—Hueles a vampiro...

Hoseok cambió su expresión totalmente, abrió los ojos, atónito y abrió un poco la boca alejándose de Taehyung.

Hyunjin miro a Hoseok de una manera que decía  "Explícate", o un "¿Qué tienes para decir?".

—Hyunjin, no le hagas caso. Seguro le falla el olfato...—balbuceó algo torpe. Hwang no le creyó, él conoce perfectamente los dones de su amigo, era imposible que me equivoque.

—¿Por qué hueles así? —preguntó Kim, mientras se acercaba a él.

Él se alejó de más, yéndose en dirección a las habitaciones. Dejando perplejos y confundidos a los dos chicos restantes en el pasillo. Entonces, apareció Seungmin, preguntándoles por qué estaban de esa manera, a lo que los dos chicos le explicaron lo ocurrido... Obteniendo una cara larga y angustiada, con un brillo de sorpresa en sus ojos.

Era obvio para Taehyung y Hyunjin que algo ocultaban, pero no sabían que tan malo seria para tales reacciones.

—No pregunten nada más —pidió, evitando las miradas de los recién llegados, les dio la espalda y comenzó a andar—. Mañana se les aclarará todo en el cuartel —ambos se miraron con las cejas alzadas. ¿Qué está pasando? Se preguntaban intrigados.

Seungmin los guio a sus habitaciones. La de Tae quedaba enfrente de la de su amigo y al lado del de Hoseok.

Taehyung entro a ella y se acostó en su cama. Pensando en lo sucedido. Cuando un aroma lo desconcentró.

El aroma a vampiro.

Mucho más firme e intenso que el que llevaba Hoseok, y lo sentía provenir de su propio balcón, así que se levantó con sigilo y asomó su cabeza por la puerta de este, quedando en blanco por lo que vio.

«¿¡Hoseok besándose con una vampira!?»

Kim prefería mil veces no haberse asomado para ver a Hoseok besándose con en enemigo. Su estómago se revolvió con violencia. Repugnancia, eso era lo que sentía.

¿Por qué se estaba besando con un vampiro? Él era mucho mejor a sus ojos.

Jung mantenía a la chica entre sus brazos, apretándola a su vez contra la baranda del balcón, ella lo abrazaba a él del cuello, estaban tan juntos que su estómago se revolvió más. Celos.

«Yo debería ser quien recibiera sus besos»

Sintió el odio recorrer en su cuerpo. Quería de hechizar a esa sanguijuela con el conjuro más cruel que conociera.

Sin embargo, lo que más le dolía era el hecho de que notaba que él parecía disfrutar el beso, su cercanía con la chica, lo notaba.

Pena, dolor y aversión era todo lo que sentía en su interior. No entendía como el hechicero más perfecto que alguna vez amo —y seguía amando—, lo haya olvidado tan fácilmente. Y, para colmo, con una vampira.

Los amantes rompieron el beso, pero se mantuvieron juntos, hablando en susurros, antes de alejarse completamente y que la chica se fuera. Hoseok se quedó mirando la dirección por donde había desaparecido su novia.

Taehyung, sin pensarlo dos veces, salió a su balcón y se acercó a la baranda, mirándolo fijamente. En sus ojos se leía a decepción.

—¿Qué haces ahí? —exclamó irritado Hoseok cuando giró su rostro y se encontró con esa mirada del contrario, lo había sorprendido.

—¿¡Una vampira!? —clamó con disgusto—. ¡De todos los seres que podrías haberte enamorado! ¿¡y eliges vampiros!? —bramó—. No logró entender, no puedo creer que hayas hecho eso, no entiendo... —se detuvo para carraspear, pues su voz se había quebrado.

—Tae-

—¡No! —interrumpió—. No quiero que me mientas como siempre. Prefiero esperar a ver que dice Moonbyul cuando se entere de esto.

Se alejó de la baranda, no soportaba más estar junto a él. Se encaminó a su cuarto, con la idea de salir y avisarle a Moon de la situación. Sin embargo, no lo logró, quedo petrificado. Hoseok lo había hechizado.

—¿Qué mierda haces? —estaba forcejeando, intentando moverse por mínimo que fuera. Queriendo liberarse del hechizo.

Escuchó un golpe seco a sus espaldas y en un pestañeó Hoseok lo enfrentaba con su ceño fruncido y un rubor misterio. Y, en vez de tener miedo o desconfianza por lo que podría este hacerle, solo pudo admirar el rostro agraciado de su ex.

«Es tan precioso»

Sus miradas se conectaron y Taehyung solo pudo perderse en ellos pensando en todo lo que había pasado, en todo lo que había sentido.

«¿Por qué? ¿Por qué después de años, de tantos noviazgos y de tantas cosas que han pasado en este tiempo alejados, yo me sigo perdiendo en sus ojos tal y como cuando éramos niños?»

—Impidiendo que arruines todo —fue su respuesta tan fue su patética que aun paralizado y encantando, soltó una risa burlona.

—¿Arruinar qué?, ¿tu romance?, ¿tu plan para acabar con la escuela? —Hoseok levantó una ceja como diciendo con su expresión "¿eres estúpido?". Entonces Kim entendió que ninguna de sus suposiciones eran acertadas. Volvió a fijar su atención en el anillo que lleva, ese anillo que lo tenía tan desconcertado—. ¿Te casarás con ella? —preguntó con un hilo de voz. Queriendo saber, pero a la vez no.

«¿Y si quizás su padre lo había hecho? Al fin y al cabo, él es mitad vampiro»

Hoseok abrió mucho los ojos, antes de comenzar a reír a carcajadas, y de una manera muy ruidosa. Colocó sus manos sobre su barriga, como si lo agarrase para evitar el dolor de reír tan fuerte.

Eso lo hizo bajar la guardia, de a poco su hechizo se fue desvaneciendo y Taehyung se pudo soltar, lanzándose contra el risueño, apresándolo contra una pared.

—¡Que chiste más bueno! —murmuró de manera entrecortada por las risas.

Sin poder evitarlo, Taehyung se quedó admirando sus fuertes carcajadas, sonriendo con él. Bajo la vista a sus labios y tuvo una ganas torrenciales de saborearlos.

—¡Hoseok, ya! —gritó, pero él seguía muerto de risa—. Para de reírte.

Al verse ignorado, no encontró otra solución que...

Así es. Callarlo con su boca. Con un beso. Sabía que tenía más opciones.

Pero ver de cerca su boca sonriente, luciendo como un corazón. Solo juntó sus labios, logrando por fin que la risa muriera.

Lo tenía loco... Completamente loco, de esa manera lo tenía Hoseok. Loco.

«Por Dios. No puede ser más sensual, tierno y atractivo, pero a la vez estaba diferente»

Ya no era ese buen niño dulce y alegre veinticuatro/siete. Ahora era un hechicero rebelde con carácter y temperamento de vampiro. Pero en sus ojos podía ver un vislumbro de esa dulzura y pureza que recordaba.

Y sus labios. Sus labios tenían el mismo sabor, y hasta mejor.

Envidia, envidia le tenía Taehyung a esa vampira que le podía besar como quisiera y cuando quisiera.

Quería ser él quien lo besara, quería ser él a quien Hoseok amara. Pero las cosas no son tan fáciles. Y él lo sabía, el tiempo no volverá y eso es lo que más le dolía, que nada volverá ser como antes, nada.

- ˏˋ 🖤 ˎˊ-

no ps, mucho por hoy, xd

no tarde nada vl

nos leemos luego~

graciascia por leer~

~OurTheStars~