ᴇʟ ᴘʀɪᴍᴇʀ ᴀᴛᴀǫᴜᴇ

En el momento en el que Sam y Danny subieron las escaleras, Noah había llegado, aquel mejor amigo de la pequeña Meg quien fue llamado por teléfono gracias a su amiga

Cuando Sam encontró al departamento todos tenían su vista en la televisión en donde sonaban las noticias, las cuales parecían ser inquietantes

-¿Ahora que?- Sam pregunto confundida

-El guapito- Quinn sonrió al ver al hombre entrar, saludando a Noah para después hacerle un espacio a un lado de ella, desde que Meg los presentó, Quinn tomó una atracción por el chico castaño aunque este pasará demasiado tiempo con Meg

-Sus nombres ya fueron revelados por la policia, Jason Carvey y Greg...- el reportero hablaba con sorpresa

-Ay no es cierto, es el rarito de la clase del cine- Mindy señaló la television, mirando a Meg

-Lo recuerdo, la clase con la maestra Crane

Meg se tuvo que acomodar en el sillón, el brazo de Ethan rodeaba sus hombros con protección dándole miradas inquietantes a Noah quien intentaba hablar con su mejor amiga

-Tranquila... no te pasará nada- Ethan acaricio su hombro con confianza, logrando que la rubia sonriera

La cara de todos cambio al escuchar el nombre de Ghostface, ¿que tenía que ver todo esto con Woodsboro? Sabían que no era secreto que Stab era famosa, pero un departamento con cuerpos mutilados y disfraces de aquel asesino no eran coincidencia pura

-Meg, Tara, empaquen, tienen 10 minutos- Sam comenzó a ponerse nerviosa, caminado hacia su habitación

-¿Que te pasa Sam?- Meg se levanto con rapidez siguiendo a sus hermanas 

-Nos vamos de la ciudad

-¿Que?- Danny cuestionó, confundido por tanto movimiento por algo que él aún no sabía

-Te agradezco mucho nuevo sospechoso pero nos encargamos, descansa- Chad hizo retroceder al hombre hasta llegar a la puerta- tómate tu lechita y a la camita

Meg se detuvo al ver a su hermana mayor tomar uno de los cuchillos de la cocina, alertando a Tara quien no dejaba de hacerle preguntas a su hermana ya que ella no pensaba irse

-Primero hay que hablar de esto porque tal vez no tendría que ver nada con nosotras- Tara se exaltó, siguiendo a su hermana quien caminaba de un lado a otro desesperada

-¿Lo dices enserio?

-La ciudad es demasiado grande, Tara tiene razón, además es Halloween, todo el mundo usa ese estupido disfraz- Meg tampoco quería marcharse, había comenzado a formar una vida en la ciudad, tenía a Ethan ahora

-Esto no es una coincidencia, ustedes dos lo conocían

-Solo un poco... era raro- Meg miro a Ethan intentando buscar ayuda pero este no sabía que decir

-Chad, Mindy, ¿quieren apoyarme?

-Bueno, si es un poco cercano a nosotros- los hermanos se complementaron al mismo tiempo

Tara miro a su otra hermana, Meg al sentir que la tomaba del brazo supo instantáneamente de quien se trataba, entendía él sentimiento de Tara, ¿por qué huir si nada les había pasado aún?

-Quinn, tu papá es policía ¿verdad? Puedes llamarlo e investigar qué pasa- Meg se dirigió hacia su mejor amiga la cual se mantis callada

-Exacto, antes de que tú decidas sola que tenemos que abandonar nuestra educación para escapar del estado- Tara se enfrentó a Sam la cual miraba a Quinn esperando una respuesta

-Ya lo estoy llamando

El sonido de el celular de Sam volvió a alertar a todos, la pantalla del dispositivo se encendió repentinamente avisando que una llamada estaba entrando, la respiración de Sam se aceleró y caminó con cuidado hacia su teléfono, cuando lo tomó sus nervios se calmaron al ver de quien se trataba, Gale Weathers

-¿Quien es?- Tara pregunto

-¿Por qué todos se pusieron nerviosos con el teléfono?- Ethan hablo por primera vez en voz alta

-Enserio tienes que ponerte al corriente

-Sam... mi papá quiere hablar contigo- Quinn extendió su brazo para así poderle entregar su teléfono a la mayor

-Señor Bailey, ¿qué tal?- Sam hablo por la bocina, haciendo una pausa dando a entender que el oficial hablaba con ella- pues mi hermana cree que estoy exagerando... ¿de que habla? ¿Qué pasa?

Meg no podía aguantar los nervios, llevo un dedo a su boca y comenzó a morder su uña de forma desesperada, abriéndose en dedo con sus propios dientes gracias a lo que pasaba

-¡Sam espéranos!- Meg y Tara bajaban las escaleras con rapidez, de un momento a otro Sam había salido del departamento y solo sus hermanas fueron capaces de seguirla

-Entren y cierren las puertas con seguro

-¿Enserio? ¿No quieres que estemos contigo?

-Bien... pero manténganse juntas ¿quieren?

Meg le dedicó una sonrisa a Tara, tomando su brazo con suavidad para poder caminar a un lado de Sam sin separarse, el camino empezó a ser silencioso, algunas sirenas de policía se escuchaban a lo lejos pero nada alarmante

No hasta que el teléfono de Sam volvió a sonar, deteniéndose al ver el nombre y foto de quien la llamaba en ese mismo instante

Richie Kirsch

-Genial, ahora hay señal telefónica en el infierno- Meg susurro al ver la fotografía, cuando pensaba en el ex de su hermana, lo recordaba con la garganta degollada

-Nunca borre su contacto- Sam confesó- están llamando de su teléfono

-No vayas a contestar, deja que siga sonando

En un impulso de valentía, Sam contestó la llamada, su rostro no tenía expresión alguna pero por dentro podría morir de los nervios

-¿Quien eres?- Sam comenzó a mirar a su alrededor, gracias a esto, Meg se apegó más a Tara para protegerla

-Hola Samantha, ¿me extrañaste?

-Quiero que consideres con cuidado si de verdad quieres hacer esto porque los dos últimos que se metieron con nosotras ya están muertos

-Deberías agradecerme Sam, Jason y Greg iban a matarlas, a tus pequeñas hermanas y a ti, los destripé antes de que pudieran hacerlo

Un hombre misterioso se acercaba a las tres, quien parecía estar hablando por teléfono y una capucha negra les impedía ver quien era, Sam se colocó frente a Meg para protegerla ya que Tara se encontraba detrás de la rubia

-¿Y entonces nos estás protegiendo ahora?

-No precisamente, voy a mostrarle al mundo quien eres en verdad, una mentirosa y una asesina, voy a castigarte Sam

-No deberías creer todo lo que lees en internet idiota

-No te hagas la chistosa, vas a pagar por lo que hiciste, no me detendré hasta que te haga pedazos, a ti y a quien se me atraviese en el camino, más les vale cuidarse las espaldas- Esta vez, Ghostface parecía demasiado resentido, parecía tener un motivo suficiente para hacer pagar a las hermanas Carpenter

-Tu deberías cuidar la tuya

En cuanto menos se lo esperaron, Ghostface llegó por la espalda de Meg y rodeó su torso con su brazo, haciéndola gritar, pero Meg era rápida y más cuando estaba asustada, como pudo logro morder el brazo de su atacante haciéndolo retroceder, Tara logró aventarlo y así darles la oportunidad de correr a las tres

-¡Ayúdenos! ¡Policía!

Las tres corrían sin un rumbo fijo, dando vueltas en esquinas intentando buscar ayuda aunque ningún auto se detenía, Meg logró divisar una tienda pequeña y no dudó en correr hacia ahí, buscando seguridad para las tres

-Por favor ayúdenos, por favor- Tara pedia desesperada a la gente de la tienda

-¡Dejen de hablar y ayúdenos!- Meg gritaba desesperada a todos los de la tienda quienes se quejaban de las niñas presentes

La campana de la tienda sonó, cuando voltearon se encontraron con su acosador, normalmente era común que atacara en privado pero ahora había subido en grado de peligro

Sam tomó los brazos de sus hermanas y juntas retrocedieron, intentando quedar fuera del radar de Ghostface

-¿Algún problema con ellas?- un hombre se puso frente a frente con Ghostface, quien no emitió ningún ruido, simplemente comenzó a apuñalar al hombre en repetidas veces, dándole una muerte segura así como a otros clientes que se acercaban para detenerlo

-Esto tiene que ser una maldita broma

La oportunidad de esconderse apareció cuando el dueño de la tienda apuntó con una escopeta a Ghostface, disparando sin darle al objetivo

-¡Salgan por atrás!

Las tres hermanas corrieron hacia la parte trasera, pero la mala suerte estaba de su lado esa noche, la puerta aún tenía seguro

-Las llaves, deme las llaves- Meg se apresuró a pedirlas, el dueño con torpeza intento entregarle lo que pedía pero gracias a los nervios le era imposible

-¡Cuidado!

Demasiado tarde, el cuchillo de Ghostface se clavó en el hombro del señor, un golpe en el rostro fue lo que lo hizo caer al suelo, suplicando que lo dejaran ir pero sus palabras fueron calladas por la escopeta, la cual fue disparada dejando un rastro de sangre mayor

Sam obligó a sus hermanas a arrastrarse por el suelo para no ser vistas, pero eran las únicas en el lugar, estaban indefensas ante un asesino con una escopeta y mucho enojo dentro de sí mismo

Meg podía sentir como su cuerpo temblaba, su corazón comenzaba a acelerarse y su vista se nublaba, comenzaba a perder el control pero Tara logró tomarle la mano, señalándole hacia dónde comenzar a gatear en silencio y tranquilidad

Ghostface comenzó a disparar de nuevo, dándole a unas bolsas de comida las cuales estallaron a las espaldas de las Carpenter obligándolas a comenzar a moverse más rápido por el suelo aunque los disparos seguían sonando sobre ellas

Sam era lista y actuaba rápido en situaciones de peligro, gracias al silencio se podían oír las pisadas de aquella persona pasar sobre lo destruido, Sam tomó a sus hermanas y con rapidez se escondieron en un anaquel, pasando desapercibidas cuando Ghostface hizo presencia en el pasillo en el que anteriormente estaban

Meg acercó su mano con cuidado a una lata de refresco, entregándosela a su hermana para que ella pudiera hacer una distracción que les permitiera escapar

Cuando Sam aventó la lata, volvieron a retomar su camino en cunclillas para poder escapar de nuevo gracias a que la distracción había servido de algo, deteniéndose gracias a que el pie de Meg piso un vidrio causando sonido de nuevo

Las lágrimas de la rubia empapaban su rostro, el rímel que traía anteriormente ahora había manchado sus ojos por el llanto, su boca temblaba y gracias a esto ningún sonido salía de su boca

Sam podía ver a través de una pequeña ranura de los anaqueles, solo uno de estos las separaba del peligro, Ghostface pareció haberlas sentido ya que giró con velocidad y dispuesto a atacar, plan que fue arruinado cuando la mayor tiró el anaquel sobre su cuerpo

-¡Corran ahora!- Sam corria con torpeza siendo seguida por sus hermanas, logrando salir de la tienda justo en el momento en que las patrullas llegaron a la nueva escena del crimen

-Creo que tenías razón Sam- Meg murmuro abrazándose a sí misma, limpiando las lágrimas en su rostro y sintiéndose más tranquila una vez que salieron de ahí

La mesa de la comisaría estaba llena de documentos y fotografías de el nuevo caso que acechaba Nueva York, Meg no dejaba de mirar las fotos en la mesa, intentando buscar respuestas inexistentes

-La encontraron junto al cadaver en el crimen del departamento-El detective Bailey mostró una máscara de Ghostface, la cual ahora era evidencia de la policía- el ADN indica que pertenece a alguien llamado Richie Kirs

Hubo un gran silencio en la sala, ¿como podía ser posible si Sam fue la que se encargarlo de apuñalarlo 22 veces, degollar su garganta y darle el tiro de gracia en la frente? Los muertos no regresaban a la vida, ¿o si?

-¿Lo conocen?

-Si, si lo conocíamos- Sam murmuró

-Pero el que nos atacó tenía una máscara diferente, como si estuviera desgastada... vieja tal vez- Meg complemento los hechos

-Tengo una duda- Wayne las miro- ¿tienen coartada para lo qué pasó hoy?

-Tara y yo estábamos en una fiesta con nuestros amigos

-Yo estaba con mi terapeuta, le daré sus datos para que le llame y confirme que estuve ahí si quiere, después las alcance en la fiesta y electrocuté a alguien

-Eso fue increíble la verdad- Meg hablo con diversión, logrando hacer sonreír a sus hermanas en un momento tan tenso como el que pasaban

-¿Eso fue antes o después de esto?

Wayne mostró su celular, en el cual comenzaba a reproducirse el video en el que Sam fue atacada con una bebida, un momento en el que todo se descontrolo y Meg quiso hacer volar sus tacones para golpear a quien había hecho enojar a su hermana

-Fue antes

-Estuvimos acompañadas toda la noche

-Y al papá de nuestra roomie le acaban de dar este caso

-Sería una gran coincidencia ¿verdad?- Wayne miro a Sam con seriedad- el detective que tenía el caso me lo ofreció porque involucra a Quinn y transfirieron a un policía de Woodsboro gracias a las coincidencias con ustedes

Meg al escuchar eso se incorporó en su silla, podía imaginarse de quien se trataba, quería que fuera así pero nadie había entrado por la puerta aún

-Si el hombre que las atacó te quiero esta credencial y la plantó junto al cuerpo Sam, entonces debe ser alguien cercano a ustedes... ¿hace cuanto conocen a sus amigos?

-Conocemos a Chad y Mindy desde que somos niños, nos mudamos con ellos para el semestre hace 6 meses o más, a Quinn, Ethan, Noah y Anika unos 6 meses

-Creo que puedo responder por Quinn así que uno menos, ¿alguna de ustedes sospecha de alguien que les quiera hacer daño?

Meg no sospechaba en nadie, claro que no, conocía a Quinn muy bien, eran mejores amigas, Anika era una buena compañera, gracias a que era más grande que ella por meses bromeaba diciendo que era su madre-amiga, Noah no podía ser un asesino, para Meg, era el chico más distraído que conocía, y después estaba Ethan, Ethan no era capaz de dañar a nadie en este mundo y menos a ella

La puerta se abrió dejando ver a un oficial, avisando que el FBI había llegado y esperaba por su presencia, Wayne accedió a salir pero dejó la puerta abierta, llamando a alguien más para que se quedara con las chicas

-Enserio quiero regresar a casa a dormir- Meg se quejó mientras frotaba sus ojos, los cuales ardían gracias al llanto

-Volveremos pronto, solo harán más preguntas

-¿Quien creen que haya regresado? Bailey dijo que un oficial de Woodsboro

El pequeño toque de la puerta las hizo voltear, encontrándose con el oficial Zack Riley, hermano de Dewey y Tatum, el último Riley en pie, para Meg, él se había convertido en un padre gracias a los acontecimientos que pasaron gracias a Amber y Richie hace un año

-Espero no haber llegado tarde a la fiesta