「Ship: Purple x Red」
Pedido por VictoriaLuzGonzalez

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[Narrador/a POV]

"¿Algo mas que Amistad?」

Purple y Red siempre fueron amigos. Desde el momento en que se conocieron, su conexión fue natural. Les gustaban las mismas cosas, hacían los mismos chistes y tenían esa confianza que hacía que todo fuera fácil entre ellos.

Con el tiempo, su amistad se volvió más fuerte. Ya no solo eran compañeros de aventuras, sino que se volvieron inseparables. Si uno tenía un problema, el otro estaba ahí. Si uno estaba triste, el otro lo animaba.

—¿Sabes? Me alegra haberte conocido —dijo Purple una tarde, mientras ambos estaban sentados bajo un árbol.

Red sonrió. —¿Por qué tan sentimental?

—No lo sé… Es solo que, de todas las personas en el mundo, tú me entiendes mejor que nadie.

Red lo miró por un momento, en silencio. Sentía lo mismo.

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Un día, mientras caminaban juntos por la ciudad, se dieron cuenta de algo extraño: iban coordinados sin darse cuenta. Sus pasos, sus gestos, incluso la manera en que hablaban.

—Creo que pasamos demasiado tiempo juntos —bromeó Red.

—¿Eso es algo malo? —preguntó Purple, riendo.

—No, al contrario. Me gusta.

Se quedaron en silencio por un momento. Purple notó que sus manos rozaban mientras caminaban. No se apartó, y Red tampoco.

Finalmente, Purple tomó la mano de Red, con suavidad, sin pensarlo demasiado.

Red lo miró sorprendido, pero en vez de soltarlo, entrecruzó sus dedos con los suyos.

Ambos se detuvieron. Se miraron, sin necesidad de palabras. Lo entendieron en ese instante.

No era solo amistad. Siempre había sido más.

—¿Desde cuándo lo sabes? —susurró Purple.

—No estoy seguro… Tal vez desde siempre —respondió Red, con una sonrisa tímida.

Purple rió. Era una de las pocas veces que veía a Red nervioso.

—Entonces… ¿esto significa que estamos juntos? —preguntó Purple, divertido.

—Solo si quieres —dijo Red.

Purple apretó su mano con más fuerza.

—Siempre he querido.

Y así, sin necesidad de confesiones largas ni de complicaciones, Purple y Red pasaron de ser amigos a algo mucho más grande.

Algo que los dos siempre habían sabido, pero que finalmente tuvieron el valor de aceptar.

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Después de ese momento, Purple y Red comenzaron a explorar su relación de una manera nueva, sin miedo a lo que pudiera pasar. A pesar de que el mundo los veía como amigos, sabían que había algo más entre ellos, algo más profundo y genuino. Se daban cuenta de que, con cada día que pasaba, su conexión solo se hacía más fuerte, y aunque nadie más lo entendiera completamente, no les importaba.

No se trataba de algo temporal ni de una moda. Estaban en algo serio, algo que no necesitaba etiquetas. El amor que compartían no venía de una necesidad de encajar en un molde, sino de la simple verdad de que se entendían y se cuidaban mutuamente.

Un día, mientras caminaban juntos por un sendero solitario cerca de un río, Purple se detuvo y miró a Red. El sol estaba comenzando a ponerse, tiñendo el cielo con tonos cálidos de naranja y rojo. El paisaje era tan pacífico que parecía que nada podría interrumpir ese momento perfecto.

—Me alegra que estemos aquí, contigo —dijo Purple, mirando al suelo.

Red se acercó un poco más, poniéndose frente a él. Su tono cambió, se volvió más serio.

—¿Sabes? —dijo Red, sin dejar de mirarlo—. A veces siento que no merezco tener algo tan bueno en mi vida.

Purple lo miró, confundido.

—¿Por qué dices eso?

Red suspiró. —Porque no siempre he sido la mejor persona. He hecho cosas de las que no estoy orgulloso, y no quiero que eso afecte lo que tenemos.

Purple sonrió, un gesto suave pero lleno de sinceridad. —No me importa tu pasado, Red. Lo que me importa es lo que somos ahora. Lo que somos juntos.

Red levantó la vista, viendo en los ojos de Purple una confianza tan pura que nunca antes había sentido. Era todo lo que necesitaba.

Sin decir una palabra más, se abrazaron. No era un abrazo de amigos. Era el abrazo de dos personas que se conocían profundamente, que habían pasado por mucho, y que ahora se apoyaban mutuamente con una fuerza que superaba cualquier dificultad.

—Te prometo que siempre estaré a tu lado, Red. No importa lo que pase. —susurró Purple en su oído.

Red cerró los ojos, disfrutando del momento, sabiendo que finalmente había encontrado algo que valía la pena, algo que ni el tiempo ni las circunstancias podían destruir.

—Yo también lo prometo, Purple. Siempre.

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La conexión entre ellos siguió creciendo, más allá de los días comunes, más allá de las palabras que a veces se quedaban cortas. Ambos sabían que, a pesar de las tormentas que podían surgir en el camino, se tendrían el uno al otro. Y esa certeza, ese amor tranquilo pero profundo, los mantuvo unidos en todo momento.

[Fin...♡]

★811 palabras★