, de por sí eran largos, pero ahora pasaban hasta su pecho. Gruesos como los de un castor. Hermione hipaba.

—Ahm, ¿Puedo ayudar? Es que... Estaba viendo las profesiones para tener y... Me gustaría ser medimaga ¿Le gustaría ser mi mentora, Poppy? —RJ sonrió y Pomfrey infló su pecho con orgullo, llevándose sus manos a su corazón.

—claro, lo que vamos a hacer es algo muy fácil, pero que afecta a las encías —Asintió inspeccionando a Hermione que miró a RJ, agradeció que la pelirroja la miraba normal, sin pena.

Y, para sorpresa de RJ y Hermione, Pomfrey logró achicar sus dientes. Aún que, conmoviendo a Hermione de gran manera, RJ dijo que le faltaba, por lo que Pomfrey achicó sus dientes un poco más. RJ sabía que Hermione tenía inseguridad sobre sus largos dientes, que eran un “defecto” a su parecer, pero RJ vivía en un mundo de magia y podían hacer lo que quisieran con su apariencia, por lo que ayudó a su amiga a sentirse mejor consigo misma. Lo que logró perfectamente.

—gracias, Poppy —Sonrió RJ mientras Hermione estiraba sus brazos en silencio para que RJ la abrace y oculte su llanto. RJ abrazó a su amiga riendo suavemente.

—De nada, cielito, ¿Vienes a ayudarme con el señor Slytherin? —RJ miró al gorila de Malfoy, pero notó algo brillando en su pecho y frunció las cejas, soltando a Hermione para acercarse.

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Era una insignia, en su pecho brillaba, pero a los segundos cambió.

POTTER APESTA.

RJ abrió la boca indignada y tomó al herido Slytherin por la camisa, escuchando a Poppy regañarla.

—¿De dónde sacaste eso? —le preguntó molesta.

—lo tiene toda la escuela ¡Suéltame, traidora a la sangre! —le gritó asqueado.

—¡RJ! —Poppy llegó a su lado, sosteniendo su hombro —sueltalo.

—¿Sabes dónde puedes meterte esa insignia? Donde se la voy a meter a cada persona que vea que la tiene... Donde no le da la luz —Amenazó, soltandolo abruptamente y quitándole la insignia, se giró a pasos pesados saliendo de la enfermería.

RJ se dirigió a dónde debería ir en un principio, pensando molesta. ¿Por qué se la agarraban tanto contra Harry?, ¿Por qué lo molestaban?, ¿Por qué no se tomaban el tiempo de conocerlo y enterarse que era un chico dulce y amable?, sentía tanta impotencia que tenía ganas de explotar.

Sin darse cuenta, ignoró a muchas personas que la saludaban en los pasillos, llegando hasta el salón de DCAO, allí se encontró a Moody que estaba bebiendo de la petaca.

—Vas a romperme la puerta —gruñó el hombre en cuanto entró así de molesta —te salen humos de las orejas ¿Qué pasó?

—¡Está maldita escuela pasa! —se quejó, llegando delante de él —son tan hipócritas que me dan ganas de gritar.

—¡Eso! —dió un saltito cuando Moody la señaló —necesitas de esa energía, de esa revolución de magia en tu interior para levantar tus muros. Así, podrías soportar hasta los cruciatus.

RJ lo miró curiosa y la sonrisa de Moody se ensanchó. Se removió incómoda pero asintió a la silenciosa pregunta de Moody.

—¿Lista para subir de nivel en las maldiciones imperdonables?

—creo que si...

Luna y Colin iban preocupados en busca de alguno de sus amigos, hasta que vieron a RJ temblando mientras veía un punto perdido en el jardín.

Los dos se miraron confundidos, iban a gritar su nombre siendo que era la amiga principal que buscaban, pero notaron como sus ojos estaban empañados y su cuerpo no paraba de sacudir. Emanaba pavor por todos lados, como si hubiera estado frente a un dementor por largos minutos.

—¿RJ? —la llamó Colin y RJ dió un salto alejandose repentinamente. Por un segundo, Colin vió a RJ de primer año.

—Oh, hola. Perdón... —negó, sonriendo nerviosa y suspirando, tratando de calmarse —¿Qué pasó?

—¿Estás bien? —Luna se sentó a su lado derecho, hablando preocupada, Colin se sentó al izquierdo.

—¡Si! ¿Por qué no lo estaría? Es solo que... Que bueno, leí un libro muggle que me prestó Hermione y me dejó aturdida cuando lo terminé, hay escritores muy buenos —rió bajito y se limpió los ojos.

—¡Ay! Yo también leí uno así, no pude dormir repasando todo lo que leí —Colin asintio sonriendo —Era ese libro que te gustó, pensé en leerlo para hablar contigo de él, y estuvo muy bueno. —RJ lo miró enternecida, pronto Colin borró su expresión y abrió los ojos recordando algo —¡Debes ver esto!

Luna le tendió el diario de El Profeta y RJ lo tomó.

—Te estuvimos buscando desde ayer —contó Luna —en serio es complicado encontrarte. Deberías dejar algunas asignaturas, casi no tienes tiempo para chismosear —sonrió con su usual delicadeza.

—no te enojes conmigo, metí la pata, lo sé ¡Pero Rita me mal entendió! —Colin se excusó de antemano.

RJ miró confundida el diario y comenzó a leer. Era un artículo de Rita sobre los campeones del Torneo, ¿Campeones? No, parecía hablar solo de Potter. RJ leyó como Rita hablaba sobre como Harry lloraba pensando en sus padres ¡Blasfemia! James jamás lo iba a admitir si eso sucedía, mucho menos con una desconocida. Pero, lo que le quitó el aliento fue lo que leyó al final.

“Finalmente, Harry ha hallado el amor en Hogwarts: Colin Creevey, su íntimo amigo, y de su aparente novia, asegura que a Harry raramente se lo ve sin la compañía de River Jimena Weasley, una muchacha de sorprendente belleza, hija de la potente familia Weasley, su padre fue visto en varios líos del Ministerio estos últimos tiempos, y que parecen estar más que enamorados desde que se conocieron en el primer año de Harry Potter. Es notorio que la jovencita apodada RJ estará muy celosa de que su novio este con tantas pretendientes detrás al ser un campeón del torneo”.

RJ abrió la boca sorprendida y miró a Colin.

—¡Yo dije que antes te gustaba, pero que dejó de hacerlo, solo que eran amigos! Sabes que no sé controlar mi boca, lo siento, lo siento —se disculpó múltiples veces y RJ alzó su mano, callandolo.

—ire... Iré en busca de James.

Se levantó yendo en busca de Potter, hasta que encontró a Ron.

—Hey, Ronnie ¿Viste a James? —preguntó, pensando que ya habían resuelto sus problemas. Su hermano mayor la miró aparentemente molesto.

—¿Por qué? ¿Vas a ir a besar y apoyar a tu novio con todo lo que pasa? —cuestionó cruel y RJ lo miró boquiabierta.

—¡Madura, idiota! —le gritó sin contenerse y Ron retrocedió un paso —¡Tengo suficientes problemas para que me sumes tus tonterías de caprichoso! No es por minimizar lo que sientes, pero los problemas se hablan, así, tu solo te hundiras. Si me disculpas, me voy en busca de mi “novio” —pronunció con ironía, dándose la vuelta y sacando el mapa merodeador.

Notó a Harry yendo a su siguiente clase y se apresuró a alcanzarlo, cuando llegó, vió que algunos se reían al verlo pasar y Harry dejó caer su pluma. Hizo una mueca incómoda y se acercó a tomar la pluma.

—¡Eh, James!

Más que harto, Harry se detuvo en el corredor y empezó a gritar antes de acabar de volverse:

—Sí, he estado llorando por mi madre muerta hasta quedarme sin lágrimas, y ahora me voy a seguir… —pero cuando volteó vió a RJ sonriendo con cejas alzadas.

—solo quería devolverte la pluma pero que bueno saberlo, yo también lloro cuando veo gatitos abandonados —abultó su labio inferior con burla y le dió la pluma, viendo a Harry ponerse colorado —no te avergüences, no hay nada más lindo que un chico sin temor a mostrar sus emociones —rió al ver a Harry aún más rojo.

—lo siento —susurró él, recuperando la pluma —y, que conste, no lloro hasta dormirme. —se rascó la nuca y RJ rió, una vez se calmó comenzó a caminar a su lado —¿Leíste el artículo?

—¿Cuál artículo? —preguntó fingiendo no entender y Harry la miró emocionado.

—¿En serio no sabes?

—claro que lo leí, James —Bufó mostrando el diario en su mano, Harry soltó un gemido de cansancio haciendo reír a la pelirroja —tranquilo, aprendí en jamás confiar en los diarios... El problema es mi mamá. Ella si ama los diarios.

—No digas eso —se tapó el rostro y RJ tomó sus manos para bajarlas, viendo con pena al de lentes —lamento haberte metido en esto.

—fue el bocón de mi mejor amigo, tranquilo —negó con una pequeña sonrisa —no me interesa lo que digan de mi, estoy ocupada con otras cosas para tomarle importancia a algo como eso. Pobre de ti, oh, James Potter, tiene una novia de sorprendente belleza pero celosa —dramatizó, usando sus manos unidas para bailar de manera exagerada y voltear haciendo reír al de lentes.

—¿No estás molesta entonces? —RJ negó.

—No, para nada, tu y yo sabemos que solo somos amigos —le dió un empujón y Harry sintió una punzada —solo vine a ver qué no quede nada incómodo por ser emparejados.

—no, no, yo no tengo problema —negó en un bajo susurro, acomodando sus lentes.

—entonces genial —sonrió buscando la mirada de Harry que al final la miró, sonriendo como pudo —¿Te veo luego, James?

—te veo luego, RJ.