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━Capítulo Siete




❝𝐌𝐀𝐍𝐓𝐄𝐍𝐄𝐑𝐍𝐎𝐒 𝐒𝐄𝐏𝐀𝐑𝐀𝐃𝐎𝐒 𝐄𝐒 𝐔𝐍𝐀 𝐌𝐈𝐒𝐈Ó𝐍 𝐈𝐌𝐏𝐎𝐒𝐈𝐁𝐋𝐄❞








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〘 ✰.༄☼︎ 𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟎𝟕☼︎༄.✰ 〙
—– bienvenida —–

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ROWAN OBSERVABA ATENTO LA HABITACIÓN A SU ALREDEDOR A LA ESPERA DE LA LLEGADA de la mujer que los dejaría quedarse en Alexandria y a decir verdad estaba asustado por lo que llegará a decirle. No quería irse.

Momentos más tarde una mujer
castaña, la llamada Deanna y le hizó una seña para tomará asiento en el sofá frente a él mientras se dirigía a una mesita en la que había una cámara de video encendido.

De pronto Rowan se sintió algo incomodo e inseguro de estar a solas con la desconocida principalmente porque estaba siendo ahora grabado.

—Soy Deanna Monroe.

—Rowan Everson —musitó el chico antes de dirigir la mirada a la camara con confusión y señalarla —. ¿Por qué encendió esa camara? ¿Qué se supone que es esto?

—Tranquilo, Rowan. Te aseguro que
no es para nada malo —mencionó Deanna tomando asiento en el otro sofá quedando frente a frente —. Aquí somos muy transparentes.

Rowan asintió no tan convencido, pero lo hizó sin poder apartar la mirada algo asustado de la cámara encendida.

—Dime Rowan, ¿hace cuanto que estás afuera?

—Desde que comenzó todo este desastre.

—¿Conocías al grupo?

—Como seguramente le dijo mi hermana sabrá que nosotros conocimos a Rick después de estar solos por un periodo de tiempo relativamente largo —empezó a decirle con seguridad mientras la mujer se acercaba un poco más atenta —. Solo nos tenemos los unos a los otros. Somos una gran familia y eso es todo.

—Quisiera saber tu edad.

—Hace poco cumplí diecisiete.

—Así que supongo que tuviste que hacerte cargo de tu hermana, ¿cierto?

—Así es.

—Muchas familias desaparecieron
con todo esto, pero me alegra saber que ustedes continuan juntos —comentó Deanna con una sonrisa amigable.

—Es mi única hermana, mi sangre y daría mi vida por ella —respondió el rubio con un tono duro mientras un par de imagenes se le venían a la cabeza.

Desde el comienzo de esto había
pasado por mucho; la muerte de sus padres, la huida del campamento de Atlanta, la llegada a la granja de los Greene, el disparo de Rylie, la caida de la prisión, Terminus, la iglesia y en todo eso estuvó cuidando de su hermana y aunque ya supiera como defenderse por su cuenta era su hermana y la cuidaría con su vida si era necesario.

—Ella haría lo mismo por ti lo sé —mencionó Deanna luego de unos segundos de silencio antes de hablar
de nuevo con un tono duro —. Dime Rowan, ¿por qué crees que tu grupo debería quedarse en Alexandria?

—Porque lo merecemos, todos merecemos un lugar al que podamos llamar hogar —respondió Rowan alzando la mirada con firmeza al mismo tiempo que sientía un nudo en la garganta —. Sinceramente a este punto me da igual que tan bien este, lo único que quiero es proteger a mi familia. Se que Judith merece más que ir siempre con el estómago vacío y dormir en el suelo con mi hermana. Solo queremos descansar de esto un poco. Ustedes no han vivido ni la mitad de los horrores del exterior que nosotros.

Deanna asintió en silencio sin saber exactamente que decirle pues en parte era verdad. Estar afuera era ir a que te matáran gratis y nadie quería eso.

Los hermanos Everson tenían el don
de dejarte perplejo con sus palabras y era algo que Deanna acababa de vivir.

—Gracias por esto, Rowan. Lo tomaré en cuenta.


































——— ✮✧☾✧✮ ———






























Cierto rubio descansaba en su cama mientras sostenía el libro que tomó robado de su hermana. Leer ayudaba a alejar su mente de cada evento horrible que lo perseguía hasta la mente como también impedía que se volviera loco del aburrimiento.

Con suerte ya habría rebasado la página en que se quedó Rylie.

Con pereza cerró el libro y lo dejó en la mesita de a lado para así ponerse de pie y estirarse soltando un bostezo en el proceso.

Fue en ese momento que le pareció ver
a una chica con una mochila acercarse a los muros. Si, para su desgracia las casas que les dieron estaban a nada de los muros. Si estos caían serían lo primero que los caminantes se cenarían.

Con rápidez e intentando ser lo más cuidadoso posible se acerco a la ventana para ver más de cerca y se percató de algo. ¿Esa chica era Enid? ¿Qué hacía?

Simplemente se quedó parado frente a la ventana agachado para ver que tanto hacía y de la nada pensó que si lo llegaba a ver espiandola por la ventana quedaría marcado como un acosador.

Rowan, el acosador. Pensó el rubio y sin poder evitarlo rió por lo bajo.

Volvió su atención a la chica que con habilidad y agilidad empezaba a trepar los muros siendo cuidadosa a la hora de pisar las rejas de las puertas hasta que en pocos minutos ya estaba del otro extremo de los muros.

Rowan preocupado se acercó a los cajones y tomó un cuchillo pequeño que se robó de la cocina. Lo tenía guardado solo por si era necesario usarlo y por lo visto ahora era necesario sacarlo.

Con el arma en manos abrió la ventana y se fijó a todos lados asegurandose de que nadie lo viera fugarse.

Su hermana estaba demasiado ocupada en la sala cuidando de Judith con Carl y dudaba que notará su ausencia pues si estaba con el castaño se olvidaba de que tenía hermano mayor.

Solo por eso te odio Grimes, roba hermanas.

Sacudió su cabeza alejando esos pensamientos y con cuidado saltó por la ventana soltando un quejido apenas cayó al cesped. Con suerte sus tobillos
no se habían fracturado.

Poco a poco se acercó al muro y con sumo cuidado de no pisar mal y que sus pies se atoraran en las rejas logró cruzar del otro lado de los muros.

Era un bosque, uno medio seco por lo visto.

Comenzó a moverse con rápidez entre los árboles para no perder de vista a la chica pues tenía miedo de que se fuera demasiado lejos y se perdiera o bien que un caminante llegará a atacarla o algo.

El chico se escondió detrás de un árbol observando sus próximos movientos y la jóven se detuvó mirando a donde ir. Fue así como de la nada salió corriendo en una dirección vaga y Rowan corrió tras de ella preocurando que no lo viera.

Llegó a un claro rodeado de árboles
y hojas secas, pero Enid ya no estaba
y soltó un suspiro lleno de frustración apenas se dió cuenta que la perdió de vista.

Grandisímo idiota, reclamó para si mismo mirando en todas direcciónes preocupado. La perdiste.

Dió un último vistazo antes de continuar explorando por dónde vino y fue así como llegó a una casa en ruinas pues escuchó ruidos y no evitar dirigirse hacía allá.

Se sorprendió un poco al encontrar
a Rick parado frente a la casa con un pequeño cuchillo entre sus manos.

El hombre alzó la mirada al rubio antes de girarse en dirección a unos gruñidos que se aproximaban. Eran caminantes.

Ambos hombres se acercaron un poco tomando con fuerza el mango de sus armas esperando el momento adecuado para comenzar la matanza de zombies.

—Preparate.

Rick fue el primero en acercarse a un caminante clavado el cuchillo en el vientre del zombies y después en su cabeza. Rowan derribó a uno como pudó y en segundos se encargo de acabar con él. Así entre los hasta hasta que solo quedó uno del que se encargó Rick.

Aparentemente ya se habían echo cargo de todos cuando de repente de entre unas mantas en el suelo un caminante tomó a Rick del tobillo.

Rápidamente entre ambos hombres acabaron con el zombie que forcejeaba contra el mayor, solo faltaba el zombie entre las mantas.

Rick se disponía a matarlo, pero
Rowan le hizó una seña para que le pasará el tubo de metal y después de unos segundos Rowan transpasó el cráneo podrido del caminante con este.

Uno menos.



























——— ✮✧☾✧✮ ———

















































































Rowan venía pateando una piedra
en el camino a un lado de Rick en lo
que llegaban a Alexandria. Ambos se encontraron pronto con un grupo de exploración en el que estaban Glenn, Tara y Noah que se adelantaron a llegar.

Cual no fue su sorpresa al llegar y ver que Glenn y Aiden, el hijo de Deanna se estaban agarrando a golpes. Glenn fue rápido y esquivó al chico antes de darle un golpe de regreso y mandarlo al piso.

Daryl y Nicholas también se habían agarrado a golpes. El ballestero lo tenía contra el suelo agarrado del cuello.

—¡Aiden, ya es suficiente! —exclamó Deanna a su hijo con preocupación —. ¡Dije que ya basta!

Rápidamente el líder corrió a apartar
a su amigo de encima del otro hombre evitando el comienzo de otra pelea.

—No empecemos ahora —susurró Rick a su compañero alejandolo del hombre.

—Diselo.

—¿Quieres otro ojo morado? —
cuestionó Michonne al ver Aiden retando al coreano con la mirada.

—Ya está, ¿okey?

—Daryl, vámos...

Finalmente Rick logró hacer qje Daryl
se apartará de Nicholas de mala gana y ahora el ambiente se ponía cada vez más tenso pues el de la ballesta no se veía tan amistoso como para dejar eso así.

Rowan simplemente se mantenía al margen de la situación junto a la puerta principal a un par de metros suyo estaba Enid viendo la escena frente a ellos.

Rylie y Carl no tardaron en llegar apenas escucharon gritos.

—Prestenme mucha atención, ¿si? —exclamó Deanna mirando a todos los presentes —. Rick y su gente son parte de la comunidad. Son pares, en todo sentido. ¿Entendido?

Por la mirada que le dió al final a su
hijo, se veía claramente que lo último iba dirigido al hombre a su lado.

—Entendido.

—Quiero que todos entregen sus armas y ustedes dos se las verán conmigo —mencionó Deanna al grupo para luego dirigir su atención a Aiden y Nicholas.

Unos instantes después la mayoría de
los alexandrinos se fueron de regreso a sus casas de modo que solo quedaron los integrantes del grupo de Rick y por lo visto Deanna les decía algo al grupo.

Rowan se giró a otra dirección y su mirada se encontró con la de Enid, quien solo lo miró sin expresión alguna. Solo mirandolo con el ceño algo fruncido.

—No te agrado, ¿cierto?

La castaña simplemente bajó la mirada sin decir nada más y se fue dejandolo ahí parado mientras a un par de metros Rylie veía aquella mini interacción con curiosidad.

Primero su hermano se escapaba de
la nada sin avisar a dónde iba y ahora llegaba y cruzaba palabras con Enid. ¿Exactamente que traía entre manos? ¿Y por qué sentía una presión horrible en el vientre? Iba a averigüarlo pronto.




































———  ✮✧☾✧✮ ———



































Rylie se mantenía tranquila en una de las habitaciones leyendo su libro cuando de repente tocaron a la puerta y con un gesto de frustración se pusó de pie para ir a abrir a quien fuera que molestará.

—Carl, ya te dije que no molestes mientras...

La chica se calló al instante apenas
vió en su puerta a Rick acompañado de la madre de Ron, Jessie Anderson.

—Hola, Rylie —saludó Jessie acercandose con una esplendida
sonrisa —. Traje algo para ti. Esperaba que usaras alguno esta noche.

—¿Esta noche? —preguntó la chica frunciendo el ceño mirando confusa a Rick —. ¿Qué habrá esta noche?

—Una fiesta de bienvenida para
ustedes por supuesto —informó Jessie emocionada adentrandose a la habitación con varias bolsas en las manos —. Pruebatelos y si te gustan puedes quedartelos, apuesto que te verás hermosa con ellos.

Rylie aún algo confusa por toda la cosa esta de la fiesta de bienvenida tomó las bolsas para inspeccionarlas y fue en ese momento que se percató de algo.

—¿En serio? ¿Vestidos?

—Busque por todos lados y solo esos encontre.

Rylie quería decir que no estaba muy contenta de llevar un vestido puesto que hace siglos que no usaba uno, pero Jessie se veía tan alegre así que simplemente le correspondió la sonrisa y se acercó para abrazarla.

—Están preciosos —comentó Rylie separandose de ella esforzandose para que sonara creible —. Me los probaré al rato y veré cuál me gusta más. De todos modos muchisímas gracias.

—A tu hermano también le traje algo de ropa, seguro se verá más apuesto.

Rylie soltó una risilla y asintió.

Rick y Jessie salieron de la habitación dejandola de nuevo a solas y sabiendo que no podría faltar a la fiesta esa tomó una muda de ropa dirigiendose al baño para comenzar a prepararse.

No sería lo que llevaría en si, pero si quería arreglar a Judith para antes de
la tarde debía ser cuidadosa. No podía arreglarse aún mientras Judith estaba con ella porque o terminaba llena de papilla o llena de agua de la bañera.

Una vez terminó fue por Judith y tal como predijo intentando bañar a la bebé termino empapada de la blusa y parte del pantalón.

—Eres una niña muy traviesa, Jude —soltó Rylie arropando a la niña con una toalla para dirigirse a la habitación —. ¿Dónde deje tu ropa? Quedáte quieta.

Estaba rebuscando en la maleta de
la niña cuando la puerta fue abierta de repente. Instantaneamente la rubia se giró a ver de quien se trataba y sonrió al ver a Carl adentrarse a la habitación.

—¡Judith!

La bebé soltó una risilla apenas vió a su hermano acercarse a ella y aplaudió un par de veces.

—A tí te quería encontrar —comentó Rylie dandole un golpecito con la ropa de la niña llamando su atención.

—¿Para que me necesitas?

—Pues quiero arreglarme y necesito que alguien se ocupe de Judith —respondió con tranquilidad dandole un toquecito en la nariz a la mencionada —. ¿Puedes?

—Por supuesto.

Rylie sonrió emocionada antes de
dejar un fugaz beso en su mejilla y salir rumbo a la ducha a darse un baño rápido. Si quería llegar a tiempo tendría que darse prisa.

—Te deje la ropa de la niña en la cama —exclamó Rylie desde el interior del cuarto de baño —. Asegurate de que no se pongas al revés o...

—Si, bañate tú.

Tomando sus palabras en cuenta la rubia tomó una ducha rápida, pero para cuando menos lo esperaba ya había atardecido. Afortunadamente ya estaba perfectamente bañada solo faltaba un peinado y escojer que ropa llevaría.

—Te ves bien bañada —comentó Carl con una sonrisa divertida repasandola de pies a cabeza —. Aún me cuesta visualizarte sin toda la mugre.

—Dejame en paz, fastidioso —pidió Rylie dandole un empujoncito divertida —. Mejor vete a cambiar y de paso te llevas a Jude para que pueda arreglarme yo.

—Lo que la preciosa señorita ordene —respondió Carl cargando a la niña para dirigirse a la puerta y mandarle un beso —. Vendre al rato.

Rylie sonrió algo sonrojada y apenas salió el chico de la habitación tres mujeres se adentraron a su habitación sacandole un susto porque literalmente aparecieron de la nada.

—¿Se puede saber que hacen en mi habitación? —preguntó Rylie arrujando el entrecejo visiblemente alarmada —. ¿Y como es que llegaron de repente?

—Eres nuestra única niña mayor y obviamente queremos hacerte lucir espectacular esta noche —respondió Maggie con una sonrisa acercandose para después obligarla a sentarse en una silla frente al espejo —. Preparate.

—Dios, ¿en qué me metí?

















































































——— ✮✧☾✧✮ ———












































































—Te ves hermosa...

—Concuerdo con Michonne —comentó Rick sentado en un sillón repasando el vestuario de la menor frente a él —. No sabía que detrás de toda esa mugre se ocultaba una hermosa señorita.

—Gracias, supongo.

Maggie carraspeó llamando la atención de la rubia y ella supó exactamente que quería la mayor.

—Y todo gracias a mis estilistas de confianza —comentó Rylie divertida antes de señalarlas —. Aunque ni idea de como dejaste pasar a estas locas.

Rick se encogió de hombros divertido y ella simplemente hizó una mueca antes de volver a repasar su aspecto en uno de los espejos de la sala.

Llevava puesto un vestido verde
militar de botones hasta las rodillas
con un cinturón café sin mangas y
con cuello. Además de una chaqueta de mezclilla y unos tacones negros sin tanta plataforma que le consiguieron.

Su cabello iba suelto a los lados y las chicas la habían maquillado aunque solo consistía en mascará de pestañas algo de rubor y lapiz labial en tono claro.

Algo muy al natural.

Y por más que le recalcaran que se veía preciosa ella seguía no tan convencida de ello. De echo se sentía algo incómoda pues no era algo que usaba diario y con esos tacones se sentía bastante extraña, pero no se atrevió a decir nada de ello.

Momentos después Rowan y Carl bajaban por las escaleras. El último llevaba a Judith cargando y ella llevaba un vestidito rosa con una mini chaqueta del mismo color, pero en definitiva se veía super tierna y linda.

—Hay que aceptar que ese vestido te queda genial —comentó Carl dejando
a su hermana con su papá mientras se acercaba a la rubia y señalaba su cara —. ¿Acaso te maquillajaste?

—Las chicas me agarraron de conejillo de indias —respondió Rylie divertida a la vez que le acomodaba los puños de la camisa al chico —. Por lo visto arreglaste a Judith y no moriste en el intento.

—Sí, defintivamente lo logré.

—Ey, ustedes dos —exclamó Rowan interviniendo en su conversación —. Los mantendré vigilados, especialmente en la noche. A un metro de distancia.

Rylie rodó los ojos ligeramente entre divertida y molesta.

—Mantenernos separados es una misión imposible.

































——— ✮✧☾✧✮ ———





























Rylie jugaba con sus manos nerviosa mientras esperaba que la puerta fuera abierta. Se sentía algo extraña, como si tuviera miedo de ser juzgaba porque de echo eso tenía en mente. No recordaba la última vez que uso un vestido ni la última vez que fue a alguna fiesta, tal vez lo hizó cuando era más pequeña.

Ya se había desacostumbrado a este tipo se cosas.

Finalmente Carol tomó la inciativa y abrió la puerta con una mano puesto que llevaba una charola de galletas en la otra. Rick, Carl, Rylie y Rowan entraron tras de ella mirando el lugar atónitos.

Era una casa enorme y estaba repleta de personas que mantenían conversaciones entre ellos. Algunos bebían alcohol.

—Bienvenidos —exclamó Deanna acercandose a recibirlos con una gran sonrisa.

—Hola —saludó Carol igual de sonriente.

—Me alegra mucho verlos —comentó
la mujer dirigiendo su atención después a los adolescentes —. Carl, Rylie, hola. Rowan, te ves muy apuesto por cierto. Gracias a todos por venir.

El mencionado sonrió por el alago y asintió. Realmente no iba tan arreglado solamente se había puesto una camiseta de mangas largas negras y encima una chaqueta marrón claro. Quizás era por el peinado desordenado de su cabello.

—Saben todavía no he podido entrevistarla a ella —comentó Deanna acercandose a la bebé en brazos de
Rick —. La envidio.

—¿Por qué?

—Porque podrá ver el futuro de este lugar —respondió Deanna a Rick separandose de ellos para hacerles unas señas —. Vámos, vengan.

No tuvieron más opción así que la siguieron por entre el montón de personas. Rick se fue porque solicitaron su presencia presencia de modo que los tres chicos se quedaron solos.

Sinceramente ninguno tenía idea de como divertirse en ese lugar y antes de que alguno dijera algo Rowan habló.

—Iré a ver como está Noah —explicó haciendo un vago gesto indicando a un rincón —. Sirvé que le hago compañía. El pobre se ve que no esta comodo.

—Si, anda ve.

Rowan asintió ante la afirmación de su hermana y pronto los chicos se hace rato les hicieron una seña para que fueran.

—¿Te sientes comoda en este lugar? —preguntó Carl a su oído mientras se dirigían hacia el grupito tomados de la mano —. Digo, si te sientes incómoda podemos irnos. No tengo problema.

—No, estoy bien. ¿Tú te sientes mal o algo así?

—No, solo preguntaba porque has
estado demasiado callada —respondió
el castaño pasando su mano por sus hombros antes de besar su mejilla
—. Parece que somos famosos aquí.

—Si lo note hace poco.

—Ey, chicos —exclamó Ron con una sonrisa amigable apenas se acercaron —. ¿Cómo se la están pasando? Y los
dos se ven muy. Debo admitir que ese vestido te hace lucir hermosa, Rylie.

—Oh, gracias Ron —comentó Rylie devolviendole la sonrisa al rubio con las mejillas más rojas —. Por ahora todo se ve bien. Estamos bien, supongo.

—Me alegro, ¿gustan un trago o algo? —preguntó Mickey con alegria señalando una mesa cercana —. Hay variedad.

—Si, iré por un refresco —anunció
Rylie sonriente antes de dirigirse a la mesa de bebidas —. Ya vuelvo.

Carl la observaba atento irse hasta
que la voz de uno de los dos chicos lo hizó salir de su trance.

—Desde que los conocí no pude evitar preguntarme algo. Solo por curiosidad, ¿ustedes son algo así como pareja? —preguntó Ron bastante serio al chico apartando la vista de la rubia a lo lejos.

—Si, estamos juntos —respondió Carl con seriedad sintiendo un nudo en el estómago extraño —. Nos conocemos desde hace mucho.

—Pues se ven bien juntos.

Carl estaba por decir algo más cuando apareció Rylie con un vaso rojo en sus manos al que le dió un trago rápido.

—Volví, ¿de que tanto hablaban?

Carl sonrió mirando a Ron enfrente suyo y tomó la mano de la chica.

—Nada de que debas preocuparte.

—¿Y que les pareció la tremenda
derrota de hace rato? —soltó Mickey de repente alivianando el ambiente tenso.

—No, fue empate, viejo —exclamó Carl reclamandole al chico antes de señalar a su novia —. Ry, ¿lo viste? ¿No es cierto?

Discutían acerca de una partida de un videojuego que habían jugado hace rato entre Mickey y Carl y que claramente ninguno aceptaba que perdieron.

—Fue empate —aceptó Ron dandole la razón al castaño y provocando la mala mirada de su compañero.

—No es justo, Ron.

Finalmente el chico aceptó su derrota y tuvó que darle las tarjetitas que apostó al castaño, quien las tomó con rápidez.

Que buena noche, eh.






















































——— ✮✧☾✧✮ ———















































































Para la medianoche Rylie ya sentía que su mundo giraba. Estuvieron parte de la noche hablando con Ron y Mickey de lo que surgiera, pero la chica perdió el hilo de la conversación con cada trago que le daba a su bebida. Se suponía era agua...

Simplemente escuchaba vagamente el sonido de sus voces lejanas aunque los tuviera en frente. De la nada soltó una risa extraña antes de dar el último trago a su bebida y tambalearse.

Rápidamente Carl la tomó de la cintura impidiendo que llegará a caer al suelo e hizó una mueca preocupado. Era obvio que estaba borracha. Una Rylie sensata no hubiera sido tan torpe para moverse.

—Rylie, ¿te encuentras bien?

—Parece que está borracha —anunció Ron acercandose a revisar su risueño rostro —. Lo mejor es que la lleves a descansar antes de que cometa alguna locura.

—El lindo rubio tiene razón —soltó Rylie sonriendole a la vez que lo señalaba con su dedo —. Llevame a descansar, cielito.

Carl no tuvó más opción que irse con Rylie. Obviamente se inventó algunas excusas a su cuñado y a su padre con tal de que no sospecharan de la borrachera que sin querer la rubia se provocó.

Y una vez los convenció de que estaban cansados salió con la rubia en dirección a la casa. No fue a medio camino que la chica pidió que la subiera a caballito ya que sus tacones la estaban matando.

Ver a Rylie borracha era genial.

Si de por si ya era un chiste andante borracha se sumaba el doble.

Entre risas y comentarios divertidos llegaron a la casa y con muchisímo esfuerzo y preocurando ser lo más cuidadoso posible, Carl logró subir las escaleras con Rylie en su espalda.

Justo cuando estaba por llevarla a su habitación la chica le reclamó que no iba a dormir sola porque le daba miedo que de repente un caminante se metiera por su ventana. Sí, ella le aseguraba eso.

—Hemos llegado, princesa —exclamó Carl acercandose a la cama dónde la chica se aventó —. Ahora a dormir, ¿si?

Rylie se acercó tambaleante a la orilla
de la cama mientras Carl se quitaba los zapatos y desabrochaba con pereza los botones de la camisa que llevaba.

Probablemente era el alcohol actuando, pero para cuando menos lo imaginaba de repente Rylie estaba frente a él con el vestido a medio abrir, la chaqueta en el suelo y los tacones en una esquina.

Carl tragó saliva visiblemente sonrojado e intentó mantener la compostura pues no se atrevería a faltarle el respeto aún si la tenía enfrente casi sin nada más que la ropa interior al descubierto.

Con pasos firmes la rubia se acercó a Carl sentandose sobre sus piernas con firmeza perdiendose en sus orbes azules.

—Rylie, me estás asustando —musitó Carl mirando fijamente a la chica a la vez que intentaba controlar el sinfin de sensaciones en su cuerpo —. ¿Qué estás haciendo?

La rubia sonrió antes de tomarlo del cuello y tomar la iniciativa de un beso, uno que la chica profundizo y de fue haciendo cada vez mas necesitado.

Carl sintía los labios de la chica
moverse sobre los suyos con desesperación, pero él no entendía y terminó correspondiendo casi con la misma ferocidad del principio a la vez que la tomaba por la cintura.

Lo que clasificaría como un beso
subió de intensidad puesto que la
chica se separó agitada y el castaño
por puro impulso comenzó a besar
el lóbulo de su oreja con suavidez sacandole un par de suspiros que sonaban exquisitos al mismo tiempo
que sus manos exploraban curiosas
el cuerpo desarrollado de la adolescente.

—Carl...

El mencionado la apartó de su cuerpo para recostarla sobre la cama con rápidez y cuando estaba por quitar los botones restantes se detuvó a si mismo cosa que alarmó a la chica.

—No puedo, estás borracha y esto...
esto no esta bien —musitó Carl tomando asiento en la orilla de la cama —. No voy a tocarte. No puedo, nosotros apenas...

—¿Ya no te gusto, cierto? —exclamó Rylie algo dolida pasando las manos por su cabello frustrada —. ¿Es que no soy suficientemente bonita para ti o es que ya ni siquiera llamo tu atención, eh?

—Rylie, ¿te estás escuchando? Claro que me encantas en todos los sentidos.

—¿Entonces por qué no quieres tocarme?

—Porque se que iremos más allá que unos simples besos y no quiero que cometas una estúpidez estando ebria —respondió Carl tomando su rostro entre sus manos con cuidado besandola lentamente —. Te amo Ry, pero no quiero que nuestra primera vez sea así. Aún no.

—¿Aún me amas, verdad?

—No importa que o quienes se interpongan te he amado desde que te conocí y seguira siendo así.

La chica sonrió antes de soltar un bostezo cansada quitandose el vestido y haciendole una seña a su novio para que le ayudará a ponerse una de sus camisas y así dormir comoda.

Una vez listos ambos se recostaron en la cama bajo varias cobijas.

Rylie se quedó profundamente dormida sobre el pecho de Carl escuchando el latir de su corazón y él por supuesto no se fue a dormir sin antes besar su frente al verla dormir como si fuera una niña que cayó rendida después de un largo día de juegos y demás.

No sabes cuanto te quiero, mi amor.
















Hi, guys. Volví y ash como me costo terminar este cap. La mitad de todo es relleno, pero da igual. Yo se que quizás la mayoría quería escena hot, pero no la tendrán por ahora. ¿Será Ron fan de la relación de mis niños? ¿Y qué me dicen de Enid y Rowan? ¿Será ella la elegida o a Rowan todas las novias se le mueren? Okno :/

En unas semanas se vienen mis globales y ando algo atareada con evidencias a entregar para el fin del semestre aún asi intentaré avanzar alla para poder avanzarle aquí.

Recuerden votar, comentar y dejar todo su amor. Pueden agregar el fic a sus listas de lectura para saber cada que actualizo. Y miles de gracias a lxs nuevxs lectorxs por darle tanto apoyo al fic. Un besote a cada unx <3




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