Temporada 2 - Capítulo Cuatro -
|Inicio de nueva época|
|20 - Votos| - Gracias.

Capítulo anterior - Resúmen.

Con daiana en el hospital, había alertado demasiado a los dos héroes cazadores los cuales se movilizaron mucho más por las oscuras calles ..
En dónde ambos conocieron a dos demonios civilizados que no quisieron luchar ..
Con la inesperada ayuda de ellos, encontraron dos importantes aliados demoníacos.

Ahora los cazadores con experiencia que quedaban, se empezarían a reunir poco a poco con todas las intenciones de acorralar a los demonios nuevamente.
Con dos adolescentes con muchísimo potencial.
Una nueva era llegaría..

Capítulo actual - Capítulo Cuatro.

•Campos de árboles

Entre los árboles, un señor veía con atención a una adolescente respirar con mucha dificultad en claro cansancio por un extenso entrenamiento.
Asuna Himejima, entrenaba todos los días hasta que no podía más.
Tatsuo miraba orgulloso a la chica, un padre que fortalecía lo máximo posible a su hija.

—Este entrenamiento termina aquí, ahora puedes pasar la siguiente fase de tu entrenamiento, fase que lastimosamente no puedo ayudarte, por eso recibirás un especial entrenamiento con izuku-san.—Tatsuo comento, tomando una pequeña sonrisa por ver la emoción de su pequeña cría.

—Me esforzaré mucho papá. Tú también debes tomar forma, no seas vago.—Asuna ordeno de brazos cruzados para sonrisa nerviosa del hombre que acepto sin problemas.

—No me des importancia, ahora solo concéntrate en seguir todas las instrucciones de Izuku-san, pronto te irás a las montañas para recibir un intensivo entrenamiento razón por la cual te entrene tan arduamente.—Tatsuo explicó.

Asuna tuvo determinación en mejoría,
Una nueva generación de cazadoras se formaría pronto.
Una organización que se disolvió totalmente volvería con dos motivadas adolescentes con muchas razones que buscaban para hacerse más.. y más fuertes en cada momento.

—•°•—
|Días después - Agencia Heroica de Cazadores|

Paradas frente a una imponente agencia.
Estaban paradas dos hermosas adolescentes que se encontraban paradas de forma épica, como si de una película se tratará.
Un extraño viento heróico, movía sus cabellos de forma bastante extraña.
Pero esa postura épica fueron represadas por chillidos de felicidad de ambas que se abrazaron de emoción.

—Bienvenidas, ¿Qué desean esta hermosa mañana?

Una recepcionista atendiendo a las dos emocionadas chicas, solo pensó que ambas eran fanes en busca de los héroes más importantes de su agencia.
Solo en busca de un autógrafo de sus jefes.

—V..- Vinimos por órdenes de los héroes.. E..eh .. s-..somos futuras.. candidatas a heroínas.. y los.. los héroes nos dieron oportunidad de entrenar con ellos..

•Himejima Asuna - No deseo dar muchos datos de ellas. Solo querían quedar como estudiantes de los héroes.
Si decía que la chica a su lado era la hermana del máximo héroe de su país, serían tomadas por locas y sacadas de la agencia sin siquiera poder hablar.

—Hōno-sama no esta presente. Y no me avisó de su visita, ¿Pueden decirme sus nombres? ... Necesito la confirmación de mi superior.—

La chica paso a una mirada de aburrimiento, demostrando claramente que no les creía absolutamente nada, preparada para llamar a los guardias, sin tomar las medidas correspondientes antes de sacarlas, sino sería despedida de su hermoso trabajo.

Tomando un teléfono, marco a su única superior presente en la agencia.
Tras decirles sus nombres, ella no tardó en llamar a dicha superior

—Señora Hashira-sama. Unas señoritas quieren tener una reunión con usted. Midoriya Daiana, Himejima Asuna.

Al ser mencionadas, las chicas esperaron pacientemente estando nerviosas por ver tantos héroes presentes como por sus entrenamientos, la emoción de ambas no la dejaba pensar en muchas cosas.

—Si, pueden pasar. Una es mi adorable cuñada y la otra bonita niña es su mejor amiga. Dales unas instrucciones de como llegar.

Tras recibir una aceptación de la heroína, la recepcionista comenzó a guar a ambas adolescentes rumbo al ascensor.

—... Enana, ¿Nunca has venido a la agencia de Izuku-sama?—Susurro Asuna, no conociendo para nada la agencia por dentro.

—Mi hermano quiere mantener mi persona en secreto de todos. No puedo venir a esta agencia porque siempre esta rodeados de reporteros. Creo que ahora será diferente porque nos iremos directamente a las montañas, entramos y salimos..—Dai susurró también en respuesta, siendo vistas por todos los héroes con curiosidad, después de todo las adolescentes llevaban enormes equipajes.

—¿Y qué es eso de que no esta? ... ¿Estará en una importante misión heroica?—Asuna volvió a susurrar tomando el ascensor.

—No me avisó nada al respecto, seguramente será una misión sencilla para él. Después de todo mi cuñada esta aquí, si fuera complicada ella también estaría al lado de mi hermano.—Dai contesto mientras se escuchaba la musiquita del ascensor.

En el último piso, las puertas se abrieron lentamente para dejarles paso, la recepcionista les señaló que caminarán por el extenso pasillo decorada con hermosas plantas.
Ellas caminaron después de agradecerle llegando a una sala de entrenamiento, ambas entraron para ver a una bella mujer golpear un saco de box con mucha fuerza.

—Mitsuri-chan. Buenos días.—Dai llamo para atraer la atención de la mujer, atención que pudo tomar.

—Dai-chan. Asuna-chan. Bienvenidas a la agencia heroica de Izuku-chan y Mitsuri-chan.–Mitsuri abrió sus brazos para atraer a las adolescentes en un fuerte abrazo amoroso.

Dai sonrió adorablemente mientras devolvía ese fuerte abrazo.
Asuna por otro lado se asqueo un poco, no por el abrazo, sino por todo el sudor de la hermosa mujer mezclarse con su cuerpo.
No pudiendo separarse por la enorme fuerza de la heroína, se resigno en ser abrazada.

—¿Están preparadas para este entrenamiento? ¡Será divertido! Una montaña solo para mujeres en dónde disfrutaremos de un buen entrenamiento y películas románticas.—Mitsuri comento para sorpresa de ambas que esperaron que estuviera izuku, cosa que no parecía ser así.

—¿Mi hermano no participará en este entrenamiento? ... ¿Se han peleado?—En modo chismosa, Daiana deseo saber que pasaba, y si podía solucionar algo que no pasaba.

—.. ¿Peleado? ¡Claro que no, Daiana-chan! Recuerda que somos importantes héroes, no podemos simplemente desaparecer del mapa, así que izuku-chan cubrirá mi puesto por ahora ... Ahora mismo él esta en una pequeña búsqueda importante. Nada de que preocuparse.—Mitsuri reveló de forma despreocupada, asuna que pudo ver las maletas en un fondo, supuso que serían acompañadas en estos largos meses.

—¿No será reprendida por tomarse una vacaciones, Mitsuri-sama?—Asuna pregunto respetuosamente.

—Pronto se dará mi aviso de vacaciones. No es de preocuparse, en serio, no las acompañaré todos los meses, pero estaré presente para ustedes lo máximo que pueda.—Mitsuri contesto con una expresión de estar despreocupada al respecto.

—¿Qué clase de misión estará haciendo mi hermano?—Dai se pregunto..

—•°•—
|Esa misma noche - Edificios abandonados|

Una chica de cabello rubio, corría desesperadamente y como podía de unos demonios que deseaban acabar con su vida.
Jamás había tenido tanta desesperación.
De su pierna derecha cortada, su ojo izquierdo tapado por la sangre que caía de su dañada cabeza.

Apreciando como los vagabundos del lugar corrían para proteger sus propias vidas, chasqueo su lengua al no poder usar a uno de ellos como carnada.
los demonios simplemente la seguían a ella y nadie más.

A nada de hacer la cosa más arriesgada de su vida, estuvo dispuesta a saltar desde el quinto piso del edificio abandonado a otro.
Si fallaba, moriría, si lo lograba, también moriría.
Dudando mucho que eso detuviera a los demonios.

Pero.

El que tenga miedo de morir que no nazca.

Cuando iba a saltar, fue sujetada del brazo para ser empujada hacia atrás.
Su cuerpo se invadió de miedo cuando no pudo ver al causante de que su idea no funcionará, pensando que era un demonio.
Pudo ver a un hombre que reconoció perfectamente.

—Creo que has tenido una idea errónea de cuánto son los metros de este edificio al otro, señorita.—

No fue capaz de reaccionar cuando un demonio salto en dirección al hombre.
Pero este no realizó ningún movimiento al respecto.
No obstante; Ella vio como el demonio se cortaba en cientos de pedazos de un segundo para otro.
Ahora más aterrada por el hombre que por el demonio, empezó a retroceder como pudo.

Su personalidad era realmente loca, ella estaba mal de la cabeza, pero no sé necesitaba ser un súper genio para retroceder ante el héroe más poderoso de todo el mundo.

Era un suicidio enfrentarlo.

—•°•—
|Montaña de cazadores - Día Siguiente|

Tras un una tarde de viajar a la enorme montaña, ahora nombrada como "Montaña solo para chicas" se habían tomado el resto del ese día de descanso para no presionar demasiado a la adolescente daiana.

En la actualidad, tres chicas estaban paradas en medio de muchos árboles rodeados.
Mitsuri teniendo una tímida sonrisa nerviosa, claramente no era buena como maestra, y a veces le costaba mucho explicar cosas complicadas.
Si su esposo estuviera presente, el tema de la respiración no sería un problema, después de todo él la creo.

—Entonces... ¿Cuál sera nuestro entrenamiento, sensei?—Asuna pregunto teniendo mucha confianza en las capacidades de la mujer, incluso sobre estimarlas. Pensando que la respiración no sería un problema aprender.

—... Eeh .. ¡Si, primero necesito ver sus habilidades en combates!—Mitsuri menciono teniendo estrellitas en sus ojos. —|Seguramente Izuku haría esto. Solo necesitas copiar su personalidad y adoptar sus pensamientos. ¡Que lista eres, Mitsuri-chan!|—

—Mitsuri-sensei. No quiero pelear, solo enséñame la misma respiración que mi hermano, por favor.—Dai subió sus dos manos hacia arriba. Tener esas llamas geniales de su hermano la ilusionaba mucho.

—... Perdón, Daiana-chan. Pero hasta ahora nadie ha podido usarla. Intente usar la misma postura que tú hermano. Sin embargo descubrí que esa respiración no es para todos. Y ahora debes ser una chica sencilla. Humilde. Ir de a poco.–Mitsuri respondio con sabiduría para recibir un triste asentimiento.

Sin embargo está tristeza se paso de la nada.
No teniendo el detalle del porque no podía usar la respiración de su hermano.

—¡Está bien, sensei. Pero, ¿Por qué no puedo usar la técnica de mi hermano?—Dai pregunto ahora más calmada.

—Cada uno posee sus propias fortalezas como habilidades. Mis puntos fuertes son la flexibilidad y fuerza.—Mitsuri sacando su katana, realizó unos extravagantes movimientos llenos de elegancia. —Y me encargaré de encontrar sus fortalezas.—

—Increible maestra, en cambio. Me está costando respirar en este lugar.—Asuna comento sentándose en una roca con la respiración medio entrecortada.

—Se someterán a estos entrenamientos con esta pequeña cantidad de oxígeno. Para fortalecer sus pulmones y llevarlos al próximo nivel de fuerza.—Mitsuri enseño su flaco brazo, intentando demostrar sus músculos, pero no pudo demostrar nada porque no había nada.

—Eres débil, Asuna-chan, te hace falta odio.–Dai comento orgullosa de poder soportar este tensa montaña pero..

Mitsuri apareció unos metros de su cuñada, dándole un poderoso codazo en el estómago que le saco el poco oxígeno que ella cargaba con mucha habilidad.

—¿P..por qué?—Dai se expresó adolorida mientras se arrodillaba, sujetándose con fuerza el estómago. Mitsuri puso una sonrisa nerviosa nuevamente.

—Perdóname, sin embargo también debes entender a estar en una igualdad con tu mejor amiga, no olvides que te cargue la mitad de la montaña para no presionarte demasiado. Por eso no estás tan cansada como tú compañerita.–Mitsuri comento tomando una repentina seriedad.

Dai que apenas podría respirar, puso sus ojos en 'X' mientras sacaba un poco la lengua, quedando totalmente inconsciente.
La mirada seria de la heroína paso automáticamente a una preocupada, arrodillándose ante su pequeña cuñada, intento despertarla con leves cachetadas.

—Aqui no ocurrió nada. Despierta Daiana-chan, vamos, vamos.—Mitsuri llamo ahora más preocupada que antes. —¿Me he pasado con la fuerza? ...—

—Sensei, solo se está haciendo la estúpida. Despierta enana sin capacidad de razonamiento, estamos perdiendo valioso tiempo.—Asuna impacto una patada en las costillas de la ahora adolorida Daiana.

—¡¿Qué te pasa?! Eso sí que fue doloroso. Idiota ..—Dai comento enfadada para proceder a levantarse.

—¡¿A quién llamas idiota, pedacito de mierda?!–Asuna ahora enfadada se acercó más a su mejor amiga, quedado cara a cara.

—¡¿Qué?! ¡Se enojo la princesa!? ¡Vete al demonio, perra!—Dai respondio. Mitsuri que se puso aún más nerviosa. Intento detener a las dos energéticas chicas.

—Vamos, chicas, no peleen. ¿Qué tal si lo hablamos con una buena comida? ¿Eh, eh?–Mitsuri quiso entrar en medio de ambas, pero fue ignorada en su totalidad. |Momento..|

—¿¡Eeeh!? ¡¿Acaso quieres pelea?!—Asuna solo se acercó más al rostro de la adolescente, inclinando su cuerpo para verla mejor cara a cara por la extensa diferencia de altura.

—¡Te haré pedazos!—Dai exclamo para esquivar un duro puñetazo y devolverle el derechazo directamente al mentón. —¡Sin tu katana no eres nada! ¡Pelea como mujer!—

Dai para rematar, le dió otro duro puñetazo para provocar que asuna chocara en contra de un árbol duramente.
Sin estar demasiado aturdida, asuna se levantó para esquivar un izquierdazo e intentar devolverle los duros puñetazos,
pero no servía para nada.

Dai volaba como mariposa y picaba como una abeja.

Mitsuri apreciando esta abrumadora diferencia entre ambas chicas, puso una mano en su mentón para analizarlas a ambas.
Siendo consciente que su pequeña cuñada entrenaba boxeo, su experiencia en unos combates cuerpo a cuerpo le dieron la habilidad para tener este combate ganado.

Asuna hacia lo posible por defenderse de los rápidos ataques que llegaban de todas direcciones, cuando de repente pudo esquivar un puñetazo, sujeto con fuerza el antebrazo de su mejor amiga y usando una fuerza increíble, la cargo en su hombro solo para estrellarla en contra del suelo.

Pero se dió cuenta que daiana no había recibido daño al detener el impacto con sus dos piernas, la sonrisa burlona de dai, solo pudo enfurecer demasiado a asuna.

—Cada boxeador tiene debilidades en las piernas, sin embargo; Recuerda que también uso las piernas, preciosa.—Dai aprovechando su actual posición, movió una pierna hacia arriba, proporcionándole a su mejor amiga una fuerte patada en medio del rostro.

Asuna solo pudo cerrar sus ojos al sentir el pie de la chica en su rostro, claramente siendo impactada duramente contra el suelo.
Aunque tenía habilidades cuerpo a cuerpo, no podía compararse para nada con su amiga.

—“Interesante. Dai-chan demuestra mucha elegancia y flexibilidad. Veamos que puedes hacer para contrarrestar. Asuna-chan."

Mitsuri mientras caminaba de lo más normal del mundo, escuchaba los fuertes puñetazos que su pequeña cuñada le propinaba a su mejor amiga, un resultado que estaría por cambiar radicalmente.
Sujetando dos katanas de maderas, nuevamente camino hacia las dos energéticas adolescentes ...

—Asuna-chan, Daiana-chan. Tomen estos apreciados artefactos. Por cierto, Asuna-chan; Dai-chan en solitario me menciono que eras tonta y fea. Solo te lo digo porque no soy una mala persona para ocultarlo.—Mitsuri reveló para sorpresa y confusión de daiana, pero con mucha atención de asuna que frunció el ceño. —Atrapen sus katanas.—

Lanzado dichas katanas a las chicas, asuna fue primero en tomarla, a pesar de estar en el suelo a nada de ser derrotada.
Dai se puso en blanco al tener esa katana en manos.
Se venía una poderosa como furiosa adolescente.

Asuna se había lanzando con todas sus fuerzas, en claro intento fallido de daiana para detener todo, esa confianza que tuvo en combate a puños, no la tuvo en combate con katana en contra de su mejor amiga.

—¿¡Qué pasa!? ¿¡Estás aterrada!? ¿¡Dónde está esa confianza de apenas unos segundos!?–Asuna forcejeando y superando a su mejor amiga, miraba con una sonrisa diabólica de oreja a oreja

Dai se separó cuando asuna estuvo a punto de atacarla nuevamente, evadiendo cada caótico ataque con mucha elegancia pero con velocidad al mismo tiempo.

Ella mantenía una sonrisa nerviosa por los ataques de su mejor amiga, consciente de que no podría esquivar para siempre.
Mitsuri apreciando los devastadores ataques de asuna, puso una mano en su mentón.
Su cuñada seguía demostrando esa elegancia a la hora de evadir como contrarrestar.

Les faltaba aprender unas cosas.
Pero no estaba nada, nada mal.
solo necesitarían desarrollar un poco sus músculos como precisión en ataques letales.

—¡Vamos, Daiana! ¿¡Esto es todo lo que puede hacer la hermana del héroe más poderoso!? ¡Pelea en serio, mierda!—Asuna intentando hacer enojar a su mejor amiga para sacar todo, buscaba palabras en medio de su combate.

—... ¡Intento, déjame en paz!—Dai arremetió con mucha precisión, superando instantáneamente a asuna, pero no funcionó de nada sus actuales habilidades en combates.

Izuku-sama seguro estará decepcionado de su hermana.

Asuna comento dándole una fuerte patada.
Daiana que rodó duramente por los suelos, impacto con un árbol, permaneciendo en ese lugar unos segundos.
Asuna dió unos pasos adelante para continuar.

—Izuku-sama siendo un habilidoso como poderoso espadachín legendario, teniendo una hermana que no es habilidosa en combate de katanas, ¿Cómo crees que reaccione? Seguro estará decepcionado de tener una hermana tan patetica.–Asuna pregunto.

—... Cállate, no sabes nada de tener un hermano amoroso. Jamás estará decepcionado de mi, como tú traidor hermano está de ti.–Una sombría daiana respondio.

—...—

Una fuerte tensión se disparó en todas direcciones, poniendo realmente nerviosa a la heroína que se encontraba unos metros alejada, esto había escalado a un asunto realmente personal.

Asuna viendo como daiana comenzaba a dar leves brincos en una pequeña danza.
elevó su katana rápidamente.

—...—Dai a la misma vez, elevó su katana para continuar la batalla, su sonrisa nerviosa se desvaneció para dejar paso a una mirada neutral como sombría.

—•°•—

Una pareja de casados, caminaba por unas oscuras calles vacías de personas. Ambos charlaban con mucha calma sin ser intimidados por dichas calles.

—Mi hermana, es una chica con mucho potencial oculto.—Izuku comento.

—¿Potencial? ¿Como tú?—Mitsuri contesto curiosa viendo fijamente a su esposo.

Ella no considero que su cuñada tuviera un mismo potencial que su esposo, sonaba estúpido de escuchar, pero si venían del mismo hombre.
¿Tendría razón en esto?
¿Su hermana menor tenía un mismo duro potencial?

—Es complicado de responder. Viendo los entrenamientos de ella, sé ve el potencial que posee. Solo hace falta explotarlo.

La mente de la hermosa mujer, daba muchas vueltas, considerando mucho a las palabras de su amado esposo.
Un potencial que su esposo solo era capaz de apreciar, pensó que tanto de potencial tenía la adolescente.
Cuánto aprendizaje tomaría y si podía compararlo con su esposa.
Pero en todo caso que tuvieran un mismo potencial.

¿Ella estaría al mismo nivel de izuku?

Un potencial que posiblemente la colocaría debajo del cazador más poderoso.
Eso sonaba;

—•°•—

—Aterrador.. Realmente aterrador..—

Mitsuri, apreciando como daiana arrastraba del cabello a una inconsciente asuna, ambas se vieron demasiado masacradas a la hora de luchar.
Agilidad, coordinación, estratégia, concentración, precisión. Todo demostrando en un resumido combate que escaló para terminar dando por ganadora a daiana que se notaba realmente cansada.

Pero.

Poca resistencia.

Dai cayó arrodillada delante de su cuñada, un intenso dolor en su pecho, le había ordenado a detenerse, una orden que aprendió a obedecer en su totalidad.
Cayendo encima de su inconsciente mejor amiga.
Mitsuri solo pudo apreciar a ambas adolescentes en su total agotamiento.

Asuna, tampoco se quedó atrás aunque fue superada estratégicamente por mucho. La agilidad, fuerza, velocidad, concentración y poder destructivo fue lo que definía a la chica.
Pero sobre todo eso.

Mucha resistencia.

—Izuku-kun. Tenías mucha razón; Ambas son las mejores candidatas a cazadoras. Los demonios estarán jodidos con ellas presentes.—Mitsuri se comento a si misma, cargando a ambas adolescentes en sus hombros, para caminar rumbo a la enorme como mejorada casa de cazadores.

—•°•—
|En otra ciudad; Osaka, Japón|

Izuku sentado en un lujoso asiento, analizaba a los doctores privados curar a una inconsciente chica con muchos cuidados especiales, cruzados de brazos para esperar el despertar de su única candidata.
Actualmente estaba en otra ciudad de su país, en una oculto edificio alejada de la ciudad principal, específicamente un departamento.

Izuku manteniendo una expresión seria en su rostro, movió una carpeta lentamente.
Tomando está carpeta en sus manos, viéndose un nombre en la etiqueta.

•Himiko Toga

Izuku había dejado esa carpeta encima de otra mesa mientras se apoyaba en su puño, todavía esperando el despertar de su futura espía.
Manteniendo una expresión vacía en su rostro, su paciencia se demostró al esperar a la chica rubia.

Caminando en dirección a una ventana, presenció a un hombre con capucha oscura caminar en dirección a un edificio totalmente oscuro.
reconociendo esa sangre en sus sistema, ahora podría reconocerlo sin importar que tanta ropa que llevará ni lo mucho que se ocultará.
Nada se escapaba de su visión.

Sacando su teléfono cuando emitió una vibración, vio un mensaje de su amada, siendo una fotografía de su hermana menor dormir toda vendada junto a su mejor amiga.

"Todo se fue de control, ven, por favor😭"

Izuku sonrió un poco, cuando movió su cabeza hacia atrás para dejar pasar un cuchillo a altas velocidades, la chica que rescató se encontraba respirando con mucha dificultad.
Tomando a una aterrada enfermera, colocó un bolígrafo para colocarlo en el cuello de la misma enfermera.

Izuku solo le contesto a su esposa, pareciendo ignorar en su totalidad a la asustada chica que aprovechaba a retroceder.

—No te haré nada. Te hubiera arrestado estando inconsciente, ¿No lo crees?—Izuku comento de forma inexpresiva.

—¿Por qué el héroe número 2 no me arrestó? ¿Qué quieres?—Toga exclamo con su mano temblorosa, los héroes que había asesinado nunca la intimidaron con tan solo su presencia.

De repentina manera, izuku sujeto el brazo de la chica para lanzarla en contra de una pared, separándola de la aterrada enfermera.
Izuku vio a la enfermera levemente para que ella corriera para irse.

—Quiero proponerte una cosa interesante. La verdad no sé cuáles son los sueños o objetivos de un asesino psicópata. Pero eso te hace perfecta para esta misión.–Izuku comento sobándose la mejilla en pensamientos, ella no intento nada para defenderse, sabiendo que seria estúpido.

—... Considero que no tengo otra opción, ¿Cierto? ... Negarse no serviría de nada, ¿O si? ..–Ella pregunto recuperando una sonrisa extraña.

—No.. tristemente.. no.. no tienes otra opción más que aceptar.—Izuku respondio para recibir un leve asentimiento.

Izuku se cruzó de brazos para ver con atención a su nueva ayudante, más o menos.
Solo tocaba esperar como avanzaría sus planes de ahora en adelante.
Se esforzaría al máximo para salvar a su hermana menor, este momento no dudaría en hacer cualquier cosa.

|Montaña de cazadoras|

Durante la oscuridad de una hermosa noche. Mitsuri estaba sentada en una roca mientras remojaba sus pies en unas aguas termales, viendo en sus redes sociales cosas adorables, su sonrisa combinaba con las cosas que veía en su teléfono.
Sumamente adorable.

Dai sin pena ni gloria entro a las aguas termales sin nada de ropa, bostezando duramente por la larga siesta por estar inconsciente.
No se tomó un segundo para saludar a su cuñada, simplemente se sumergió en el agua con los ojos cerrados.

—Ah..~ Esto es vida..—Dai suspiro aliviando su cuerpo nuevamente.

Mitsuri después de ver a su cuñada brevemente, continuo viendo su teléfono atentamente cerrando sus ojos en una brillante sonrisa daiana le dió su atención por primera vez en estos minutos de silencio.

—Mitsu-chan, buenas noches, ¿Cómo ha estado todo?—Dai tardó un poco en tomar la atención de la bella mujer, pero la tuvo eventualmente.

—Quise hablar de esto cuando ambas estuvieran despiertas. Sin embargo ahora que estás aquí, no tengo problemas en repetirlo; Fueron demasiado lejos en ese combate.—Mitsuri comento con una mirada preocupada, no deseando que ambas chicas se pelearán.

—Siempre pasa, ella solo me quiere hacer enojar. Creo que me tomo todo con mucha calma. Por eso ella sabe en dónde atacarme para enojarme, no te preocupes.—Dai respondio calmadamente, despreocupado a la mujer.

—Creo que debí detenerlas en ese instante. Pudieron haberse matado ambas, eso no está bien.—Mitsuri volvió a remarcar para movimiento de mano de la despreocupada daiana.

—No nos golpeamos en zonas críticas, solo es un combate hasta el agotamiento total o caer desmayadas. Nunca fue tan grave, no le digas a mi hermano al respecto, por favor.—Dai respondio queriendo dejar de lado la conversación.

—Bueno, pero no se crean que volverán a luchar tan salvajemente la próxima. Cuando ella despierte, quiero que se tomen de las manos y se pidan perdón por haber sido tan crueles con la otra. También quiero que se den una carta de disculpas decoradas con brillitos rosados.–Mitsuri ordenó.

—Si, si, bien, bien.—Respondio dando una sonrisa nerviosa.

—Siempre debes valorar las amistades, es un valor incaculable que nos regala el mismo universo. Por eso no busques decirle cosas hirientes.–Mitsuri aconsejó para volver a ver su teléfono.

Dai tomo en cuenta ese consejo, bajando su mirada un poco, nado levemente hasta un lado de su cuñada que tapaba su cuerpo con una toalla.
Emergiendo del agua, se sentó a un lado de ella para continuar con cualquier conversación de lo que sea.
Esto para pasar el aburrimiento.

—¿Qué ves?—Pregunto tontamente para ver bebés jodidamente adorables.

—Estaba viendo vídeos de gatos bebés, pero me tope con estos vídeos. ¿No son adorables?–Mitsuri pregunto teniendo un brillo desconocido en sus ojos que la adolescente pudo ver.

—Si, supongo.—Dai contesto interesada en esta nueva conversación entre cuñadas.

Hubo una especie de silencio abrumador, mientras un nuevo video corto se reproducía, viéndose a un bebé con un gato blanco en sus brazos.
Esto provocó una sonrisa más extensa en la heroína cazadora que nuevamente miro a su pequeña cuñada.

—Dai-chan. ¿Qué piensas con tan solo escuchar la idea de tener un sobrino?—Mitsuri lanzó una sorpresiva pregunta para la adolescente.

Esta pregunta pareció meter a la chica en una dimensión existencial, cuando tantas imaginaciones llegaron a su mente, se maravillo de dichas imaginaciones, haciendo que sus ojos brillarán en grandes estrellas.

—Pienso que sería estupendo... ¿¡Acaso estás embarazada!? ¿¡Es por eso que estás en la montaña con nosotras!? ¿¡Buscas ocultarlo de mi hermano!?—Dai pregunto sacando sus propias teorías, pero eso provocó una leve risa de la mujer.

—Nada se le escapa a tu hermano, quizás si estuviera embarazada, él se enteraría antes que mi misma. Después de todo no deja pasar absolutamente nada por su visión.—Mitsuri contesto en un tono calmado y sonrojado a la vez..

—¿Entonces?—Dai pregunto habiendo un silencio.. —Prometo por mi sagrada madre, por la tumba de mi sagrado padre que no le diré nada a mi hermano.—Dai comprendió la causa de ese silencio prometiendo no sacar nada de esta habitación.

—Esta bien aunque pensaba charlarlo con mi madre, pero supongo que aprovecharé esta hermosa noche de luna llena.—Mitsuri sin inconvenientes confío esto a la adolescente no llegando a dudar. —... Verás, cuando era una inocente adolescente sin muchos sueños de ser heroína, siempre tuve en mente tener una.. una familia numerosa.. numerosa en serio.—Mitsuri reveló, imaginando ser una ama de casa con una vida totalmente normal, con un esposo totalmente normal también.

—O..wow..—Dai susurro anonadada. –Seguramente piensas en tu carrera como heroína, ¿Verdad?—Dai pregunto, ciertamente dando en el punto.

—Si, como mi deber de heroína profesional, la idea de tener bebés se ve reducida. Son muchas responsabilidades en verdad. Sin embargo; Tengo 24 años, y me gustaría tener mi primer bebé antes de los 30, ser una madre todavía joven.—Mitsuri conto abiertamente, expresando todo con su adorable cuñada que le daba toda su atención.

—... ¿Estás pensando en retirarte?–Dai volvió a preguntar, queriendo ayudar a su cuñada a aclarar sus dudas.

—La verdad, solo es un pensamiento que da vueltas en mi cabeza aunque se detienen cuando pienso en las circunstancias.
Y considero que seré una mujer egoísta por querer retirarme porque deseo tener una familia. Muchas vidas dependen de nosotros.–Mitsuri volvió a expresar ahora de manera un poco cabizbaja.

—¿Consideras que mi hermano no podrá estar a cargo de su carrera por tu retiro?–Dai comento todavía más asombrada.

—Conociendo perfectamente a mi esposo; Él estaría a mi lado cuidándome en todo momento, y temo que también deje de lado su labor heróico, porque sé que estará siempre presente para nuestro bebé. Y sin él, las calles serían un caos de nuevo; Los demonios sin miedo a que los ataquemos, volverán a dañar caóticamente a las personas.
Todos los civiles presionarán a izuku para que los salve de nuevo. Y sé que eso lo estresarà al tener que decidir.—Mitsuri considero demasiado a su esposo en esto.

—… Oh..—

—No me molestaría estar de heroína un poco más, tener una amorosa familia más adelante, pero.. ¿Cuando nos retiraremos? Muchos héroes de retiran después de los 40 años.. y no se.. no quiero ser la causante de muchos problemas por desear algo. Un deseo egoísta.—Mitsuri menciono con el misma bajada de cabeza.

—Si en todo caso eso pasara. Que mi hermano sea presionado por la sociedad, ¿Lo apoyarías para que continuará su carrera de héroe?–Dai pregunto.

—Entendería perfectamente, sin embargo nuestro bebé quizás que no, después de todo tu hermano tiene muchos enemigos, demasiados enemigos. Esa es otra razón que me preocupa un poco. Pero aún así, no quiero que mi esposo sea como los hombres de películas que dejan a su familia por tener mucho trabajo, ¿Sabes? .. entonces la pregunta sería.. ¿Tener una familia en un momento crucial como este o esperar a los 40 incluso más de años? No sé..—Mitsuri volvió a comentar.

—Mitsu-chan. Si deseas un bebé, toma a mi hermano y llévalo a la cama, sin misericordia alguna.—Dai respondio para ser vista por su cuñada. —Te preocupa que mi hermano deje sus responsabilidades por tu deseo. Te preocupa que tú bebé tenga un padre ausente por la enorme carga de ser un héroe. Incluso te preocupa que crees un caos en la sociedad y en el mundo por tu deseo.. ¡Pero no te preocupes, recuerda que estamos nosotras!—Dai se señaló mientras con otro dedo señalaba a una neutral asuna.

—¿Eh?—Mitsuri dió a entender su confusión a dichas palabras.

—¡Nosotras nos encargaremos de su deber de mantener a los demonios bajo control, si los demonios se mantienen controlados, la sociedad no se verá perturbada! ¡Podremos mantener todo bajo control desde las sombras como los antiguos cazadores de demonios! Mientras nosotras mantenemos el país seguro, ¡Tú concéntrate en tener sexo duro con mi hermano hasta parir una criatura!—

Si su hermano sostenía una carga tan pensada como la misma sociedad y ella.
Ella se encargaría de darle a su hermano un poco de una vida normal como un padre normal.
Si ellos dos eran felices totalmente, ella estaba sin dudas dispuesta a morir con tan solo verlos a ambos contentos.

Él se había esforzado mucho para que ella y su madre tuvieran todo.
Ahora le devolvería ese favor, dándole todo a su hermano.

Una amorosa familia.

—Dai-chan..—Mitsuri comento sorprendida.

—Sin importar la enorme responsabilidad y carga. La mantendré. Mi hermano me crío para tener unos hombros de acero que mantendrá calmada está sociedad oscura, ¡Mitsu-chan, sé lo más egoísta que quieras, te apoyaré todo lo que desees!—Dai apretó sus puños para mostrar sus fuertes músculos de su diminuto cuerpo.

—Mitsuri-sensei, debes seguir tus objetivos. Si deseas tener una querida familia. No tardes demasiado. Ahora nosotras seremos las encargadas de tomar su puesto.—Asuna colocando sus manos en los hombros de una muy sonriente daiana ambas adolescentes miraron con confianza y determinación a la sollozante chica.

—¡Chicas son las mejores! ¡Waaaa!—Mitsuri sin penas se puso a llorar como una niña pequeña, abrazando a las dos adolescentes con mucha fuerza ambas se asfixiaron levemente...

—Solo tienes que ser un poco más paciente, Mitsu-chan. Tenemos que hacernos fuerte para hacernos cargo. Necesitaras entrenarnos mucho estos 14 meses. ¿Bien?—Dai aun unida en el abrazo con su cuñada, masajeo el rosado cabello de la mujer.

—¡Si, entrenaremos hasta rompernos los huesos y los pulmones, es hora de entrenar, ahora!–Mitsuri saco su un pie de las aguas termales.

—¿Qué? No espere sensei, iniciemos mañana a mañana, acabamos de despertar.–Asuna todavía adolorida por los atroces golpes de su mejor amiga, intento detener a su maestra pero ambas fueron arrastradas.

¡Inicia el entrenamiento de las cazadoras!

•Fin del capítulo –

Gracias a todos por leer este capítulo.
Espero que les haya gustado, cómo sabrán sacaré capítulo cada semana en ese mismo día, tal vez todos los viernes. Y si no es un viernes, puede que se extienda a un sábado o domingo.

Gracias por todo.

Hasta la próxima :u