.

El día de hoy también salimos de la casa. Hoy es veinticuatro de diciembre y eso significa que hoy es la gran cena de noche buena lo cual es bueno ya que estaremos todos juntos y pasando un buen momento pero por lo mismo aprovechamos y salimos para comprar últimos regalos. Solo que esta vez, vinimos con Chuck y con Sarah. Para esto, Chuck no sabe para nada el que Remus y yo salimos. Y prefiero que se quede así. Se que en el momento en el que el se entere, se pondrá de lo más histérico y molesto y arruinaría todo entonces... mejor que no lo sepa.

Pero salimos al centro comercial y nos separamos para que ellos dos fueran por sus últimos regalos ya que vendrían los papás de Sarah y su hermano Neville y Chuck le compraría algo a su mamá quien también estaba invitada. Extraño, ya que nadie de aquí convive con ella pero no deja de ser la mamá de Chuck. Me pregunto que tan incomodo será para Sirius ver a su ex novia después de muchos años.

- ¿sabes si mi mamá invitó a mi papá? - cuando le pregunté eso a Remus, tose el café que está tomando.

- ¿George va a venir?

- olvidaba por un momento que ustedes dos estudiaron juntos. - rasque mi nuca nerviosa. - no lo sé, pero vendrá la mamá de Chuck y tampoco la frecuentan mucho y no se si el plan es que venga también mi papá.

- esperaría que no. - el ríe nervioso y me le quedé mirando esperando una explicación. - no me lo tomes a mal linda pero no se que tan incomodo sería ver a tu padre después de tantos años y yo saliendo contigo.

- obviamente no lo sabría pero a decir verdad... no estaría mal verlo. - no deja de dolerme el saber que yo no crecí con un padre a un lado. Me hubiera gustado llevarme muy bien con el. - ¿fueron amigos?

- para nada. - se que el tema le incomodaba a Remus porque se veía más rojo de lo normal. Salimos del centro comercial y fuimos a la parte trasera donde había bancas y nos sentamos para esperar a Chuck y a Sarah con sus compras. - pero si llegas a verlo hoy, estaría feliz por ti.

- de acuerdo, cambiemos de tema. - le di un beso en la mejilla y recargué mi cabeza en su hombro. - es extraño como ya quiero que regresemos a Hogwarts solo para estar más tiempo contigo. Esperaría que ahora en vacaciones fuera al revés pero no, nunca podemos vernos.

- es que lo qué pasa es que estamos rodeados todo el tiempo de nuestros seres queridos y si guardamos el secreto entonces... está muy difícil.

- ¿te arrepientes?

- ¿de qué?

- de haber empezado esto. No lo digo en el plan de dramática y queriendo que me hagas sentir mejor. Lo digo bien, y pensando en que tu vida ahora es todo un caos porque pasas cada día de tu vida mintiéndole a tus amigos solo por mi. Poniendo en riesgo incluso tu amistad de años con mi mamá.

- quiero decir, no ha sido nada fácil pero... te amo. - sonreí ante ello. - lo digo en serio Meredith, te amo tanto que por lo mismo desearía que todo fuese más fácil para ambos pero me quedé pensando mucho en nuestra última salida donde dijiste que no importaban las dificultades.

- lo digo en serio y lo sostengo.

- Mer ¿te gustaría que viviéramos juntos una vez que te gradúes? - no podía dejar de sonreír al escucharlo decir eso y mientras me miraba con esos tiernos ojos tan hermosos y me acariciaba la mano. - se que será una locura y que no será fácil pero podemos intentarlo. Conseguir un lugar para ambos lejos de aquí... ni siquiera tendrían porque saber si estamos juntos, pero irnos y empezar una vida juntos y... - puse mi mano en su boca para callarlo.

- hace dos días no querías ni siquiera pensar en matrimonio y ahora estás dispuesto a vivir conmigo.

- yo... - sonríe. - si, lo sé, estoy loco.

- bueno ya somos dos locos porque yo también estoy que me muero por empezar una vida a tu lado. - el suspira aliviado y lo interrumpí con un beso. Me lo corresponde y terminamos abrazándonos realmente muy felices por esto. - te amo, Remus. Obviamente quiero vivir contigo. Es increíble, yo puedo tomar un curso de moda en... um... Chéster o Liverpool, lejos de aquí y solo tú y yo. Empezando de cero.

- okay. - el me sonríe y me da un beso en la nariz. - espero y no te aburras de mi.

- no digas tonterías. - tomé de su mano y nos puse de pie. - somos tú y yo, contra el mundo ¿si? lo único es que no quiero tener hijos. - el se ataca de la risa una vez que yo digo. - en serio, ni siquiera me lo puedo imaginar a futuro muy futuro... no se si sea lo mismo.

- perfecto, porque yo tampoco quiero. Quiero decir, nada en contra de ellos solo...

- no está en tus planes. - el asiente con la cabeza. - esta bien, en los míos tampoco. - me toma de la barbilla con delicadeza y me da un beso. - bueno... un semestre más. Cuento los días para que estemos juntos al cien por ciento.

- ahora empecemos por sobrevivir a la navidad. - me suelta y da dos pasos atrás.

- ¿qué?

- es que Chuck y Sarah ya vienen.

- ¿cómo sabes? - voltee y ellos dos ya venían saliendo. - ah, supongo que tienes un súper oído por eso. - el ríe. - que miedo, es bueno saberlo.

- hola. - Sarah corre a donde estoy y me abraza. - ya tengo tu regalo.

- tenemos el de todos de hecho. - Chuck muestra miles de bolsas. - estoy emocionado por ver a mi mama así que le llevo varias cosas. ¿Viene tu papá, Mer?

- no tengo idea. - levanté ambos hombros. - supongo que es momento de saberlo. ¿Nos vamos? - le pregunté a Remus volteando a verlo.

- claro, vamos. - el dice y los cuatro avanzamos hacia su carro.

Voy a ser honesta, estoy algo emocionada por esta noche. Nunca se sabe que va a pasar en estas cenas familiares que tenemos, siempre hay drama. Espero que hoy sean puras cosas buenas.

...

Llegamos a la casa y ya estaban todos arreglados así que me subí rápido a mi habitación no Sarah y yo nos arreglamos. Me puse un vestido color rojo debido a, bueno, a la navidad. Uno de manga larga pero igualmente pegado al cuerpo. Me recogí el cabello pero me dejé a un lado un poco de cabellos cortos como si fuera fleco.

- oye, estoy de lo más feliz. - le dije a Sarah una vez que me puse de pie y caminé por la habitación. - hoy cuando fuimos a comprar los regalos, Remus me dijo que le gustaría que viviéramos juntos.

- wow ¡eso es un gran avance! - Sarah se pone de pie por igual. - que lindos, y que bonito que se van a dar la oportunidad de intentarlo. Yo los apoyo.

- te adoro. - le di un abrazo. - Gracias por siempre estar ahí para mi.

- es que se trata de Remus, se que está mal tener excepciones pero se que el es una gran persona y que te respeta y que te quiere de verdad así que en estas circunstancias, yo puedo decir que todo este sacrificio que están haciendo, vale la pena.

- ¿puedo pasar? - era la voz de Chuck, entonces antes de que se pudiera enterar de algo de lo que hablábamos, fui corriendo a abrirle la puerta.

Salí de la habitación una vez que Chuck entró, para darles su privacidad y en cuanto salgo, choco con Sirius de nuevo.

- hey, ya se nos está haciendo costumbre el encontrarnos así. - me dice y le sonreí. - wow que hermosa estás.

- Gracias. - empezamos a bajar las escaleras juntos. - tu también te ves bien. Supongo que para la ocasión. - el me mira con confusión y una vez estando abajo en la sala de estar, se veía a lo lejos en la cocina a Lily y a la madre de Chuck.

- ah, Angelica. - el se acomoda el cabello mientras piensa que decir. - si... no es del todo cómodo verla de nuevo pero está bien. Ella vino por Chuck.

- es muy bonita.

- si, lo es. - dice mientras me mira y decido mejor bajar la mirada. - pero es solo eso, la madre de Chuck. Realmente nada más.

- hola. - Remus se acerca a donde estamos y le sonreí. - que bonita, Meredith.

- Gracias, Remus. - si Sirius prestara más atención, seguramente se hubiera dado cuenta de cómo veo con ojos de corazón a Remus y de cómo el me mira por igual. - todos venimos muy listos para la cena creo yo.

- oye Remus, mira quien llegó. - Sirius le da una palmada en la espalda y este se voltea para ver hacia la puerta. Realmente somos todos quienes miramos para ver quien llegó y siento como mi corazón se rompe por completo cuando entra Lola. - ahora si, puedes estar tranquilo porque invitamos a "el amor de tu vida". - Remus voltea a verme de inmediato pero estaba más enfocada viendo a la famosa Lola.

Antes por obvias razones, ella no me causaba ningún problema. Pero ahora, vaya que me causa una inseguridad enorme. Mientras Nora fue tan solo su amiga y de repente salían, Lola es su amor más fuerte del pasado, su primera novia bien y la ex dueña de ese corazón. Es mas, nada me hace confirmar que ya no es así. Ella es preciosa. Cabello rubio corto y esa mirada tan tierna que tiene y sonrisa de comercial.

Ahora si voltee a ver a Remus ya que quería ver su reacción al verla y este tan abre los ojos con mas expresión y medio le nacía hacer una sonrisa pero se detiene.

- ¿la invitaste tú? - Remus le pregunta a Sirius en voz baja pero claro que escuché.

- no para nada, de hecho fue Lily. - Sirius levanta ambos hombros y se retira para la cocina con ellas. Yo en cambio me quedo viendo a Remus esta vez y el a mi.

- Mer, por favor por favor no dejes que esto te afecte.

- no estoy molesta, solo es... incómodo. - dije y guardé silencio cuando la vi acercarse y ella me sonríe. Después, se retira el abrigo y se muestra embarazada.

- hola... ¿Meredith, cierto? - asentí con la cabeza. - te recuerdo obviamente de la última comida que tuvimos.

- estás esperando un hijo. - dije sin dejar de ver su vientre. - ¿quien es el padre?

- um... sorpresa. - Ella se voltea para ver a Remus y ríe nerviosa. - no te quise avisar antes para distraerte de tus momentos como maestro en Hogwarts pero creo que fue esa semana antes de que te fueras a dar clases.

- estás embarazada. - Remus dice sin poder creérselo y ella asiente varias veces. - voy a ser padre.

El peor sentimiento de toda mi vida. No podía creer lo que estaba pasando. Mi corazón roto en mis pedazos al verla con el vientre así. Como ella lo abraza con tanta emoción, como el la saluda de la misma manera. Le da un gran beso en la mejilla y se abrazan por lo que parecen ser minutos. Ni siquiera quería estar presente en ese momento. Voltee a ver a Sarah, quien sabía perfectamente cómo me sentía y que estaba pasando. Solo ella podía entender mi dolor y saber y deducir como es que mi corazón estaba en estos momentos. Así que se acerca a mi y toma de mi mano para llevarme fuera de la casa y que habláramos.

- Meredith, entiendo como te sientes y lo lamento pero...

- ¡ah! - grité de la desesperación y empecé a llorar. Es ella quien corre a abrazarme. - es su hijo, Sarah. Está embarazada de el.

- ¿fue mientras ustedes dos estaban juntos? - negué con la cabeza. - oh, eso lo hace peor.

- la vida le dio un hijo con la persona a la cual más a querido y esa persona no soy yo. Literalmente estoy estorbando en los planes de su vida, yo...

- no digas eso, Mer. Seguramente Remus está en estos momentos arreglando las cosas con ella. Quizás no diciéndole que sale contigo pero... que está con alguien más.

- mamá me dijo que les avisara que ya íbamos a comer. - Harry abre la puerta de la entrada y nos dice eso. - ¿están bien?

Asentí con la cabeza y me limpie las lágrimas. Entré a la casa y Remus ya se encontraba solo en la entrada supongo que esperándome. Sarah opta por dejarnos solos y se va a el comedor junto con Harry.

- no tenía idea de que esto estaba pasando. - me dice y me asome para ver cómo todos la abrazaban con emoción y le decían lo emocionados que estaban por la noticia. - Meredith, mírame por favor.

- feliz navidad. - le entregué la bufanda que el me había dicho que quería que le hiciera y puesto que aún no tenía nada más que decir, preferí irme a sentar. - pero veo que no se compara con tu otro regalo por parte de Lola.

- Mer. - el me sigue pero evidentemente ya no podíamos hablar del tema una vez que nos acercamos a donde ya todos estaban por cenar.