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Estaba pensando en la manera más fácil de acercarme a la familia Potter sin que me viera tan intensa y por supuesto en un horario que no me abrume ya que ahora iba a trabajar en la cafetería. Tengo turno de 1:00 pm a 5 pm por ahora y me parece perfecto. Fue por ello que voy ahora que es temprano para llevarles un poco de los brownies que hice. Deben querer probarlos, no veo porque no.

Estaba por salir de la casa cuando escucho que Chiara seguía aquí, así que voltee a la entrada donde ella estaba buscando sus papeles por todos lados.

-¿te ayudo en algo? - le pregunté y ella voltea a verme con la charola.

- ¿qué estás tramando?

- nada, no veo porque piensas que estoy tramando algo. - Ella ríe y se pone de pie para ponerse su cara y su estetoscopio en el cuello. - ¿qué?

- cocinaste brownies.

- ¿eso que significa?

- que algo te está haciendo pensar de más las cosas. - me da un beso en la frente para ya irse. - solo los preparas cuando algo te preocupa, lo hiciste cuando íbamos a mudarnos acá y lo hiciste cuando íbamos a ver a papá.

- no se de que me hablas.

- como digas. - Ella levanta ambos hombros y va hacia fuera para tomar el carro e irse. - sea lo que sea, por favor no te metas en problemas y... ¿nos vemos para cenar?

- por supuesto que si. - contesta una tercera voz y era Sirius, el padrino de Harry. Lo saludé a lo lejos y el a mi. - hola ¿cómo estás?

- pareciera que tú vives aquí. - le contesta mi hermana y aproveché el que ellos dos se quedaron platicando y voy a la casa de los Potter para entregar estos brownies a Harry. Toqué de la puerta y esta se abre ya que ya estaba técnicamente abierta. Entré y fui a la sala de estar para buscarlo pero nada. Esta casa es preciosa, mucho más grande que la nuestra y llena de muebles elegantes y ventanales enormes.

Empecé a caminar para ver cada lugar, por ejemplo, la habitación con libros y una mesa para el té por lo que veo. Y quería ir a ver la cocina, ya que anoche no tuve la oportunidad verla. Es muy grande, por un poco más que la de nuestra casa y contaba con muchos ingredientes que yo no cuento con. Wow, amaría tener esta cocina, más por la mesa en el centro que tiene la cual es muy amplia y lisa para ahí usar las masas y todo eso.

Me voltee para seguir viendo de la casa y casi choco con James. Me asusté pero de nuevo me aferré a mi charola.

- hola. - el me sonríe y yo muy pero muy apenada tan solo me voltee para dejar los brownies sobre la mesa. - ¿cómo entraste?

- el padrino de Harry fue a hablar con mi hermana. - cuando dije eso, el ríe. - ¿está Harry en casa? Me gustaría darle un poco de los brownies que hice.

- ¿los hiciste para Harry? - pensando en el hecho de que tengo que pasar tiempo con el, si. Lo hice con una excusa para venir a verlo y preguntarle sobre cómo está llevando esta situación. - que linda...

- Vanessa. - le recordé mi nombre.

- ¿puedo probar uno? Ayer quedé fascinado con los pastelitos. - dice mientras apoya los codos en la mesa donde estaban los brownies.

- ¿en serio? - sonreí emocionada. - muchas gracias, si, adelante.

- solo tomaré uno, lo prometo. - reí nerviosa y es que, me importaba mucho que pensaban los demás de lo que cocino. Me parte el alma cuando recibo una mala critica pero es parte de, y tengo que aprender a recibirlas. - es lo mas delicioso que he probado en toda mi vida.

- que alivio. - dije mientras suspiraba hondo. - puede tomar los que quiera.

- ¿por qué preparas los mejores postres del mundo? wow. 

- es que... me gusta mucho la repostería. - admití. - y estoy ahorrando de hecho, para conseguir un negocio donde pueda poner a vender todos mis postres. 

- te puedo pagar para que vayas bien con tus ahorros si me preparas mas postres como estos.

- puedo dárselos gratis, no es problema alguno. - me recargué en el refrigerador que estaba detrás mio. - ya tengo trabajo... en una cafetería en el centro. Hoy es mi primer día. Perdone si hablo demasiado, normalmente hablo mucho.

- me agrada eso. - el sonríe. - ¿cómo te vas al trabajo? ¿tu hermana te llevará?

- oh, ella esta ocupada casi todo el día entonces creo que pediré un taxi. - me mira con el ceño fruncido. - tengo una bicicleta pero ya tuve la experiencia de ir al centro una vez en ella y si cansa mas de lo que quisiera admitir. 

- pero entonces, el dinero que ganes se irá en tu taxi de ida y de regreso.

- obviamente no todo el dinero...

- yo te llevo. - lo miré con asombro. - mi hijo nunca esta en la casa.

- ¿Harry no esta ahora?

- sale todo el tiempo con sus mejores amigos... a quienes deberías conocer por cierto, te agradarían mucho. - asentí con la cabeza. - pero tengo tanto tiempo libre que me aburro. Yo puedo llevarte y recogerte si así lo quieres.

Siento que Lily apreciaría esto porque así yo podría contarle cualquier novedad de su ex marido. 

- muchas gracias, si. Por favor.

- con una condición... - se acerca a mi y me puse mas nerviosa, mas porque no tenía ni la mas mínima idea de lo que me iba a decir. - ¿puedes seguir dándome a probar tus postres?

- trato hecho. - le estreché la mano. - gracias señor Potter, mi horario es de una a cinco y...

- me da risa como me presenté contigo con mi primer nombre pero ahora has decidido llamarme por mi apellido.

- por respeto a usted claro.

- me haces sentir bastante viejo. - el ríe. - pero es valido, agradezco el "respeto". Pero tu nombre me resulta largo.

- no es para nada largo. - ahora yo me reí. - son tres sílabas.

- ¿alguien te dice Nessie?

- por supuesto que no, según yo no es una abreviatura para mi nombre. - al menos nunca antes la había escuchado. Solamente del lago Ness. - ¿por?

- porque así te voy a decir desde ahora. - me despeina el cabello y toma un último brownie. - que por cierto, yo no tengo ningún problema en llevarte te lo prometo pero ¿y tus padres?

- no vivo con mi padre. - dije levantando ambos hombros. - el um... - odio tener que dar la explicación todo el tiempo. - digamos que no le encanta el que yo sea una esquib.

- oh, tu padre es un mago. - dije tosiendo ya que el brownie se le atoró de la noticia que recibió. - wow, eso no me lo esperaba.

- ¿tu eres un mago, cierto? Harry es uno. - el asiente con la cabeza. - que increíble, básicamente mi sueño de toda la vida.

- yo no puedo hacer estas maravillas que tu haces. - sonreí por el hecho de que intentó hacerme sentir mejor. - así que es diferente. Pero entiendo, entonces solo son tu y tu hermana.

- así es, mi hermana es medico y esta viviendo su mejor vida haciendo lo que ama y yo bueno... ni siquiera se aun si quiero ir a la universidad.

- descuida, eres joven. Tienes demasiado tiempo para pensar bien las cosas y en como quieres verte en un futuro. - el pasa por donde estoy y saca del refrigerador un poco de leche. - ¿quieres?

- no gracias.

- no sabes cuantas veces he querido comer un postre como estos en esta casa sin que me regañaran porque tienen mucha azúcar. - lo miré con el ceño fruncido. - oh si, mi ex esposa, ella es...

- ¿estricta?

- perfeccionista. - el dice haciendo los ojos hacia atrás. - no podía haber algo diferente o que no le pareciera porque ya iba a perder la cabeza. - ahora entiendo porque quiere que yo este al pendiente del orden de su familia mientras ella no esta. - no me mal entiendas, la adoro como no tienes una idea. Pero eso no quita el que fuera un dolor de cabeza.

- ¿usted la sigue queriendo? - no puedo creer que me he convertido en la psicóloga del Sr. y la Sra. Potter. 

- bastante, por supuesto. - es bueno saber que ambos están en el mismo canal. - pero ella fue quien pidió su espacio y su tiempo y hey, yo no me pienso negar a ello.

- ¿me esta diciendo que si fuera por usted, usted seguiría con ella? - el se queda pensando en su respuesta y termina asintiendo con la cabeza. - wow.

- eso no quita el que no este disfrutando mi tiempo a solas. - el ríe. - que por cierto ¿nos vamos? para que no llegues tarde.

- si, gracias. - tomé una servilleta para limpiar de las migajas de brownies sobre la mesa y me voltee para tirarlas pero James me detiene y me toma de la mano para retirarme la servilleta.

- no te preocupes, yo la tiro. - me sonríe y me da mas nervio aun tenerlo así de cerca. Lo cual esta mal, porque el solo lo hizo por ser amable y yo porque lo encuentro tan lindo que ni se como actuar enfrente suyo. - ahora si, vamos.

Salimos de su casa y me subí al carro. Al menos la mitad del camino, cada uno iba viendo hacia el frente sin mucho que decir. Es que, realmente no había nada de que hablar. Si, ha ambos nos gusta star Wars y quizás los postres pero no por eso nos íbamos a ser los mejores amigos del mundo. 

Como sea, no fue hasta que el rompió el silencio.

- ¿puedo decirte algo y no te enojas? - no me esperaba ese comienzo de pregunta pero terminé aceptando. - creo que tu padre es un completo idiota.

- oh descuide, yo igual pienso lo mismo. - suspiré hondo. - no pasa nada.

- claro que pasa, yo no puedo imaginarme dejando de lado a mi familia solo porque no tiene magia.

- no lo sabe porque no ha estado ni estará en esa situación. - James se queda pensando y tarda en darme una respuesta, y es que es cierto, creo que puedo lograr a entender un poco pero muy poco a mi papá. Mas no a justificarlo.

- sea como sea, creo que tu y tu hermana merecen mas, es todo. - sonreí ante ello. 

- ¿yo te puedo decir algo y no te enojas?

- realmente no se que es lo que voy a escuchar y tengo miedo. - el ríe.

- creo que es una tontería que usted no viva la vida que quiere. - voltea a verme confundido. - me dijo que no le gusta a nadie Star Wars en su casa y que por ello casi no habla del tema y que tampoco lo dejaban comer postres por la azucar. Yo jamás dejaría de lado las cosas que amo solo porque a alguien mas no le parecen.

- supongo que tienes razón. - dice mientras se estaciona enfrente de la cafetería y voltea a verme. - pero nunca has estado enamorada como para sacrificar algo por alguien ¿o si?

- no... nunca lo he estado... pero se que cuando lo esté, no voy a cambiar por esa persona. O le gusta como soy o no, punto. - el ríe ante ello.

- ay Nessie, eres todo un caso. Pero ¿adivina qué? me agradas y mucho. - abrí la puerta para por fin irme. Y el por igual baja para despedirse. - ¿tu hermana y tu tienen planes para esta noche? es que vienen los amigos de Harry y me gustaría que los conocieras.

- ¿puede ir Chiara?

- por supuesto que si, ahí va a estar Sirius. - puse los ojos en blanco pero fue inevitable, el logró sacarme una sonrisa. - mucho éxito en tu primer día de trabajo.

- éxito en... tu día. - ni siquiera sabía aun a que se dedicaba el señor Potter. - nos vemos al ra... - ni siquiera terminé de decir lo que estaba diciendo cuando vi que el se encontró con una chica y empezó a platicar con ella de la manera mas coqueta. Era evidente que se conocían ya que el se emocionó al verla. 

Traté de no prestarle atención a ello y entré a la cafetería.

¿Estas son el tipo de cosas que Lily Evans esperaba que le contara? Odio esto de ser literalmente una lechuza mensajera. Ja, si mi papá me escuchara usar esa expresión, se reiría de mi por no tener la oportunidad de tener una lechuza como Josh si tuvo. 

Pero al menos entiendo la referencia. 

NOTA: holi, perdonen si esta algo nulo por ahora, pero están tan solo apenas conociendo se los personajes :)