🤍 07.
Sus ojitos se abrieron lentamente viendo la claridad por fin, pero se sobresaltó al ver las paredes de color gris algo totalmente diferente y más al no ver sus heridas en sus brazos y cuerpo.
Giro su rostro viendo una pequeña cuna a lado de la cama algo que lo confundió aún más, se levantó y camino hasta aquella cuna viendo a un pequeño cuerpo de un bebé totalmente dormido, sus pequeños labios esponjosos, unos lindos y rellenitos cachetitos un bebé sumamente lindo y tierno.
Entonces la puerta de la habitación se abrió viendo a una pareja entrar y caminar hasta la cuna viendo al bebé con una gran sonrisa.
— Es muy pequeño y hermoso amor... — Dijo la mujer viendo al bebé.
— Lo se cariño nuestro bebé es el más lindo de este lugar — Contestó el hombre sonriendo.
El peli-azul miro la escena totalmente feliz y conmovido, ojalá y sus padres fueran así con el.
De pronto todo se volvió oscuro y vio a la pareja totalmente dormida y a un lado la cuna donde el bebé estaba totalmente dormido, Jimin miraba al bebé entretenido, sin duda era el bebé más lindo que había conocido en su vida, entonces vio a otro cuerpo junto al suyo vestido de negro, el peli-azul miraba asustada a aquella persona que tomaba al bebé y salía del lugar con el bebé en sus brazos.
El pequeño no tardó mucho en comenzar a llorar sobre saltando a la pareja quien se levantó para atender al bebé y asustarse al no verlo y salir de aquella habitación en busca de su bebé.
Jimin corrió a la ventana de aquel cuarto viendo a la persona de negro subir a un auto junto al bebé y alejarse del lugar, él se sintió totalmente mal por aquella pareja quien buscaba sin descansar a aquel bebé, sin poder creer lo que aquella persona había hecho.
Pero había algo que había llamado la atención del peli-azul y era que aquella persona tenía un parecido a alguien le conocía pero que no lograba recordar...
(... 🤍 ...)
Sus ojos se abrieron con brusquedad y sentir su respiración acelerada, miro todo el lugar viendo que se encontraba en su habitación, trato de levantarse, pero su cuerpo dolía demasiado, con sumo cuidado sentó su cuerpo y justo cuando iba a levantarse vio el pelinegro entrar junto a un plato de ramen y un vaso de jugo de naranja.
— ¿Qué tratabas de hacer? — Pregunto Jungkook dejando las cosas en la mesita de noche del peli-azul.
— I-Iba a levantarme — Respondió Jimin.
— Lo siento pequeño ángel, pero no lo harás, debo curar tus heridas y ver si si graves, mientras no te vas a levantar — Dijo el pelinegro.
El peli-azul mordió un poco su labio asintiendo.
— Bien iré por el botiquín no te muevas de aquí — Le advirtió el pelinegro.
Unos minutos después el pelinegro regreso al cierto con el botiquín en sus manos, dejó a un lado este para luego ver al peli-azul.
— Necesito que te quites la camisa ángel, para poder revisar las heridas...
El más bajo asintió sonrojado para quitarse tímidamente su camisa con ayuda del pelinegro notando los golpes y pequeñas heridas que habían ovacionado estos, el pelinegro comenzó a curar las heridas del peli-azul con sumo cuidado a no lastimar lo, colocando un poco de algodón con alcohol en las que estaban más abiertas y tenían un poco de sangre y un poco de pomada en las menos graves.
— ¿Quién te hizo esto Jimin? — Preguntó el pelinegro curando al menor.
— T-Taemin... E-El chico del cual me salvaste la otra vez, auch... — Se quejó el peli-azul.
— Lo siento ángel —Se disculpo. — En cuanto a ese tal Taemin me las va a pagar por hacerte estas heridas — Dijo el pelinegro molesto.
— No te preocupes, lo golpee con un jarrón que había en el lugar, solo espero y no me traiga consecuencias después — Dijo Jimin.
Jungkook asintió siguiendo con su labor, tomó un poco de pomada para colocarla en uno de los golpes para que tranquilizara el dolor, pero lo que más le llamó la atención fue una pequeña marca en la cintura de Jimin, el cual era unas alas de como las de él, pero con una pequeña corona arriba de esta.
Frunció su ceño confuso por ello y aquello lo vio el peli-azul.
— ¿Sucede algo? — Pregunto Jimin viendo al pelinegro.
— ¿Qué es esto? — Pregunto el pelinegro señalando la marca del peli-azul.
Jimin miro el lugar señalado viendo una pequeña marca en su cuerpo.
— No lo sé, jamás había visto esa marca en mi vida — Dijo el peli-azul viendo la marca.
El pelinegro miraba atento aquella marca, confuso ya que aquella marca solo podía crearse o aparecer por la Unión de un demonio y un humano...
Pero solo conocía a alguien quien era experto en el tema y que debía ir con el lo antes posible para saber si sus teorías no le estaban haciendo una mala jugada.
— ¿Sucede algo Kookie? — Preguntó el peli-azul.
El pelinegro levantó su vista y negó tomando el rostro del peli-azul entre sus manos.
— Nada de eso, simplemente pensé que era un tatuaje o algo por el estilo — Excusó el pelinegro sonriendo.
— No, nada de eso, es más ni sabía que tenía esa marcar — Dijo Jimin.
— Luego nos encargamos de ello ahora come un poco mientras dejó el botiquín en su lugar...
— No te vayas... Quédate aquí conmigo por favor — Pidió el peli-azul con un ligero puchero.
El pelinegro asintió dejando un beso en la frente del peli-azul.
— Esta bien, pero come lo que te he traído por favor — Pidió el pelinegro.
El peli-azul asintió tomando el plato de ramen y comenzar a comer lo que el pelinegro le había preparado, sin duda Jungkook era la persona que más se preocupan por el...
Unos minutos después el peli-azul había terminado y ahora se encontraba tomando su yogurt que le había pedido al pelinegro que le trajera luego de haber terminado todo lo que le había traído, el pelinegro no apartaba su vista de él, algo que lo hacía sonrojarse una que otra vez por ello.
El peli-azul sintió las manos del pelinegro sobre su rostro limpiando unas gotas de yogurt que había derramado en este algo que lo sorprendió.
— Tenías tu labio manchado — Dijo el pelinegro sonriendo.
— Gracias — Agradeció el peli-azul.
— Espera te falto una parte — Dijo el pelinegro.
Jimin vio como Jeon se acercaba a el para limpiar su labios y mirarse atentamente los dos en una atmósfera de tensión y deseo.
El peli-azul fue acercándose poco a poco el cuerpo de pelinegro hasta sentir sus labios mezclarse entre ellos dos y sentir nuevamente aquel sentimientos que ambos comenzaban a experimentar y crear ambos.
Siendo este su destino que pronto les traería felicidad y a más vez preocupación y peleas entre ellos..
(... 🤍 ...)
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro