Mark había cumplido catorce años cuando volvió a sentir esa sensación de hormigueo en el estómago y el calor en las mejillas.

Curiosamente, el causante de todo era nada más y nada menos que Nakamoto Yuta, el mismo chico de quien había estado "enamorado" toda la primaria. Su madre solía recordarle esos días en los que el mayor y él afirmaban ser novios y no podían estar lejos más de un día, sin ponerse a llorar.

De vez en cuando él y Yuta hablaban de eso, se reían de la manera inocente que inició su amistad, por eso eran, amigos.

Yuta había crecido, había hecho más amistades e incluso había cambiado de escuela. Estaba a menos de dos años de graduarse e ir a la universidad, mientras que Makku, apenas estaba entrando en la adolescencia.

Parecía que el ahora de mechas verdes estaba en un mundo completamente distinto. Y eso frustraba demasiado a Mark.

¿En qué momento su hyung había pasado de comer tierra y ver peppa pig a ser genial y popular? Aunque sabía que aún veía esa odiosa caricatura, pues lo había atrapado varias veces viéndola.

Yuta había pasado de ser su amigo, a un simple conocido, ya que apenas y tenía tiempo de verlo. Exámenes, tareas, ensayos con la banda que había formado junto a sus nuevos amigos, incluso citas con chicas ¡citas! eso dejaba en Mark un amargo sabor en su boca. Tal vez estaba siendo un poco egoísta al querer devuelta al de mechas verdes, en querer que las cosas vuelvan a ser como antes. Yuta tenía derecho a hacer su propia vida, hacer nuevos amigos, formar una banda e incluso salir con chicas. Era un adolescente después de todo.

Su cabecita estaba vuelta un lío. Pero entre tantas vueltas y peros, una cosa estaba clara, recuperaría a su hyung. Volvería a obtener mimos de su parte y sería su novio, esta vez uno real. O al menos eso esperaba.

Había llamado a Jeno, con la esperanza de que él supiera que hacer. Pero en vez de eso, sólo estuvieron observando el techo durante una hora entera.

— ¿Has pensado en hablar con él y ya?  Es decir, tal vez si le dice como te sientes, logren recuperar su amistad —Makku suspiró. Claro que lo había intentado, más veces de las que su orgullo le permitiría admitir, pero Yuta parecía siempre demasiado ocupado para él. Sus ojitos se aguaron sin remedio, no podía evitarlo.

—Claro que sí, pero no me escucha, es como si ya no tuviera tiempo para mí —limpió el rastro de lágrimas que habían salido sin querer. No era momento de ser un bebé. Y entonces su mente se iluminó. No era momento de ser un bebé. Eso era. Si crecía, si maduraba y le mostraba a Yuta que ahora era grande como él, así lo tendría de vuelta— Enséñame a ser grande por favor —Jeno miró confundido al rubio, quien había puesto su mejor carita de cachorrito para convencer a su amigo.

—No lo sé Makku, supongo que para ser grande debes pagar impuestos y conseguir empleo. La verdad no sé de eso —el rubio golpeó su frente mientras suspiraba. Esto sería más difícil de lo que imaginaba.

—Me refiero a que me enseñes a ser como tú y los de tu edad. Ya sabes —el peliazul río volteando su mirada su acompañante.

—Lo dices como si tuviéramos diez años de diferencia o algo así —el rubio bufó. Bien tal vez Jeno no era el mejor ejemplo de "madurez"— Creo que ya sé lo que tienes en mente, quieres crecer para agradarle al nuevo Yuta. Además de que escogiste a la peor persona para ayudarte en eso. Te recuerdo que veo anime veintitrés de las veinticuatro horas del día, encerrado en mi habitación.

— ¿Y qué haces en la hora restante?

—Tiempo para el almuerzo —ambos rieron, rindiéndose por el momento con el plan, tal vez luego le pedirían ayuda a alguien más.

Habían acordado de verse en una fiesta donde tocaría la banda de Yuta. Jeno se había enterado de ella por su amigo Jungwoo. Quien llevaba días intentando convencerlo para que "socializara y dejara de querer casarse con una chica 2D", ambos sabían que eso no sucedería, pero valía la pena intentarlo. Al final, lo vio como una buena oportunidad para que Makku conociera el mundo de "los grandes".

Si era sincero, Mark quería llorar de lo agradecido que se encontraba con Jeno durante las últimas semanas. Él de verdad estaba intentando ayudarlo a realizar su plan. El peliazul estuvo buscando consejos para madurar en wikihow e incluso había comenzado a ponerlos en práctica. Estaban matando dos pájaros de un tiro.

Conocía a Jeno y sabía que no movía un dedo por nada que no fueran sus figuras de sus waifus.

Todo marchaba a la perfección, al menos hasta que llegó el día de la fiesta y el rubio se dio cuenta que no tenía ropa para esa clase de ocasiones. Todo su armario estaba lleno de suéter y pantalones anchos.

Esa fue su primera crisis existencial de la noche.

La segunda fue cuando llegaron a la fiesta y perdió de vista a Jeno a los minutos de haber entrado al espaciosos jardín trasero.

Y la tercera fue cuando vio a Yuta subiendo al improvisado escenario con su perfecta apariencia, con sus aretes y su cabello desordenado pero peinado a la vez, con sus preciosos ojos reflejando la luz de colores y sus bonitos labios moviéndose al cantar.

Sentía conejos saltar en su estómago. Una familia de conejos saltando y jugando. La sensación de bienestar al escuchar su voz nuevamente no se comparaba con absolutamente nada.

En su estado de trance, terminó aceptando varias de las bebidas que le ofrecían, Todas tenían un sabor dulce con algo amargo al final. Sabía tan bien que mientras se perdía en el sonido tomó cerca de seis vasos más de lo mismo.

Estaba atontado, sin saber si era por la bebida que claramente tenía alcohol o por la aterciopelada voz de Nakamoto. Pudo jurar que los ojos de Yuta encontraron los suyos en la multitud que se reunía alrededor del escenario para escuchar a la banda, todo fue perfecto.

Al menos hasta que la presentación terminó y Yuta bajó apresuradamente del escenario hasta llegar a él.

—Mark ¿Qué haces aquí? —el de mechas verdes tomó al rubio de las mejillas y lo observó atentamente.

—Vine a verte. Te extraño, hyung —Makku cortó la distancia que los separaba uniéndolos en un abrazo que casi tira al mayor al suelo. Y hablando de suelo, Yuta notó la cantidad de vasos de plástico a su alrededor.

—Oh no. Mark ¿Acaso tomaste alcohol? ¡Pero si tienes trece! —el mayor pasó sus manos por su rostro, quien se haya llevado a Mark allí, las pagaría caro.

—Tengo catorce, hyung. Ca-tor-ce —balbuceó— ¿Por qué me llamas Mark? ¿Ya no me dirás Makku? Ni siquiera me estás abrazando de vuelta —había comenzado a alargar sílabas y a reír entre cada oración.

—Te llevaré a casa ¿Okey? No es bueno que estés aquí y menos si estas sólo.

Mark había negado. Él quería permanecer junto al mayor en la fiesta. Quería seguir escuchándolo cantar. Pero al final, Yuta lo había sacado de allí, cargándolo en su espalda.

El rubio balbuceaba una canción que el de mechas verdes no conocía, mientras se movía y bailaba al ritmo de sus tarareos entrecortados, haciendo para Nakamoto más difícil el llevarlo cargado.

—Dime Mark ¿Con quién estabas en esa fiesta?

—Estaba con Jeno, pero se perdió y creo que me robaron el celular, así que no pude llamarlo —río ante sus propias palabras.

— ¿Y por qué Jeno te llevó allí?

—Quería verte. Últimamente no nos vemos porque estás ocupado.

—Pudiste enviar un mensaje.

—No quería esperar un mes a que me contestaras —Mark frunció los labios. Tal vez estaba exagerando un poquito— Arroz con leche me quiero casar —el rubio volvió a cantar y a aplaudir, evitando el tema— Yuta, me quiero casar contigo —el de mechas verdes se tensó y observó al chico en su espalda, quien tenía una expresión risueña. Yuta negó haciendo que Mark comenzara a balbucear pequeños "por qué" mientras agitaba sus piernas.

—Llegamos —el mayor soltó al rubio, para que este bajara de su espalda y pudiera entrar a su casa, pero este tan sólo se abrazó más a él— Vamos Mark, tocaré en menos de quince minutos, necesito volver.

—Sólo un rato más.

—Mark.

—Por favor, solo será un momento —el menor lloriqueaba, negando a soltarse.

—Mark es en serio.

—Me gustas, Yuta hyung —el mayor se vio interrumpido por la confesión del menor, quien bajó de su espalda y caminó hasta llegar frente a él. Yuta había comenzado a tener una sensación de deja vu. Sonrió para sus adentros, viendo sin querer al pequeño Mark de seis años frente a él.

— ¿Por qué?

— ¿Por qué? —el menor lo pensó antes de responder—  Porque eres tú ¿Yo no le gusto? —Yuta iba a responder, pero nuevamente Mark lo interrumpió— Por supuesto que no. Te gustan las chicas ¿No? Hace poco te vi salir con una, te veías feliz. Te extraño, pero quiero que seas feliz —tal vez se había dado por vencido pronto, pero no quería escuchar el rechazo de los labios de Yuta— Adiós — antes de que pudiera irse, Yuta lo tomó de los hombros y lo abrazó.

—Al menos déjame responder, tonto —el de mechas verdes lo alejó un poco y dejó un suave beso en la comisura de sus labios— También me gustas, Makku.

—O sea que... ¿Somos novios? —Yuta río y acarició el rostro del menor, mientras negaba.

— ¿Puedes esperar un poco más? Es sólo que no creo que salir con alguien de trece sea legal —Mark hizo un puchero antes de volver a reprochar.

—Catorce hyung, ca-tor-ce —escondió su rostro en su pecho, mientras inhalaba el perfume del mayor— Puedo esperar si prometes no ir a más citas —Yuta asintió y extendió su meñique.

—Entendido, no más citas ¿Alguna otra condición? —Mark entrelazó su meñique con el del mayor.

— ¿Podrías volver a llamarme mi bebé Makku?

—Creí que te molestaba —Mark negó. No le molestaba, sólo lo avergonzaba un poco. Yuta apretó sus mejillas y le dio un casto beso en su frente— ¿Crees que a tu mamá le moleste si me quedo a dormir?

—A mamá le encantaría volver a verte —ambos comenzaron a caminar hacia la entrada de la casa del menor— ¿Qué hay de la fiesta?

—Jungwoo organiza fiestas todos los fines de semana, así que no hay problema —Mark sacó las llaves de su bolsillo y ambos entraron en silencio aún con sus meñiques entrelazados.

Si manguitos preciosos, doy por finalizado esta bella adaptación... eh de admitir que me puse re soft cuando escribía los caps jiwndfijni pero bueno, espero les haya gustado uwu

Me tomó como un mes jnsndjdj pero tiene un explicación unu me quitaron el cel, la tablet y la laptop solo la voy a usar para clases, aproveché este momento con la excusa de que "estoy en clase" por suerte no me pillan u.u

Pero buuuuuueeno espero que esten super bien :3 y esperen que estoy pensando en un proyecto con este mismo shipp u.u además en otras de mis historias está incluido (alto spam les puso la piba está)

Sin más, agradecer mucho a @ywandere por permitirme realizar está adaptación.

Aprovecho para decir que, originalmente pensaba adaptarlo al Seongsang perooo las ganas de leerlo en Yumark fueron grandes dnwn y ajá, no me arrepiento ncjnwoi

Una vez más muchas gracias  a todxs lxs que me leyeron u.u que tengan un bomnito día como esta shipp aea