Luego de aquellos besos que no había llegado a mayores, ambos regresaron al departamento de Jimin para descansar un poco, Jungkook estaba dispuesto a dormir en la otra habitación que había en el departamento del más bajo pero el menor se había negado a dormir totalmente solo, así que Jeon no tuvo otra opción más que dormir con el peli-azul.

La mañana del martes había llegado y el menor no tenía las ganas suficientes para asistir a la Universidad, además que sus heridas y golpes comenzaban a doler un poco, Jimin fue el primero a despertarse y sentir los brazos de Jungkook sobre su cintura abrazándolo, el peli-azul sonrió ante aquel acto del pelinegro y que no quería romper o separarse, pero su estómago pedía comida urgentemente.

El peli-azul se levantó perezosamente y con cuidado de no despertar al mayor, una vez lo consiguió salió de la habitación para caminar hasta la cocina y comenzar a preparar algo para que desayunara el pelinegro, unos minutos después luego de haber preparado todo sirvió un poco de lo que había preparado para el en uno de los platos y sentarse dispuesto a comer en total silencio mientras esperaba a que Jeon se despertara ya que no quería interrumpir al pelinegro quien dormía tranquilamente en su habitación.

Todo parecía estar tranquilo hasta escuchar el timbre de su departamento sonar, el menor se levantó dándole un sorbo a su yogurt y caminar hasta la puerta y abrirla encontrándose tras ella a su madre seria y entrar sin pensarlo dos veces el cual el peli-azul la siguió.

— ¿M-Mamá? — Pregunto el menor confuso. — ¿Qué haces a...

Sus palabras se quedaron en el aire al sentir la mano de su madre sobre su mejilla, el peli-azul miro a su madre sorprendido por el repentino golpe que le había dado y sentir sus ojitos cristalizarse por el dolor.

— Tu acaso no entiendes el no causar problemas ¿¡verdad?! — Dijo su madre furiosa.

— ¿De qué éstas hablando mamá? — Preguntó Jimin.

— Tú sabes a lo que me refiero Jimin... ¡¿Golpear a Taemin fuera de la Universidad no fue suficiente que tuviste que ir y golpearlo en su salón?!, casi lo matas y sus padres están totalmente furiosos por ello — Exclamo su madre. — Es que acaso no sabes hacer algo bien...

— Mamá yo solo me defendí, el me golpeo, que acaso no ves las heridas y golpes que tengo los cuales él tiene mucho que ver en ello — Dijo el peli-azul.

— No digas tonterías Jimin, esto ya llego a su límite — Dijo su madre molesta. — No puedo creer que hayas golpeado y mandado al hospital a Taemin... Eso es algo inaceptable en nuestra familia...

— ¡Entonces prefiero no ser parte de esta asquerosa familia! — Grito el más bajo molesto.

La mujer miro molesta al chico, levanto su mano dispuesta a dejar otro golpe en la mejilla del peli-azul, pero que fue interrumpida por otra voz.

— Pone una mano sobre él y no sabe de lo que soy capaz de hacerle — Amenazó la voz de Jungkook totalmente serio.

La mujer giro su rostro viendo a un chico de cabellera negra y un cuerpo ejercitado su vista se posó en los tatuajes que se encontraban en su cuello y brazos, pero solo uno logro llamarle más la atención los cuales consistían en unas alas de demonio negras y en medio de estas una especie de espada, la mujer vio a aquel chico tomar el brazo de su hijo y atraerlo a su cuerpo algo que a la mujer le desagrado.

— ¿Quién eres tú y qué haces en casa de mi hijo? — Pregunto la mujer seria.

— Jeon Jungkook soy el novio de su hijo y por ente puedo venir a su departamento las veces que quiera — Respondió el pelinegro serio.

El peli-azul se sorprendió por lo que Jeon había dicho, pero no dijo nada, solo esperaba que su madre no hiciera nada tonto y terminara molestando al pelinegro.

— ¿Novio?, mi hijo no tiene novio — Dijo la mujer seria.

— Entonces eso significa que él no le tiene la suficiente confianza para contarle todo sobre la vida de él, la cual por lo que vi solo le importa la maldita imagen antes de la felicidad de su propio hijo — Dijo el pelinegro.

— ¿Quién te crees tu para hablarme de esa forma?, solo porque eres el novio de mi hijo no significa que me tengas que hablar así ya que, si es de mí en este preciso momento hago que mi hijo se aleje de ti ya que no eres alguien digno de estar con él... — Dijo la mujer molesta.

— Inténtelo y verá que el me elegirá a mi antes que a dos pares de idiotas que tiene como padres los cuales no les importa el cómo se encuentre o se sienta en lo más mínimo — Aseguro el pelinegro serio.

— Jimin ¡¿En serio dejaras que este tipo te diga que hacer?! — Dijo su madre mirando al peli-azul.

El menor miro a su madre y luego dirigir su vista a Jungkook totalmente molesto viendo a su madre.

— Lo siento mamá, pero estoy harto de que siempre defiendas a alguien más en vez de tu propio hijo, siempre seguí tus órdenes y jamás desobedecí alguna orden tuya, pero ya no más — Dijo el peli-azul viendo a su madre. — Jungkook a estado conmigo en los peores momentos cuando tu solo te interesaba el que dirían los demás, así que te pediré que te vayas si era todo lo que me ibas a decir...

La mujer miro sorprendida a Jimin y miro totalmente molesta y seria al pelinegro totalmente quien no quitaba su vista de ella.

— Bien, solo espero y no te arrepientas de las consecuencias Jimin, ya que desde este momento te olvidas de que tienes padres — Dijo la mujer saliendo del lugar.

El menor miro sorprendido y destrozado a las duras y crueles palabras que le había dicho su madre y sus ojitos cristalizados sintiendo como en cuestión de minutos salir de sus ojos, vio como su madre salía del lugar dejándolo solo con Jungkook quien camino hasta Jimin y abrazarlo.

— No te guardes todo ángel, recuerda que te dije que yo sería la persona que te levantaría en los peores momentos... — Dijo Jungkook.

El peli-azul no lo dudo no un minutos y abrazo el cuerpo de mayor sintiendo sus lágrimas salir y las leves caricias en la espalda que el pelinegro le brindaba, mientras a Jimin le dolía lo que su madre la había dicho ya que ella estaba siendo engañada y solo esperaba que no se arrepintiera después.

— Ya no llores ángel, ahora yo estaré junto a ti — Le aseguro el pelinegro.

— P-prométeme que jamás te irás o me dejaras solo... - Pidió Jimin viendo a Jungkook.

— Lo prometo ángel — Dijo el pelinegro acariciando el rostro del peli-azul y unir sus labios en un tierno beso.

Transmitiéndole todo ese cariño y amor que comenzaba a crecer en ambos...

(... 🤍 ...)

La mujer llego a la oficina de su actual esposo totalmente molesta, el hombre al ver a su esposa camino hasta ella.

— ¿Sucede algo? — Pregunto su esposo viendo a la mujer.

— Él está aquí, tal y como aquel hechicero lo dijo... — Dijo la mujer. — Debemos hacer algo antes que nuestro plan se vaya a la basura por culpa del hijo menor de Jeon JungHyun...

— No podemos, necesitamos a Jimin aquí para el plan y el proyecto — Respondió el hombre.

— ¿Entonces que sugieres?, dejarlo con ese chico que le puede meter ideas locas o descifrar que no somos sus verdaderos padres de Jimin — Dijo la mujer alterada.

— No si somos discretos, recuerda que para que Jimin logre saber quién es debe de recordar su pasado lo cual es imposible — Le aseguro aquel hombre.

— Si es que ese demonio no lo marca — Le recordó la mujer.

— Entonces eso nos beneficiaría para el proyecto ya que Jimin finalmente sería lo que nosotros necesitamos....

De un demonio....

(... 🤍 ...)