Taehyung 

Hoy me encuentro en la empresa.

Por la mañana antes de venir aquí Jungkook me llevo hasta mi casa para poder cambiar mi ropa, no llegaba allí hace dos días y andar con las mismas ropas solo alertará a Jin que algo pasó.

No creo poder soportar sus burlas, se que se reirá de mí cuando sepa que me entregué a Jungkook, pero no porque esté mal, solo que estoy seguro que sacará las cartas de que yo no necesito un Alfa, jamás estaré con un Alfa.

Todo eso quedó sepultado al conocer a Jungkook y la verdad no me arrepiento de nada.

Todo lo que he vivido con él durante este tiempo ha sido maravilloso y me tiene feliz, me hace sentir a gusto con cada cosa que hace.

Saqué mi teléfono del bolsillo ya que el sonido particular que le tengo a Jin estaba resonando por toda la oficina.

Creo que estamos súper conectados, recién estaba acordándome de el y ahora  mismo está llamándome, no por nada es mi mejor amigo.

—Hola Jin.

— ¿Cómo estás cariño?, ¿Estás aquí hoy?

— Si estoy... ¿Por qué no vienes a mi oficina para que hablemos?

— Ya voy bajando, nos vemos.

Es mejor hablar de todo lo que pasó de una vez, se que se reirá pero tengo que contárselo, no soy capaz de tener secretos con él.

Necesito que sepa todo lo que he vivido en estos días, claramente omitiendo los detalles. 

Es bastante íntimo y es algo que nos concierne solo a Jungkook y a mi.

Unos segundos después de cortar la llamada, Jin está haciendo ingreso a este lugar. 

—Hola Taecito…

—¿Cómo estás Jinnie?

— Perfectamente hermoso e increíble como siempre cariño.

No pude evitar reír por sus palabras, él es precioso y su autoestima me encanta.

Sabe cómo luce y no le da vergüenza alabarse.

—Así veo, estás radiante.

¿Algo de lo que deba enterarme?

— Mucho la verdad, pero... Quisiera saber primero porque estuviste desaparecido.

Estuve llamando pero no contestaste.

— Sobre eso... estuve un tanto ocupado.

—Cuéntame, se qué hay algo muy interesante detrás de tus palabras.

— Estuve con Jungkook, pasamos estos días juntos.

Hubo un pequeño silencio.

Jin me observa con una sonrisa burlesca, creo que ya sabe más o menos de lo que se trata.

—¿Solo eso? ¿Hay algo más que quieras contarme?

— Estuvimos juntos...

Por alguna extraña razón me siento avergonzado de decir las cosas claramente.

-— ¡No puede ser! La florcita ya encontró quien la riegue... — dijo con un grito.

Mi cara está ardiendo.

— Baja la voz, te oirán. 

—Es que estoy muy emocionado por ti, es como si yo mismo hubiese tenido mi primera vez, ¿Cómo fue?

¿Él te cuidó?

—Fue perfecto Jinnie... Él fue muy dulce y cuidadoso.... Al menos la primera vez— dije mordiendo mi labio inferior.

— Con que aprovechaste muy bien tu desaparición, me enorgulleces Tae.

Me está haciendo un escaneo completo, sobre todo en mi cuello y se lo que está buscando.

— No hay marca,si es lo que buscas.

A eso me refiero con que el fue perfecto.

Valora mi opinión y no me fuerza a nada.

— Estoy tan feliz por ti mi pequeño, encontraste un gran Alfa, el que te mereces.

Se acercó a abrazarme cariñosamente.

— Todo con él se da de manera natural, cada cosa, cada palabra se siente correcta.

— Debería burlarme al saber que al Omega arisco por fin lo han atrapado en las redes, pero no puedo. 

Estoy tan feliz por ti que solo que solo quiero abrazarte.

—Yo también estoy feliz, a pesar de que tuvimos un pequeño inconveniente mientras estábamos en casa de Jungkook, por lo general todo marchó de forma maravillosa.

— ¿A qué te refieres, paso algo?

— Si… cuando estábamos desayunando, su madre se presentó en el lugar. 

Lo mismo de siempre, comenzó a ofenderme y tratar de hacerme quedar mal frente a Jungkook, pero él no lo permitió. 

La tomó por un brazo y la sacó de su casa.

Se que debería sentirme mal por eso, es su madre después de todo, pero sentí que le importo y que me cuidara de cualquier persona que quiera lastimarme.

— Esto solo hace que mi pensamiento hacia el mejore, me encanta que sea así y que te dé tu lugar.

—Algo me dice que esa señora no se quedará quieta y no me preocupa que venga y diga lo que quiera, solo no quiero que Jungkook se sienta mal por sus dichos.

Tal vez él se ve frío y sin sentimientos a simple vista, pero yo he visto a su yo verdadero y no me causa gracia la idea de que lo lastimen de alguna forma.

—Oww si mi pequeño Tae está enamorado.

— Si lo estoy Jin y Jungkook también lo está, me lo dijo.

—Eso es maravilloso cariño, me alegra de que se encontrarán y que ahora están viviendo esto sin poner barreras entre ustedes.

—Si es muy bueno, me siento completo.

Seguimos hablando un par de minutos más, y luego Jin abandonó mi oficina.

Decidí ir con él, tengo la intención de ver a Jungkook un momento.

Jungkook

Tengo pensado ir por mi Omega en el horario de descanso. 

Lo quiero llevar a comer delicioso y pasar tiempo con él.

Debido a que nos ausentamos mi trabajo aumentó considerablemente, por lo mismo necesito estar con él en cualquier momento que pueda, por pequeño que sea.

Estaba apunto de terminar unos informes cuando una presencia se adentro aquí.

Al levantar mi cabeza para ver de quién se trataba, no esperé verla.

No después de haber prohibido su ingreso a la empresa.

—¿Qué haces aquí Krystal?, Recuerdo haber prohibido tu entrada ¿Cómo lograste hacerlo?

—Tienes guardas bastante manipulables, además el nefasto de tu secretario no está en su lugar.

Fue bastante fácil llegar a ti.

— Bueno así como llegaste te irás en este momento, no tengo nada que hablar contigo y la verdad tu sola presencia me está molestando.

— No lo haré, no sin antes hablar contigo.

—Déjame adivinar, mi madre ya fue a contarte todo lo ocurrido.

— Si lo hizo y estoy muy enojada en este momento.

¿Cómo es posible que metieras a esa zorra a la que sería nuestro futuro hogar?

—¿Estás hablando de ti?, No recuerdo haberte llevado hasta mi casa, yo solo estuve con mi Omega en ese lugar. Con el Omega más perfecto  y hermoso que existe. 

El único que no tiene comparación y que es perfecto para mí.

—¿Te estás escuchando? Reconoces tan fácilmente tu infidelidad hacia mi. 

Yo soy tu Omega no esa puta que no descanso hasta tenerte entre sus piernas.

- ¡Largo de aquí! No permito que nadie se refiera así a él.

No sé lo permití a mi propia madre y menos te lo permitiré a ti.

—No me iré, no puedes correrme, soy tu prometida.

—Hasta aquí, me cansé de tu idiotez. 

Te he dicho que no quiero nada contigo, jamás te pedí ser mi Omega o algo por el estilo. Que mi madre lo quiera no quiere decir que yo esté de acuerdo.

Además sabes bien que nadie toma decisiones por mí.

Sal de aquí, no me hagas sacarte a rastras.

—Esto no sé quedará así, vas a lamentar haberme traicionado de esta forma, me encargaré de hacer que ese estúpido se aleje de ti.

No permitiré que nadie trate de quedarse con lo que es mío.

La saqué casi a empujones de mi oficina, se que no es correcto tratarla de esta forma ya que es una chica y además Omega, pero su insistencia ya tiene al límite mi paciencia y solo hace que la deteste cada vez más.

Cuando estaba a punto de cerrar la puerta se giró rápidamente y estampó sus labios sobre los míos. 

Para mí mala suerte Tae está justo parado en frente de nosotros y su cara de cabreo me está haciendo temer de que malinterprete lo que hizo está loca.

Yo la retiré inmediatamente de mi, pero logró su cometido al hacer que Tae nos viera.

—Aquí no cariño, no debes besarme frente a nuestros empleados—dijo Krystal.

Se lo que pretende y necesito aclarar las cosas en este mismo instante.

— Estás loca, si lo que buscas es que por la mala quiera algo contigo déjame decirte que solo estás logrando que te desprecie cada vez más.

Mi omega está de pie frente a mí solo observando, y yo me estoy muriendo de los nervios por saber que pasa en su cabeza.

—Tae amor esto no- 

— Silencio Jungkook, se lo que acabo de ver. 

No necesito tus explicaciones.

Se me está haciendo difícil comprender sus palabras, necesito saber que tanto es el daño por lo que vio, para así poder repararlo lo antes posible.

— Por suerte ya notaste que eres solo un juego para mi alfa, ya le diste lo que buscaba. Ahora volverá a mi como corresponde, espero que no hayas sido tan idiota para creer que tendrías un lugar especial al abrirte de piernas.

Me acerqué furioso a ella, que Tae no me haya dejado explicarle ya me tiene molesto y ella solo empeora las cosas.

Cuando estaba a punto de sostenerla para sacarla de aquí, Tae se puso entre nosotros.

Se que lo que vio me costará hacer que entienda que no fue algo que yo quise hacer, nunca lo había visto tan molesto y está vez estoy asustado.

Sus ojos están tirando fuego.

—¿Ya terminaste?

Me extraño darme cuenta que sus palabras no van dirigidas a mi, si no a Krystal.

— Si terminaste tu brillante actuación, ahora vas a escucharme.

Acabas de hacer el ridículo más grande de la historia, no sé en qué momento pensaste que sería buena idea besar a mi Alfa a la fuerza y creer que yo me tragaría eso de que fue él quien lo hizo.

Si fuese tu, me sentiría muy avergonzada por arrastrarme de esta forma para conseguir la atención de alguien.

— No sé de qué hablas, yo solo estaba correspondiendo al beso que mi Alfa me estaba entregando, que no quieras aceptar la realidad es problema tuyo.

—La única realidad aquí presente es que necesitas con urgencia un psiquiátrico.

Aprende a valorarte más y no obsesionarte con algo que claramente no pasará. 

Ahora mismo quisiera golpearte por todo el mal rato que le haces pasar a mi Alfa, pero no soy como tú.

No caeré tan bajo.

Ahora sí te queda algo de dignidad lárgate de aquí y no vuelvas. 

La próxima vez no seré tan civilizado.

Algo en los ojos de Krystal cambio, la irá se volvió miedo. ¿Es posible que ahora mismo le tema a mi Omega?

El se ve tan seguro de sí mismo al hablarle, además me llama su Alfa en reiteradas ocasiones, marcando su territorio y dejándome en claro que confía en mí.

Krystal giró sobre sus talones y sus tacones hacían un ruido bastante chistoso cuando trataba de alejarse del lugar lo más rápido que sus pies le permitían.

Todo quedó en silencio, solo podía escuchar la respiración agitada de Tae. 

Su molestia podía sentirse.

Jin también lo notó, porque lo observa con cara de preocupación.

—Tae yo-

—Tienes una habitación y un baño dentro de tu despacho, ve y quítate ese olor asqueroso que te dejó esa loca encima.

Luego de eso podemos hablar si quieres.

No puedo escucharte, me distrae esa peste.

Está siendo muy dominante en este momento pero no me molesta, se que lo hace porque le importo y me ama.

Por lo mismo fui a hacer lo pedido sin ningún tipo de queja. 

Mi Omega quiere algo, lo tendrá con solo chasquear los dedos.

— Ya vuelvo, no te vayas quiero que conversemos.

—Estaré con Jin en lo que tú entras te quitas el hedor y ventilas tu oficina. 

No quiero nada que me recuerde a esa loca allí dentro.

Me ofrecería a ayudarte, pero estoy tan molesto que no te ganarás ese premio.

Ve rápido y hazlo bien.

Me di media vuelta e ingresé a mi oficina, tengo ropa aquí en caso de emergencia y está es una.

Gracias a dios se me ocurrió poner este cuarto dentro.

De lo contrario estoy seguro que mi Omega se mantendría lo más lejos de mi posible, si sigo oliendo así.

Gracias por leerme

🌸 ErLith_ 🌸