Kana había terminado de hacer la cena, estaba sirviendo los platos en la mesa del comedor pero no podía evitar sentirse preocupada por que su pareja, Aqua Hoshino, no estaba presente.

─── ¿Por qué tardará tanto?... ─── Se preguntó así misma para luego soltar un largo suspiro, tal vez y solo tenía trabajo.

De repente, se escucharon los toquidos en la puerta, cuando la pelirroja fue a atender vio a su pareja muy cansado y con algunas heridas que le abrían dejado marcas en su rostro además de sangre en su ropa.

─── ¡AQUA POR DIOS! ¿¡QUE TE PASO!? ─── La de cabellos de fuego rápidamente guio al rubio a su asiento en la mesa del comedor. ─── Enserio ¿que rayos te paso?

El de ojos azules no hablo, solo desvío la mirada. No parecía tener muchas ganas de hablar, pero si de comer ya que vio su plato de comida en la mesa.

─── Te dejare comer si... Me cuentas que pasó ¿Vale? ─── La expresión de la dama se suaviza levemente, era evidente su conversación.