|06| Alma Gemela
"El tio Magnus siempre se ve tan sonriente, le preguntare cual es su secreto"
La lluvia caia detras de los cristales, la noche se encontraba oscura y no se podia ver mas alla del vidrio.
Gota tras gota caia con velocidad, una fuerte lluvia habia llegado al mundo de los mundanos, era de madrugada y segun los reporteros, la lluvia duraria el resto de la noche y el dia.
Magnus observaba la lluvia detras del vidrio, de pie mientras tenia un brazo flexionado a la altura de su menton y el otro brazo lo usaba como soporte. Sus dedos se movian mientras tenia los ojos clavados hacia mas alla de la lluvia.
No habia podido encontrar el sueño, habian pasado tres dias desde que habia visto a sus sobrinos, donde se entero de lo sucedido detras del velo.
Aun tenia el secreto guardado, no se lo habia dicho a nadie, ni a su esposo ni a la madre de sus sobrinos.
Chris Bane (De soltero DarkLight) esposo del Gran Magnus Bane, ambos se casaron meses despues de Alexander y de Evie Lightwood.
Luego de la Gran Boda, Chris le pidio a su esposo permanecer juntos por toda la eternidad, por lo que Magnus le dio un hechizo para hacerlo inmortal, para que ambos permanezcan juntos y jovenes por siempre.
Despues de ese hechizo de inmortalidad, ambos adoptaron a Madzie y la criaron como su hija, la cual lo siguen haciendo.
Pero desde entonces, Magnus jamas menciono a Luna como su ex amante cuando trabajaba para los Bloodmane, hasta la Masacre de la Corona, donde todo se desvordo.
Los ojos de Magnus se cerraron con lentitud, cuando un recuerdo de hace años se apodero de toda su cabeza.
Residencia Bloodmane | 22 de Julio de 2011
La ceremonia de coronacion iba a dar comienzo en minutos, todos los hijos de Antonio Bloodmane se habian reunido de vuelta con sus hijos para la ceremonia de sus sobrinos.
Leonor y Elizabeth estaban recibiendo a los invitados en el Salon de la Corona, saludando a los 300 miembros Bloodmane que habian venido de todo el mundo y el Aureum.
Junto a los miembros familiares, habia un gran equipo de guardias de alto rango enviados por el Consejo Real para que nada pase en la ocacion.
Todos estaban desarmados, sin una sola arma.
¿Que podria salir mal?
Magnus Bane entro al Salon de la Corona con un impecable traje oscuro de terciopelo con detalles en bordo y un gran delineado en sus ojos, saludando a los invitados con mucha reverencia y respeto.
Mientras caminaba, vio a su amada compañera, Luna Liaru junto a Elizabeth y Will Winston, escuchando la conversacion de los Bloodmane.
No solamente era su compañera, era su esposa.
Se habian conocidos en el siglo XVIII cuando el entro a la Residencia Bloodmane (mientras que ella habia permanecido desde los comienzos de los Bloodmane en el siglo X), y desde entonces habian permanecidos juntos.
Tanto, que decidiron forjar su union para siempre, con el consentimiento de los Bloodmane.
Se casaron en el Aureum, frente a todo el Consejo Real.
Ya eran mas de trescientos años juntos, y seguian contando.
Pero habia otra verdad, y era que su esposa cargaba con otra gran sorpresa que lo habia sorprendido.
Ella estaba embarazada, de nueve meses.
Una noticia que hizo saltar a Magnus de la felicidad, siempre habia querido ser padre y ahora tenia la oportunidad de serlo junto a su esposa.
Continuando con la historia, Luna noto la presencia de su esposo y sonrio, para luego pedirle permiso a sus amos y comenzar a caminar hacia el.
Ambos se encontraron a medio camino del camino y juntaron sus manos.
-Estas hermosa, Luna Mia -susurro Bane, viendo el hermoso vestido blanco con piedras por todo su vestido y un hermoso cabello trenzado con mucho mechones sueltos.
-Tu no te quedas atras, Amor -acoto ella, caminando junto a el hacia el altar.
-¿Estas segura que no quieres ir a sentarte? No quiero que te canses -ella rio al oir su preocupacion.
-Estoy bien -acoto entre risas- Una hibrida milenaria puede hacer muchas cosas.
Ambos se detuvieron y las manos de su marido se posaron sobre el vientre de su esposa, sintiendo como su hijo pateo al sentir la magia de su padre.
-No se que haria sin ustedes, son el Corazon que me mantienen con vida -confeso, con una sonrisa.
Luna sonrio y poso una mano sobre su mejilla, viendolo con ternura.
Nada podria arruinarles su felicidad.
[...]
Caspian Bloodmane cayo sin vida sobre los brazos de su hermana Evie (de quince años), quien lloraba a gritos, pidiendo que regrese, pero aquel poderoso Elixir ya habia hecho efecto en todo su sistema.
Antonio Bloodmane, el Padre de Familia, se habia agachado a la altura de su nieta para abrazarla, interin que Leonor y Elizabeth Bloodmane se acercaban a sus hijos con dolor y lagrimas en sus ojos, sin saber que habia pasado.
Los caballeros de la guardia Real rodearon a los cinco Bloodmane sobre los escalones, mientras que los demas invitados que eran todos Bloodmane se alarmaron sin saber que ocurria.
Fue entonces que Antonio grito que todos los brujos y hombres buscaran en toda la residencia al bastardo que le habia hecho a su nieto.
Y asi fue, en un chasquido, los diez brujos presentes levantaron las salvaguardas y desaparecieron del Salon de la Corona para buscar al responsable, todos menos Luna quien se habia quedado con Evie.
Diez brujos no pudieron buscar en toda la residencia ya que era enorme de arriba a abajo, contando cada pasillo secreto y habitacion secreta, no llegarian a tiempo a buscar en todo el terreno de los Bloodmane, incluyendo sus jardines y cementerios.
Se habian dispersado, Will Winston fue el primero en desaparecer para revisar le entrada principal, quientras que los nueve brujos restantes buscaban en otro lugar, junto a los hombres de la guardia real.
Todo iba bien hasta que Magnus (quien estaba investigando los pasillos secretos de la planta baja) Vio que Jaime Adgar (parabatai de Leonor Bloodmane) sintio un dolor en su runa parabatai, como si lo estuviese quemando.
La residencia habia quedado en completo silencio, no se escuchaba nada, lo cual eso le parecia extraño al brujo.
Y ahi mismo, Magnus acompañado de Jaime decidieron ir corriendo de vuelta al Salon de la Corona para saber que estaba pasando, debido a que no se podia oir nada en lo absoluto.
Pero cuando habian entrado en el Salon de la Corona, sus corazones se detuvieron.
Todo era un completo baño de sangre, todos los miembros de la familia Bloodmane habian sido masacrados de formas brutales, sangre por todos lados, y cuerpos dispersandos por el suelo.
Incluso los cuerpos de la guardia Real que antes protegia a los cinco miembros sobre los escalones, no habia una sola alma con vida.
Al igual que no habia rastro de las personas que provocaron todo esto, se habian esfumado como una cortina de humo.
No habia rastro de la pequeña Evie Bloodmane, no se veia por todos los lados.
Se detuvo por completo a medio pasillo, cuando vio un cuerpo sin moverse en el suelo, mirando hacia en direccion a Caspian Bloodmane dandole la espalda al hombre de traje, totalmente intacto pero sin poder moverse.
-¡Nooo! -grito desgarradoramente Magnus con dolor y comenzo a correr hacia aquel cuerpo con necesidad y mucho mas temor que antes.
Magnus se arrodillo frente al cuerpo, levantando sus manos para poder moverlo pero las mismas no captaban el pensamiento, Bane veia sus manos temblar ligeramente.
Fue entonces que tomo la iniciativa y movio el cuerpo para ponerlo boca abajo, el platinado pelo y bastante largo cubria todo el rostro de la joven, con mucho cuidado lo corrio para ver el rostro de aquella persona.
Sollozo mas fuerte cuando vio el rostro de aquella persona, no dudo en abrazar el cuerpo y atraerlo contra su pecho, llorando con gran fuerza y ruido, con gritos y quejidos, lloraba mientras pedia que el cuerpo regresara a la vida, como si eso fuera posible para ello.
Era ella, su difunta amada, Luna Liaru.
Acariciaba el frio cabello de la chica y luego sus mejillas que parecian de porcelana, pero sus parpados no se levantaban y tampoco se le escuchaba respirar ni aunque sea, con dificultad, lo unico que se podia escuchar era el sollozo del brujo.
El vestido blanco (al igual que su cabello) tenia una gran mancha roja sobre su pecho, y de los delicados labios de ella brotaba una fino hilo de sangre.
La habian apuñalado varias veces sobre su gran vientre, donde estaba su hijo, su querido primogenito.
El niño... que ambos habian decidido ponerle Nale...
-Vuelve, por favor... -susurraba mientras la abrazaba con fuerza, escondiendola en su pecho como si quisiera que no lo viera al rostro.
Lloro durante varios minutos solo, sollozando con rapidez, intentando calmar su acelerada respiracion que le evitaba balbucear cosas apenas audibles.
La habia perdido, para siempre.
Ya no podia sentir su magia, ya no sentia nada de su alma gemela.
Brooklyn, NY | Actualidad
Magnus salio de aquel recuerdo tocando su tabique con cuidado, habia olvidado el sentimiento de aquella noche.
Su hijo, y su esposa... muertos, a manos de Valentine Morgensten.
El hijo que jamas pudo conocer, sabiendo que le faltaba dos semanas nada mas a Luna para dar a luz.
Habia perdido una parte de el en una noche, su alma gemela y su progenie.
Magnus sintio punzadas en su corazon, recordando todo lo que habia planificado para su hijo y Luna, ellos podian haber formado una familia.
Tambien recordo la noche que Jace e Evie murieron pero revivieron, cuando Evie le conto que conocio a su bebe que tenia la marca de brujo igual a Magnus pero los ojos de su madre.
Pero por alguna razon del destino, el conocio a Chris y adoptaron a Madzie.
Luego de esa horrenda masacre, el Consejo Real llamo a los diez brujos presentes esa noche para Aureum, cintandolos.
Obligaron a los diez subterraneos a hacer un voto de silencio, para que no digan nada de lo que ocurrio esa noche ni mucho menos vuelvan a la Residencia Bloodmane, ya que habia unas nuevas salvaguardas que matarian a cualquier subterraneo.
Desde entonces, Magnus se mudo a Brooklyn para volverse el Gran Brujo de esta ciudad.
Magnus rebusco en el bolsillo de su pantalon, sacando de este el collar de Cuarzo que Evie le dio, luego de revivir.
Un collar de Cuarzo, era el collar que siempre estaba en el cuello de Luna, y tambien el mismo con el que fue enterrada.
Las yemas de sus dedos tocaron con cuidado la piedra, mirandolo fijamente.
Tenia que contactar con Luna cuanto antes, y lo sabia muy bien.
De pronto, unos brazos envolvieron su cintura y un menton se apoyo sobre uno de sus hombros.
-Ahi estas...
Magnus brinco del lugar al oir esa gruesa voz, de repente mostro una falsa sonrisa sin ver a la persona, para no pretender nada.
-¿Ocurre algo? -pregunto, para guardar de vuelta el collar rapido.
El brujo se giro para observar a su marido, quien tenia los cabellos recogidos en una coleta.
-Yo diria lo mismo, pero parece que no dejas de pensar en algo -menciono el pelilargo, pensativo.
Magnus sonrio y toco la punta de su nariz con su dedo indice.
-¿Deberia sentirme insultado por eso?
Chris sonrio y nego de inmediato.
-No... me encanta esa sonrisa.
Alago, pero al mismo tiempo se separo de su esposo.
-Pero esta... es la tercera noche seguida que te despiertas y te levantas. -añadio, por lo que Magnus- ¿Hay algo que te molesta?
Bane, sin embargo, siguio con su sonrisa de vuelta.
-Ami nada me molesta -afirmo- Bueno, incluso tus adorables ronquidos me hacen dormir mejor.
En ese momento, Chris borro su sonrisa.
-Ey... yo no ronco...
Y Magnus cerro sus ojos para comenzar a imitar los ronquidos de Chris.
-Mira, te conozco... y se que algo te esta pasando -insistio Chris con preocupacion.
-Christian... estoy bien...
Le aseguro, para acercarse y dejar un corto beso en los labios de Chris.
-Ven, vayamos a dormir... -y Magnus paso por alado suyo para ir a su habitacion como si nada.
Pero sin embargo, Chris borro su sonrisa para sentirse mas preocupado que antes por su marido.
[...]
En el mundo de la Realeza, las cosas se encontraban patas arriba. Se había notificado que cinco shadowhunters de la Realeza fueron encontrados muertos y drenados hasta la ultima gota, en un club de la realeza y subterraneos.
Las camaras de aquel club mostraban ese grupo de dos chicos y tres chicas divertirse, hasta que de pronto salieron del club y las grabaciones no mostraron nada mas de ellos.
Siguiendo a Hope y a Antonio, los hermanos se levantaron cuando el sol salio para abrir un portal directo a Aureum.
Pero esta vez, estaban acompañados de sus parabatai que accedieron a ir con ellos.
Ademas, Lucas debia recibir la runa de la Nobleza Shadowhunter con el Maestre Luwin.
Cuando los cuatro salieron del portal, el mundo entero parecía que se había detenido para contemplarlos a ellos cuatro, viendo que había dos nuevas caras.
La Realeza conocían a Isabelle Lightwood, Jace Herondale y su esposa Clarissa Herondale como los mejores guerreros del instituto de Nueva York en su época junto a Alexander e Evie Lightwood.
Sin embargo, nadie conocía a sus hijos, los cuales habían llegado a este nuevo mundo.
Al salir se dividieron en dos grupos, Antonio y Lucas se fueron hacia la Citadell para encontrar al Maestre Luwin y que pueda marcarlo con la runa de la Nobleza. Mientras que Hope e Ilazebeth se fueron por otra dirección, para presentarle la ciudad.
Durante su camino, ambas se encontraron con Azriel quien se encontraba solo junto a una banca leyendo un libro, mientras que había algunos shadowhunters que lo molestaban desde lo lejos, lanzándole cosas.
-Idiotas... -murmuro el muchacho junto a las dos damas, luego de que un joven le haya arrojado un papel magico que explotaba, provocando una pequeña bomba de tintura.
Resulta que el joven que lanzo la bomba pertenecia al grupo de Catriel, el mismo rubio se encontraba con sus amigos y tres chicas que eran parte de su grupo de animadoras, el trio parecia emocionado de que el gran Catriel les haya prestado atencion.
Y para la cereza del pastel, esos muchachos le gritaban "¡Gitano de porquería!", haciendo reir a otros shadowhunters que se encontraban con sus respectivos grupos.
-Todo esto es... asombroso... -confeso Ilazebeth, viendo todo a su alrededor- ¡Mira nada mas! Es decir... jamas crei que algo asi existiría.
-Ese siempre fue el objectivo del Consejo -afirmo Azriel, cerrando su libro- Permanecer en secreto y nunca dejar que un shadowhunter de la Clave se entere de este mundo.
-¿Por que? Esta es su historia, su lugar donde crecieron, lucharon y estudiaron... -le dijo Betty, confundida- No deberían porque ocultarse.
Antes de que Azriel pueda seguir contándole, un nuevo individuo llego a ellos tres con un tono arrogante, llamando la atención del pequeño grupo.
-La Realeza permaneció oculta por siglos, para evitar que los No-Reales entren en nuestras vidas y arruinen todo, manchando nuestra sangre.
Le respondio Catriel, poniéndose entre medio de Hope y Azriel, mirando a la pelinegra.
-Soy Catriel DarkBlood -se presento, tomando la mano de la azabache y dejando un beso en el dorso- Señorita...
-Ilazebeth -le respondio de inmediato Betty, con una sonrisa alagante.
-Ilazebeth que bello nombre para una bella dama -continuo el rubio, como todo un galan.
A todo esto, Hope y Azriel miraban la escena con desagrado, sabiendo que el rubio solamente estaba fingiendo ser agradable para luego mostrarse irritante como siempre.
-¿Que haces aquí, DarkBlood? -le pregunto Azriel, con amargura- ¿No tienes que mostrarle tus abdominables a tu club de fans?
Los contrario dejaron de mirarse y cortaron su escena, por lo que Catriel se separo de Ilazebeth para ahora mirar a Northman, que esperaba una respuesta o que directamente se vaya lejos del trio.
-Solamente pasaba por aquí cuando via a Hope, ¿eso es algo ilegal? -le pregunto, con burla.
Ahora, los dos chicos miraron a la pequeña Hope que estaba visualizando todo frente a ella, y al sentir la mirada de ellos, se puso nerviosa.
Pero aun asi, no se dejaría intimidar por Catriel.
-Y aquí estoy... -afirmo Hope, abriendo un poco sus brazos- ¿Necesitas algo?
Catriel sonrio sin mostrar su sonrisa y sin decirle nada, paso un brazo por los hombros de Hope para atraerla a el, dándole la espalda a Ilazebeth y de Azriel.
La comenzó a guiar un poco lejos de sus amigos, para que puedan tener mas privacidad.
-En unos días es la gran pelea... solo espero que tu hermano... no huya como cobarde...
Y hacia pausas mientras le contaba lo que estaría a punto de suceder en días, dándole un toque de sombrio y mafioso a la vez.
-Lo se. Pero Antonio jamas abandona una pelea, el nunca ha caído.
Y después de responderle, ambos se pusieron cara a cara para verse mejor, por lo que Hope se saco el brazo de Catriel de sus hombros.
-Eso esta por verse, linda...
Le dijo casi en susurro, a lo que Hope fruncio un poco sus cejas y ladeo su cabeza hacia la derecha.
Esas fueron las ultimas palabras de Catriel antes de que pase por alado de la joven y se vaya, de vuelta con su grupo de amigos que lo esperaban.
Hope se quedo congelada en su lugar, a lo que sus dos amigos se dirigieron hacia ella para saber que ocurria.
-¿Estas bien? ¿Qué te dijo Catriel? -fueron las primeras palabras de Ilazebeth al ponerse frente a su parabatai y tocar su brazo.
Sin embargo, Hope solamente subio sus hombros, restándole importancia a las palabras de su nuevo amienemigo.
[...]
Lucas y Antonio salieron de la Ciudadela de los Maestres, una vez que luego el Maestre Luwin le haya trazado la runa de la Nobleza a Lucas sobre el lado derecho de su cintura, junto a su ombligo.
Desde el momento que el rubio piso la Ciudad, fue visualizado por unas cuantas chicas que "simulaban" pasar por alado suyo solamente para ver mas de cerca al duo de parabatai.
El castaño rio mientras pasaba su brazo por los hombros de su hermano y tambien mejor amigo, caminando hacia delante.
Por otra perspectiva diferente, Lucas se encontraba fascinado y encantado por todo este nuevo pais, y mas aun al enterarse que pertenece a el porque su padre es de la Realeza y ademas, el Director del Consejo Real.
Muchos de los shadowhunters ahi mismo reconocian al hijo de la Leyenda del Instituto de Nueva York, por lo que los rumores no tardaban en salir volando.
-Todo esto... es asombroso... -musito- ¿Por que no me dijiste que pertenecia aqui?
Antonio solto una risa y palmeo el brazo de su amigo con fuerza, solo para molestarlo.
-Yo tampoco lo sabia. Mama nos lo mostro.
Le contesto, mirando las hermosas vistas con un sol de verano sobre ellos, lo cual le daba vida a cada rincon de Aureum.
En ese entonces, un pensamiento invadio por completo la cabeza de Lucas. Tanto, que lo hizo borrar su sonrisa y detener su rumbo, quedandose atras.
Antonio al sentir eso, no dudo en detenerse y girarse. A lo que se encontro con su rubio hermano, con una expresion de pena en el rostro.
-Acerca de tu mama... ¿lo has descubierto...?
De inmediato, el castaño nego con la cabeza, impidiendo que su parabatai termine de preguntarselo.
-Todavia no, pero tampoco me rendire acerca de eso.
[...]
El resto del dia en el Aureum se trato asi, los hermanos les mostraron la ciudad a Ilazebeth y a Lucas, con ayuda de Aiden y Azriel a su lado, quienes se los encontraron en el camino.
Luego de eso, Ilazebeth tuvo que irse ya que recibio un mensaje de fuego de su padre para que vuelva al instituto para sus deberes diarios, algo que ella o pudo negarse y con amargura, se marcho.
A las horas Lucas tambien se marcho, ya que su madre Clary aun lo tenia bajo castigo y el tenia que ir al instituto de Londres para ayudarla.
Dejando a los hermanos solos, de vuelta.
Antonio se fue a entrenar junto a unos nuevos amigos que habia hecho en los ultimos dias, al parecer, eran muchachos de sangre Pura y Real que tambien odiaban a Catriel y su grupito, algo que ellos tenian en comun.
Por otro lado, Hope decidio visitar la Ciudadela de los Maestres ya que queria visitar al Maestre Luwin, que a pesar de el fuera un hombre de casi ochenta años, lo habia convertido en su amigo.
-...Tu abuelo era el mejor de su clase, como tu bisabuelo -le relataba el anciano, viendo a Hope sentada sobre unas bancas- Ambos tenian esa chispa... que los hacian destacar de todos... nunca nadie los supero...
Hope lo miraba con atencion, con sus ojos un poco entrecerrados mientras veia al hombre sacar un gran libro gordo lleno de polvo de uno de los tantos estantes de la gran habitacion.
Lo unico que se podia escuchar ademas de la voz del Maestre, eran las cadenas que caian por sus hombros hacia delante, ya que tenian un gran significado para los Maestres.
La cadena de eslabones significa que los maestres no se sirven a si mismos, sino que son sirvientes de todo Aureum. La cadena consiste de varios eslabones de distintos metales. Los maestres no se quitan la cadena nunca, ni siquiera para dormir.
Ellos son los que enseñan a los shadowhunters jovenes a pelear, a estudiar y defenderse, para superarse el uno al otro y ser el mejor de su clase.
El hombre anciano soplo con mucha fuerza para sacarle el polvo al libro de tapa dura, ayudandose con su mano.
-...Tu bisabuelo Antonio... -y al nombrarlo, solto un suspiro- Era extrovertido, no le tenia miedo a nada... y eso lo hacia ser perfecto... luego del nacimiento de sus cinco hijos, el solia pasar sus dias en el Aureum con Evie, ya que la consideraba muy especial.
Al oirlo, Hope se quedo algo confusa ya que no habia nombrado a alguien especial.
-¿Y que hay de Caspian? -le pregunto Hope, ladeando su cabeza a un lado.
En ese entonces, el Maestre Luwin levanto un poco su mirada hacia delante, y acto seguido, se giro para darle la espalda a la pequeña y apoyar el gran libro sobre un escritorio de madera.
-Caspian era mas sanguinario que su abuelo y su padre... el siempre pedia mas de lo que podia alcanzar... -le confeso- Odiaba a los No-Reales, hizo lo imposible para que tu madre no conozca ese mundo... Siempre pedia misiones, queria ser el mejor de su generacion...
Hope se quedo cautivada, tan cautivada que no sabia que responderle al Maestre Luwin.
-Le pidio al Consejo ir a las dimensiones del infierno para matar a los Demonios Mayores, el solo -prosiguio- Pero al ver su ambicion, el Consejo se lo nego. Tu bisabuelo era parte del Consejo.
Y mientras relataba, abrio el libro para buscar una pagina en especifico y hacerle señas a la chica para que se acerque.
Hope brinco de su lugar para dirigirse a el, colocandose alado suyo.
La pagina le mostraba una fotografia de hace mas de veinticinco años, donde los directores de aquella epoca posaron para la foto, siendo un total de siete directores. Entre ellos, su bisabuelo difunto.
-Caspian se la pasaba horas leyendo en la biblioteca, queriendo saber mas de lo que ya sabia... practicaba hasta altas horas de la madrugada... y siempre salia en misiones peligrosas... jamas era derrotado.
Ahora se paso de pagina, para ver a la familia Bloodmane, contando con sus dos abuelos, su madre y su tio y su bisabuelo, posando con vestimentas blancas y joyas de la familia.
-¿La locura nublaba su juicio?
El Maestre Luwin asintio ante la pregunta de Hope.
-En cambio a tu madre, le habian asignado todos las misiones contra los Demonios Mayores... algo que molestaba a Caspian, pero tu madre intentaba que el este tambien... -dijo- Hasta que Caspian se puso celoso de su propia hermana...
Hope paso la pagina con cuidado, donde se veia la foto del anuario de Caspian (su clase), cuando habia cumplido los dieciocho años.
-Evie siempre les daba sus misiones a Caspian... para hacerlo sentir bien... pero por dentro, Caspian habia generado un odio hacia su sangre... en sus ultimos dias de vida, el siempre la trataba mal a ella, como si fuera un No-Real... pero ella no se daba cuenta, ya que estaba cegada por el amor que le tenia.
Hope subio su mirada hacia el Maestre, que contaba todo mientras veia el libro frente a ellos. Sus cejas estaban arrugadas, mostrando algo de preocupacion.
-Mama queria a Caspian... pero el empezo a odiarla cuando el Consejo le daba mas misiones a ella...
Luwin asintio ligeramente, volviendo a cerrar el libro con mucho cuidado.
Y entonces, Hope descifro algo:
Su madre no se encontraba con su hermano muerto durante las noches en su despacho.
Se trataba de alguien mas.
Pero, ¿quien era esa misteriosa persona?.
[...]
Magnus espero una hora a que su esposo Christian y su hija Madzie se marcharan a cenar.
Habia permanecido todo el dia extraño (mas de lo habitual) donde jamas se habia presentado asi.
Chris habia notado ese cambio de parecer, pero luego de insistirle todo el dia, se canso y decidio no insistir mas.
El Brujo movio sus manos sobre toda la Sala de Estar para correr todos los muebles, dejando un gran espacio a su alrededor.
Queria hacerlo, necesitaba hacerlo... y estaba a punto de hacerlo.
Con la ayuda de un polvo color grisaceo que se trataba de cenizas de nephilim y subterraneos combinados para traspasar.
Formo un circulo grande y luego se puso frente a el, para abrir sus manos.
El ritual era para pasar al Velo, siendo un vivo detras del Velo por unos minutos, sino su corazon se detendria para siempre.
Por su cabeza se le habia ocurrido la idea de traer a un muerto detras del Velo al mundo de los vivos, pero le parecia un error luego de ver el ritual de sus dos sobrinos.
Y a continuacion, comenzo a decir las palabras en latin fuerte y claro.
-Fesmatus... invoca elymas magnus... -hablo, abriendo sus manos hacia el circulo- Fesmatus... fiet velum... fesmatus fiet velum, velum intrabit...
Mientras resitaba, veia que aquel circulo del polvo huesudo comenzo a levantarse sin romper el circulo, cada particula se levantaba detras de otra.
-Fesmatus... invoca elymas magnus... -continuo- ¡Fesmatus, Lunam Testor te!
Ahora el circulo se habia desvanecido por completo, formando un gran circulo frente a el, del tamaño de un portal.
-¡Fesmatus... invoca elymas magnus... Fesmatus... fiet velum... fesmatus fiet velum, velum intrabit...!
Y repetia los versos una y otra vez, viendo como el "portal" frente a el se iba abriendo, dejando ver un sitio oscuro y con nieblina, sabiendo que es de noche.
Sentia que su cuerpo tenia una especie de "atraccion" hacia el portal, como si fueran un iman y un clavo.
-¡Fesmatus, invoca elymas magnus...! ¡Fesmatus, Lunam Testor te!
Cuando iba a seguir gritando a los cuatro vientos, una corriente electrica recorrio todo su cuerpo y de un momento para el otro, toda su alma fue absorbida por ese raro portal.
El cuerpo entro dentro del portal siendo absorbido, provocando que siente un ligero golpe en el pecho al momento de entrar.
Magnus traspaso el famoso Velo que era la barrera entre el Mundo de Sombras vivo del muerto.
Su cuerpo cayo al suelo, apoyando una de sus rodillas sobre el suelo de hojas, a lo que el levanto la mirada.
Se encontraba en un bosque oscuro por la noche, habia una gran cantidad de nieblina en todas las direcciones.
Estaba tan "extrañado" no habia un alma muerta que el conociera.
Solo... asi se encontraba...
Levanto su cuerpo para reincorporarse, y sin tener otra alternativa, comenzo a caminar hacia delante.
No tenia mucho tiempo, tenia que salir porque sino el tambien quedaria detras del velo para siempre.
El silencio reinaba a su alrededor, no habia otra cosa que no era naturaleza oscura y nieblina por doquier.
Solamente tenia que encontrar a su persona, preguntarle algunas cosas e irse cuanto antes.
Jamas habia estado detras del Velo, por lo que no conocia una direccion exacta hacia donde ir.
El camino fue algo largo, durante varios minutos se encontro completamente solo.
Hasta que de pronto, algo le aparecio.
Observo no muy lejos de el a una joven de vestido blanco que la tela se deslizaba sobre las hierbas con su caminata.
Tenia los pies descalzos, y tambien se podia observar su cabellera platinada que le llegaba a la cintura, tambien suelto con algunas trenzas.
Magnus se quedo sorprendido, tan sorprendido que esta vez no dudo en correr hacia la silueta femenina.
Y para agregar, grito:
-¡Luna!
La joven reacciono a escuchar su nombre, se dio vuelta en la direccion del grito y observo a un brujo correr hacia ella.
Ella tambien se quedo perpleja, pero a comparasion de Magnus, ella se quedo estatica en su lugar.
-¿M-magnus...?
Ambos se encontraron despues de veintitres largos años, los cuales jamas se habian podido volver a ver ni saber del otro.
Los cuerpos se detuvieron frente al otro, mientras que sus ojos inspeccionaban todo del otro con shock.
Todavia Luna no podia creer que el estaba ahi, junto a ella.
Magnus iba a tener la palabra, pero antes que la tenga, Luna se le adelanto.
La joven bruja tomo del rostro a su Alma Gemela (que alguna vez lo fue) y unio los labios de ambos.
Magnus se quedo sorprendido al ver su accion, este tenia sus ojos abiertos como platos mientras que los de ella se encontraban cerrados, sabiendo que a ella le causaba felicidad que se hayan reencontrado.
El brujo permanecio intacto durante algunos segundos antes de que la Hibrido se haya separado de el finalmente.
-Estas aqui... -solto ella, con una pequeña sonrisa- Estamos juntos... amor mio...
Bane permanecio callado, mirando a su ex amante con algo de pena y tristeza, sabiendo que habian pasado tantos años sin verla, aunque para un muerto, solo pasaron largos dias interminables.
Aquella vez que Evie fue apuñalada por Valentine, ella fue a su "cielo" junto a su familia y su protectora, aunque para estos, recien habian pasado unos meses desde la Masacre de la Corona.
Pero en realidad, casi habian pasado seis largos años desde aquella noche maldita.
Luna aun tenia esa pequeña sonrisa de enamorada en sus labios, mirando cada centimetro del rostro de Magnus, con sus manos aun sobre sus mejillas.
Se encontraba feliz, ella habia estado esperando a Magnus un largo tiempo. Y ahora, se habia encontrado con su viejo amor.
Siguiendo con la narracion, Magnus agacho su mirada a la par que ponia sus manos sobre las de pelilargo y las retiraba con sumo cuidado de su piel, tomando algo de distancia de ella.
Liaru se quedo algo confundida con su accion, y sus cejas pudieron mostrarlo.
-¿Magnus...?
-No estoy muerto, querida... -la interrumpio, con dolor en sus palabras.
Por un sexto sentido, Luna bajo con cuidado la mirada hasta las manos de Magnus, donde pudo notar un anillo de bodas con un gran diamante sobre el.
De inmediato, ella sintio una punzada en su corazon y una corriente electrica recorrio por todo su cuerpo, provocando que de un paso atras.
-¿No estas muerto? -le pregunto, algo confundida y fastidio- Eso quiere decir que...
-Pase al velo...
Volvio a completar su frase, levantando su mirada para verla, observando el rostro fruncido de Luna.
La bruja ladeo un poco su cabeza y comenzo a negar con la cabeza lentamente, con sus labios un poco abierto.
Eso estaba mal, y ella lo sabia muy bien.
-No tienes que estar aqui... no puedes estar aqui... -nego de inmediato, tomando distancia entre ambos para protegerse.
Otra de las reglas de cruzar el Velo es no hacer contacto fisico con un muerto, ya que eso implica que tu alma se va "muriendo" debido a que se la contamina la persona muerta con la que hace contacto.
Ahora ella se habia enojado con el.
-Luna, tienes que escucharme... algo esta pasando...
-Magnus tienes que irte, ahora -lo intervino, empezando a alejarse mas de el- Vete, Magnus...
Las punzadas que iban al corazon le pertenecian a Magnus, el observaba la parte seria y molesta de Luna, como jamas se habia mostrado.
El enojo de la hibrido se debian al ver el anillo de bodas de Magnus y ademas, que el haya entrado VIVO al mundo de los muertos.
-Tienes que escucharme, el Velo, todos los vivos se encuentran en problemas.
Iba a seguir insistiendole, pero se callo al momento que vio que Luna abrio sus manos, desatando un enorme poder sobre el, provocando una corriente en todo el lugar y que sus cabellos empiecen a perder la gravedad.
Luna era mucho mas grande y poderosa de Magnus, algo que ningun Velo podria separar la magia de ambos. Ella tenia mas poder sobre el.
A continuacion, ella estiro su brazo derecho hacia el para someterlo, dejandolo inmovil.
-Magnus... tu no perteneces aqui... -le hablo, con una voz seca- No hasta que mueras...
El nombrado comenzo a quejarse cuando el aire comenzo a faltarse, su magia no podia hacer mucho ahi mismo, lo cual era un problema.
La contraria estaba dispuesta a enviarlo fuera del Velo otra vez, pero unos quejidos se lo impidieron.
-E...Ev...Vie....Evi...
Esas fueron las letras que hizo que Luna bajara a Magnus de vuelta al piso y que ella calme su magia contra el, dejandola sorprendida.
-¿Evie? ¿Que ocurre con Evie? -le pregunto de inmediato, como una madre preocupada.
Magnus se levanto con dificultad del suelo ya que habia caido de rodillas sobre el, mirando a Luna que le exigia con la mirada respuestas.
-Ella esta en peligro, sus hijos estan en peligro... todo el mundo de sombras esta en peligro -le anuncion de una buena vez.
Los cabellos de Luna volvieron a tene gravedad al igual que los finales de la falda de su vestido y sus ojos volvieron a la normalidad, a su color violeta.
-¿Que...?
-No tengo mucho tiempo, Luna -la corto- Pero necesito de tu ayuda. Alguien esta drenando a subterraneos, nephilims... y hasta shadowhunters de la realeza, no sabemos para quien es...
-¿Y por que viniste hasta aqui, Magnus? -le pregunto, con frialdad.
-Alguien esta levantando el Velo para que algunas criaturas puedan salir y drenar a nephilims y subterraneos. Eso es lo que dijo Caspian Bloodmane cuando lo invocaron...
-¿¡Invocaron a Caspian?! -exclamo- ¿Sabes lo peligroso que puede ser invocar a alguien detras del Velo?
No habia tiempo para responder esas preguntas.
-Luna, necesito de tu ayuda... necesito que me digas quien esta saliendo del Velo, o quien lo esta levantando...
Le suplico, con algo de desesperacion ya que sus minutos como muerto acabarian en cualquier momento y no tendria mas respuestas hasta quien sabe cuando.
Ella se quedo callada, tratando de recordar algo que sucedio ahi mismo.
Y sin mas, nego con su cabeza.
-No se mucho... los demas brujos no quieren decirme ya que estoy con los Bloodmane... -le explico- La mayoria de ellos murieron por su causa. Solo he oido rumores...
-¿Rumores? -le pregunto, de inmediato- ¿Que rumores, Luna?
La joven suspiro.
-Supuestamente, una bruja de un milenio lo esta levantando, pero nadie sabe quien es... y un grupo salio para servirla... eso es todo lo que se.
-¿Que grupo? ¿Quienes son?
Sin mas que decir, Luna le confeso que grupo serian.
Dejando al brujo en shock por completo.
-...Luna... nadie esta a salvo -le recordo, temeroso- Si esas cosas salieron, solo sera cuestion de tiempo para que hagan travesuras en el mundo de sombras y en los mundanos...
-Lo se... pero no pude detenerlas, ellas son mas fuerte que yo...
Y cuando le respondio, Luna levanto un poco la manga de su vestido blanco, dejando ver una raiz oscura que se expandia por todo su brazo, como una vena dentro de su piel, la raiz iba hasta la altura de su codo y se expandia.
-Por el Angel... ¿No has podido curarte?
Luna nego con lentitud, volviendo a bajar la manga para verlo.
-Su magia es oscura... nadie han podido detenerlas...
-¿Y que puedo hacer? -insistio Bane- Hablare con los demas brujos, soy amigo del Gran Brujo.
A Luna se le ocurrio una idea, por lo se acerco a el con tan de decirsela, ya que el tendria mas ideas por la cabeza.
Pero antes de que diga una sola palabra, Magnus sintio una corriente por todo su cuerpo, y como un iman lo estaba "llamando" para que vaya a el.
-No... -musito Luna, sabiendo que no habia mas tiempo.
Luna intento tomar la mano de Magnus, pero ya era demasiado tarde, su cuerpo habia sido absorbido de vuelta por el portal de cenizas de muertos.
Magnus salio del portal, desplomandose sobre todo el piso de su Sala de Estar, dejandolo sin aire y sin energias, solo podia mover sus ojos.
Habia vuelto a la vida, afuera del Velo.
En ese entonces, la puerta de entrada se abrio, dejando ver a dos individuos.
-¿Papi? -pregunto Madzie confundida, viendo a su papa Magnus sobre el suelo.
♡♡♡
N/A: todo esto del Velo y demas e inspiro en series como Diario de Vampiros y True Blood, ya que tienen mucho significado.
Mas adelante conoceran la parte en la que me inspire con la serie True Blood.
PD: La fecha del recuerdo, 22/07/11, es la fecha de horas antes a la Masacre de la Corona, ya que despues de las 00, es decir ya 23/07, Evie ya habia cruzado el portal.
¡Comenta y Estrellita!.
Capitulo Cinco, con la aparicion especial de Luna Liaru, protagonizada por Emilia Clarke.
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