Vi como los Mikaelson salieron del pensadero, lo primero que sentí fueron los brazos de Klaus abrazándole sin lastimarme, sentí como sus lágrimas mojando mi hombro.

—Te amo tanto mi amor—me dijo una vez que nos separamos del abrazo, pero ahora siento que Rebekah es la me abraza

—Rebekah estoy bien tranquila—digo mirándola con una pequeña sonrisa

—Ellos no saben valorarte como hermana, los protejas siempre pero si ellos dos no te quieren nosotros si— me dijo con una sonrisa Rebekah, los demás solo sonrieron estando de acuerdo a la rubia de su hermana

—Eres muy valiente Atenea —me dijo Elijah con una sonrisa que devolví.

Todos nos la pasamos hablando de lo que vieron, y yo respondiendo algunas preguntas que me hacían o algunas bromas que hice también, también abramos sobres los mellizos y cosas así, me siento tan bien con ellos.

Dos meses después

Ahora me encuentro en la habitación de los mellizos, estoy muy emocionada ya que solo falta otros dos meses para que nazcan los bebés, una vez que termine de guardar la ropa que Rebekah compró ayer para sus sobrinos, siento unas manos rodearme la cintura y un beso en el cuello.

—Que hermosa estás amor—me dijo Klaus dándole la vuelta y darme un beso con cariño y amor—Hola mis otros amores—dice poniéndose a la altura de mi enorme panza y poner su mano en sima de la mía

—Gracias—dije mirando a Klaus que me ve un poco confundido—gracias por darme este hermoso regalo de ser madre, por darme una oportunidad de amarte—dijo con una sonrisa

—No, gracias a ti por darme una oportunidad de tener una familia,de darme dos hermosas esperanzas, por desamárrame que seré mejor y que si merezco que me amen—me dijo Klaus con lágrimas en los ojos, lo beso para que sienta que lo amo más que a nadie a demás de mis hijos—Me gusta esa foto!—dijo una vez que nos separamos del beso

—Jaja Rebekah me obligó o tomármela—dije tomando la foto en mis manos

—Pues valió la pena amor, por qué te vez muy hermosa—dijo para robarme un beso—La habitación es muy linda—dijo mirando la habitación mientras que me toma de la cintura

—Todo gracias a Rebekah y a Kol, que le ayudaron Bueno a Kol lo obligamos—dije soltando una risa

O así

Después de hablar un rato más de los bebés, nos fuimos a la cocina por qué tengo un hambre, cominos entre risas y robándonos unos que otros besos, después de eso le bañe y nos acostamos a dormir abrazados.

"No veo la ahora de tenernos en mis brazos, mis pequeños James y Hope" fue lo último que pensé para quedarme dormida

Hola estos dos capítulos era una mini maratón.

No olviden visitar mi nueva historia llamada " ¡¡Estamos en crepúsculo!!" —Jacob Black y tu

Espero y les guste por que lo escribí con mucho amor para ustedes