Antes de que Iniciamos el capítulo.
Me gustaría dar un anuncio importante.
desde ahora empezaré a adelantar algunas cosas.
capitulo 28 está actualmente y falta demasiado todavía.
Por eso, daré un leve desarrollo a cada personaje que se presente,
No quiero adelantar todo forzadamente, espero que me acompañen en esta larga historia..
.
.
.
.
.

Madre.. ¿Dime quién te lastimó?

Izuku Midoriya se encontraba parado al frente de su madre y hermana menor,
su inexpresividad cargada con una seriedad brutal, hacia duda completamente de un ataque, si el más fuerte del grupo dudaba, todos dudarían en atacar, por otra parte,
La pequeña daiana tenía una enorme sonrisa en su rostro, no sabía el porque.. pero sentía que todo lo malo paso.

- Imouto.. dime.. ¿Quien lastimó a nuestra sagrada madre?

Dai al escuchar la profunda voz de su hermano, se puso en posición de soldado atrás de izuku,
toda la seriedad no antes nunca mostrada para la pequeña niña, la asustó más que los mismos demonios.

- ¡E-..el monstruo que está en el árbol, señor onii-sama!

La bebé nuevamente cayó a un lado de su madre, mientras tanto.. la visión de inko comenzaba a fallar, su cabeza daba vueltas y vueltas..
rompió un límite que ni ella misma sabía que tenía,
su poder fue caracterizado cómo uno bastante débil para el combate.. apenas y podía agarrar un muñequito..
pero suponía que era la fuerza de una madre cuando su cria estaba en peligro..
no obstante, volviendo a la realidad.. lo único que pudo apreciar es ver la espalda y el cabello largo de su bebé.

- I-..Izuku-chan... Gracias... Por... Llegar...

Inko se sentó contra un árbol, siendo ayudada por la pequeña daiana, la cuál se encontraba mucho más calmada,
Su querida madre estaba bien, su hermano mayor se encontraba con ellos, todo estaría bien en este momento..

Porque él ya estaba aquí..

- No te preocupes madre.. te agradezco yo.. ahora... Me encargaré de todo...

Izuku de un momento a otro, el poderoso filo de su katana se acercó al ojo del demonio causante de todo..

- ¡¡¡ROAAAAARR!!!

Dai se asustó por los desgarradores rugidos de los demonios, todos en sincronización totalmente enfurecidos por el infernal dolor que pasaban se abalanzaron contra un inexpresivo protagonista..
los ojos de la bebé brillaban por toda la acción que veían sus ojitos, ignorando completamente los brazos cortados o las cabezas volado, ver a su hermano mayor sin inmutarse ante los múltiples ataques.

Ella.. deseaba ser fuerte también...

Izuku agarró la cabeza de un demonio, estrellando la cabeza del monstruo contra el suelo, aún sosteniendo la cabeza de dicho demonio, enterró su cabeza en la boca del monstruo,
todos los demonios presentes tuvieron un desequilibrio por el dolor,
era como una llama que quemaba lo más profundo de su alma,
quemaba tanto que no pareciera que se detuviera ni en cientos de años.

- Respiración solar, primera postura - Vals..

Izuku con un corte limpió, quitó la cabeza de un demonio, pero..
Un brazo extremadamente largo, salió de una puerta repentinamente,
Izuku al ver ese ataque, bloqueo sin problemas el brazo, no obstante..
muchos más brazos empezaron a salir, pero está vez del suelo..

- ¿Mmm?... ¿Mmm?...

Izuku ladeaba su cabeza de un lado a otro, mostrando su confusión, las manos que cortaba no se regeneraba, pero.. no dejaban de aparecer por los suelos.

- Niño humano.. eso realmente... ¡¡DUELE DEMASIADO!!

Una cantidad de manos, empezaron a bajar hacia izuku, el cuál no tuvo problemas en esquivar cada ataque, alejándose bastante de su madre y hermana para que no sufrieran algún daño.

- Eres... Fuerte...

Izuku mencionó aún no mostrado alguna expresión, los demonios se acercaban a izuku con lentitud,
mientras el demonios de las manos largas emergía de la puerta con un poco de esfuerzo,
su tamaño era robusto, bastante enorme en pocas palabras,
alrededor de su cuerpo, habían brazos cubriendo su cuerpo,
sin darle mucha más importancia.
nuestro protagonista no retrocedió ni un solo paso, empezando a caminar lentamente hacia los demonios.

- Lastimaron a mí madre.. matar demonios no me da placer.. pero ustedes serán un caso especial..

Izuku ante la visión de los demonios desapareció, aparecieron al frente de la primera víctima, enterró su katana en la garganta, empezando a desintegrarlo rápidamente,
agachándose para esquivar su zarpazo, corta la cara del demonio atacante, el cuál también se empezaba a desintegrar por el ataque..
los demonios no llegaban a comprender cómo un niño humano lograba provocar tanto sufrimiento en ellos,
pero las llamas que salían de la katana, realmente quemaba hasta la última célula de su cuerpo..

Un dolor infernal, cómo si se los sumergieran en lava, siempre que intentaban abandonar la lava, volvían forzadamente a hundirse..

Izuku notó como una mano se acercó peligrosamente a él, sin problemas termino por cortarlo como si de mantequilla se tratará.
volviendo a su acción con los débiles demonios,
sin misericordia alguna cortaba los brazos y piernas, pero en ningún momento los decapitaba, sumergiendo más a los demonios en el sufrimiento eterno..

Izuku al no poder acabar con un demonio al ser interrumpido por las manos de aquel gran demonio, solo suspiro un poco..

- Primero acabaré contigo.. eres problemático...

- Humano.. te veo demasiado confiado.. no soy como aquellos demonios inútiles.. el amo me dará atención después de que...

En una ráfaga de fuego que apareció de la nada, el demonio quedó paralizado en su lugar, notando como su cuello poco a poco se deslizaba a un costado.

- ¿Eh?...

- Hablas mucho.. "Te veo demasiado confiado"

Izuku sin brindarle más importancia al demonio de los brazos, cuál maldecía con un inmenso odio, si dio la vuelta.. elevando su katana hasta su cuello,
dicha katana negra como la noche.. paso a una oscura carmesí,
sus ojos verdes profundos analizaba a cada demonio presente que intentaba huir por las puertas.

- Aliento Solar.... Nadie huirá de este lugar..

Nuestro protagonista sin alargar demasiado la cosa, simplemente por la preocupación por su madre, empezó a decapitar a cada demonio que intentaba huir,
las puertas tampoco se salvaban del destino de los demonios, siendo cortados con mucha simpleza por izuku.
Inko, la cuál todavía se encontraba recostada en el árbol, solo podía ver las llamas producidas por su hijo..
ahora comprendía... su niño podía sobrevivir por su cuenta..

Observando a un protagonista sobre una pequeña pila de demonios decapitados, izuku seguía acabado con los restantes..
Dai por otra parte, seguía apreciando todo con sus ojitos brillando con mucha admiración,
la fuerza de su hermano mayor, ella también ansiaba tenerla, así podría proteger a su madre de los malvados monstruos que la atacaron.

Izuku atravesó el corazón de un demonio, bajando su katana hacia abajo, termino partiendo a la mitad de dicho demonio, observando como el corte provocaba la evaporación del demonio,
esquivando un puñetazo, devolvió dicho puñetazo, no sirvió de nada ese puñetazo que lanzó,
pero un simple corte al cuello, finalizó con el demonio que parecía pelear bien cuerpo a cuerpo.

Todo el cuerpo de izuku, se encontraba bañado en sangre de los demonios.. sin importante mucho, comenzó a pisar los cuerpos, caminando hacia su familia.

- ¡ONII-SAMA, ESTUVE MUY ASUSTADA, WAAAAH!

Dai no dudo en abrazar la pierna de su hermano mayor, en busca de consuelo por todo lo ocurrido,
Izuku analizo la cabecita de la bebé, la cuál sangraba un poco,
Causado por el choque del auto contra los escombros, no obstante.. el mayor impacto lo recibió una delicada inko midoriya,
la mencionada se encontraba realmente agotada por todo,
su visión se vio afectada, lentamente perdía su visión..

- Madre.. descansa.. todo está bien..

Inko la cuál no pudo oír correctamente las palabras de su niño, atrás del protagonista pudo ver a los despedazados demonios..
Viendo que todo se encontraba controlado por el chico.

- ... Izuku... Oigo borroso...

Izuku sin esfuerzo, cargo a su madre en sus brazos, pasando su vista a su hermana menor mencionó:

- Hermana, quédate cerca mío.. Madre, tu descansa un poco, todo estará bien desde ahora..

Ante las palabras con calma de izuku,
Inko cerró sus ojos lentamente, perdiendo totalmente el conocimiento.
no descansaba correctamente por estar tan preocupada por su niño..
sin embargo.. Izuku le demostró que no tenía el porque desesperarse,
ella no debería estar preocupada por izuku, sino por los mismos demonios,
sus esfuerzos por mantener a su pequeña princesa dio sus frutos..

.. ROAAR!

Izuku bajo su mirada, observando al demonio que se atrevió a atacar a su madre, casi olvidaba su existencia.. bajando con delicadeza a inko, saco su katana con lentitud, acercándose lentamente a un aterrado demonio, el cuál intentaba escaparse..

- Tu ojo no se regenera.. ya veo...

- ¡¡¡ROAAAAR!!!

Izuku sin misericordia alguna, apuñaló el otro ojos, destrozando dicho ojo, sacándole los dos brazos en dos rápidos tajos,
Nuestro protagonista veía como el demonio se retorcía del dolor..

- Te quedarás aquí.. para toda la eternidad..

Izuku dejo caer otro árbol justamente encima del demonio, está vez.. el demonio no pudo moverse, era demasiado débil.. no tenía sus dos ojos ni sus dos brazos..

- La luz solar no llegara a ti..

Izuku tomo el mentón del demonio, el cuál intentaba darle un mordisco, pero su lengua había sido cortada..

- Tampoco podrás dañar a nadie.. nunca más..

Izuku en un tajo, termino cortando la mitad de la cara del demonio, dejando caer su mandíbula al suelo..

- Nunca más...

Izuku se dio la vuelta, dejando a un moribundo demonio en ese lugar, para siempre..
nuestro protagonista llego hasta su madre, cargándola nuevamente en sus brazos,
Dai con una de sus manitas, agarro con mucha firmeza el kimono de su hermano mayor,
dándose cuenta de lo tenebroso y oscuro del bosque..

«...»

Izuku veía a su madre descansar calmadamente,
por suerte, pudo ver qué todo circulaba con naturalidad, el sobreesfuerzo de inko la agotó por completo, un buen descanso era más que suficiente, no obstante, lo único verdaderamente dañado, era el tobillo de la mujer..
ahora no podía llamar a un doctor, nadie tendría un valor para abandonar la seguridad de los hospitales/casas.

- O-..Onii-sama.. ¿Mamá estará bien?

La pequeña daiana, aún derramaba pequeñas lagrimitas, no deseaba ver mal a su madre,
quería el consuelo de su hermano mayor, el era el único que la podía calmar en estos momentos,
nuestro protagonista sabiendo exactamente que hacer, cargo en sus brazos a la bebé,
la cuál se oculto en el cuello del chico.

- Por supuesto que si.. hermana menor, verás que mañana estará como nueva, nada grave le pasó.. así que calma, calma..

Izuku camino hasta la sala de estar, sentándose en el sofá, empezó a acariciar el cabello de la bebé con mucho cuidado..

- ¿Quieres saber un secreto?..

Izuku mencionó con mucha calma, mientras tanto la pequeña niña asentía un poco deprimida y asustada por todo lo ocurrido.

- Yo.. le prometí a nuestro padre que las iba a cuidar.. que nadie les llegaría a ser daño.. por eso imouto.. nada malo te pasará, porque siempre estaré para ti..

- ¿Y.. y si los monstruos me quieren comer de nuevo?

- Ningún monstruo te va a comer.. no si yo puedo evitarlo.. nunca romperé esa promesa con padre.. así que descansa bien hermanita, yo estaré cuidándote en todo momento.

Dai al estar en los cálidos brazos de su hermano, sollozo un poco, pero su miedo de ser devorada por los monstruos lentamente se iba gracias a izuku,
nuestro protagonista se quedó en todo momento cargando en sus brazos a su hermana menor.
necesitaría llevarla a una psicólogo infantil por lo ocurrido,
evitar que la bebé tuviera problemas más adelante.

-.. Padre, casi rompo mí promesa.. sino hubiera sido por Yue.. en estos momentos no tendría a madre y imouto de mí lado.. lo siento mucho..

Izuku observo con inexpresividad la ventana..
su corazón se encontraba triste por lo ocurrido...
cuando recibió la noticia por parte de su mascota, un miedo lo invadió totalmente,
agradecía demasiado que su madre tumbara aquel árbol, sin el fuerte estruendo, no la hubiera podido ubicar correctamente.
por suerte, todo resultó bien..
las dos mujeres más importantes de su vida, se encontraban bien..

- Yue.. Muchas gracias.. te daré un premio por lo que haz hecho..

- ¡Un gusto, Izuku-sama!

Yue la cuál se ubicaba encima del televisor, veía con atención a la bebé, ambas compartían una bonita relación entre ama/mascota,
por eso la preocupación de su bienestar.

Ahora todo contra los demonios..
se había vuelto mucho más.. personal..

«....»

Corriendo por la casa con mucha rapidez,
una niña adorable tenía en su rostro una enorme sonrisa con un sonrojo de mucha emoción.

Daiana Midoriya..
Edad..: 4
Don..: X
Habilidad: Ser Tierna.. Según ella.

Dai se aferró a la pierna de su madre, demostrando lo contenta que se encontraba este soleado día.

- ¡Mamá, es hora de ir a ver mí don!

- Bien, bien.. espera un segundo pequeña..

Inko Midoriya
Edad..: 31

Inko guardo un plato de comida en el refrigerador,
en este lapso de tiempo, ocurrieron algunos acontecimientos,
después de esa noche en la cuál casi perdían la vida,
Inko presenció en primera fila el poder de su niño,
aunque eso en las siguientes noches no le quitó la preocupación,
pudo confiar en el enorme poder de su hijo,
pudiendo llegar a descansar mucho mejor.

Dai quedó con algunos traumas por eso,
se negó por un tiempo abandonar su casa sin su hermano mayor,
pero pudo recuperarse rápidamente gracias a un doctor por parte de su querido tío.

Los demonios después de ese acontecimiento, empezaron a ser exterminados más rápidamente por izuku,
el cuál en serio se tomó demasiado personal el asunto,
lastimosamente su exterminio no logro atraer a ninguna "Inferior" pero eso no lo detuvo de su deber.

Su entrenamiento en estos 2 años, paso a ser el dominio de sus técnicas, creando nuevas con el pasar del tiempo,
pero eso lo veremos en estos momentos.

Volviendo a la actualidad,
madre e hija, se encaminaron hasta un pequeño dojo en el patio de su vivienda,
Dai emocionada ingresó al lugar, viendo a su hermano mayor entrenar.

Izuku Midoriya..
Edad..: 12 años
Habilidad: Espadachin.. Boxeador.

Izuku, estaba parado al frente de su mejor amigo..
Yamato Kanroji ambos amigos, llevaban guantes de boxeo, estando en guardia,
los dos se lanzaban puñetazos sin tregua alguna.

- ¡Vamos mocoso! ¡¿Eso es todo?! Siendo tan débil en puños, ¡¿Quien protegerá a mí princesa?!

Izuku se agachó para devolver un golpe a las costillas, eso dejo sin aire al hombre, el cuál se intento recuperar del golpe.

- ... Un segundo.. Yamato-dono.. ¿Madre, hermana?

Izuku esquivo otro puñetazo, ignorando al hombre que intentaba golpearlo, nuestro protagonista le brindó toda su atención a las dos mujeres.

- Izuku-chan, te deje comida en el refrigerador, nos iremos al hospital..

Inko comentó teniendo en brazos a una brillante daiana.
Dai no dejaba de brillar por la pura emoción de saber cuál sería su poder.
viendo a su hermano con una sonrisa de oreja a oreja.

- ¡Seguro tendré un poder súper genial, onii-sama!

- Estoy seguro de eso, pequeña imouto.. cuida de madre.

Izuku levantó su mano, viendo como ambas mujeres se retiraban, nuestro protagonista volvió a voltear justamente cuando recibió un puñetazo en la cara que lo termino tumbando contra el suelo bruscamente.

- ¡JAJAJA, LO LOGRÉ!

Yamato celebro golpear en la cara a un niño,
dando un pequeño baile de victoria,
Izuku se sentó en el suelo inexpresivo, viendo a su amigo festejar la victoria.

- Bien hecho, Yamato-dono.. una victoria es una victoria..

Aunque se encontraba inexpresivo, izuku daba aplausos por la victoria de su amigo,
se preocuparan de dónde aprendió boxeo..
aprendió gracias a su antiguo capitán de su antíguo equipo,
Haruka, el cuál le enseñaba algunas técnicas en el boxeo, no obstante.. por ahora solamente se centraba en practicar su kenjutsu,
pero de vez en cuando también practicaba boxeo junto a su mejor amigo,
cómo en estos precisos momentos.

- Te descuidaste, eso me dio la grandiosa victoria que tanto me merezco.

- Después de mucho tiempo, logra vencerme.. Yamato-dono..

- Solo te dejo vencerme.. pero no más.. desde ahora no me voy a contener.

Yamato con una sonrisa engreída en su rostro, negó con el dedo, aún orgulloso por su victoria.

- Wow.. tiemblo del miedo, Yamato-dono no se va a contener.. ayuda porfavor..

Izuku dramáticamente puso su brazo sobre su frente, demostrando todo su sarcasmo ante las palabras del hombre.

- Mocoso..

Yamato golpeó sus manos, preparado para el segundo round..

- Ven con...

Antes de que pudiera terminar, se quedó paralizado al ver el puño del chico enterrado en su estómago,
con los ojos bien abiertos,
intento reaccionar lanzando un izquierdazo, sin embargo... no fue complicado para nuestro protagonista esquivar.. devolviendo el puñetazo al mentón,
Yamato comenzó a ser brutalmente golpeados por un niño.
Izuku lanzaba una ráfaga de puñetazos al azar por todo el cuerpo del hombre, que solamente podía cubrirse ante la poderosa ráfaga.

- ¡Yo también puedo!

Yamato dejo de protegerse, empezando a devolver la ráfaga de golpes, aunque ningún puñetazo llegaba a dar al niño,
Izuku al tener donde golpear, solamente aumento su velocidad de los golpes.
.
.
.
.
Un fatigado yamato, se encontraba aún de pie,
mientras aún intentaba golpear al protagonista, su último golpe por el extremo cansancio,
fue con tanta lentitud hacia izuku, el cuál lo termino bloqueando con su frente sin problemas.

- Te... Di.. un....golpe... Yo... Ganó... Otra... Vez.. ¡¡JAJA!!

Yamato después de soltar una fuerte pero corta risa, se negó caer ante izuku, permaneciendo con una sonrisa agotada,
nuestro protagonista se quedó inexpresivo por su segunda derrota ante el hombre.. no lo logro tumbar a través de puñetazos.

- Eres fuerte.. Yamato-dono.

- No importa la adversidad, debes mantenerte firme.. chico..

Yamato aún mantuvo su sonrisa, mientras se sacaba los guantes de boxeo, viendo la hora en la televisión del lugar, noto que era el momento de ir a buscar a su princesa.

- Mañana... uf~ estoy agotado.. a lo que iba.. mañana, vendrá mí niña.. así que... Espero que la recibas bien..

- Cómo siempre, Yamato-dono, no sé preocupe.. su hija puede empezá a vivir aquí, si así lo desea.. no me hago ningún problema.. puede dormir conmigo.

- Si, si, lo que digas.. amigo, no le digas eso a mí niña o se desmayara de la pena.

Yamato camino hasta las botellas de agua,
ver todo el gimnasio en el que se encontraba, silbó del asombro, todavía no podía creer todo el avance de izuku, al principio su casa se caía a pedazos, ahora tenía hasta un gimnasio en su vivienda.

- ¿Cómo conseguiste tanto dinero, chico?

- Mí trabajo.. me da mucho..

Izuku también agarro una botella de agua, viendo atentamente el gimnasio,
él junto a su querida madre, usaban este lugar para mantener siempre en forma,
no fue problema comprar materiales para armar un pequeño dojo, tampoco fue problema comprar las máquinas de ejercicio,
aunque mayor parte del tiempo, izuku era el único que casi siempre lo usaba.

- Aún no sé de qué trabajas.. no debe ser algo peligroso, eres un niño después de todo, pregúntale a tu jefe si me da un puesto.. ¿No?

Yamato comentó con una sonrisa despreocupada,
su trabajo era jodido, sus compañeros eran fastidiosos, su jefe le exigía demasiado.
liberaba estrés con los deportes,
pelear con izuku era una manera excelente para desahogarse y no destrozar a su patético patrón..

- Lo tendré en cuenta..

- Tengo una buena carrera universitaria, una experiencia laboral espléndida, soy un buen esclavo :D.. dile eso a tu jefe.

- Anotado..

Izuku comentó, su amigo era fuerte.. tanto en peleas cuerpo a cuerpo.. poseía un talento en la katana realmente bueno,
podía llegar a ser un buen guardaespaldas de la familia ubuyashiki,
Estaría seguro de que su tío le pagaría excelente por ese servicio.

Ambos después de tomar un pequeño descanso,
Izuku acompañó a su amigo hasta la salida de la casa,
Yamato subió al coche aún demostrando su cansancio, los golpes recibidos por izuku, dolían demasiado.
pero el mismo lo mencionó.. debía mantenerse firme.. y evitar llorar como un bebé.

- Yamato-dono, ¿Puede darle esto a su hija?

Izuku le extendió un ramo de flores y una carta..

- Claro..

- No lea la carta.. lo conozco..

Izuku comentó inexpresivo,
su poesía enamoraría a cualquier ser humano,
no quería que su mejor amigo tuviera ideas raras,
Yamato con la misma inexpresividad que izuku, agarro la carta, dejando todo en el asiento de al lado.

- También este peluche de oso, tuve que esconderlo de imouto.

Yamato agarro el muñeco con un poco de esfuerzo, no era de gran tamaño, pero sin dudas era bastante grande.

- Quiero entregarle sus dulces favoritos..

- Creo.. Creo que es suficiente chico..

- Porfavor.. solo debe entregarle todo.. ¿Cómo voy a casarme con ella sino la cautivo?

Izuku entregó una caja con forma de corazón,
agachándose un segundo, agarro la última cosa que tenía para la niña.

- También está miel, las señoras abejas me dejaron tomar un poco de su miel.. así que ella tendrá que agradecerle a las señoras abejas por eso

Yamato volvió a asentir, mientras agarraba los regalos del niño para su princesa,
después de que izuku insistiera tanto en casarse con su hija,
dejo de reprocharle algo, la insistencia de izuku lo convenció,
en estos últimos años, su hija recibió muchos regalos por parte de izuku,
Izuku también recibió regalos por parte de mitsuri, los cuales mayormente eran dibujos,
dibujos venerados por izuku.

Izuku poco después de darle los regalos, movió su mano en despedida, viendo como el auto se retiraba del terreno.
volviendo a su pequeño gimnasio, se dispuso a seguir entrenando arduamente con algunas de las máquinas.

«...»

Dai teniendo una enorme sonrisa en su rostro,
la ilusión de tener un poder que sea capaz de igual con su hermano mayor,
se contenía para no gritar de la alegría por la impaciencia que poseía,
Inko, la cuál sonreía de la misma manera, solo acariciaba el cabello de su bebé.

- Bien.. Señora midoriya.. después del análisis de sangre..

Dai al ver a doctor, sus ojitos solo brillaron mucho más, pero..

- Su hija no posee un don... Lo siento mucho.

La niña, la cual aún mantuvo su sonrisa, sus ojos demostraban el shock, quedando totalmente paralizada en el regazo de su madre,
no tenía un don.. ¿Cómo lucharía contra los monstruos al lado de su hermano?
ese era su único sueño..
si no poseía un don... ¿Su hermano mayor la odiaría?
ignorando la conversación de su madre con el doctor, su cabeza estaba enredada por los pensamientos negativos..

- Pero eso no tiene sentido, señor doctor.. mí niña debe tener el don de..

Inko se quedó en silencio por unos segundos, ¿Acaso la bebé no era capaz de predecir acontecimientos del futuro?
que su princesa no tuviera un poder era absurdo, aunque ansiaba que no lo tuviera,
contando que era una maldición..

- Lo siento señora, no pudimos detectarlo, pero la mantendremos informada.. es una verdadera lástima.

El doctor se sintió un poco mal por la niña,
la cuál parecía tan desilusionada, cómo los niños de estos tiempos, todos ansiaban ser poderosos héroes.

- ¿Deseabas ser una heroína, pequeña?

- ... No.. yo solo.. quería ser tan fuerte como mí hermano mayor.. ¡Ayudarlo con los monstruos!

Dai no pudo resistir más, rompiendo en un fuerte llanto por la decepción que se acababa de llevar, ¿Allmight? ¿Endeavor? Ningun héroe sé comparaba con su hermano mayor..

- .. Gracias por la atención, doctor.. nos retiramos..

Inko tomo en sus brazos a la pequeña daiana, la cuál no paraba de llorar,
estando bastante triste por los acontecimientos, recordó algo de suma importancia..

Su hijo tampoco poseía don..

Con eso en mente, inko puso una diminuta sonrisa,
inko era consciente que la niña admiraba a su hermano mayor,
por eso ella no iba a decirle que su hermano no poseía don,
sería el mismo izuku quien le diría, quizás eso animaría muchísimo a una dolida daiana.

«...»

Una decepcionada daiana, ingreso a su habitación lentamente..
Ella no tenía un don... ¿Cómo vería a la cara a su hermano?
Encendiendo su computadora, la pequeña daiana comenzó a ver unos videos de fútbol..
intentando contener las lágrimas por la triste noticia, eso la destrozó por completo.

Inko la cuál se ubicaba en la puerta, se encontraba decepcionada de ella misma..
sintiéndose culpable de no poder darle un poder a la niña, que solamente quería luchar a un lado de su máxima inspiración.

- M-..Mami.. ¿T-tú crees que pueda ser i-igual de f-fuerte que o-onii-sama?

- ¿Porque no le preguntamos a tu hermanito?

Inko comento viendo todas las lágrimas que salían por los ojitos de la niña.

- Dame un segundo bebé, verás que tu hermano tiene una sorpresa que contarte.

En el gimnasio de la casa, izuku se encontraba trotando en la caminadora, mientras observaba con atención la televisión, las noticias de Japón reportaba que la cantidad de fallecidos por los demonios bajo sorpresivamente en estos 2 años,
aún con su neutralidad, pensaba en algo importante.
quizás dar un golpe a los demonios.. que capte la atención de la máxima autoridad,
pero.. dudaba que en su estado pudiera vencer al rey de los demonios,
su máximo potencial no fue desatado,
tenía muchas limitaciones por su edad y condición física.

- Izuku-chan..

La voz de su madre, captó la atención de izuku que volteo para verla.. confundido por el semblante triste de inko, detuvo por completó su entrenamiento.

- Madre.. ¿Paso algo malo?

- Si... Dai-chan se encuentra mal en estos momentos.. fue diagnosticada quirklees..

Inko mencionó guardando el silencio por unos segundos, pensando en como continuar con sus palabras.

- Oh..

Esa fue la única respuesta cortante de izuku,
nuestro protagonista bajo un poco la mirada confundido por esa noticia.. su hermana tenía la capacidad de ver ciertos acontecimientos del futuro, ¿Ese no era un don?

- Ella te admira mucho cariño.. quizás algunas se tus palabras tengan mucho más peso que las mías.. ¿Puedes intentar subirle el ánimo?

- ... Claro, no será una tarea complicada.

Izuku se puso la parte superior de su kimono, empezando su pequeño viaje a la habitación de su hermana menor, aún lado suyo la acompañaba una triste madre..
la noticia de su princesa aún la mantenía triste.. más sabiendo cuál era el sueño de la bebé.

- Imouto.. Toc, Toc..

Dai al escuchar la voz de su hermano, se negó a voltear, viendo atentamente los partidos de fútbol, izuku solo lograba oír los sollozos de la niña.

- Hermanita, he oído la noticia..

- Perdón.. hermano.. seguro debes estar decepcionado de mí.. Snif...

- ¿Por qué lo estaría?...

Dai volteo lentamente su silla giratoria, observando a su hermano mayor, Izuku se sintió mal por ver la carita llena de lágrimas de su hermana menor.

- Yo solo.. quería pelear con los malos a tu lado.. onii-sama.. ¿T-tú crees que pueda ser fuerte? Snif.. C-Como tú

- Por supuesto que si, imouto.. puedes ser mucho, mucho más fuerte que yo..

- P-pero... N-n-no tengo un don.. o-onii-sama..

- Yo tampoco tengo un don.. hermanita..

Los ojitos de la niña al oír eso, saltaron de la impresión, Izuku subió sus hombros con un poco de desinterés en si tenía un don o no, toda la fuerza que poseía, la consiguió con mucho esfuerzo,
todavía se seguía esforzado por un solo motivo..

- Solo estas mintiendo para hacer sentirme mejor.. eres malo, onii-sama..

- Es completamente real, pequeña hermanita.. pude desarrollar mí propio don.. genial, ¿No? Si yo puedo.. tu también puedes.

- ¡¿Ese fuego genial que sale de la katana, no es un don?!

Dai empezó a dar pequeños saltitos, sus ilusiones rápidamente volvían a ella.
si ella también podía realizar ese poder, su sueño de pelear a un lado de su hermano, llegarían a ser realidad.

- No.. no es un don, con mucha práctica.. todos podrían llegar a realizarlo.. ¡Yo, seré tu maestro!

- ¡¡SIIII!! ¡¡VAMOS A PRACTICAR ONII-SAMA!!

Una flecha de felicidad golpeó a la niña, devolviendo toda la alegría a la pequeña daiana,
esa ilusión volvía a renacer en ella,
ahora su maestro sería su hermano mayor..
este día fue no fue realmente bueno ni malo..
ahora.. ella también podía ser una espadachina.

Izuku cargo en sus brazos a su hermana menor, volteando a ver a su madre, levantó el pulgar, su misión de animar a la niña, resultó ser un pleno éxito.

«Ese mismo día»

La niña todo ese día, fue consentida por su hermano y madre durante casi toda la tarde, jugando con ella con el balón,
o viendo videos de fútbol de algunos jugadores reconocidos,
Izuku tuvo que calmar la emoción de la niña al querer entrenar,
Daiana todavía no recibiría un entrenamiento,
aunque esa noticia Daiana no lo tomó muy bien,
acepto la condición si su hermano le dejaba jugar con su consola, cosa que izuku acepto sin ningún inconveniente.

Actualmente, en la cocina de la casa,
Izuku estaba sentado sobre una mesa, viendo como su madre cocinaba.

- Bien, Izuku-chan.. ahora que la pequeña se encontra mejor.. tengo al que decirte.

- ¿Si, madre?

- Empezarás la escuela pronto.. así que pasado mañana, iremos a comprar tus útiles para la escuela.

Inko mencionó cortando un tomate, izuku ante la mención, lo proceso por unos segundos.

- Pero madre.. tengo noches ocupadas, no puedo simplemente dejarlo..

- Lo siento, pero la decisión fue tomada.. tendrás que dejar de pelear por un tiempo.. así que le avisaré a kiriya-kun de esto..

Inko tuvo la intensión de acabar la discusión,
pero.. izuku se negó un poco a aceptar eso

- Madre, si dejo esto.. los demonios empezarán a reproducirse de nuevo, ¿No has visto las noticias? las causas de muertes por dos demonios disminuyeron.. todo el esfuerzo de dos años y medio se irán por la borda..

- Entonces armen un equipo o no sé, quiero verte con estudios pequeño.. si un día acabas con todos los demonios, ¿A qué te dedicaras?

- Un equipo..

Izuku puso una mano en su mentón,
la idea de hacer un equipo que tuviera su técnica, no sería una mala idea,
los demonios serían erradicados con más facilidad y abarcaría más terreno en el país.
.
.
.
.
.
.
.
.
- Entonces... ¿Un grupo?

En una habitación, izuku se encontraba al frente de su tío Kiriya Ubuyashiki.
ambos teniendo miradas serias en el otro, una reunión en secreto sin soldados, ni científicos locos..

- Correcto.. a diferencia de los soldados, sus armas no pueden dañar a un demonio.. no obstante, si un equipo supiera dominar mis técnicas, el cuál.. pudo no solo asesinar a un demonio, sino también dañar hasta la más diminuta célula.. sería beneficioso para Japón..

Izuku dio argumentos que dejó pensativo a su patrón,
los nuevos podrían trabajar.. y el podía concentrarse en sus estudios,
no pensaba de decepcionar a su madre no yendo a una escuela, quizás quería que hiciera amigos principalmente.

- Tu madre quiere que estudies.. comprendo, pero.. ¿Tendrás tiempo para entrenar a los nuevos? con una diminuta explicación, debería ser más que suficiente.

Kiriya comentó.. la idea de tener un grupo con las mismas habilidades que izuku,
Izuku no tendría problemas en tomarse un largo descanso y tener una vida como un adolescente normal.
Imaginándose a más izukus en un solo grupo, sería realmente abrumador.

- Puedo darles una explicación de cómo usar las habilidades.. también.. cómo entrar al mundo transparente.. no sería un inconveniente..

- Pensé que la técnica te la ibas a reservar para vos..

- No tengo problemas en enseñar mis técnicas.. mientras sean buen usadas, estaré contento de ver la vida florecer de nuevo con la derrota de los demonios... Entonces.. ¿Que piensas?

- Bien.. iniciaremos el proyecto.. .

Pilares..
.
.
.
Fin del capítulo.