—Lo encontre...

—¡¿Q-que?!—Rápidamente se levantó para encararlo y suplicarle.—¿Donde está?,¡Dímelo por favor!

—¿Taehyung?—Le hablo preocupado al ver como comenzaba a desesperarse por la respuesta, tanto que incluso parecía no poder respirar—¿Taehyung, que tienes?

—Está comenzando a tener un ataque de ansiedad otra vez...—Se acercó rápidamente Chanyeol, para darle un poco de aire con sus manos.—Señor Kim, respire profundamente y cuente hasta el 10...

—E-estoy bien...—Respiró profundamente, recuperando así su respiración.—S-solo fue la impresión...—Poniéndose de pie por su propia cuenta.

—Y-yo nunca te había visto así...—Mencionó Hoseok sorprendido de la reaccion de Taehyung.

—Nunca me había sentido así, es como si necesitara a Jungkook para vivir, por que me falta el aire y siento que morire en cuestiones de segundos...—Se inco frente a él.—Por favor...te lo ruego Hoseok...dime donde esta...

—El está en el castillo del Conde Yung yeum.

—¡¿Q-que?!—Apretó fuertemente sus puños, haciendo que las venas de su cuello se marcarán y sus ojos cambiaran a un tono rojizo intenso.—¡Ese maldito!—Para después correr lo más rápido posible hacia esa tenebrosa mansión, la cual quedaba algo lejos de su mansión. Mientras que en el camino pensaba como actuaría en cuanto aquel Conde lo viera, quería matarlo en cuanto abriera la puerta, pero tenía que mantener su postura para no llegar a perjudicar a su Amado.

Todos siguieron a Taehyung, pero Hoseok aún estaba allí ya que no podía correr a esa velocidad, estaba por salir de la mansión para ir con Jungkook y decirle que Taehyung estaba en camino, pero una voz detrás de él lo detuvo.

—¿Yo puedo ir, Papi?

—No pequeño, esto es muy riesgoso para pequeños como t-...—Sus palabras quedaron suspendidas en el aire cuando se dio la vuelta para ver a su pequeño y este ya no era tan pequeño.–¿J-Jiminie?—Su Hijo ahora era un chico muy atractivo, que aún conservaba esa tierna carita, pero su cuerpo parecía tener bellas curvas, un muy buen cuerpo a la vista de cualquiera.

—Hola Papi...—Hoseok corrió hasta el para poder abrazarlo, Jimin no lo podía sentir físicamente pero le gustaba cuando su Papá Hoseok lo abrazaba.

—Has crecido mi Pequeño...—Comenzó a llorar, pues no pensó que ese momento llegaría tan rápido.

—Papá también me dijo eso, aunque yo al principio me asuste.—Hizo un puchero.

—No tienes nada de que asustarte pequeño, es normal...

—¿P-pero entonces si ya estoy grande, ya no podre ir a la escuela?—Haciendole un puchero en cuanto se separaron.

—Si, puedes ir a una escuela especial para chicos grandes así como tu...

–Pero ellos no quedran jugar conmigo...—Nuevamente hizo un puchero, y entonces Hoseok comprobó que su Hijo aún era su Pequeño.

—Me temo que no pequeño, pero Taehyung y Jungkook podrán jugar contigo...

—¡Pero yo quiero jugar con mis amigos y tener aun muchos más amigos!

—Lo sé Jiminie, pero por lo pronto estarás aquí en casa, ¿Bien?—Mientras acariciaba su cabellera.

—Si Papi...

—Bien Pequeño, ahora tengo que irme a decirle a Kookie que Taehyung esta en camino, ¿Si?

—Si Papi, y por favor dígale que lo extraño mucho...

—Yo se lo diré Pequeño...—Dándole un beso en la cabellera Rubia, para después desaparecer en la pared.

—Espero que este bien, Hyung...
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Taehyung había llegado a la oscura y tenebrosa mansión de aquel que alguna vez había considerado familia. Desde afuera se notaba como todo era antiguo y descuidado, pero más que nada oscuro y sólo siendo iluminada por los rayos de la luna, su Amado debía de estar atemorizado por eso mismo se atrevió a tocar.

Segundos después le abrió ese ser repugnante que tanto odiaba Taehyung, pero tuvo que ser lo más hipócrita posible si quería recuperar a su Jungkook...

—¡Primo Yung!

—Taehyung...—Sonrió al mismo nivel de hipocresía que Taehyung.—¿Que te trae por aquí?

—¿Qué no puedo visitar a mi Primo?

—Ja, ja, si, es solo que no pensé que te atrevieras a venir a este lado oscuro...

—Recuerda que también soy un vampiro...

—Si,es solo que tu estas acostumbrado a lo bueno y a lo mejor, así que nunca te invite por que creí que un vampiro tan importante como tu nunca convivirias con vampiros como yo...

—Ja, ja, no es como para que te humilles solo...—Soltó una pequeña risa.—Entonces...¿Puedo pasar?

—Si, claro pasa...—Haciendose aun lado para que pudiera pasar.

—Gracias...—Sonrió hipócritamente mientras pasaba hacia el interior de la mansión.—Y parece que es aún más oscura por dentro.

—Si bueno, yo morí en este castillo y desde ese entonces ha estado muy silencioso, pero no me importa ya que vivo solo y me adapte a la soledad...

—Mmh, que bueno...

—¿Quieres algo de beber?

—Si, por favor...—Se moría de la desesperación por encontrar a su Jungkook, pero tenía que mantener su margen y atacarlo en el momento adecuado.

—Bien, ya vuelvo, pero puedes esperarme en el salón...—Apuntando hacia la gran sala, donde se encontraban los sofás y las viejas decoraciónes empolvadas.

—Si...—Caminó hacia dónde le había dicho el otro vampiro, mientras recorría con su vista toda la mansión, ¿Donde podría estar su Kookie?

—Volví...—Sonriendo sinicamente. Traia consigo dos copas, las cuales contenían un liquido rojo.

—Gracias.—Dijo entredientes mientras aceptaba su copa, aunque por supuesto que no tomaría de ella, podía contener un tipo de veneno, aparte de que se veia diferente a la que el tomaba.—Es sangre de animal, ¿Verdad?

—No,yo no tomo de esa asquerosa sangre, ja, ja.—Río burlonamente, alzó su copa hacia Taehyung y dijo:..—Es de humano.

—A-ah, ¿Si?—Miró sorprendido la copa.

—Si, ¿Por que? ¿No te gusta la de humano?—Arqueadole una ceja.

—¿De quien es la sangre?—Ignorando sus preguntas.

—Oh, no te preocupes por eso, solo te diré que de un chico muy dulce, y vaya que su sangre también lo es.—Dijo mientras daba un trago.

—¡¡¡Eres un maldito!!!—Se abalanzó hacia el, para después comenzar a golpearlo.—¡¡¡Donde esta Mi Jungkook!!!

—¡No se de que estabas hablando!

—¡¡¡Claro que lo sabes maldito Bastado!!!—Siguió golpeandolo sin cordura, mientras este trababa de defenderse.

—¡D-de acuerdo, te lo diré!—Entonces Taehyung paro de golpearlo,para después ponerse de pie, pero sin bajar la guardia de cualquier intento de ataque del contrario.

—¡Allí esta!—Apuntó hacia la copa de sangre derramada en el suelo y entonces Taehyung se quedó sin aliento, para después dirigirse nuevamente hacia Yungyeum, esta vez para matarlo, pero entonces todo se volvió negro...

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