Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

ׂׂૢ༘ ⊘⊘2



════════════════. ❁~✩ .═


Capítulo 2

૪'ރ፧  ¿En qué me he metido?








POV. Shouko Tendo

La habitación se quedó en completo silencio, nadie comentaba ni una sola palabra, ni siquiera mi tío o el señor Saotome. Este periodo de mutismo no duró mucho, pero para mi fue lo suficientemente largo para que adentro de mi mente pudiera iniciarse un caos.

Estoy segura que, si hubiera unas mini Shouko dentro de mi cabeza como muestran en los animes, lo más probable es que estarían en pánico destruyendo o incendiando el lugar por la tontería que acababa de hacer, porque si, eso fue lo que hice...

Una gran tonteria.

Solamente quiero gritar, probablemente golpear algo y refugiarme en la seguridad de mi habitación, lo cual podría considerarse patético, porque no hace más de unos segundos me dije a mi misma de no arrepentirme y ahora estoy haciendo justo lo contrario.

¿A dónde fue la gran seguridad que tenía hace un momento? Porque la necesito urgente de regreso.

Ya me arrepentí de haber hablado, esta era una situación en la que tenía que ser egoísta y haberme quedado callada siendo ajena a todo esto, al final de cuentas nadie me habría dicho nada.

Pero bueno, lo hecho esta hecho.

Ahora solo me queda mantenerme lo más calmada posible ya que aún tengo que mantener mi dignidad, no sé si lo estaba mostrando, pero una parte de mí quería creer que lo estaba haciendo muy bien.

Akane que fue la primera en reaccionar de todos los presentes, se acercó a mí dejando atrás su ira, siendo cambiada por una gran preocupación. Con una extraña delicadeza viniendo de su parte, tomo mis hombros con intenciones de que la mirara. Respire profundamente tratando de tranquilizarme antes de cruzar mis ojos con los de ella, tratando de mostrar seguridad ante todo.

"Los ojos son el reflejo del alma", un dicho que yo considero cierto al igual que Akane y ambas somos muy conscientes de que a veces lo que no puedo expresar en palabras, acciones o emociones, mis ojos son lo que siempre me delatan ante las personas que mejor me conocen, siendo mi prima menor una de ellas.

—Shouko, no tienes que hacer esto. No puedo permitir que te cases con él y pases el resto de tu vida siendo infeliz con ese fenómeno.

Al haber dicho esas palabras, pude notar que Ranma volvió a molestarse, pero por suerte decidió mantenerse callado y no incluirse en la conversación, algo que en mi mente estaba agradecida.

—Calma Akane —tomé sus manos suavemente y les di una ligera caricia—, no seas tan grosera con él, recuerda que es nuestro invitado.

—El no merece ningún tipo de respeto de mi parte—un puchero apareció en su rostro, algo que me hizo reír levemente.

De fondo podían escucharse los murmullos que eran poco entendibles de la conversación que tenían mi tío con el señor Saotome, la cual no duro demasiado antes de que mi pariente se dirigiera a mí.

—Si estas segura de querer comprometerte, Genma y yo estamos de acuerdo con esta decisión —asintió el señor Saotome apoyando sus palabras.

—Es una hermosa chica, hijo —habló esta vez el de lentes de una forma muy animada, cosa que irritó más a su hijo—. Eres muy afortunado.

—Por supuesto que es hermosa, viene de familia —comentó mi tío antes de que ambos adultos empezaran a reír.

Sinceramente no creía que este fuera un momento adecuado para reír, pero tal parece que ambos no eran consientes del denso ambiente que nos rodeaba o al menos a nosotros los jóvenes. Opté por quedarme en silencio observando el intercambio que tenían, como el resto.

—Pueden hacer lo que quieran, pero yo me voy. ¡Adiós! —habló Ranma dándose la vuelta y caminando directo a la salida con una gran determinación.

'Si, mejor vete', pensé para mis adentros.

Una parte de mi se alegró al ver que nadie intervenía, pero dicha felicidad no duró demasiado cuando el padre del chico se puso frente a él, en un intento de impedir que diera un paso más.

—¿A dónde vas, muchacho? —preguntó con una voz que trataba de ser imponente, pero la actual pelirroja ni siquiera se inmutó ante la acción de su padre.

—De vuelta a China. Para encontrar una forma de deshacerme de esta maldición, ahora no es tiempo para "prometidas".

Hábilmente esquivó al mayor y siguió caminando, pero de repente detuvo sus pasos para mirar a Akane que aún se encontraba a mi lado.

—Por cierto, tú también le echaste una buena mirada a mi cuerpo —ante sus palabras, de reojo vi a mi prima, notando el sonrojo de vergüenza e ira en sus mejillas que llegó a extenderse hasta sus orejas—. Además, no es la gran cosa para mi ver a una mujer desnuda, quiero decir me he visto muchas veces.

'¿Enserio? Eso dices ahora, pero bien que te avergonzaste al verme en el baño'.

Para suerte de Ranma, preferí no mencionar lo que me ocurrió antes, porque estoy segura que Akane lo mataría sin ninguna piedad si es que se llega a enterar.

Para cuando me di cuenta, la pelirroja extendió parte de su camisa con intenciones de mostrar su pecho dando un mayor énfasis a sus palabras.

—Y estoy mejor formada para rematar —dicho eso, comenzó a reírse despreocupadamente sin ser consciente de que sus palabras hicieron volver a encender una llama de ira en Akane—. Además, no entiendo porque te haces la muy ofendida, si tu prima...

'Espera, al diablo con la amabilidad ¡¿qué pensaba decir sobre mi este cretino?!'

Podía imaginar qué tipo de comentario soltaría, pero no estaba dispuesta a corroborarlo. Antes de que pudiera intervenir (talvez ocupando la fuerza como método), el que es originalmente un chico, ni siquiera pudo terminar la frase porque mi adorada, tierna y delicada prima lo aplastó con la mesa sin ningún tipo de contemplación.

Justo como si fuera una cucaracha.

Gracias a esto, hizo que a su paso las tazas que había en la mesa cayeran al piso y terminaran ensuciando el tatami con el té. Después de eso, la de pelo azabache salió de la sala sin decir una palabra.

—Que desastre —dije para mí misma.

No me molestaré con Akane por tratar así a un invitado, incluso me alegro mucho que lo hiciera porque si ella no lo golpeaba yo lo haría, porque ciertamente Ranma se lo merecía y hasta pienso que otro golpe no hubiera estado nada mal. Era una lástima que hubiera quedado inconsciente tan rápido.

'Patético, y así espera mi tío que administre el dojo con él.'

Hay que admitir que las palabras del pelinegro eran totalmente innecesarias y ya no tenía motivos para que siguiera discutiendo con Akane. También hay que contar que ya estaba empezando a hablar de mí y para ser sincera, no me importaba si lo que quería decir era algo bueno o malo, no quería que lo hiciera.

Al notar que mi tío y Kasumi estaban recogiendo la vajilla que estaba dispersa en el suelo, me uní a ellos para ayudarlos a limpiar el desorden y en acomodar la mesa nuevamente en su lugar. Mientras tanto, el señor Saotome trataba de despertar a su hijo que aún se mantenía inconsciente, pero sin importar lo que hiciera, su hijo no reaccionaba.

¿Sería muy cruel de mi parte desear que se quedé así para siempre? Porque prefiero verlo así como esta y evitarme más problemas.

—Lo mejor será llevarlo a la habitación y esperar a que despierte por su cuenta —le comentó mi tío con preocupación a su amigo.

'¿Qué? ¿Habitación? No me digan que van a pasar la noche aquí'.

—Tienes razón—respondió el de lentes antes de cargar el cuerpo con poco cuidado sobre su hombro y se lo llevó, a donde se encontraba la habitación en la que comúnmente se hospedaban los invitados.

—¿Van a dormir aquí? —pregunté por inercia a nadie en particular, pero quien me respondió con una afirmación fue mi tío.

—Si, además de que ellos vivirán aquí, Saotome y yo pensamos que sería buena idea, para que así Ranma pueda aprender sobre la administración del dojo —su respuesta no me alegró en absoluto.

Normalmente no tendría problema en compartir el mismo techo con gente que recién conozco, me considero una persona algo paciente y ante cualquier situación puedo defenderme, pero ahora no puedo quejarme cuando yo también estoy viviendo en una casa que no me pertenece gracias a la amabilidad de mi tío.

Después de todo esta era su casa y él podía invitar a quien quisiera, pero en un rato, los Saotome han demostrado que prácticamente son unas personas problemáticas. Un padre despreocupado y un hijo grosero no es precisamente la mejor combinación, además de que sus discusiones tienden a terminar en combates.

Ahora que lo pienso fue una suerte de que no hayan roto nada a su paso por el momento pero, ¿Cuánto tiempo tardaran en empezar a hacerlo?

Estoy segura que mi tío no a pensado en nada de eso y estoy todavía más segura de que ignorara mis palabras si le llegara a comentar lo que pienso. Lo mejor será que sea consiente por su propia cuenta. 

Solo espero que no se de cuenta ya demasiado tarde.

Por más que me hubiese gustado que el par se fuera a primera hora de la mañana, parece que ahora solo me queda resignarme y esperar a que mi tío ponga unos cuantos límites para que ese par al menos no terminen destruyendo la casa.

—Deberías de considerar esta una buena oportunidad, Shouko —volvió hablar el mayor mientras tomaba de forma pacífica su té—, así ambos pueden conocerse mejor antes de la boda.

Me atragante con mi propia saliva al escuchar esa palabra. Es decir que, ¿vamos a casarnos pronto?

—Tío, ¿no crees que somos muy jóvenes para eso? Solo tenemos dieciséis.

—No te preocupes Shouko, esperaremos a que tengan dieciocho para llevar a cabo la ceremonia.

De acuerdo, dos años.

En dos años pueden pasar varias cosas y talvez, en ese tiempo, mi tío pueda reaccionar a esta idea tonta y decida cancelar el matrimonio.

En dado caso que no se pueda, trataré de retrasarlo lo más posible, a los dieciocho estaré entrando a la universidad y ya tengo pensado en irme a la universidad de Kyoto, podría usar como escusa mis estudios para posponer el matrimonio. Y aunque no estoy muy interesada, también podría hacer una maestría y en dado caso un doctorado.

Talvez mínimo once años sean suficientes para que mi tío recapacite, ¿verdad?

Y de no ser así simplemente lo cancelo y me desaparezco, con suerte mis primas ya estarán casadas y formando su propia familia, así ellas no se verán obligadas a comprometerse con Ranma.

O talvez una opción más rápida seria deshacerme de los Saotomes, al menos del menor, haciéndolo parecer como que escapo.

No suena tan mala la idea una vez que lo piensas más detalladamente, ademas de que la desaparición de Ranma no seria algo raro ya que al parecer él tiene motivos para regresar a China.

Mientras estaba perdida en mis pensamientos, no fui consciente de la cercanía de mi tío y fue hasta que tomo mis manos que noté que estaba frente a mí, me sentí incomoda al ver la gran cantidad de lágrimas que escurrían por sus ojos.

—Shouko, no tienes idea de lo feliz que me has hecho —de repente me envolvió entre sus brazos dándome un fuerte pero cariñoso abrazo—. Ahora me siento tranquilo al saber que el dojo se quedará en buenas manos.

'De acuerdo estoy empezando a sentirme un culpable, descartemos los planes por ahora.'

Después de corresponder al abrazo de mi tío me separe con una sonrisa en mi rostro para reconfortarlo, normalmente a las situaciones que se me presentan las enfrentó con la cabeza en alto, pero en este momento prefiero la retirada.

Excusándome para poder "cuidar de Ranma" (no se me ocurrió algo mejor), me levanté del suelo y literal hui para ir a esconderme en la cocina, pero antes de irme, las palabras que dijo me dieron un escalofrió que recorrió toda mi espina dorsal.

—Me alegro que estés preocupándote por tu prometido.

'Mi prometido', por solo escuchar eso me da dolor de cabeza.

En la mañana cuando me desperté, no esperaba que para antes del final del día tendría un prometido, para empezar ni siquiera esperaba tener un novio en los próximos meses...o años.

Vaya ironía de la vida.

Al entrar a la cocina, solo se encontraba Kasumi que estaba sacando unos productos de limpieza que guarda en un mueble, fue inevitable acércame a ella y la tome por sorpresa cuando la rodeé en un abrazo, ocultando mi rostro en su hombro. Dejando a un lado las cosas que llevaba en sus manos, me abrazó con su característico cuidado.

—No esperaba que aceptaras el compromiso, Shouko —inició la conversación la castaña—. Lamento no haberlo hecho yo, pero realmente no me gustaba la idea de casarme con alguien menor que yo.

—No exageres Kasumi, solo se llevan por tres años.

Me daba gracia que hablara como si ella fuera una anciana, pero no puedo culparla por ello. Puede que por el estilo de vida que lleva o mejor dicho por el rol que decidió tomar después de la muerte de mi tía, es decir su madre, tomo las responsabilidades y la madurez que no correspondían a alguien de su edad.

Así que, con eso en mente, es normal que a Ranma lo consideré como un niño porque también a mi llega a tratarme como tal.

—Tienes razón —susurró cerca de mi oído mientras acariciaba mi cabello—, pero aun así no me agradaba la idea. Así que te agradezco por lo que hiciste.

Gracias a sus palabras, una pequeña parte de mi se alegraba de haber tomado esa decisión, después de todo la felicidad de la que considero como mi hermana mayor y figura materna es lo más importante para mí. Las dudas que rondaban por mi mente estaban disminuyendo, pero eso no significaba que todavía no desaparecían por completo.

—No te preocupes, sabes que haría cualquier cosa por ustedes.

Suavemente se separó de mí, llevando una de sus manos a mi rostro para hacer que mis ojos la vieran fijamente. Por instinto mi respiración se detuvo, y a pesar de mis nervios me fue imposible desviar la mirada de sus ojos marrones, idénticos a los de sus hermanas.

Idénticos a los de su madre.

—Ya hemos hablado de eso antes, Shouko. No tienes que hacer todo por nosotros, eres nuestra familia, nos preocupamos por tu bienestar y felicidad. De verdad, espero que no te hayas sentido presionada para haber tomado ese tipo de decisión.

—Para nada —le mentí descaradamente mientras ocultaba mi rostro en su cuello.

Ella no necesita saber de mis pensamientos más profundos y egoístas.

Después de unos segundos, ambas nos separamos y retomamos lo que estábamos haciendo antes, mientras ella estaba terminando de sacar sus productos de limpieza, yo me concentre en llenar un cuenco con agua y algunos hielos, también tome un pañuelo y de paso saque un medicamento del botiquín de primeros auxilios.

—¿Vas a tratar el golpe de Ranma? —asentí como respuesta— Está bien, yo iré a limpiar el tatami.

Y sin decir más, salió de la cocina y por mi parte me dirigí a la habitación de invitados.

Al entrar a la recamara pude observar a un Ranma, aun con su versión femenina, acostada boca abajo en un futón con su padre sentado a su lado viéndolo con demasiada seriedad.

Respiré profundo tratando de tranquilizarme antes de sentarme frente a él, teniendo el cuerpo de su hijo entre nosotros.

Me alegré de que Ranma fuera golpeado por Akane, se lo merecía, pero no estoy segura de lo que pensaría el señor Saotome al respecto. A nadie le gustaría ver como su propia sangre es golpeado y en especial noqueado por alguien ajeno, sin importar que circunstancias llevaran a ese desenlace, uno se hubiera sentido ofendido.

Así que para evitar un problema, opte por dejar atrás lo de antes, pedir perdón por la situación y comenzar a tratar el golpe que recibió el chico/chica, después de todo es nuestro invitado y fue herido en nuestra casa así que simplemente no podía ignorar esto.

—Le pido una disculpa por todo lo sucedido señor Saotome, también me gustaría que disculpara a Akane, ella normalmente no se comporta así.

—No te preocupes, debo admitir que mi hijo se lo tenía merecido. Este muchacho no piensa antes de hablar.

Mis hombros, que sin darme cuenta habían permanecido firmes, se relajaron al escuchar lo que dijo, no me gustaría llevarme mal con una persona que vivirá debajo el mismo techo que yo por quien sabe cuánto tiempo.

—Esperemos que eso no le cause problemas en el futuro —comenté con una sonrisa la cual el mayor respondió de la misma manera.

—Así que, Shouko Tendo...a diferencia de tus primas que las conocí cuando eran unas bebes, nunca te había visto antes, solo he escuchado de ti por parte de tu tío.

Mientras él hablaba, coloque el pañuelo que anteriormente había mojado con agua fría sobre la cabeza de Ranma, esto como objetivo de bajar la inflamación de su cabeza.

—Nunca espere que la hija de Yukiteru sea quien se comprometería con mi hijo.

Mi cuerpo se paralizó al escuchar dicho nombre y al parecer él se dio cuenta de la reacción que tuvo mi cuerpo.

—Ese hombre no es mi padre —murmuré más para mi misma, pero estoy segura de que mis palabras no pasaron desapercibidas para el señor Saotome.

Cuando lo observe, el ya me devolvía la mirada con una seriedad similar a la mía, pero parecía como si estuviera pensando en algo.

Si es verdad lo que dice respecto a que ha escuchado de mi por parte de mi tío, probablemente él ya le haya contado sobre mi situación.

—Entiendo —asentí como respuesta queriendo dejar eso de lado, lo bueno es que el mayor tenía el mismo pensamiento que yo—. Cambiando de tema, Soun me ha comentado que eres muy buena en el estilo de pelea libre, que fácilmente lo has sobrepasado.

—Admito que soy buena, pero me sorprende que eso piense mi tío sobre mí.

Y no mentía en absoluto, ha pasado un tiempo desde la última vez que entrene con mi tío, pero todavía puedo recordar perfectamente como era en una pelea, era demasiado bueno en la lucha, una excelente técnica y una increíble defensa y estoy segura que todo fue gracias al maestro que lo había entrenado en su juventud, a pesar de que no hablaba mucho (nada) de él.

Siempre he admirado a mi tío por ser un buen luchador y que ahora su amigo me diga de lo que piensa de mí, me hace sentir feliz y orgullosa de mí misma.

—Yo también me sorprendí —continúo hablando el mayor—, es por eso que me gustaría ver de primera mano que tan habilidosa eres, espero que un día de estos podamos entrenar.

—Por supuesto.

Ambos seguimos hablando por un buen rato tratando de conocernos mejor, después de todo y según sus palabras en un futuro seremos familia, es por ese motivo que me pidió que no lo tratara con tanta formalidad hablándole de usted y que dejara de llamarlo señor Saotome. Incluso insistió en que podía llamarlo "padre" y que podía tratarlo como tal.

Por un momento pude notar sus intenciones de convertirse en alguna clase de figura paterna para mí, admito que fue un lindo gesto de su parte, pero para ser sincera no me agradaba mucho la idea.

El dicho dice: "No juzgues un libro por su portada", pero Genma Saotome no parece ser el mejor prospecto de padre, ya tengo una decepción con el que se considera mi padre biológico, no me gustaría agregar otra más a la lista. También llamar "padre" a una persona a la cual literalmente acabo de conocer se me hacía extraño. Ni siquiera llamaba a mi tío de esa manera y eso que el era mi tutor.

'Además de que yo ya tengo a una figura paterna.'

Pero eso no se lo podía decir, no me gustaría destrozar sus buenas intenciones. Así que usando como excusa el cómo podría sentirse Ranma al respecto, traté de convencerlo de llamarlo de otra manera.

Yo consideraba esta una razón válida, después de todo su hijo no estaba del todo de acuerdo con el compromiso y sería raro para el que yo ya empezara a tratar a su padre como mi suegro.

Con sinceridad no esperaba la poca, o mejor dicho casi nula, importancia que tenía el señor Saotome a la opinión de su hijo.

¿Lo ven? No es el mejor ejemplo de padre.

Fue después de insistir un poco más que finalmente cedió ante mi excusa y acordamos en que lo llamaría tío Genma.

Poco después de esto, se retiró de la habitación dejándome a mi sola con un Ranma inconsciente.

Vi la hora en el reloj que había en la habitación, indicando que eran la 7:07 de la noche, no pude evitar sonreír por eso. Comúnmente cenábamos entre las siete y media o las ocho en punto, así que no falta mucho para comer.

Ahora que no tenía nada que hacer, se me cruzo por la mente en esperar a que Ranma despertase, porque después de conversar con el tío Genma nació una iniciativa que querer hablar con él para al menos acordar como llevaríamos este compromiso. Aunque ahora que lo pienso también debería hablar con Akane, porque no me gustaría que ella y Ranma se llevaran mal mientras el chico viviera aquí.

'No quiero más problemas'.

El pequeño quejido que provino de la pelirroja llamó de nuevo mi atención. Mientras ella se sobaba adolorida su cabeza, me acerque a una jarra de agua que estaba sobre una mesita (que seguramente dejó Kasumi antes), y rellene un vaso.

—Por favor toma esto —le tendí una pastilla junto con el vaso de agua—, esto te aliviara el dolor.

La chica observó con desconfianza la pastilla que se encontraba en mi mano, pero al final sin ninguna queja la tomo.

—Esa niña —murmuro para sí mismo después de haber bebido toda el agua.

—Admito que la actitud de Akane no fue la correcta —por supuesto que lo fue—, pero debes aceptar que te merecías ese golpe.

—Claro, ponte de su lado.

—Por supuesto, es mi familia y siempre la apoyo.

Le sonreí de la forma más dulce que pude, pero un gruñido salió de sus labios y desvió la mirada con enojo. Ignorando sus quejas, tome el pañuelo que ahora se encontraba en el suelo y lo remoje nuevamente con el agua fría y en este le enrolle un par de hielos.

—Toma esto —miró un momento el pañuelo—, ponlo detrás de tu cabeza.

—No necesito tu ayuda~¡AAAA! —gritó esta última parte debido a que toque el gran chichón que había crecido en la parte trasera de su cabeza— ¡No tenías que hacer eso!

—Anda, no seas terco y has lo que te pido.

A regañadientes acepto e hizo lo que le dije.

Ambos nos quedamos en silencio un rato, no tenía idea de lo que pasaba sobre la mente del chico, pero en la mía trataba de pensar en una manera abarcar el tema que quería sin que Ranma se lo tomara a mal y empezara a discutir como un niño, pero antes de que pudiera hablar la pelirroja ya me había ganado la palabra.

—¿Por qué haces esto? —preguntó bruscamente, pero irónicamente su voz trataba de ser suave— ¿Es porque soy "tu prometido"? Pues déjame decirte que...

—Bueno, lo hacía porque eres un invitado que se lastimó estando en nuestra casa, así que es normal preocuparse por ello —lo interrumpí antes de que comenzara a quejarse de nuevo, pero se quedó callado por unos momentos más al haber escuchado mi respuesta.

Fue en este instante que decidí no divagar y hablar sin rodeos sobre el tema que tenía pensado.

—Pero ahora que mencionas todo eso del compromiso, me gustaría hablar de ello.

Su entrecejo se frunció aún más.

—No vamos a casarnos, no me importa el acuerdo al que hayan llegado tu tío y mi viejo. No pueden obligarme a hacer esto.

—¿Y crees que eres el único que no está de acuerdo? —repliqué, comenzando a molestarme.

—Pues no pareces muy disgustada.

—El que no lo muestre no significa que no lo sienta.

Y de nuevo, no dijo nada al respecto.

Respire profundamente tratando de tranquilizarme, no tenía que actuar como Akane, no debía perder la calma.

—Entonces si no te gusta tanto la idea como a mí, ¿Por qué intercambiaste lugar con tu prima?

—Solo quise ayudar a Akane —respondí sin entrar tanto en detalles.

De acuerdo Shouko, solo vamos a hablar, trataré de no discutir ya que no es necesario, ambos tenemos que iniciar esto con el pie derecho.

'Es tratar esto de forma madura y civilizada', me repetí esto en mi mente varias veces antes de hablar.

—Escucha, sinceramente me pareces buena persona, algo grosero —él iba a reclamar algo, pero no lo deje—, pero buena persona y en realidad quisiera que pudiéramos llevarnos bien.

—¿Y por qué querrías eso? —preguntó aun desconfiado.

—¿No crees que sería mejor llevar este compromiso en buenos términos a que estar discutiendo por cualquier cosa a cada rato? —tal parece que esto llamó su atención, haciéndolo reflexionar— Admítelo sería muy cansado y llegaríamos a un punto de no poder soportarnos.

—Si, tienes razón. Entonces, ¿Qué pretendes? ¿Qué actuemos como una dulce pareja de enamorados? —hizo una mueca de asco— Ni hablar.

Rei ante su suposición, no niego que por un momento imagine el cómo nos veríamos actuando como enamorados, así todos acaramelados como si fuéramos los personajes de una película o un manga shojo. Lo admito, no me gusto esa imagen mental, moví mi cabeza de lado a lado para librarme de esos locos pensamientos ganándome una mirada de confusión por parte de Ranma.

—No para nada, eso sería muy incómodo —él asintió dándome la razón.

Bien, ambos estamos de acuerdo en algo, así que quiero pensar que no será difícil a que acepte lo que quiero proponerle.

—Qué te parece si en vez de tratarnos como prometidos, simplemente nos tratamos como si fuéramos amigos.

Pude notar que Ranma no esperaba esto de mi parte, su rostro lo delataba. No llevaba mucho de conocerlo, pero hasta ahora me he dado cuenta que es fácil de leer, ya que es demasiado expresivo. Es por esa misma razón, que también supe que realmente estaba considerando mis palabras.

—Es una buena idea —comentó después de un rato—, así podrá estar más tranquilo mi papá y no lo tendría encima de mí presionándome.

—Exacto, y no tenemos que preocuparnos de que nos casaremos pronto, sé que tienen planeado que la boda se lleve a cabo hasta que tengamos dieciocho. Aún faltan dos años para eso y en ese tiempo pueden pasar muchas cosas.

—Por la forma en que hablas parece que ya has pensando en algo para evitar que nos casemos —habló con curiosidad.

'Si, pero tú no sales beneficiado de ello.'

—No precisamente, pero como te digo en ese tiempo pueden ocurrir muchas cosas —mencioné esto como un vago intentó de despistar a la chica (chico) que estaba sentada frente a mí, le sonreí, pero por la forma en que entrecerraba sus ojos tal parece que sospechaba algo de mí y no lo culpaba. Por suerte no paso más de unos segundos para que su expresión se volviera una totalmente despreocupada.

Ya que llegamos a un acuerdo creo que ya era momento de ir a cenar, con eso en mente comencé a recoger todo lo que había traído, esto bajo la atenta mirada de Ranma. Cuando tome la tableta de pastillas, las observe un momento antes de preguntar.

—Por cierto, ¿Cómo te sientes ahora? ¿Te sigue doliendo la cabeza?

—Ya no siento el dolor, el medicamento que me diste tuvo un rápido efecto.

Al escuchar su respuesta le di el medicamento para que lo conservara. Conociendo el carácter que tiene Akane no esperaba que hiciera las paces con Ranma solo porque yo se lo pidiera, estoy segura de que eso llevara algo de tiempo, de parte del chico no estaba segura ya que no lo conozco demasiado, pero quiero creer que será lo mismo para él.

—Sera mejor que lo guardes por si esto se vuelve a repetir.

Algo ofendido cruzo sus brazos sobre su pecho, mientras me miraba con el ceño fruncido.

—Como si fuera a dejar que ella me golpeara de nuevo.

También esperaba lo mismo, pero un presentimiento me decía que las necesitaría más que nadie en esta casa.

—Es bueno saber eso, pero por precaución quédatelo. Es mejor prevenir que lamentar.

A regañadientes terminó aceptando el medicamento y espere paciente a que terminara de guardarlo dentro de la mochila de su equipaje.

—¿Vienes? Creo que ya no tardan en servir la cena.

La mención de comida hizo que el estómago de Ranma gruñera, haciéndome algo de gracia. 

—Por como sonó eso, se nota que tienes demasiada hambre —creo que hasta puedo asegurar que tiene hasta más hambre que yo.

—No puedes culparme —se encogió de hombros antes de seguirme el paso hacia afuera de la habitación—. Por todo lo que pasó olvide que la última vez que comí fue está mañana, justo antes de que mi papá me dijera sobre el compromiso y empezara a arrastrarme hasta aquí, pero antes de ir a cenar entrare al baño primero, necesito transfórmame en hombre.

Seguimos caminando a la misma dirección ya que el baño estaba de paso. Tuvimos una breve conversación mientras tanto y cuando llegamos, lo detuve antes de que cruzara la puerta.

—Puede que sea mucho pedir, pero también me gustaría que pudieras disculparte con Akane.

¿Era demasiado? Por la forma en que me miraba como si me hubiera salido otra cabeza parecía que sí.

—Disculparme con esa fea marimacho, nunca.

Con rapidez le di un pequeño golpe con mi dedo índice en la frente, me di cuenta que no esperaba para nada mi acción, como también me di cuenta de su disgusto por ello, pero ahora no me importó lo que pensara.

—No le digas de esa forma, esas palabras pueden ser hirientes para cualquier chica.

—Para herir sus sentimientos, primero debería tenerlos —susurró más para mí mismo, pero para su mala suerte si logré escucharlo.

—¿Que dijiste? —hablé severamente.

—Nada —contesto con rapidez, moviendo sus manos frente a el—. Entonces me disculpo con tu prima, ¿Y qué? ¿Así dejamos las cosas? Debo recordarte que ella me llamo fenómeno y pervertido, aparte de que me golpeó.

'Golpe que te merecías, pero es cierto que no era justo ser llamado de esa forma'.

—Si te disculpas con ella sinceramente también te pedirá disculpas. Y no te preocupes si en dado caso no lo hace, yo hablaré con ella.

Dicho esto retome mi camino.

Ahora sola, no pude evitar pensar en este caótico día. Aunque no estoy de acuerdo con este compromiso, estoy un poco aliviada, ninguna de mis primas tuvo que comprometerse y pude llegar a un pacto de amistad con Ranma.

No era mucho, pero en definitiva era algo.

Antes de entrar a la sala pude escuchar un fuerte golpe proveniente del baño, y dejando las cosas en una mesita que adornaba el pasillo, regresé sobre mis pasos a una gran velocidad.

Por un momento pensé que Ranma pudo haberse resbalado y por lo tanto lastimado nuevamente, por lo que sin sentir pena de encontrármelo con poca ropa entre al baño, llevándome la sorpresa de ver a Akane adentro frente a Ranma que aún se mantenía en su versión femenina (que por cierto, secretamente me alegraba que estuviera en esa forma), y ambas se encontraban desnudas.

'Vaya suerte tienen, dos veces en menos de una hora', nótese el sarcasmo.

De inmediato, vi la gran marca con la forma de una mano plasmada en la mejilla inflamada de la pelirroja. Ya podía darme una idea de lo que sucedió.

Con prisa tomé la toalla de Akane, que estaba cerca de mí, y con prisa envolví el cuerpo de mi prima menor y comencé a guiarla fuera del baño mientras le hablaba a Saotome.

—Después de que termines de bañarte te ayudaré a bajar la inflamación. Y disculpa a Akane por eso —por mi último comentario la azabache se ofendió.

—No me arrepiento, ¿Por qué tendría que disculparme con ese pervertido mirón?

En medio de sus quejas, la guie hacia su habitación. Al entrar en esta vi su ropa limpia tendida en la cama y mientras seguía escuchándola hablar le iba pasando cada una de sus prendas para que se fuera vistiendo.

No me moleste en detenerla, sino al contrario, estaba dejando que se desahogara y para mi suerte después de un rato se encontraba más calmada, en este punto ella ya estaba terminando de cepillarse su largo cabello.

—¿Ya estas más tranquila? —me atrevía a preguntar una vez que guardo silencio por unos segundos.

—No —me respondió de una forma algo cortante, pero conociéndola sabía que en este momento ya podía llevar una plática más amena con ella.

—Akane, ¿por qué estas molesta con Ranma?

—Shouko, hasta la pregunta ofende, tengo muchas razones para odiarlo —cuando termino de peinarse, molesta se sentó a mi lado en su cama.

—Supongo que una de esas es por ser un hombre.

Su silencio fue su respuesta afirmativa. Un suspiro salió de mis labios y tome su mano antes de acariciarla.

—Akane, puedo entender tu odio, pero Ranma no es el causante de lo que está sucediendo en la escuela, ese fue Kuno. Ranma no te ha acosado y ni te ha exigido que salgas con él. Además, él no tiene la culpa de haber nacido siendo hombre.

Su ceño su frunció aún más y me miró.

—Pero él nos engañó a todos haciéndose pasar por mujer.

—¿Y eres consciente de que estuvo lloviendo toda la tarde? Fue inevitable para él y el tío Genma que no se transformaran.

Su molestia desapareció por un breve momento y parpadeo un par de veces antes de preguntar.

—¿Tío Genma?

Cierto, no le he contado sobre porque lo llamó así, aunque quiero pensar que de la misma forma terminaran llamándolo mis primas más adelante.

—Después te cuento, pero no te desvíes el tema.

Resignada, soltó un suspiro a la vez que apretaba un poco el agarre de nuestras manos.

—Si, sé que llovió casi toda la tarde, pero el no dijo nada sobre ser hombre cuando llegó. Incluso se quedó callado después de que papá se desmayó cuando pensó que era mujer. Y termine enterándome de su verdadero genero de la peor manera.

Hice una mueca al recordar, lo asustada y molesta que se veía hace un rato.

Por lo que me contó antes, cuando ella había entrado al baño observó la ropa de Ranma en una cesta y siendo consiente de ello entro a ducharse con la chica sin saber que se lo encontraría en su versión masculina completamente desnudo.

Si yo huera pasado por algo similar no sabría como reaccionaria, pero probablemente no hubiera ido muy bien, pero aún tenía una duda.

—Pero no entiendo, si sabias que estaba duchándose ¿por qué entraste al baño?

—¡Porque pensé que era mujer! No tiene nada de malo bañarse junto a otras mujeres.

Eso aun no terminaba de responder mi duda.

—Pero ignorando si es hombre o mujer, ¿no pensaste que podía haber sido incómodo para el bañarse con una desconocida?

Molesta separó su mano de la mía y se levantó de la cama, no me gustaba verla estresada, pero no pude hacer nada al verla caminar en círculos por su habitación antes de que tomara una pose imponente frente a mí.

Aunque su postura no me asustó para nada.

—¿De qué lado estas? —preguntó molesta.

—Por supuesto que en el tuyo, pero trato de entender ambas perspectivas. Quién sabe, talvez él tiene la misma opinión que yo sobre los baños públicos —me encogí entre mis hombros con ligera indiferencia.

La azabache puso los ojos en blanco por mi actitud.

—No porque a ti te incomode bañarte con otras personas, significa que a los demás les suceda lo mismo. Somos japonesas es parte de nuestra cultura.

Hice una mueca por lo que dijo.

—Enserio, no puedo creer que quieras comprometerte con ese pervertido. ¿Por qué te ofreciste para casarte con él?

—¿Acaso preferías ser tu su prometida?

—Para nada —susurró tan bajo que por un momento dude un poco en lo que dijo, pero rápidamente se recompuso para hablar con su tono de voz normal—, pero podría haber convencido a papá para evitar todo esto.

—Pues por lo que se mostró ahí abajo, el parecía muy decidido con que se llevara a cabo este compromiso y sabes cómo se pone cuando el dojo está de por medio.

Eso era algo que no podía negar, Akane sabía muy bien como era su padre y la importancia del dojo para él, es principalmente por ese motivo que ella quería heredar el dojo, porque confiaba en sus capacidades y estaba segura que eso calmaría a su padre.

—En eso...puedes tener razón —cedió con resignación.

—Por supuesto que la tengo, pero ya no te preocupes por eso seré yo quien se case con Ranma así que tu tranquila.

—¿Como me pides que me tranquilicé? No cederé a esta injusticia, hablaré con papá y estoy segura que entenderá. El dojo no es más importante que la felicidad de sus hijas.

—Yo no soy su hija —respondí sin pensar, pero fue la expresión ilegible en el rostro de mi prima lo que me hizo darme cuente de mis palabras haciéndome sentir culpable, pero ya era tarde para retractar lo que dije.

—Sabes lo que quiero decir —habló seriamente.

—Si, solo estoy bromeando —fue lo que pude decir para disipar lo tenso que se puso esto—. Akane, es muy lindo que te preocupes por mí y en verdad aprecio el gesto, pero tienes que relajarte. Te aseguro que todo saldrá bien.

Hizo un puchero y debido a su adorable gesto la abracé con un gran cariño, que al poco tiempo correspondió a mi gesto.

—No tienes que hacer todo por nosotros Shouko, también nos preocupamos por tu bienestar.

Una pequeña risa salió de mis labios al recordar lo similar de la situación a la que tuve con su hermana mayor.

—Kasumi me dijo algo parecido —comenté mientras me separaba del abrazo.

—Pues deberías de hacer caso, por una razón te lo decimos.

Sonreí por lo dicho para después dirigirnos a la puerta, pero antes de salir de su habitación la detuve por un momento.

—Akane, me gustaría pedirte un favor —ella me miro con duda, ya esperaba que su actitud fuera similar a la del chico, pero no perdía nada con intentarlo—. Me gustaría que te disculparas con Ranma.

Y tenía razón, reacciono de la misma manera. Talvez nunca lo reconozcan, pero puede que ellos sean más parecidos de lo que piensan.

—Por favor —insistí—, después de todo vamos a vivir bajo el mismo techo y yo estaría más tranquila si las cosas entre ustedes no fueran tan caóticas.

—Trataré, pero no prometo nada —a regañadientes aceptó.

—Eso es más que suficiente.

Ambas salimos de su cuarto y caminamos hacia la sala donde ya se encontraba Nabiki sentada junto a la mesa, y ambos Saotomes sentados en el corredor que da hacia el jardín que se encontraban hablando entre sí.

Akane se sentó junto a su hermana y yo me dirigí a la cocina para colocar en una bolsa unos cuantos hielos, cuando regrese a la sala, me acerque a ambos hombres.

—Ranma —padre e hijo se sorprendieron por mi llamado—, coloca esto en tu mejilla, te ayudará con la inflamación. Déjatelo ahí un rato y si se descongela me avisas para cambiarlo.

En ese momento noté como Kasumi comenzó a traer la cena y con rapidez me acerqué a ella para ayudarla a colocar todo sobre la mesa, pero cuando me iba alejando no pude evitar escuchar lo que dijo el tío Genma.

—Bueno, ella te ha cuidado y se preocupa por ti, eso solo hace a una prometida más tierna.

Al final no pude escuchar la respuesta de Ranma y para ser sincera no tenía interés en escucharlo.

















Y aquí otro capitulo <3

He visto comentarios que me piden que actualize y que más quisiera sacar los capítulos más rápido, pero lo malo es que lo más probable sea que mantenga este ritmo de un capitulo cada 15 días o(TヘTo), al menos por mientras me voy acostumbrando a escribir este fanfic, talvez en un futuro (ya que tenga más facilidad para esto) pueda publicar un capitulo por semana.

Cruzo los dedos para que eso suceda 🤞




Dato curioso:

Shouko siempre busca diversas maneras de conseguir dinero, debido a que no le gusta pedir a su tío para sus gastos personales (que en su mayoría son mangas, cassette, CD's, comida y ocasionalmente en ropa).



Hikaru Okhawa



Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro