Mirar el techo en busca de una solución era lo mejor que podía hacer Renjun en ese momento. Desde la ventana de su habitación se podía ver cómo iba oscureciendo gradualmente, los minutos pasaban pero el chico de cabellos castaños no se movía de su lugar, estaba en alguna clase de shock del cual no podría salir muy fácilmente.

Pero, ¿qué se supone que debía hacer a estás alturas?

Oh, cierto... no están al tanto; Dejen les explico la situación.

Renjun era un chico de ya veinte años, cabello oscuro y, un chino con perfecto dominio del Coreano que se encontraba a principios de su segundo año de universidad cursando la carrera de ingeniería informática.

Un chico estudioso que creció en el seno de una buena familia, quién recibió halagos de muchas personas gracias a sus logros tanto académicos como artísticos y deportivos, alguien de promedio admirable desde pequeño y un carisma único que te atrapaban cuando menos lo esperabas.

Alguien realmente destacable, debería
decir.

Oh, pero hay un problema.

Es gay.

Y ha escondido a su novio de sus padres por año y medio.

Entonces ustedes dirán "Cómo pudo
escondera su novio de sus padres
durante año y medio?", pues sencillo;
Renjun formalizó su relación con su novio un mes después de haberse mudado a un apartamento propio el cuál fue patrocinado por su hermana mayor, la única que conocía de su orientación sexual en toda su familia.

¿Y su pareja en cuestión? Oh, bueno, él aparentemente no estaba muy enterado sobre el hecho de estar escondido; No sabía mucho de la familia del menor realmente.

Era un tema similar a un Taboo.

Jaemin era un buen chico, un poco más alto que Renjun, de cabello azul y grandes y brillantes ojos, un chico muy bueno en las materias con números y fórmulas y quién (sorprendentemente) estudiaba artes en la universidad de Seúl; Podríamos llamarlo el amor de la vida de Renjun.

Con una sonrisa que enamoró al
contrario de inmediato, una increíble
habilidad para los trucos de magia que Renjun aún recuerda haber visto en su primera cita y un humor algo sarcástico, Na era el chico perfecto
para Renjun.

Renjun amaba mucho a Jaemin, mucho más de lo que expresaba regularmente.

Entonces, ¿Qué debía hacer?

Su mirada se mantenía en el mismo
sitio, su cuerpo estaba completamente quieto y si no fuera porque estaba parpadeando cualquiera creería que estaba muerto.

Respiraba profundo mientras recordaba la llamada que tuvo hace unas horas con su padre.

—¿Qué va a hacer qué?

—Iremos a Corea en una semana. Haz
espacio para nosotros en tu
departamento.

Sudaba frío de solo pensar en su padre estando en su departamento y
encontrándose con su novio de repente.

Y es que Jaemin era tan tranquilo y
directo que probablemente recibiría al señor Huang presentándose como el novio de su hijo del cual cree que es
ciento por ciento heterosexual.

Porque los Huang eran homofóbicos.

Muy buenas personas pero igual
homofóbicos.

Pobre señor Huang, no se daba
cuenta que su hijo tenía la palabra Gay tatuada en la frente.

Los señores Huang estarían en Corea en tan solo siete días y Renjun no sabía que hacer sobre Jaemin, ya que el mayor lo visitaba casi siempre luego de salir de sus clases.

¿Cuáles eran sus opciones?

¿Podria decir que Jaemin era su
amigo? Realmente no, esa idea estaba
descartada; Jaemin era muy directo.

¿Podría continuar escondiendo a
Jaemin? Pudiera intentarlo y morir en el intento; no, gracias, siguiente opción.

¿Podria pedirle un tiempo a Jaemin y que dicho tiempo termine cuando sus padres se vayan? Ajá, pudiera ser
factible pero ¿y si sus padres no se van hasta dentro de unos dos años?

Un grito agudo de frustración salió
desde lo más profundo de su garganta
mientras con fuerza se tomaba de los
cabellos, desordenando, dañando y
maltratando sus hebras oscuras junto
con sus cuerdas vocales.

¿Podría decirle a sus padres que era
gay?

¿Podría decirle a Jae que no lo visitara porque estaba de viaje?

¿Podría seguir mintiendo?

¿Podría...

Terminar con Jaemin?

—¡Definitivamente no! —Se gritó a sí
mismo mientras golpeaba su cabeza
contra una almohada repetidas veces,
intentando borrar cualquier rastro de
esa idea.

Renjun nunca podría terminar con
Jaemin, el mayor era un chico demasiado bueno y paciente que no merecía que Renjun le cortara por sus
inseguridades y cobardía.

Continuó golpeándose contra la
almohada hasta que de repente una
idea cruzó por su mente.

¿Pero qué tal si Jaemin terminaba con él?

Todos los créditos a: M_Hyuka