Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

𝘗𝘢𝘳𝘵 𝘚𝘪𝘹: episode II


Los días pasaban con rapidez mandando al olvido mi cumpleaños y todos los sentimientos de éste. Yuri estaba mejor del estómago, resulta que tenía un virus de estómago común y tuvo que pasar dos noches en el hospital por deshidratación.

La misma noche de mi cumpleaños JiEun me encontró comiendo helado en pijama mientras veía una película de esas que te hacen llorar a mares, justo lo que quería hacer en mi cumpleaños. Me regañó y me dijo que no me cabría el vestido de Seokjin, luego me dio un besito en la frente y se sentó a mi lado. Un tanto confuso todo.

El trabajo de historia del arte iba demasiado bien, Namjoon y yo solíamos reunirnos en la biblioteca para ver el diseño de nuestro museo y cómo podrían ir las obras seleccionadas, decidimos tener un museo con grandes columnas corintias blancas, decoraciones rococó y alfombras rojas. Demasiado imaginario para ser real. Al menos es bonito.

Todos nos repartimos el trabajo en partes y nos quedábamos en el campus hablando sobre la exposición y sobre cómo la podríamos hacer más divertida y especial.

-No puede ser más divertida y especial de lo que ya lo es- dijo Sunhee.

-Siempre se puede ser más especial- añadió Namjoon sin despegar la mirada del libro de arte.

Cada día me convenzo más de que Kim Namjoon es un ser etéreo que se desvanecerá entre mis dedos si trato de tocar una fibra de su cabello.

Y así abril se convirtió en mayo.

-Debemos quedar.

Namjoon se posicionó a mi lado y caminó conmigo.

-¿Pasa algo?- pregunté.

-Si, que queda menos de un mes para la presentación y tengo la sensación de que nos falta mucho por hacer.

Ese era Namjoon, repasaba las cosas veinte veces para asegurarse de que cada letra y punto están en su sitio. Es un perfeccionista pesado, pesado y guapo, muy guapo.

-Si no te sientes seguro podemos quedar esta misma tarde- dije y me paré enfrente de la clase que me tocaba.- Pero te advierto de que hasta las decoraciones doradas de las columnas han sido examinadas cincuenta veces por mis expertos ojos.

-Pues tus expertos ojos harán un poco más de trabajo hoy- le sonreí divertida.

-Está bien, Nam- dije- Dime hora y saldré antes.

-¿Te importa si es en mi casa?- preguntó, negué- Bien, tiene que llegar un paquete importante y no sé a qué hora llega, así que tengo que estar en casa- asentí- Ahora aviso a los demás. ¿Sales a las tres?

-Sip- dije y vi cómo el profesor se acercaba al aula- Bien Namjoon, te dejo, luego nos vemos- le di una última sonrisa y entré al aula.

Hoseok me saludó desde la tercera fila, le sonreí y puse rumbo a su lado.

-¡Jojo!

JongIn me paró en medio del camino con una gran sonrisa adornando su brillante cara.

-¿Por qué estás tan brillante?- le pregunté.

-Me pongo una crema nueva- se acarició la cara- Pero no es el punto.

-Dime.

-Cómo te has perdido la primera clase del día debo decirte que a principios de junio hay un trabajo conjunto y tu clase de diseño gráfico y la mía de diseño de moda se van a fusionar- le miré raro.

-¿Y qué más?- pregunté.

-Yo diseñaré ropa que me pondré y tu harás fotos que editarás- JongIn saltó con ilusión sobre sí mismo.

-¿Vamos juntos?- pregunté, él asintió frenéticamente- Estamos perdidos- murmuré.

-¡Vamos a sacar buena nota!- dijo sin perder la sonrisa- ¡Con tu talento y mi belleza haremos magia!

-¿Me has llamado fea?- pregunté pero JongIn comenzó a zarandearme de un lado a otro.

-¡No es el punto, Jojo!

-Suficiente- dije mareándome.

-¡Sesión de fotos de pareja!- exclamó.

-Si se supone que tú modelas y yo hago las fotos no hay sesión de fotos de pareja- dije.

-Si que hay, conozco a alguien que hace unas fotos maravillosas y nos puede ayudar en ese momento- JongIn se veía muy feliz, así que aceptaré hacer el trabajo con él y podré vivir en paz el resto de la semana.

-Está bien- dije finalmente- ¡Pero yo elijo el tema!- él asintió y me moví para ir a mi sitio- ¡Y deja de usar esa crema! ¡Vuelve a la de bebé!- él me miró indignado.

-¡Jojo!

Sonreí sentándome en su sitio y Hoseok me miró con gracia.

-Así me dará tiempo de pensar- le dije y justo entró el profesor.

-¿Te hace un ahorcado?- preguntó Hobi, le miré seria.

-Siempre me hace un ahorcado.

Kim Namjoon me esperaba en la salida con la cara metida en el teléfono y el ceño fruncido.

-¿A qué viene ese ceño fruncido?- pregunté acercándome, cuando me escuchó guardó su teléfono y relajó su expresión para sustituirla por una pequeña sonrisa con hoyuelos. Hoyuelos que son de lo más apretujables.

-No es nada- dijo- Lo demás irán viniendo, les he mandado la ubicación, ¿Vamos juntos?- asentí.

Namjoon me contó trivialidades mientras caminábamos a su pequeño apartamento, la conversación se hizo todavía más cómoda cuando pasamos a contarnos anécdotas de nuestra vida y él me contó que tiene tendencia a romper las cosas cuando las toca.

-No puede ser- dije riendo- Tienes ese aspecto tan dulce y de bueno que no te veo capaz de romper nada- él también rió y se paró enfrente de mi ocasionando que chocara con su espalda.

-Disculpa- dijo, negué.

-No es nada- dije tocándome la nariz- ¿Llegamos?- pregunté.

-Si, aquí es.

Namjoon abrió dos puertas para poder ingresar al edificio, me llevó al ascensor dónde apretó el botón seis y me explicó que tenía un perrito llamado Moni que a lo mejor ladraba por las nuevas visitas.

-Me gustan los perros- dije- Aunque tenga un gato- señalé.

Namjoon me volvió a guiar a otra puerta al final de un pasillo pintado en blanco con una planta en medio, él la apartó un poco con el pie y tecleó el número de la puerta.

-¿Esa planta es tuya?- pregunté entrando a la casa. Oí su grave risa.

-Si, antes era pequeña, pero no tengo tanto espacio en casa.

Cierto era, mientras me quitaba las zapatillas me quedé embobada viendo la cantidad de plantas que Namjoon tenía por toda la casa, desde colgadas en el techo hasta encima de las mesas y estanterías.

-¿Alguna vez te he dicho que soy alérgica al polen?- pregunté.

-¿Enserio?- él me miró preocupado y fue corriendo a abrir las ventanas- ¿Así está bien?- dijo desde otra sala.

La entrada tenía enfrente un pequeño pasillo con dos puertas, la cocina a mi izquierda y una pequeña sala de estar, Namjoon se encontraba en esta mirándome.

-Así está bien- dije y unos ladridos me cortaron, del pasillo venía un perrito blanco mediano y peludo.

-Moni- llamó Namjoon. El perro dejó de mirarme con desagrado y fue hacía su dueño, luego me hizo una seña para que me acercara. Negué- Vamos, no muerde, es muy bueno, ya verás, una vez le hagas carantoñas te querrá- sonrió y me acerqué.

Moni al principio olisqueó mi mano y miró a su padre buscando aprobación, al ver que este agarraba mi mano para acariciarle acercó su cabecita para que pudiera completar la acción.

-¡Qué suave!- exclamé y me solté de Namjoon para seguir acariciando a su mascota.

-¿Quieres un café?- preguntó Namjoon, mientras me sentaba en la mesita de centro de la sala de estar.

-Claro- contesté.

Media hora después no me quedaba café, Moni descansaba en mi regazo y Namjoon y yo estábamos perfeccionando todos los puntos de la presentación. Ni rastro de Sunhee y Jongho.

-¿Cuándo vendrán Sunhee y Jongho?- pregunté.

Namjoon iba a contestarme cuando el timbre de la casa sonó, se levantó diciéndome que podrían ser ellos, pero pasados unos minutos volvió con un paquete en la mano.

-No eran ellos- dijo, dejó el paquete en el sofá y yo lo miré mal.

-¿Y bien?- él desvió su mirada de la mía y recorrió la sala con los ojos un tanto nervioso.

-Parece que no van a venir- me crucé de brazos.

-¿Les has dicho que vengan?- pregunté. Él se rascó la nuca y me miró con culpabilidad- Eres increíble, Kim Namjoon- cogí el bolígrafo y seguí corrigiendo mi parte del guión, un rato después Namjoon se levantó de su asiento y rellenó su taza de café y la mía.

-Una pregunta, Joohyun- dijo sentándose enfrente de mí. le miré- ¿Ya no...- miró a otro lado nervioso- Ya no... estás con nadie...¿no?- le miré sin entender que me quería decir.

-No te entiendo.

-Si- dijo- Sí ya... Si ya no estás con Park Jimin...- dijo tímido.

Lo miré sin saber a dónde quería llegar.

-Nunca he estado con Park Jimin- dije.

-¡¿Enserio?!- sonó más emocionado de lo que quería aparentar, enarqué una ceja- Disculpa.

-¿Por qué lo preguntas?

-Porque...- se aclaró la garganta- Me preguntaba si querrías salir conmigo, es decir, me pareces muy interesante y eres atractiva, me gustaría tener una oportunidad contigo.

Le miré con un poco de pena, no creo que una relación sea lo que necesite ahora mismo.

-Namjoon, yo...- comencé pero él me cortó.

-Quiero que sepas que iré totalmente en serio, quiero demostrarte que puedo ser el último, no te abandonaré y me quedaré a tu lado pase lo que pase- dijo apartando la timidez.

-No lo sé- hice una mueca.

-Tienes tiempo de pensarlo- me sonrió y cerró el libro que estaba leyendo con una sonrisa.

Es la primera vez que nadie me insiste por algo como esto. Me ha hecho sentir bien.

-Lo pensaré- le sonreí, él me miró con ilusión y asintió.

A lo mejor Kim Namjoon si podía ser el último.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro