YoonGi estaba dormido sobre las sábanas de la habitación en el barco, mientras que Jimin estaba recostado a su lado, acariciando su rostro, y suavemente deslizaba su flequillo para verle el rostro.

Jimin no sabía lo que sucedía. ¿Perdería a YoonGi, a su conejito? A su único compañero de toda la vida. No podía permitírselo, sin embargo, ¿Qué podía hacer? Él sabía que yoonie, su conejo, algún día debería... irse, por no decirlo en términos más... Realistas. Pero jamás se había detenido a pensar, ¿Qué sería de él?
Sabía que podría estar actuando como un dramático. A esta persona, no la conocía, después de todo. Pero conocía al ser interno. Sabía que a ese ser, le fascinaba dormir sobre su cuerpo y ocultar su rostro en su cuello por las noches. Sabía que roncaba cuando dormía con hambre. Sabía que se hacía el muerto cuando no quería caminar. Sabía que le fascinaba correr en césped, y sabía que le adoraba con todo el alma.

Jimin sentía que estaba perdiendo la cabeza.
De pronto, YoonGi balbuceó algo, y Jimin se acercó a él. El chico había abierto sus ojos, aunque mínimamente aún, y le observaba en sueños.

Jimin sonrió.

-Hola, Yoonie.

YoonGi pestañeo un par de veces antes de dejar caer sus ojos ante los de Jimin, YoonGi jamás vio a Jimin lucir tan hermoso. Y, bueno, a decir verdad...

-Eres muy lindo, Jimin

Jimin rió, sintiendo ternura en su interior por la confianza de YoonGi al decir las cosas sin rodeos. Él, conociéndose a sí mismo, no podría ser tan directo; sin embargo, sin meditarlo de masiado, se acercó al pelinegro, y beso su frente por un par de segundos. Cuando retiró sus labios de esa zona, se sorprendió a sí mismo al encontrarse con las mejillas sonrojadas de YoonGi

-Yoonie, ¿sonrojado? Esto no es verdad. -Se burló Jimin.

YoonGi frunció el entrecejo inmediatamente, y bufó de una manera adorable.

-Cállate, Jimin Yo no te digo nada cuando te sonrojas.

-Es porque yo nunca lo hago.
YoonGi esbozó una gran sonrisa antes de soltar una carcajada.Jimin, mientras observaba las risas de YoonGi, se contagió del carcajeo a medida que intentaba ponerse completamente serio.

-¿De qué te ríes, conejo tonto?

-¡Te he visto frambuesa un millón de veces,Jimin! -YoonGi dijo sonriendo ampliamente.

-¿Ah si? ¡Pruébalo!

Okay, lo cierto, es que Jimin si tenía ciertas locas intenciones con el inocente conejillo. Sin embargo, él no quería apresurar las cosas. Sabía que a YoonGi se le escapaba su lado coqueto, y sólo estaba excavando, buscando la forma de que ese lado saliese a volar, para saber si realmente solo eran bromas, o YoonGi realmente lo deseaba, y no de una manera únicamente sexual, o en el ámbito físico.

"Él también lo desea"

¿De verdad era así? El corazón de Jimin estalló de una divertida forma cuando la anciana dijo aquello. Últimamente, tenía extraños pensamientos donde los relacionaban a él y a su mascota, de una manera bastante... Específica y compremetedora. Cualquier pensamiento fue desviado, cuando YoonGi se posó sobre su cuerpo, y comenzó a hacerle cosquillas en los lugares correctos y precisos.

YoonGi lo conocía tan bien. Jimin no sabía cómo era posible, si tan sólo podía verlo. Nunca hubo un toque íntimo cuando estaba en su forma animal, por supuesto que no. Pero ahora, de humano, todo se sentía especial e íntimo. Todo se sentía... Demasiado afectivo. No era incómodo, no era molesto. Era sorprendentemente... Satisfactorio y llenado. Su toque era especial, y... ¡No tenía palabras! ¡No podía describir lo que comenzaba a sentir en pocos días! ¡Muy pocos días!

-¡Yo-YoonGi! ¡N-no! ¡Me-me ha-haces... Me a-ahogo...!
Podía oír como YoonGi carcajeaba a la vez que movía sus manos sobre su cuerpo, sin dobles intenciones. No podía siquiera abrir los ojos para verle. Estaba cegado por la risa, y embobado con la de YoonGi.

Al cabo de un par de minutos, YoonGi detuvo el movimiento de sus manos, posándolas con sencillez sobre la curvatura de la cintura de Jimin. quedándose sobre él, con una sonrisa amplia mientras se observaban, y Jimin recuperaba la respiración. Pero casi la pierde nuevamente, cuando YoonGi se acercó nuevamente a su rostro, rozando la punta de sus narices con ternura, y una sonrisa misteriosa en sus labios.
Jimin observo atento a sus movimientos.

-Estás sonrojado. -Susurró bajo, como una onda, una sonrisa envolvía sus belfos.

Jimin rió algo nervioso por las ocurrencias de YoonGi, y se sostuvo de los hombros del más alto para sujetarse y no sentirse fuera de onda. Aunque al hacer esto, YoonGi resopló ternura por los ojos, observándolo con tanta admiración y... Algo más.

Estuvieron vagando sobre el rostro del contrario por unos momentos que se hicieron demasiados cortos, cuando YoonGi se aleja un poco, y desliza el flequillo de Jimin por su frente, para poder observarlo de mejor manera. YoonGi sonríe.

-Jimin-Murmuró con una tierna sonrisa- Mi corazón siempre ha latido muy fuerte cuando estás cerca.

Y el de Jimin hizo exactamente eso, cuando escucho las palabras de YoonGi Por primera vez, agradecía que fuera una persona sin pelos en la lengua. Ahora, claro.

-Jimin.. Yo... -
YoonGi se veía algo avergonzado ahora, su mirada se desvía hasta los labios de Jimin con rapidez, y vuelve a su lugar- Una vez... Estaba en tu regazo... Y Jungkook había tomado tu mano, Jimin... Él... Te acercó a ti, de esta manera... -YoonGi posó una de sus manos sobre la nuca de Jimin, y lo atrajo a su rostro, soltando ambos un jadeo- Te sonrió... -YoonGi lo hizo, observando los ojos asustados o nerviosos que Jimin poseía- Y él... -YoonGi Acarició la mejilla de Jimin con su pulgar- Yo... Me alejé... No quise ver lo que hacían... Yo estaba... -YoonGi se alejó poco a poco del rostro de Jimin, sintiendo una repentina timidez- Yo estaba... Estaba...

-¿Ce-celoso?

YoonGi observó a Jimin, con sus ojos asustados y confusos. Entonces, bajo la cabeza y asintió.

-Yo estaba celoso, Jimin....

Jimin no podía sentirse más... ¿Feliz? Sus manos temblaban, y su corazón gritaba.
YoonGi estaba admitiéndole. Él... ¿Lo deseaba de verdad?
Hubo un momento de silencio. Silencio intenso, donde sus miradas buscaban las respuestas que sus bocas no querían dar. Entonces, Jimin habló.

-YoonGi....

Él nombrado alzó las cejas, volviendo a concentrarse en lo que decía el muchacho.

-¿S-si?

Era increíble para él. YoonGi sentía algo que lo hacía celarse. Sentía algo que lo alejaba, Sentía algo que lo ponía a su corazón latir muy fuerte. Sentía algo que lo hacía sonrojarse. Sentía algo que lo confundía. Sentía algo que lo hacía titubear. Sentía algo por Jimin. inexplicable, Dios.
quería llorar.
¿Qué más podía ser aparte de...

-¿Quieres que te enseñe lo que hizo Jungkook esa vez?

YoonGi amplió sus pupilas ante la sorpresa. No sabía qué esperarse, pero confiaba tanto en Jimin, que no tenía mucho por lo que dudar. Él nunca le haría daño. Jimin jamás le haría daño.

-Enséñame.

Jimin se sintió tan desesperado, que no fue nada lento. Solo sabía que sus manos fueron a los costados del cuello de YoonGi, donde pudo sentir sus venas tensándose. Estaba nervioso. Y entonces, fue cuando atrajo sus labios con los propios. Fue un movimiento rápido, pero que procedió de una manera lenta.
YoonGi, como era de esperarse, no era un experto. Pero, cuando Jimin puso sus labios sobre los de él, deseaba con todo su ser, sentir cada centímetro de la boca de quien lo confundía de sobremanera. Por eso fue que, cuando Jimin dio un primer paso a mover sus labios, YoonGi le siguió los pasos.
Fue algo lento. Jimin parecía estar enseñándole paso a paso a YoonGi, hasta que, cuando el más alto tuvo la técnica, comenzó a demandar el beso. Ahora sus bocas se movían sincronizadas, y podían sentir las puntas de sus miembros bucales, poco a poco. O así fue, hasta que YoonGi tomó la nuca de Jimin, y lo presionó contra él, para hacer más interesante la situación. La mano desocupada de YoonGi bajó hasta la espalda baja de Jimin y la presión contra sí, haciendo que Jimin se tragase un gemido que se fundió en el movimiento de sus lenguas. Jimin inconscientemente, movió su zona pélvica contra la de YoonGi, y este inmediatamente se retiró, debido a la falta de aire.

Entonces, cayeron en cuenta de donde se encontraban. Jimin frunció el ceño.
¿Por qué mierda estamos en mi cuarto ahora? -Eso no lo dijo, sólo fue su subconsciente.

"Por qué lo deseas"

Esa voz fue una en su cabeza que lo hizo caer en cuenta de la situación. Entonces, volvió a mirar a YoonGi,
El castaño jadeaba, mientras lo penetraba con sus ojos. Pero luego, le dio una sonrisa, la más feliz que jamás le había visto tener.

-Jimin....

-Hice muchas cosas con jungkook, YoonGi -Dijo al borde de las lágrimas, sin saber exactamente la razón, mientras una sonrisa se le apoderaba- Pero, si t-tú lo permites,YoonGi... Quiero hacer de todo y más, solo contigo.
Jimin sintió que iría al cielo cuando vio la sonrisa y los ojos lagrimosos de YoonGi, Jamás vio una expresión tan emotiva y contenta.

-Jimin.... -Balbuceó, sonriente, acariciando el rostro de Jimin con delicadeza a pesar de la rapidez-jiminie, yo-yo... Quiero estar contigo... Siempre, jimin.