"𝑬𝒏 𝒏𝒖𝒆𝒔𝒕𝒓𝒐 𝒑𝒓𝒊𝒎𝒆𝒓 𝒆𝒏𝒄𝒖𝒆𝒏𝒕𝒓𝒐, 𝒔𝒐𝒍𝒐 𝒃𝒂𝒔𝒕𝒐 𝒄𝒐𝒏 𝒗𝒆𝒓𝒕𝒆 𝒂 𝒍𝒐𝒔 𝒐𝒋𝒐𝒔 𝒖𝒏𝒂 𝒗𝒆𝒛, 𝒑𝒂𝒓𝒂 𝒒𝒖𝒆 𝒎𝒊 𝒄𝒐𝒓𝒂𝒛𝒐́𝒏 𝒔𝒆 𝒑𝒂𝒓𝒂𝒍𝒊𝒛𝒂𝒓𝒂 𝒚 𝒄𝒂𝒚𝒆𝒓𝒂 𝒆𝒏𝒂𝒎𝒐𝒓𝒂𝒅𝒐 𝒅𝒆 𝒕𝒊."
— 𝑾. 𝑱

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❬ 𝟐𝟑 𝒅𝒆 𝑴𝒂𝒚𝒐, 𝟏𝟗𝟕𝟐 ❭

Aquel chico estaba acostado en el fresco y verde pasto, con el cálido aire pegando directo en el delicado rostro, los sedosos mechones de cabello negro danzaban lentamente al compas del suave viento, sus apagados ojos estaban fijamente en aquel hipnotizarte cielo azul con nubes blancas y esponjosas estas eran de diferentes tamaños y formas, el olor a primavera se podía sentir alrededor.

Aquella colina que estaba junto a la Universidad, ese era el sitio favorito de Wooyoung, era tranquilo, no habían molestas personas alrededor, en ese lugar había una banca de metal color café y un frondoso árbol que prestaba su sombra, cada día que podía se sentaba ahí a leer un libro, escribía su historia o simplemente lo usaba para escapar de la realidad, aquel lugar era su fuente de inspiración.

Wooyoung odiaba demasiado la sociedad y la mentalidad de cada uno incluyendo la de sus padres, ellos lo habían enviando con un psiquiatra debido a que estaba "enfermo" y debía curarse de aquella "enfermedad maligna" porque si, en esa época la homosexualidad se consideraba un "trastorno mental" pensaban que podían curarse con terapias y tratamientos y él había sido víctima de ello, a sus diecinueve años cuando sus padres se enteraron, rápidamente lo internaron, estuvo así por dos años, arto de las pastillas y charlas sin sentido que tenia con el psiquiatra.

Logro salir de ahí, pero ya no quiso vivir con su familia, así que escapo de su casa con la ayuda de su hermana mayor, ella era la única que lo apoyaba en todo y ahora a sus veintidós años tiene un trabajo de medio tiempo y también estudia en una universidad, se valía por sí mismo.

Se había quedado dormido por un momento, una pequeña sonrisa habían en sus labios; pero al escuchar a lo lejos el sonido de unos pasos y el crujir la hojas secas al ser aplastadas se le hizo raro, ya que nadie aparte de él iba a ese lugar, con pesadez abrió sus ojos, giro su cabeza hacia donde provenía aquella dulce voz, ahí sentado había una persona, su sonrisa se borro al ver a un chico, este tarareaba una canción mientras escribía en una libreta.

¿Quién era y que hacia ahí?

Lentamente Wooyoung se levanto y acercó, quedando frente al desconocido, iba a reclamar pero el chico levanto su rostro, este lo veía con curiosidad y confusión, todas aquellas palabras que le diría se las tragó, ninguna de estas pudo salir de sus labios.

Ese chico era jodidamente guapo, además aquellos ojos avellanas que lo veían con curiosidad, eran preciosos y tenían un brillo especial.

—Hola, Uhm... ¿Qué haces aquí?... —Wooyoung al fin pudo pronunciar algunas palabras.

—Lo siento no te vi, a veces soy un poco distraído. —el castaño dio una sonrisa avergonzada. —Yo soy nuevo en esta universidad, estudió música, necesitaba tranquilidad para escribir la letra de una canción, así fue como encontré este lugar. —rasco su cabeza apenado. —Perdón por interrumpir tu espacio. —

—E-está bien, este lugar es público y sé que no me pertenece, yo solo vengo a escribir, podemos compartirlo, los dos necesitamos un sitio tranquilo... —El chico sonrió y Woo giro su rostro sonrojado.

¡Esa sonrisa debería ser ilegal! —pensó el pelinegro.

—Gracias... —el castaño achicó sus ojos y sonrió. —Por cierto, soy San... —

—De nada... —Woo aun seguía perdido en aquella bonita sonrisa y ojitos brillantes. —Soy Wooyoung... —

Toda aquella soledad se esfumó cuando aquel chico castaño, de ojos gatunos, hermosos hoyuelos y sonrisa preciosa llegó a ese lugar, robando su lugar secreto, pero también había robado algo más.

Aquel chico desde el primer momento había robado el corazón de Wooyoung.

Esa fue la primera vez que lo vio.

La primera vez que su corazón latió sin parar.

La primera vez que sus apagados ojos al fin brillaban.

La primera vez que Wooyoung se permitió amar. 

🥀Gracias por leer🥀