#07
Cuando reconstrui aquella noche recordé aquella foto. Me había sentado en el sillón de mi apartamento y tomado aquel trozo de papel para analizar mejor la foto.
En ella estaba __, algo más joven pero no mucho, llamaba mucho mi curiosidad el hecho de que ambos ojos estaban parejos, sin aquella cicatriz que actualmente lleva; a su lado había un hombre algo más alto que ella, tez algo morena, cabello castaño claro y bastante largo, ojos alegres y verdes; este hombre pasaba su brazo por los hombros de ella quien sorprendentemente sonreía y no de una manera irónica, parecía una sonrisa verdadera. Muchos factores de esa foto despertaron mi curiosidad... Bueno ella siempre despertaba mi curiosidad y quizás ese era el motivo principal por que cual la odiaba... quien diría que eso que odiaba se convertiría en lo que amará.
No entendía varias cosas pero sentía que no era el momento de analizarlas o investigarlas, necesitaba tener respuestas del calavera antes de que ella tomara cartas en el asunto.
-¡Jack Conway!- un dia antes de que la cuesta regresiva terminara ella llego enfadada a mi despachó- ¿Donde la tienes?
-¿De que hablas? ¿Y ahora qué le sucede Klitka?
-No quieras hacerte el estupido conmigo- ella me planto cara- Se que tu la tienes, eres el único que ha entrado a mi departamento y no me hacen falta años de estudio para descifrar que tu eres quien tiene mi foto
-¿Tu foto?- en ese momento recordé, había abierto el cajón de mi escritorio y tomé aquella foto- ¿Hablas de esta?
-¡Lo sabía!- ella de manera abrupta tomo la foto y me miro seria- ¿Que mierda hacías con algo que no te pertenece? No tienes la excusa de que hayas pensado que era tuyo porque tiene mi puta cara
-Estaba demasiado tomado y lo sabes- le había restado algo de importancia- La abre metido en mi traje sin darme cuenta, tampoco tengo porque darte explicaciones fuiste tu quien me llevo a tu casa
-La próxima te dejaré ahogarte en alcohol- se había colocado sus gafas y luego guardado su foto- Solo esperó que llegues a tiempo con el tik tak del reloj... No querrás que tome cartas en el asunto luego de lo que tomaste
Si por drama y misterio dieran premios, ella los ganaría todos. Pensaba que sabía gran cosa de su vida pero claro esta que me equivocaba y el hecho de que la cuenta regresiva disminuya cada vez más solo me agobiaba y me dejaba sin pensar en lo que verdaderamente quería pensar.
El día llegó, ella me esperaba sentada en la gran silla de mi despacho tomando su habitual café. __ había llegado mucho más temprano que yo, solo estaba sentada allí, esperándome, aún recuerdo como vestía, una chaqueta de cuero negra, sus típicas gafas oscuras, unos jeans oscuros junto a una camisa gris y unas largas botas. Al entrar ella se había colocado sus gafas sobre la cabeza, inclinó su cabeza y me analizó con su mirada.
-La cuenta regresiva terminó Conway, toma asiento
Yo me había sentado delante de ella, como era de esperar ella solo estaba allí sentada, analizandome, esperando a que yo soltara el primer golpe, esperando a que diera el primer pasó.
-Logre infiltrar a Gustabo y Horacio en la mafia que tiene relación con el calavera, creemos que es quien dictamina las tareas en esa organización, aún no hemos dado con la ubicación de su sede pero hacer pasar a ellos dos como explolicias corruptos les facilita la entrada en ella, he aprovechado el incidente del ciudadano y Gustabo para hacerlos pasar exempleados y ahora operan en el CNP como Dan y Fred y tienen la protección del CNI. Por el como van las cosas doy por asegurado la captura de ese gilipollas dentro de la brevedad
-¿A que llamas brevedad? ¿Semanas, meses? Me pregunto ¿Cuantas muertes de policías entraran en aquella "Brevedad"? - se recostó en la silla colocando sus brazos detrás de su cabeza, siempre mantenía ese tono de burla que tanto me irritaba- Colocar a esos dos desequilibrados mentales en una infiltración de bandas que incluye a gente que mató a sangre fría a unos policías por siempre rencor ¡Jah! Que buen plan, dime que más.
-No hay nada más, es suficiente información como para que me dejes actuar a mi, si me equivoco o fallo yo cargare con esa culpa.
-No quiero que lo tomes personal, no tengo nada en contra de usted- ella había sacado de su bolsillo un teléfono móvil algo antiguo- Sin embargo sus errores podrían traer muertes, muertes que cargará en su conciencia y muertes que son innecesarias mientras yo esté presente
Recuerdo como ella se llevó aquel aparato a su oreja, por más de que llevase gafas notaba que me miraba fijo. Su tono se había vuelto más serio y frio al hablar por teléfono.
-Solo veo incompetencia laboral estando aquí- había hablando ella por el móvil, no se dirigió a mi aunque sus palabras si me llegaban como dagas- Ante la situación, como ya le he comentado antes, solicitó ahora mismo que se me de permiso para actuar... Le mantendré informado.
Corto su llamada, se había levantado, pasó a mi lado y con algo de pena colocó su mano sobre mi hombro.
-Desde ahora quiero que te encargues de lo que en un principio te mandaron a hacer aquí, quiero te encargues de la maya policial y de la seguridad de la ciudad a excepción del calavera, de eso me encargaré yo.
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