Chaeyoung conocía perfectamente las consecuencias que conllevaba su plan, pues, a este punto no le sorprendería si MinHo se cansara de su juego.

En verdad quería volver a acostarse con él, sin embargo, se planteó que, si se hacía un poco la difícil, su crush lograse entender el propósito de sus rechazos. Por alguna razón, anhelaba que MinHo se enamore de ella.

Suspiró cuando lo vió coqueteando con Tzuyu, ella paseaba sus manos por el pecho de Lee. Parecía querer quitarle la camisa ahí mismo y MinHo, bueno, no movía un dedo para impedirlo. Cerró un poco fuerte la puerta de su casillero, generando que algunos allí le vieran asustados. Sonríe al ver que, su crush y esa porrista también captaron tal accionar.

Dándose la vuelta, se va molesta hacía el salón de artes, pues, era casi hora de su clase de plástica.

—No entiendo porqué te empeñas en seguirle el juego—habló Tzuyu—. Sólo te está engatusando para humillarte, tú no mereces eso, MinHo.

—Créeme cariño, yo no saldré humillado si intenta tal cosa.—sonrió besando sus labios.

Era tan descarado, no le importaba lastimar a quién se ligara, él no es de esos idiotas que andan rogando por una oportunidad.

Se despidió de ella y fue también a la clase de plástica.

Antes de ingresar, verificó que nadie estuviese cerca. Cuando ingresó, sonríe ladino viendo a Chaeyoung observar por la ventana. Para suerte suya, no había nadie dentro.

Caminando a ella, rodeó su cintura, tomandola desprevenida al girarla sobre sí para robarle un beso. Chaeyoung le siguió con el mismo ritmo, ambos se encerraron en su propia burbuja de deseo. Sabían que no era el momento de ir más allá, sólo abstuvieron a besarse y tocarse. MinHo en esos instantes, sentía un enorme deseo de quitarle la ropa y follarla pero conocía el límite impuesto entre ellos.

No iba a negarlo, estaba harto de la situación.

—¿Por qué carajos no quieres sobrepasar los extremos, ah?.—preguntó separándose de Chaeyoung.

—¿Por qué carajos quieres sobrepasar los extremos, eh?—refutó ella, igual o peor de molesta—. ¿Es qué acaso no te importa otra cosa que tener sexo?.

—Soy adicto al sexo, Chaeyoung. No un maldito romántico.—respondió fatídico.

—¿Nunca te sentiste atraído hacía alguien de otra forma que no sea sexual?.

MinHo suspiró, era evidente que no iban a llegar a ningún lado con esto.

—No, tampoco me interesa sentirlo—contesta—. Me parece ridículo.

—¿Enamorarse es ridículo para tí?—de pronto su corazón pareció romperse en unos cuántos pedazos—. Increíble, en verdad no sé porqué saqué ese tema primeramente si no estuviera tan enamorada de t-...—calló de inmediato, quiso morderse la lengua al haberle confesado literalmente que se muere por él.

—Ahora entiendo la razón del porqué no querías follar—dijo—. Te gusto, estás enamorada de mí—agregó—. También puedo deducir lo que intentabas hacer...—murmura.

Chaeyoung traga en seco, no tenía justificación para ello.

—¿De verdad pensaste por un momento que yo me fijaria en tí de esa manera?.—habló irónico.

Estaba siendo cruel, sin embargo, debía dejarle en claro su posición.

—Por un momento, sí, lo creí...

—Lamento decepcionarte, no soy de esos. No me gustas, Chaeyoung. Dudo que algún día vayas a gustarme.

Son entendió, a pesar de estar derramando lágrimas en ese instante. No podía cambiar a alguien como Lee MinHo.

—Bien, como ya dejamos las cosas en claro, creo que hasta aquí llega esto que tuvimos—mencionó limpiandose sus ojos—. Ya no vuelvas a buscarme ni a hablarme, sigue con tu vida de follador inalcanzable...—sollozó.

Sin más, tomó su bolso y se marchó. Desaparecía por un buen tiempo, no deseaba ser el hazmerreír de todo el instituto al ver a Tzuyu sonreír ampliamente una vez salió de ese salón.

Nunca debió enamorarse tan profundamente de un idiota como Lee MinHo.

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Tres meses exactos pasaron desde que, Chaeyoung no regresó a pisar aquel establecimiento.

MinHo no se sentía a gusto con nada, todo le irritaba y no había vuelto a acostarse con nadie. Por más que quisiera, dejaba a sus ligues sin llegar a segunda fase.

Chan y Felix notaban el mal humor de su mejor amigo, el rechazo hacía algunos alimentos y antojos desconocidos que le causaban aún más incertidumbre.

Ahora mismo, MinHo almorzaba pizza con kimchi y unas naranjas cortadas, bebía una malteada de chocolate y de postre comía helado de piña, ron y menta.

—¿No crees que eso te hará doler el estómago después?—pregunta Felix—. Hyung, esas mezclas de comida no se las daría ni a mi peor enemigo.—vociferó sorprendido.

—Es delicioso si lo pruebas, mira, prueba.—le extendió una cucharada de helado, el menor hizo una mueca de asco por los aromas que esta desprendía.

—Si no supiera que los hombres no quedan embarazados, diría que MinHo si parece uno.—menciona Chan en modo de broma.

Lee miró a su hyung con el ceño fruncido, aún así, no dejó de comer y beber dichos alimentos. Eran una exquisitez a su parecer.

En ello, MinJeong llegó con unas bolsas en mano. MinHo detectó el aroma a chocolate en una de estas.

—¿Traes dulces ahí?.

Kim asintió, mostrando algunas cajas de bombones para compartir con su novio y cinco barras de chocolate blanco.

—¿Quieres uno, oppa?.

El azabache afirma elevando su mano, Felix iba a regañarlo pero MinJeong le cedió el dulce.

—Es raro, antes no comía esto.—susurró hacía ambos australianos.

—Lo sé, amor. Yo también quiero entender el porqué sus gustos cambiaron tan repentinamente.—dijo Lix, sentandola en sus piernas.

Chan por su parte, veía pensante las posibilidades de una sola cosa que no dejaba de hacerle ruido. Salió de ellos, apenas visualizó a su hermosa novia aproximarse.

—¿Sigue tragando cómo si se acabara el mundo?.—cuestionó bromista, saludando a todos.

MinHo ignoró aquello, sólo se dedicó a seguir en lo suyo.

—Sí, y acaba de pedirle dulces a MinJeong.—alude Bang.

—Esto si es sorprendente.—espeta Mina, el resto estuvo de acuerdo.

Nuevamente esa posiblidad invadió la mente de Bang Chan.

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Chaeyoung aguardaba su cita con el obstetra, siendo acompañada de DaHyun.

—Hoy sabremos si es niña o niño.—menciona la mayor de ambas.

—Estoy nerviosa, unnie—murmura tocando su vientre levemente abultado—. Sea cuál sea el resultado, estará bien...—sonríe.

Hace dos meses había descubierto de su embarazo, pues, le pareció extraño no sentir ningún síntoma respecto a ello. Sino hubiese sido porque justo le tocaba su chequeo médico mensual, ni enterada hubiera estado.

—¿Y algún día de estos, piensas decirle?.

Chaeyoung soltó un leve bufido, no estaba segura aún, con lo último que MinHo le dijo, era seguro que la rechazaría y se negaría a aceptarlo.

—No sé, él me dejó muy en claro todo—dice al recordar sus hirientes y sinceras palabras—. Aunque...

—Lo sé, Chae. Sigues enamorada de MinHo—completó DaHyun—. Como sea, tarde o temprano él deberá saberlo. Después de todo, es el padre de tu bebé.

—Sí, tampoco quería que ocurriera esto siendo tan jóvenes y sin ninguna experiencia, no fue mi intención quedarme embarazada de la nada. Simplemente olvidé tomarme la pastilla del día siguiente, tuve oportunidad de abortarlo pero no adquirí el valor suficiente para hacerlo—solloza—. ¿Y sabes algo, unnie? Cuidaré a mi bebé, independientemente de su género, será mi más preciada prioridad.

DaHyun sabía eso, ella ayudaría en lo que pudiera a su mejor amiga.

—¿Tus padres están enterados?.

—No lo tomaron bien, se decepcionaron cuando les dije. En otras palabras, me dejaron a mi suerte.—masculló mirando el techo de aquel pasillo.

Ninguna volvió a tocar el tema, pasado unos minutos, el nombre de Chaeyoung fue llamado.

Ambas pasaron, saludaron al doctor Byun y la menor procedió a recostarse sobre la camilla.

—¿Lista para saber el sexo del bebé?.—preguntó BaekHyun.

—Estoy nerviosa pero sí.—sonrió Chaeyoung.

—Muy bien, aquí vamos.—expresó al colocarle el frío y pegajoso gel sobre su vientre.

Te amaré sin importar qué, frijolito.

¿Inesperado? Sí, jaja. Pero es necesario para el desarrollo de los personajes, jsjs<3

Espero les guste mucho el capítulo.<3