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🏚️ㅤㅤㅤㅤ ( 𝖿𝗅𝖺𝗌𝗁𝖻𝖺𝖼𝗄 )

yongbok había tenido muchas parejas en su vida, pero estaba muy seguro que cualquiera de sus terribles relaciones amorosas no tenía comparación con la mierda de persona que fue el papá de liz.

seokjin era un hombre casado jugando con fuego, si no fuera por su pequeña hija que mantenía la relación de sus padres viva de alguna manera.

la cabaña se alzaba alta entre los árboles verdes y el petricor de la tierra fresca después de una noche fría de primavera. yongbok arreglaba unas cosas en la cocina mientras dos niños pequeños y una niña de ocho años jugaban a construir tartas de barro en el patio.

la mayor se alertó por la llegada de un hombre que vestía formal con una niña rubia en brazos que se ocultaba en su regazo, no dejó pasar por alto y corrió hacia la cocina.

“papá” ─── llamó la dulce wony, el llamada volteó una vez que sintió uno de sus dedos jalar su camiseta.

“¿qué sucede?”

“viene alguien.”  ─── añadió en un tono secreto, el rubio se alertó ante la confesión de la más joven, por lo que limpió la suciedad de su delantal.

seguido a eso un repicar melodioso sonó a la puerta de madera, yongbok dio un brinco dirigiéndose a wonyoung.

“¿me veo bien?” ─── la niña respondió afirmativa con un pulgar arriba.

otro repicar se hizo presente impaciente. fue a la puerta a atender la llamada y vio ahí a seokjin junto con una pequeña rubia dormida en sus brazos.

“hola, buenos días bok” ─── dijo el hombre animado.

“¿qué tal? pasa.” ─── invitó cortés.

seokjin el hombre de la camisa de botones cargaba con una pequeña niña con un overol de jean impidiendo que vea su rostro. después de algunas charlas ocasionales, cortas y precisas llegaron a la cocina.

yongbok miró con algo de desconfianza a seokjin ya que parecía levemente atormentado tapándolo con una falsa sonrisa y amabilidad que no era común.

“¿dónde están los niños?” ─── intenta desahogar esa tensión mientras rompe el hielo en la conversación, su cabeza gira a ambos lados buscando a las pequeñas cabecitas traviesas que juegan a las traes.

“en el patio, jugando.” ─── se apoya en la isla de la cocina sentándose tranquilo alzando el cejo, ignorar la tensión que existía era agotador.

“ya veo, creo que es una calamidad tener que bañarlos a cada rato, toda la suciedad que traen a cada no debe ser la adecuada.” ─── analiza.

“pues son felices así, llenos de barro, son niños, es parte de su infancia disfrutar al máximo jugar y ensuciarse.” ─── añadió con algo melancólico en su tono, no se sabía que era lo que estaba presente en su interior, una mezcla de esperanza con pizcas de tristeza se forman en su rostro.

seokjin lo medita unos segundos, al parecer sus palabras no le llegaron a convencer de todo, una posible explicación es porque su niñez había pasado hace mucho; sus padres le habían enseñado otras cosas como la pulcritud y la moral, pero estaban cansados de lidiar con un peso que los rodea.

“por cierto, traje a la hija de mi esposa.” ─── el rubio se voltea a la dirección del mayor manteniendo su expresión neutra, seokjin tiende los brazos mostrando a una niña de tres años ─── “se llama liz.”

“¿la hija de tu esposa?” ─── se baja de la encimera mientras cruza los brazos, seokjin se tensa y niega repetidas veces con la cabeza.

“aún estamos en el proceso de divorciarnos, yongbok.”  ─── ese tono de tranquilidad y cierto desconcierto suelta una excusa evidente, yongbok se sentía algo ofendido. ─── “creo que no me expliqué bien contigo... pronto seré un hombre divorciado que no pierde su fe en el amor. por más que llevé patadas al lado de jennie, sé que siempre hay otra oportunidad.”

seokjin se levanta para acercarse a yongbok pero ese intento falló descaradamente porque a medida que los pasos eran más largos yongbok se alejaba aún más de ese tacto, pero el espacio no era suficiente para huir, su espalda se pegó a la pared de la cocina acorralado.

el hombre mayor soltó a la pequeña dejándola en el piso, por lo que tomó la oportunidad de tomar la cintura del pelirubio con firmeza a pesar de que las manos de este estaban forcejando para que lo soltará.

“ajá” ─── pero por más que seokjin tenía la suficiente fuerza para derribar a yongbok contra la pared la persistencia de su rechazo era constante. ─── “no me interesa ser parte de eso.”

“no te pregunté.” ─── posó sus labios al lado de su oído susurrándole con un tono juguetón mientras sus dedos escarban buscando apretar su pequeña cintura y frotar sus cuerpos al unísono, pero yongbok lo empujó con fuerza al sentir unas traviesas falanges que se rozan por la piel debajo de su camisa.

“deja de hacer eso, seokjin, está la niña. ¿no te da vergüenza?" ─── señala al lugar donde seokjin había dejado a la pequeña, pero había un espacio vacío en el que ya no estaba nadie en la cocina.

eso le dejó mucho que pensar a yongbok, en su caso estaría preocupado, pero el mayor estaba enfocado en otros asuntos más importantes que la indefensa niña.

“ni siquiera está aquí.” ─── apuntó alzando una ceja. sus intenciones eran claras desde el primer día, solo quería tener sexo desenfrenado, llevarse a ese lindo rubio a la cama.

yongbok también estaba claro en su posición: no quería nada con un hombre como él, que su familia no es lo esencial en su vida, eso lo que hacía sus ideas retorcidas de engañar a su esposa con la primera persona que ve de su agrado ya que una persona imponente y egoísta es lo que caracteriza su personalidad y lo único que resalta.

sin aviso, el rubio acabó en la cama a fuerzas con seokjin, pero era por un beneficio mayor a placer, porque para nadie era un secreto que lo hacía de a gratis.

ya había anochecido, el sol se había puesto y las pancitas de los niños comenzaron a rugir.

“papá” ─── llamó liz dando vueltas y vueltas, revisó debajo de la mesa y en el patio de juegos también, pero no había nadie.

entró a un salon de estudio donde habían muchos muebles y mesas, también se agachó para buscar ahí en el corto espacio que había.

“hey, intrusa.” ─── llamó uno de los niños pequeños cruzados de brazos sacándole un pequeño susto a la rubia. ─── “¿qué estás haciendo?”

“¡papá!” ─── dijo apuntando hacia la mesa pequeña en la que había estado buscando a su papi.

“yo no sé quién es tu papá, mocosa.” ─── él niño mayor por nombre jungwon era el protector de sus hermanos menores y en parte de su hermana mayor wony, una chica tranquila que los vigilaba jugar, ella no juega, ni tampoco habla, solo observa lejana, pero siempre jungwon quería ser el guardián de la familia sacando a patadas a cualquier intruso. ─── “¿cuándo entraste aquí? ¡está prohibido entrar a la casa de alguien más si no te da permiso! ¿eso lo sabes?”

la pequeña estaba al borde de las lágrimas con sus ojitos cristalizados debido al tono que jungwon usó para regañarla, eso hizo que pegara un brinco desprevenido.

“hey, hey, tranquila, está bien, no llores, no llores.” ─── esas simples palabras hizo que la pequeña empezara a sollozar a gritos cosa que llamó la atención de la muchacha joven, ella solo se asomó a la puerta, silenciosa como siempre y vio a su hermano jungwon intentando consolar a la pequeña cantándole una canción de cuna o acariciando su pelo.

wony vio enternecida pero distante a la desesperación de su hermano para cesar sus llantos pero unos pasos galopantes paralizó a la mayor.

“perdón por esto, yongbok, pero tengo prisa.” ─── habló rápidamente una voz masculina totalmente desconocida a wonyoung pero asociada al invitado que llegó al mediodía.

“¿¡tú crees que yo nací ayer, maldito?! esta es la última vez que quiero verte porque juro si te vuelvo a ver por aquí yo—” ─── wonyoung trató de pasar desapercibida debido a la discusión de los adultos, los regaños ruidosos de yongbok llamó la atención de la niña más pequeña que inmediatamente dejó de llorar al escuchar la voz de su pariente.

“no era mi intención, lo lamento, tal vez a tus ojos soy el peor ser humano, no tengo perdón y lo acepto, pero por favor, no me odies, te adoro, amor. cuándo regrese te prometo que te llevaré a vivir en la ciudad conmigo y solo seremos tú y yo... lo prometo.” ─── ruega con mucha pasión, wonyoung mira confundida de un lado para otro sin saber qué pensar al respecto de esta escena, su mente estaba revuelta. ¿qué había pasado? pero entre esa ola de sentimientos negativos, la pequeña rubia sale disparada a abrazar la pierna izquierda de su papá, aferrándose fuerte sin intención de soltar otra vez.

yongbok mantiene la expresión de incredulidad, de engaño, de ira acumulada, podría golpearlo en cualquier momento si no viera por el rabillo del ojos a los niños mayores de la guardería con caritas confundidas repletas de terror.

da un suspiro hondo y resopla entre dientes.  ─── “solo, vete. no quiero más problemas.”  ─── seokjin en respuesta da una sonrisa tranquila.

“te prometo que volveré por ti y empezaré a cambiar desde ahora.” ─── dijo mientras culmina su conversación liberando la presión que había en su pecho y su corazón latiendo feroz. ─── “ también quiero dejar a liz contigo. yo no soy el mejor padre y si se queda conmigo sería como un... desastre, no quiero darle malos ejemplos a mi hija,  dejarle a cargo de alguien respetable como tú considero que es lo más adecuado, jennie volverá por ella mañana.”

yongbok lo duda un poco y después dirige su mirada al suelo al ver a la pequeña secándose las lágrimas con el pantalón de seokjin, lo reflexiona por varios minutos pero las palabras quedaron en el aire, el mayor de los dos se agacha para llegar a la altura de la niña.

“princesa, volveré mañana a por tí, ¿vale?” ─── ella con su mano seca sus pequeñas lágrimas de sus ojos, sus mejillas estaban rosadas de tanto llorar, pero la voz de su papá la relaja y sonríe ampliamente. ─── “¿te vas a portar bien?”  ─── ella asiente en respuesta con un pequeño humido. ─── “¿por el dedito?” ─── ella saca su dedo pequeño y lo entrelaza con su papá en señal de una promesa inquebrantable, él se levanta para despedirse de yongbok.

“supongo que nos veremos mañana, te traeré algo bonito a tí también, príncipe.”  ───  dijo mientras salía de la cabaña despidiéndose con la mano animado, en respuesta el rubio volteó los ojos.

“muérete infeliz.” ─── cerró la puerta de un manotazo, su cabeza daba miles de vueltas, quería llorar pero mostrar debilidad ante sus pequeños era lo último que quería hacer. da un suspiro lleno de incertidumbre y agotamiento, marca la vista a la pequeña liz que lo mira expectante jugando con sus deditos.

“hola.” ─── dijo tímida la menor.

“hola liz, un gusto, soy tu nuevo niñero, mi nombre es yongbok.” ─── su voz animada tapaba la marea furiosa de sentimientos reprimidos en su interior, como el enojo y la decepción que seokjin le había dejado. pero aún así, intentaba ser amable con su hija. ─── “¿tienes hambre?” ─── ella asiente en respuesta.

se agacha para levantarla y llevarla en sus brazos a la cocina, aún con wonyoung y jungwon siguiéndolo con la mirada paralizados en sus posiciones.

“wonyoung, jungwon, aquí no pasó nada. ¿de acuerdo?”

“¿ese tipo va a volver?” ─── salta jungwon con una expresión de desprecio ante el invitado de su papá, yongbok se queda pensativo unos segundos, el futuro de ahora en adelante es incierto.

es tan desconocido saber que pasará después, no puedes colocar toda tu confianza en una persona que no cumplió la promesa más grande de su vida, ser fiel a la persona que más amaba en el mundo.

a yongbok en sus cortos veintidós años su vida se llenó de giros inesperados y decisiones tomadas a la ligera; pero una de las cosas que más se arrepiente fue este amargo recuerdo. es difícil quitarse la culpa, volver a hacer el mismo de antes de destruir el falso amor filial que ese hombre le tenía a su esposa por solos dos o tres noches de sexo a cambio de dinero.

era un desastre pero estaba haciendo lo posible para quitarse esos huecos de incertidumbre de encima,  deseaba no ver a seokjin en un buen tiempo ya que es un recordatorio de una mala decisión.

pero lo remendaría todo dándole a liz la mejor de sus vidas, enseñando a hacer amable y tener la madurez de elegir por el bien, evitando hacer pensar a sí mismo que se había equivocado en dejarla con él, por que estaba dispuesto a ser siempre el modelo a seguir de la rubia, dispuesto a mejorar.

“no lo sé, jungwon.”

( fin del flashback )

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