Luego de la feliz mañana que había pasado con Sadie, en casa me esperaba el regaño del año. Louis me había estado llamando todo el día anterior, y yo de imbécil lo había ignorado completamente.

La situación era que no habíamos acordado que me quedaría con él, así que le dijo a mis padres que me había ido de su casa más o menos a las 7:00 PM, lo cual era un problema, ya que no me aparecí en ningún momento.

Mis padres me llamaron de igual manera que Louis, y también los ignoré. Ahora me encontraba en el comedor, mirando a cualquier lado menos a mis padres.

-¿Entonces..? ¿Cuál es tu excusa, Millie?- Preguntó mi padre después de un gran silencio.

-¿Excusa de qué?- Me hice la desentendida.

-No finjas que no sabes..- Habló mi madre sobándose el entrecejo.

-Pues no lo sé, ¿a qué se debe esto?.

-No llegaste anoche, y no estabas con Louis después de las 7, ¿en dónde estabas?- Suspiré mirando hacia la mesa.

-Estaba..

-Conmigo.- Giré el rostro de inmediato, encontrándome con la mirada de Lilia. Sonreí. -Lamento no haberles informado, pero tuve un problema con mi casa y Millie se ofreció a ayudarme.- Caminó a paso lento hasta llegar a mi lado.

-En todo caso, igual debieron avisar.- Dijo mi padre sin más. Hice una mueca y volví a mirar la mesa.

-Para la próxima lo haremos, lo lamentamos.

-Sí, perdón por no avisar..- Murmuré. -¿Ya puedo irme a mi habitación?- Mis padres asintieron no muy convencidos con la situación.

Cosa de la que no los culpaba, a pesar de que mi contexto es que no deben enterarse que hablo con Sadie, para ellos nada de esto sucede, así que su preocupación recae en lo que me pudo haber pasado.

Me levanté de la silla en cuanto pude. Tomé la mano de Lilia y la llevé a mi habitación casi corriendo. Una vez dentro del lugar, me miró con una ceja levantada, y un semblante curioso, pidiendo a gritos una explicación de a dónde carajos había ido.

-Debes contarme qué pasó, porque no te salvé el trasero en vano.- Asentí cerrando la puerta con seguro. -¿Así que..?- Suspiré y me recargué en la puerta.

-Sadie me besó, luego yo la besé, después pasamos horas besándonos y... Dormimos juntas.. y fue maravilloso todo, en serio..- Suspiré de nuevo, esta vez como una enamorada.

-Espera... ¿En serio?- Sonrió con amplitud.

-Me siento muy feliz, Lilia...- Sonreí de igual manera.

-Esto es maravilloso, Mills.- Caminó hacia mí de nuevo. -Todo será como antes, y podremos arreglar todo y... Estoy feliz por tu felicidad.- Sonreí confundida.

-¿Arreglar todo?.

-Luego lo sabrás..- Levanté una ceja.

-¿Por qué no ahora?.

-Porque estás feliz y no pienso meterme con eso.

-Hmm... Bien, pero tendrás que contarme de cualquier forma.- Asintió. -Ahora mismo solo quiero ducharme y, quizá llamar a Sadie.- Rió negando con la cabeza.

-No te cansas de ella, ¿verdad?- Negué inmediatamente.

-Nunca lo haré.

[...]

26/08/2020

Respiré hondo intentando calmar mis nervios. No había dormido bien la noche anterior, no por nada malo, si no que, no dejaba de pensar en la pelirroja. Invadió mis pensamientos apenas caer la noche, y pasé horas imaginando escenarios ficticios a su lado. Soy una maldita cursi.

Finalmente terminé por recordar más cosas, todo gracias a divagar por mis pensamientos. Aprendí que los apodos que teníamos eran sumamente importantes para ambas, así que decidí retomarlos.

Parte de eso me tenía en un manojo de nervios. Había pensado en llamarle Dodger en cada ocasión que se presentara. Hoy por ejemplo, tenía la idea de cómo lo haría, todo con tal de ver su rostro enrojecer (cosa que me gustaba mucho).

Logré ver a la pelirroja a lo lejos, guardando sus libros en su casillero y leyendo cada portada de éste, completamente distraída. Sonreí enternecida y emprendí mi camino hacia ella. Una vez estuve lo suficientemente cerca, me incliné un poco para adelante.

-Buenos días, Dodger..- Susurré cerca de su oído. Me separé luego de escucharla suspirar. Sonreí mirando su semblante sonrojado.

-Jammie, casi me desmayo..- Rió nerviosa.

-¿Fue mucho? Pensaba que era buena idea retomarlos.- Me recargué en los casilleros de junto.

-El apodo está bien... Solo que me sorprendiste..- Carraspeo y cerró su casillero. -Buenos días a ti también, jam jam.- Sonreí ampliamente.

-¿Qué tal tu noche?- Hizo una ligera mueca.

-No tan buena, dormí mejor estando contigo.- Suspiró. Miré a ambos lados del pasillo y con lentitud acerqué mi mano a la de ella, hasta tomarla por completo. Su sonrisa creció a lo que la miré como idiota.

-Me pasó lo mismo..- Susurré.

-Quizá debamos repetirlo algún día.- Murmuró apartando la mirada ligeramente.

-Si... Debemos hacerlo, definitivamente.- Rió por lo bajo y volvió su vista a mí.

-Te ves muy linda hoy..- Se acercó un poco más a mí. -Bueno, en realidad siempre te ves linda, pero me gusta cuando haces eso con tu cabello..- con su mano libre, retiró un par de mechones de mi cabello que estorbaban en mi rostro. -te ves adorable con dos coletas.- Susurró. Deslizando lentamente sus dedos por mi mejilla. Todo esto sucedía con su vista directa a mis ojos.

Los ojos de ambas estaban conectados. Me perdí en cuestión de segundos. Lo primero que había captado mi atención de ella, siempre fue su mirada, tan expresiva y maravillosa. Mi supuesta admiración por sus ojos se había convertido en una adoración. Estaba completamente atada por ella.

-¿Qué me haces, Dodger?- La oí suspirar.

-Lo mismo que tú a mí..- Susurró. -Adoro tus ojos.

-Y a mí me encantan los tuyos.- Sonreímos a la par.

-Ejem, si siguen así moriremos de diabetes.- Nos separamos lentamente y miramos a nuestro lado. La castaña teñida, mi enemiga mortal, me miraba con una ceja levantada. -Agh, Brown.

-Agh, usurpadora.- Sonrió. Miré a la chica a su lado y fruncí el ceño. -Chiara.

-Hola cariño.- Sonrió dulcemente. Seguía sin comprender cómo la dejaban entrar aquí si ya ni siquiera estudiaba.

-Chicas, que milagro verlas.- Habló Sadie. Bajé un poco la mirada y sonreí al notar que nuestras manos seguían juntas.

-Lo mismo te digo, Sink. Te desapareciste un día entero y te perdiste de muchas cosas, ¿dónde quedó tu espíritu de señora metiche?- Reí por lo bajo.

-Estaba ocupada.- Dijo entre risas. -¿De qué tanto me perdí?- Levantó una ceja. Sophia y Chiara se miraron con una sonrisa, y posteriormente se tomaron de la mano.

Levanté una ceja procesando de inmediato. Sonreí con amplitud. Sabía que esas dos tenían algo. Al contrario de Sadie, que se quedó sin entender por un par de minutos.

-No entiendo..- Reí mirándola.

-Mejor para mí.- Dijo Sophia, acto seguido Chiara la miró con una ceja levantada. -Perdón, cariño. Era una broma.- Reí.

-De una ala, ¿eh?.

-Cállate Brown, estás peor.

-Si, y me da orgullo.- Me sacó la lengua. -Infantil.- Levantó el dedo del medio, abrí la boca ofendida.

-Ni se te ocurra decir nada.- Fruncí el ceño.

-Esperen... Wow, ¿Chiara y tú..?- Finalmente captó. -¿En qué momento-?

-Te dije, te pierdes de tantas cosas en un solo día...- Susurró la pelinegra. -No estamos saliendo oficialmente, solo es... Una prueba.

-Me gustan las pruebas gratis.

-Sophia..

-Perdón cariño.- Volví a reír.

-Gobernada.

-Te dicen.

Guardé silencio. Tenía cierto grado de verdad. Las tres rieron ante mi silencio, no me quedó más que levantar la vista con la poca dignidad que me quedaba. Cambié de tema y seguimos con la charla.

Tenía que buscar la manera de sacar a la pelirroja de mi mente, no iba a dejar que se apoderara de mí tan fácilmente.

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Hey!

Adivinen quién olvidó que era martes HSKDBSKDB

¿Qué les parece?:)

Espero les haya gustado<33

Recuerdenme el día en el que estamos porque estoy imbécil HAJSBDJS

Buenas noches<3

Sillie es real!
Y!

Sin más que decir: CHAO BYE!

By: Muffinisaurus_Rex8