愛 ໑ O4
No sabe cuanto tiempo paso pero se quedo dormido mientras Jihyo le contaba muchas cosas, hasta ahora solo confiaba en ella, le pareció muy honesta y carismática.
Luego de nuevo se despertó, pero sentía su cuerpo peor y mas pesado, el dolor de cabeza era mas insoportable era como si estuviera con resaca, como si le martillaran la cabeza.
- Llegamos. - aviso Jihyo quitándole algunos mechones de cabello.
- Jihyo...usted me puede quitar estas cosas. - se removió pues ya ni siquiera sentía las muñecas.
- Si pero, no hagas nada tonto lo digo en serio. - le vió, y el menor solo asintió.
La mujer le hizo un ademán con los dedos al tipo que anteriormente lo había cargado como costal de papas, quien traía una llave y solo le hizo una ceña con el rostro al menor para que se moviera un poco, por fin insertó la llave y las esposas se abrieron, haciendo que un gran alivio le recorriera el cuerpo.
- Jihyo vuelve a casa y le avisas a Daniel que tenemos que hablar. - habló Minho volviendo donde estaban ellos y vaya que se estaba conteniendo para no saltarle encima y querer extrangularlo con sus propios, se sobo las muñecas y vió a otro lado.
Jihyo vió a Lee con todas intenciones de molestar al chico por eso hablo.
- Ya no tiene las esposas. - advirtió al otro chico quien cambió su expresión. - se las quité porque, demonios mira sus muñecas tienen sangre estan lastimadas, no importa que demonios sea tuyo pero no lo trates tan mal ¿entiendes?.
Con semblante serio solo asintió, Jihyo por último se despidió de el, y en ningún momento ese hombre de dos metros de apartó del lado del azabache, quien veía a Lee caminar ¿Como decirlo? Tenía mucha presencia y también por la forma en la que caminaba, estaban en un lugar que parecía estar en medio de la nada, eran entre las 4 y 5 de la tarde, solo miraba árboles y nada, nada, árboles y mas árboles, luego de pasar por un pequeño sendero, llegaron a una casa, que mas bien parecía un pequeño centro comercial, se detuvo un momento antes de entrar pero recibió un empujón por parte de uno de los dos hombres, y entraron a la casa si es que asi se le podía llamar al entrar Minho colgó su abrigo en un perchero que estaba en la entrada principal uno de los hombres lo guío hasta la sala, que tenía el tamaño de una biblioteca y espero a que Lee llegara hasta allí, tenía muchas preguntas, muchas, también tenía muchas ganas de golpear a Lee.
¿Porque no simplemente lo mata y ya?.
El pelinegro entró, a la sala y vaya jodida vida, ya no llevaba ni sacó y abrigo, simplemente una camiseta blanca por dentro de los jeans negros que hacían resaltar sus muslos , con una corbata, zapatillas negras, un reloj en su muñeca derecha y varios anillos en sus dedos, ¿Porque?... A no era el momento de pensar en eso se repitió Jeon mentalmente.
- Mi padre va matarte cuando se enteré de que me tienes aquí. - espeto sin tantos titubeos, lanzándole cuchillos invisibles con la mirada.
- Tu padre pronto va terminar como tus amigos, ¿Tienes idea de la clase de persona que es hombre? Solo es una sabandija que pronto morirá también, es de las personas mas repugnantes que existe y ni siquiera tu como su hijo lo conoces bien. - hizo una pausa. - oh quiza lo haces y eres igual que él.
- Lo que dices no tiene el mas mínimo sentido solo eres un idiota, ¿que busca? No tengo ni la mas mínima idea de porque me trajiste aqui ¿Porque no solo me matas? No te pareció difícil hacer eso con mis amigos.- su voz sonaba tan fría que quemaría a cualquiera con sus palabras.
- Ellos no valen nada, no son importantes la basura se desecha, y pronto le pasará eso a tu papá.
- Claro porque alguien querría matar a una de las personas mas importantes de italia y corea y salirse con la suya. - espeto con sarcasmo.
- ¿No crees? Tu padre, ¿Porque crees que te mando a busan unos dias? Por vacaciones no cabe duda que eres un ingenuo, tu padre es un mounstro, que le hizo una mala jugada a una de las mafias que estaba aliado, es un asesino, mato a la hermana de Moretti ¿Como crees que se lo tomó el hombre? Tu padre es asesino y al parecer eres el único que no se ha dado cuenta, ¿Quien crees que mato a tu madre eh? En serio crees que murió por causas naturales, por favor deja de ser tan estúpido ¡tu padre la mato, es una asesino un asco de persona! No te das...
El ruido en seco de algo estampandose contra su rostro fue el único sonido en la habitación, el menor se le había acercado, y proporcionado un golpe, cuando volteó a verlo lo miraba con una expresión fría, y lágrimas brotando de sus ojos.
- No vuelvas a decir eso el no mato a mi madre. - su voz ni siquiera tembló, solo sentía rabia mucha rabia.
- Escucha bien. - le tomó de las muñecas y le vió hacer una mueca de dolor, pero aún así no disminuyo la fuerza en la zona. - Tu padre es un mounstro, date cuenta cuando quieras, pero que te quede claro que nunca lo vas a volver a ver ¿Entiendes?.- disminuyo su fuerza y veía el terror en los ojos del pequeño.- Nunca vas a dejar esta casa, ahora eres mío.
Soltó una risa amarga y nego con la cabeza.
- Estas loco. - se soltó de su agarré y le dió una mala mirada.
- Hablo en serio, ni siquiera intentes escapar, hay reglas: No sales, nadie viene a verte, tienes prohibido hablar con alguien sin mi permiso, si necesitas algo le dirás a mi consejero, no preguntas, no vas a lugares donde te llaman, y lo que veas o escuches no le dirás a nadie, desobedece a una y atente a las consecuencias.
Hablaba demasiado en serio, que solo le mandaba señales a su cerebro que mejor no dijera nada, no tenía escapatoria de allí, estaba en medio de la nada, ni siquiera sabía en que pais o lugar estaban, estaba confundido juraba que se iba desmayar su respiración se agitó y sus manos comenzaron, el corazón le latío con mas fuerza y el miedo, de nuevo ese nudo en su estómago y esas ganas de querer esconderse en brazos de su madre se hizo presente, todo lo que escucho era mentira, pero...
¿Porque estaba dudando?.
Otra vez esos recuerdos borrosos, que lo lograba ver con claridad, no entendía si era que no los podía recordar o no quería hacerlo, y miles de preguntas comenzaron a rondar por su cabeza, estaba confundido y la situación no parecía estar a su favor, sus amigos estaban muertos, y su padre pronto lo estaría, quien era su padre en realidad ¿Narcotráficante? ¿Asesino? No era solo un hombre de negocios porque se quería convencer de que todo ese dinero era por compañias y tratos, ¿Que clase de tratos? ¿Que tenían que ver sus amigos en todo esto? Y el interrogante mas grande era:
¿Porque Jeon no me mato?.
Y nuevo otra vez esa sentimiento de que su cuerpo se volvía liviano y todo se tornaba negro.
Espero que les guste :D estaré Actualizando todas las adaptaciones porque si
🍄: minnh-aye
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro