cap. 24
El día siguió pasando con normalidad, ninguno volvió a mencionar aquel beso pero sin duda fue algo significativo. Aldo me ayudaba demasiado cuando quería algo, yo aún podía caminar pero parecía que él quería evitar que hiciera esfuerzos
—Tengo sueño.— avisé mientras veíamos una película —¿Podemos ponerle pausa a la película y terminar de verla mañana?.—
Pude ver que Aldo tomó el control para ponerle pausa y después simplemente me miró
—No mames morra, son las 10:00 pm.— se burló —Además ya mañana no tienes que levantarte temprano a trabajar.— recordó
Eso era cierto pero igual modificar mis horarios de sueño ya era algo extraño, realmente estaba acostumbrada a dormir temprano para tener un buen control de energía para mis ensayos
—Igual mañana tú te vas a levantar temprano para ir a entrenar.— recordé ahora yo y él asintió —¿No quieres que te acompañe?.—
—A decir verdad preferiría que te quedaras para que no hagas mucho esfuerzo.— dijo y lo miré mal —¿Ahora que dije que fuera tan malo para ganarme esa mirada?.—
—Tengo una fractura pero no estoy lisiada.— avisé —Puedo moverme aun teniendo este yeso y siendo sincera no quiero quedarme todo el tiempo aquí tirada sin hacer nada.—
—Me da miedo que te vuelvas a lastimar, agarra el pedo de que realmente me preocupas.— pidió
—Tu preocupación no debería ser tan excesiva.— dije —Agradezco que quieras cuidarme pero no me trates como discapacitada.—
Al escuchar eso último empezó a reír, solo bastaron pocos segundos para que me contagiara su risa así que el ambiente se volvió un poco más liviano
—No quiero llevarte a mis entrenamientos porque te conozco y sé que eres muy inquieta.— suspiró —Si me ves practicando es obvio que vas a querer hacer algo similar, no eres precisamente una persona sensata y estoy casi seguro de que te volverás a caer. Prefiero darle tiempo a tu fractura para que sanes al menos un poco.—
—Las fracturas "no sanan un poco".— advertí, literalmente el hueso tenía que estar fuerte —Pero está bien, tú ganas, no me llevarás a tus entrenamientos.—
—¿Tan rápido me darás la razón?.— cuestionó sonriente y asentí —Que día tan pinche histórico, por primera vez cediste.—
—Solo tengo una condición para aceptar que no me lleves.— avisé y su sonrisa se borró
Desde que nos conocimos era casi imposible que yo no "ganara" cualquier tipo de discusión que tuviera con Aldo, él siempre me daba la razón o cedía ante mis caprichos, ahora sería mi turno de dejarlo ganar pero no se lo dejaría tan fácil
—Era tan hermoso para ser realidad.— bufó —Pero bueno, dime tu pinche condición.—
—Es algo sencillo.— dije —Tú y yo en una cita.—
Ahora su mirada se convirtió en una de confusión, realmente parecía intentar analizar lo que dije
—¿Tu condición es que vayamos a una cita?.— cuestionó y asentí —No mames, creo que tu caída si te afectó el cerebro wey.—
Intentó poner su mano sobre mi frente como si quisiera asegurarse de que me sentía bien pero se lo impedí
—Sé que te estás divirtiendo al rechazar mis confesiones pero no rechaces mis citas.— pedí —Cuando regreses de tu entrenamiento te estaré esperando para que vayamos a algún lugar.—
Sabía que también estaba todo el tema de sus directos pero realmente esperaba que pudiera dejarlos de lado al menos por el día de mañana
—Me intriga saber a donde podrías invitarme estando así.— dijo pensativo —Así que jalo, vamos a una cita.—
Hice un pequeño bailecito emocionada y él empezó a reír por mi reacción
—Me hiciste pausar la película porque tenías sueño pero al parecer aún te queda energía para tus bailecitos.— seguía riendo
—Es que saber que mañana saldremos me subió la energía.— presumí acomodándome mejor
—Más te vale que sea una cita linda.— advirtió y asentí
Sabía perfectamente a donde llevarlo, quería que fuéramos juntos a un parque y hacer una especie de picnic. Quizás eso podría ser lo suficientemente bueno para lograr que pensara en aceptarme como su novia
—Por cierto.— exclamé y me miró atento —Ahora que no podré bailar empezaré a buscar algún pasatiempo para tampoco molestarte tanto mientras estés en stream o en tus entrenamientos.—
—¿Quieres que te sugiera algunas opciones sobre lo que puedes hacer?.— cuestionó y negué
—Quiero seguir haciendo algo artístico, aunque no pueda bailar.— confesé —Realmente siento que dibujar o diseñar está fuera de mi alcancé, no soy tan talentosa.—
—¿Entonces que quieres hacer?.— cuestionó bastante interesado
—¿Me vería muy tonta si digo que quiero hacer pulseras o cositas así?.— cuestioné ahora
—Creo que es un pasatiempo lindo.— dijo —Además de que puedes hacer muchos tipos de pulseras, pueden ser tejidas, de piedritas o de cuencas, con hilo o estambre.—
Sonreí un poco, al principio pensé que me diría que era algo muy básico pero no debía dudar de él, era como si cualquier cosa que me apoyaría en cualquier cosa que le contara, por más insignificante que fuera
—Te haré la primera pulsera a ti.— avisé y sonrió —Solo dime una palabra.—
Él lo pensó por algunos segundos hasta que después pareció tenerlo más que claro
—Roma.— dijo y ahora yo tenía curiosidad por saber que significaba
—¿Y esa palabra por qué?.— pregunté
—Roma era un imperio fuerte, aunque ahora sea la capital de Italia.— contó burlón —Pero además de eso, si lo lees al revés dice "amor". Tú eres mi fuerte y amorosa Roma.—
Reí un poco al escucharlo, para muchos podría ser "la chica fresa" pero al escuchar que él dijo que era "su roma" le quitó el significado a cualquier otro sobrenombre que me hayan puesto.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro