Reí al leer lo exagerado que puede llegar a ser Jimin. Guardé la nota, para luego pegarla en la libreta.

La puerta se abrió de golpe, una alborotada cabellera rubia se asomó para comprobar si estaba dormido.

—Buenos días hermoso— Jimin entró con una bandeja en sus manos. Mis mejillas comenzaron a sonrojarse involuntariamente.

—Buenos días— susurré con una sonrisa en mis labios.

Jimin dejó la bandeja sobre su lado de la cama, luego de acercó para besar mi mejilla.

—Ahora sí, son buenos— él se acomodó a mi lado

—¿A qué se debe todo esto?— levanté una ceja curioso, la bandeja traía pan tostado, jugo de naranja, muchos chocolates y dulces, además de una rosa roja, la cual, no pude evitar oler.

—Solo quise hacer algo especial para ti— sonrió, algo me decía que este día sería diferente, el hecho de haber confesado que siento algo por él, ya lo hacía especial

—Pensé que estabas dormido anoche— fui yo él que se atrevió a retomar la conversación de anoche, sentía algo dentro de mí que me impulsaba a hablar con él.

—Oh, yo pensé que no querrías hablar de eso— fruncí un poco el ceño mientras me disponía a desayunar

—Sí quiero— encogí mis hombros, Jimin se puso un poco nervioso, pude notarlo cuando bajó la mirada y jugó con los dedos de sus manos 

—Tú, ¿de verdad me quieres, YoonGi?, debes ser sincero, por favor— mi corazón comenzó de un segundo a otro a latir más rápido

—Sí, de verdad— tragué en seco, de verdad lo quería, él se había ganado mi cariño, aunque nunca revelé que se lo ganó tan solo en unos días.

—Dios, creo que me desmayaré— Jimin estaba sonrojado, no pude evitar soltar una carcajada

—¿Por qué dices eso?— Aunque no lo crean, tengo sentimientos, solo que me cuesta demostrarlos a terceros 

—Yo, pensé que nunca lograría que sintieras algo por mí, cada día que pasaba te sentía más cercano y tenía miedo que al preguntarte te asustaras y me dejaras— su confesión no me causo rabia, sino, ternura, y él dice la verdad, me había acercado mucho últimamente, y había comenzado a tenerle confianza, algo nuevo en esta relación.

—No soy de piedra, Jimin, y no tengas miedo de preguntarme algo— él asintió rápidamente

—Entonces, dilo otra vez— no entendí realmente lo que me estaba pidiendo

—¿Qué cosa?— él sonrió y explicó

—Di que me quieres otra vez, porque ayer estaba dormido y no sabía si estaba soñando o no— pareciera que una ola gigante de nervios había atacado mi cuerpo en tan solo segundos, hasta podía sentir mi labio inferior temblar.

Decir Te Quiero cuando estás saliendo constantemente con alguien, significa que ya sientes un tipo de amor por él, a lo mejor, se te escapa, o no es amor, pero junto a él, te sientes distinto y especial.

—Te Quiero, Jimin— susurré, sabía que estaba muy avergonzado, sentía mis mejillas arder. Jimin no lo pudo evitar, se acercó hasta mí y me besó. No puedo negarlo, le seguí el juego.

—También te quiero, Yoonie— besó sonoramente mi frente y se alejó —dejaré que desayunes, luego recuerda que tenemos que ir con Dara. 

—¿Has hablado con ella?— pregunté sorprendido, él asintió

—Tenemos que estar en dos horas en su departamento— fruncí el ceño, ¿ella no trabaja?

—Espera, pero ¿no está en la oficina?— Jimin sonrió y levantó una de sus cejas

—Tenemos un punto a favor, cariño— mordió su labio inferior, aún seguía sin entender 

—¿Por qué?— pregunté

—Jin Hee, la despidió

...

El edificio donde Dara vivía era gigante, podría apostar que tiene al menos cincuenta pisos, era escalofriante.

Jimin mantuvo su mano entrelazada a la mía todo el camino, habíamos caminado desde un restaurant, todo el camino sentí a gente observándonos y paparazzis que no pierden su tiempo, comenzaba a sentirme orgulloso de caminar con él sin ocultar lo que realmente está pasando.

—Venimos al departamento de nuestra amiga Sandara Park—  Jimin le habló al conserje del edificio

—Un segundo— él llamó hasta la casa de Dara, cuando recibió la aprobación de ella, nos dejó pasar

—Oh, no, escaleras— gruñí al ver que el ascensor estaba en mantenimiento 

—Algo de actividad física no está mal, Yoonie— Jimin me arrastró hasta las malditas escaleras 

Creo que mis piernas ya se habían muerto al llegar al departamento de Dara, Jimin se rió de mí unas cuantas veces, tenía pésimo estado físico, pero con mucho orgullo. 

—¡YoonGi, Jimin!— Dara sonrió ampliamente al vernos parados frente a su casa—, adelante— La saludamos con un beso en la mejilla, luego de eso nos llevó hasta su sala de estar, donde pude notar muchas fotografías antiguas y apostaría que vi una mía también colgada.

—Bien, qué les trae por aquí— ella mordió una de sus uñas algo nerviosa

—Venimos a hablar sobre Jin Hee — Jimin se acomodó en el sofá—, es muy importante

—Bien, en qué puedo ayudar— a ella le temblaban los labios al hablar

—¿Por qué te ha despedido?— antes de comenzar, quise preguntarle la verdadera razón de su despido

—Jin Hee buscaba a gente más joven, solo eso— ella estaba mintiendo, habíamos partido muy mal

—Lo siento, pero yo no creo eso, ¿qué es lo que realmente te hacía Jin Hee, Dara?— Jimin logró intimidarla completamente, ella no sabía cómo responder.

Nunca se me había pasado por la mente que Dara fuera maltratada por Jin Hee, ella se veía tan sonriente cada mañana, que se me hacía imposible.

Pero, muchas veces usamos máscaras invisibles que le muestran al mundo lo feliz que eres, pero sabes que por dentro lo estás pasando muy mal.

—Nada— negó incómoda 

—Dara, necesito que seas sincera con nosotros, tú bien sabes que Jin Hee nos ha puesto una demanda y estamos buscando pruebas para culparlo, sé que no es un hombre intachable como la prensa lo nombra, él esconde muchas cosas, y tú podrías ser una muy buena ayuda— de alguna manera le supliqué que fuera sincera

—YoonGi, no puedo hablar— solté un gran suspiro mientras trataba de analizar y encontrar las palabras correctas

—Entonces, escondes algo— Jimin susurró—, Dara, por favor, necesitamos que nos ayudes— Jimin mordió su labio nervioso, sabía que por su mente estaban pasando distintas formas de tortura que vivió Dara en ese estudio 

—Yo, solo les puedo decir que él es un bastardo, ha cometido muchos crímenes, chicos, en serio, estoy bajo una gran amenaza de su parte, si les digo la verdad, estaría jugando con mi propia vida— ella quería ayudar, pero no podía y la entendía bastante

—Lo siento, Dara, no quisimos intimidarte de esta forma, solo es que estamos desesperados por encontrar pruebas, el juicio será en algunos meses y temo que todo se vaya a la mierda— Dara solo asintió mientras miraba el piso

—Contraten un detective— ella susurró

—Ya lo habíamos pensado, pero queríamos hablar antes contigo— Jimin señaló 

—Realmente quería saber sobre Ji-eun— Pareciera que Dara se le había aparecido un fantasma, sus ojos se abrieron más de lo normal 

—¿Ji-eun?— susurró muy despacio

—Sí, la madre de Jungkook y ex esposa de Jin Hee— Jimin explicó

—Era la esposa de Jin Hee— confesó—, pero ella solo se la pasaba encerrada en esa mansión— susurró lo último

—¿Tienes certeza de eso, Dara?— Jimin preguntó 

—Sí, pero les repito, yo no seré de mucha ayuda— Dara sabe toda la verdad, solo se siente tan acorralada por Jin Hee que prefiere guardar silencio 

—Has sido de mucha ayuda— ella me miró con el ceño fruncido—, ¿crees que un detective privado sea la solución?— pregunté

—Sí, es la solución— algo me decía que Dara ya había contratado a alguien antes 

—Disculpa, pero ¿tú has contratado uno?— pareciera que Dara quería sacarnos a patadas de su departamento 

—Y-Yo...— Jimin la interrumpió

—No diremos nada, solo queremos saber sobre ese detective, y si ya lleva el caso, lo apoyaremos para que lo resuelva de una vez 

—Sí contraté uno hace unos meses, y está trabajando en el caso— ella asintió 

—¿Podemos hablar con él?— pregunté

—No puedes llamarlo, YoonGi, él trabaja en un prostíbulo muy alejado de aquí— mis ojos se abrieron más de lo normal, un ¿prostíbulo?

—Disculpa, pero ¿por qué él trabaja ahí?— no podía entender cómo un detective trabajaba en tal lugar 

—Prefiero que lo averigües tu mismo, solo te puedo dar la dirección, tú dile que vas de parte mía, él sabrá qué hacer— me quedé sin habla unos segundos, ella ya tenía todo planeado para aplastar de una vez a Jin Hee, era muy bueno saber que tenía una gran aliada 

—Allá iré entonces— asentí decidido 

Dara me pasó una tarjeta con la dirección de tal prostíbulo, minutos después nos despedimos de ella, le había prometido no volver a verla en su departamento, a estas alturas Jin Hee ya debe saber que ella estuvo con nosotros, y no quería correr más riesgo.

...

—Sigo sin entender— crucé mis brazos y miré hacia la ventana, con Jimin ya nos dirigíamos al estudio 

—He escuchado sobre el constante tráfico de personas, no sé si tiene algo que ver— él encogió sus hombros

—¿Tráfico de personas?, creí que eso era antiguo— susurré sorprendido

—Es antiguo, pero creo que ha vuelto o realmente nunca se ha ido— Jimin frunció el ceño

—Entonces, Jin Hee está ligado al tráfico de personas

—No lo sabes aún, YoonGi, cuando hablemos con ese detective todo quedará más claro, y sabremos en qué ayudar— Jimin

—Creo que todo esto me está dando miedo— confesé, nunca me había sentido tan culpable, nunca creí que le traería tantos problemas a tanta gente

—No debes tener miedo, ese viejo caerá tenlo por seguro— me guiñó un ojo

Por primera vez el estudio estaba desierto, solo algunos autos estacionados afuera, que de seguro eran del equipo de grabación, maquillaje y escenografía, Hoseok solo nos había citado a los dos, ya que grabaríamos el baile y quería una máxima concentración.

—Creí que nunca llegarían— Taehyung tomó mi brazo y me dirigió hasta el interior del estudio

—Eres un bruto— me quejé

—Llegan una hora tarde, ¿Dónde mierda andaban?— él frunció el ceño 

—Hey, Tae, no le dañes el brazo, lo necesito entero para el baile— Jimin se sumó a la conversación

—Bien— Taehyung rodó los ojos—, solo quiero saber dónde andaban par de tórtolos 

—Con Dara— no me servía de nada ocultarle información a Taehyung, si se enteraría igualmente 

—¿Qué hacían con Dara?— él preguntó algo atónito 

—Hablar sobre Jin Hee, pero no logramos averiguar nada— Jimin respondió

—Oh, es lamentable— Taehyung mordió su labio nervioso 

—Sí, pero no te preocupes, buscaremos otra solución— le guiñé un ojo y me dirigí hasta vestuario 

Hoseok me saludó de lejos ya que estaba muy concentrado en la escenografía, es bueno que deje de pensar por algunos momentos en la demanda.

—¿Dónde está Jimin?— Sooyoung frunció el ceño cuando entré

—Hola, Sooyoung, sí, estoy bien, muchas gracias— dije irónico

—Sí, lo siento, hola, Yoonie, pensé que Jimin vendría contigo, tengo que maquillarlos a los dos, ya que Seohyun se ha enfermado y no podrá venir— Seohyun era la maquilladora de Jimin

—Creo que lo has llamado con la mente— dije al ver entrar a Jimin al camarín 

Nuestra vestimenta solo consistió en unos short's color celeste, Hoseok había cambiado las mayas por estos y para ser sincero, se me hacían más cómodos.

—¿Estás nervioso?— Jimin susurró aún detrás del set, solo faltaban unos minutos para salir 

—Algo— estaba nervioso, bastante nervioso, hace mucho tiempo que no bailo con alguien más

—¿Recuerdas lo que dice el libreto?

"Los dos están sentados de espalda en el suelo, Evans es el que toma la iniciativa y se gira quedando frente a Dave, toma sus manos y lo levanta suavemente, sin soltar sus manos las lleva hasta sus hombros, permanecen ahí hasta que Evans, toma la cintura de Dave y lo levanta lento y delicadamente, mientras Dave encoge una de sus piernas, cuando así un pequeño salto"

—Sí, lo recuerdo, aunque debemos agregar algunas cosas— solo habíamos ensayado una vez esta escena, la verdad saldría todo improvisado 

—Me gusta improvisar— fue como si hubiera leído mi mente 

—En eso estaba pensando— reí 

—¡Jimin, YoonGi, al set!— Hoseok avisó por el megáfono 

—Bien, entonces, suerte— susurré

—Suerte— él sonrió y entrelazó muy fuerte su mano con la mía 

...

Nos sentamos los dos de espalda, MY HEART WILL GO ON comenzó a sonar segundos después.

"Cada noche, en mis sueños, Te veo, te siento"

Jimin se giró aún sin pararse hasta quedar al frente de mí

"Así es como sé que sigues encendido"

Tomó lentamente mis manos y nos levantamos del piso 

"Más allá de la distancia y los espacios que hay entre nosotros"

Llevó mis manos hasta sus hombros, para luego tomar mi cintura y comenzar a elevarme lento y delicadamente 

"Has venido a mostrar que sigues encendido"

Doble una de mis piernas, creando un pequeño saltito, mientras Jimin me devolvía otra vez al piso, estábamos creando un Adagio, en el Ballet son movimientos lentos que se hacen con o sin acompañante. 

"Cerca, lejos, donde quiera que estés, creo que el corazón sigue latiendo"

Los movimientos cada vez se hacían más cercanos, Hoseok había especificado roces, nunca había bailando de esta manera y menos con un hombre, giros y perfectas posturas alcanzadas gracias a la ayuda de Jimin pudieron ser logradas en ese instante.

"Una vez más abres la puerta, y estás aquí, en mi corazón, y mi corazón seguirá adelante"

La canción comenzaba a avanzar cada vez más y con Jimin ya estábamos llegando al Allégro, creo que es una de las partes más bonitas y entretenidas, donde podemos hacer movimientos brillantes y energéticos como el Grand Jeté, un salto magnífico

"El amor puede acariciarnos una vez, y durar una vida entera, y nunca irse hasta morirnos"

Ya estábamos terminando con nuestro baile, finalmente Jimin retomó con nuestra postura del principio, pero esta vez cuando me bajaba, sus labios se encontraron con los míos 

"Amor era cuando te amé, un momento real al que me aferro, en mi vida, siempre existiremos"

Y así es como damos por terminado nuestro baile.

El timbre comenzó a sonar, Jimin se separó lentamente de mí y me abrazó muy fuerte

—Siempre has sido el mejor— susurró en mi oído y por una extraña razón un escalofrió recorrió mi cuerpo.

—Gracias— aún sin entender, él se separó de mí unos centímetros de mí

Taehyung y Hoseok nos felicitaron segundos después, no tuvimos oportunidad de hablar con ellos, ya que debían dar algunas entrevistas. Aunque Hoseok me dijo que debía ir a ver mi departamento, cosa que a Jimin no le gustó mucho.

—¿Por qué no te gusta la idea de que tenga un departamento?— reí, estaba siendo tan infantil 

—Porque debes vivir conmigo, solo eso— encogió sus hombros

—También debo tener mi espacio, e iré de todas formas a verlo— él negó con una sonrisa 

—Ahora, ¿adónde quieres ir? 

—Quiero ir con ese detective— él me miró levantando una ceja y yo le guiñe un ojo