4-7 años

Si bien los reyes no estaban teniendo el éxito que esperaban porque Hyunjin seguía pasando tiempo con su hermano sabían que Hyunjin ya no era el mismo, porque su comportamiento era diferente. Era mas protector con Félix (por naturaleza) el ya presentaba señales de ser alfa, tenía mucha fuerza y su altura, su aroma a tierra húmeda y pino confirmaba que en un futuro sería un alfa muy fuerte. Mientras que Félix era muy pequeño, delgado, tenia mas pequitas y su cabello era delgado y sedoso. Tenia un aroma a vainilla y fresa el sería omega todos estaban convencidos de ello.

La reina no le molestaba la idea, pero ahora eso era una molestia para ellos. Cuando ambos tuvieran su primer celo no habría nada que hacer, Félix seria marcado por Hyunjin y nadie podría hacer nada. Faltaban aun cinco años para que Hyunjin se presentara como alfa y para entonces ya tenia que haberlos separado.

Y ya había una candidata para ser la esposa de Hyunjin, una princesa de un reino vecino: Lee Chaewon, tenia la misma edad de Hyunjin y bueno era una buena candidata para el futuro rey. Y tenían planeado que la marcara el mismo día de la ceremonia, para romper de una vez por todas el lazo de Hyunjin con Félix

Ellos querían repetir su misma historia con Hyunjin.

—¿Félix?— El rey entró a la habitación del menor pero no lo vio por ningún lado, su cuarto estaba en completa obscuridad solo la luz de la luz se colaba por el balcón y el reflejo daba a la cama del menor.

Al menos no se molesto en buscarlo.

Era luna llena, y el cielo estaba despejado. El rey fruncio el ceño y gruño mientras salia de la habitación.

Félix solía salir durante el día y regresaba ya muy entrada la noche, Hyunjin iba con él para poder pasar tiempo juntos, ya que sus clases para ser rey no era nada fácil. Pero aun así platicaba con su hermano y dibujaban cosas en los troncos de los árboles con su preciada daga, porque era un regalo de su padre.

—Mira... una estrella fogas— señaló el menor, —pide un deseo, jinnie— dijo mientras cerraba los ojos y cruzaba sus dedos.

Hyunjin lo miro con diversión, la imagen de Félix familia ente a el era muy tierna.

—¿Que pediste?— Hyunjin aventó una piedra al mar mientras esperaba la respuesta de su hermano. Félix hizo un puchero y negó con la cabeza. —dime, anda Lix—

El menor puso los ojos en blanco pero asintió, el no sabia como negarse a algo que le pidiera su hermano.

—-que algún día encontremos la felicidad — sonrió con ternura —lejos de aquí...—

—Bien...— sonríe y le desordenó el cabello —-vamonos, es tarde—

Como todo lo lindo no puede durar para siempre, cuando regresaran al castillo la realidad los golpearía, Félix volvería a ser el cero a la izquierda, y Hyunjin en centro de atención. El avces pensaba que había hecho algo que hizo enfadar a sus padres pero no sabia que. Odiaba eso, que sus padres ignoraran su  presencia y solo se concentraran en Hyunjin, pero el no podía hacer nada. Tal vez en un futuro no muy lejano podría huir, con Hyunjin o sólo pero lejos de todo y todos. Donde ambos pudieran verse y pasar tiempo juntos sin impedimentos.

Solo era que Hyunjin quisiera irse con el. Cierto el no había pensado en eso, probablemente el no quiera irse con el. Una sensación de vacío se instalo en su pecho de solo pensarlo no le gusto.

—¿Porque lloras?— Pregunto Hyunjin mientras le limpiaba las lágrimas que se deslizaban por sus mejillas con sus pulgares, con mucho cuidado. —¿Te duele algo?—

El menor negó con la cabeza y lo abrazo, necesitaba que las cosas volvieran hacer como eran antes. Que sus padres lo abrazaran, le contaran historias, sentía un vacío en el pecho era como si le hubieran quitando algo: Hyunjin.

—Hyunjin...—- sollozo —-¿me quieres?—

Sus ojos brillaron, de solo mirarlo.

—No..— el menor volvió a sollozar —te amo... porque eres mi único hermano, y por que eres muy especial para mi-—

Dejó un húmedo beso en su frente antes de volver abrazarlo. Pero Félix sabia que algo malo iba a pasar algo, su pecho se hundía pensando en eso porque no era nada bueno.

Se sentía amado por Hyunjin, eso era  suficiente para el.