—— THE POWER OF THE HOLLOW ——

—Sí esa cosa es tan poderosa que no se puede destruir, ¿por qué nos traes aquí y nos cuentas todo esto?— Quiso saber Klaus al no entender porque Davina les había contado aquella historia, para después decirles que todos los esfuerzos que hicieran serían en vano.

—Los ancestros querían que lo supierais.— Respondió la bruja con obviedad, haciendo que la Original se diera cuenta de que había más tras aquella historia, no podía ser tan sencilla, algo más debía de haber ocurrido.

—Pues informa a los ancestros de que son una pérdida de tiempo. He vivido mil años y nunca me he encontrado con nada que no se pueda matar. Venceremos a este patético fantasma también.— Sentenció Klaus sabiendo que haría todo cuanto pudiera por destruir a aquella criatura que amenazaba a su ciudad así como a su familia, en especial a sus hijas.

—Su tribu la convirtió en lo que es ahora, su familia debió de impedirlo.— Intervino Astrid sabiendo que debían de haber hecho algo, no podían haberse quedado de brazos cruzados observando el caos y la destrucción de la mano de alguien que solo ansiaba más poder.

—¿Crees que no lo intentaron?— Inquirió Davina con obviedad. —Quisieron deshacer lo que su magia había hecho, pero eso fue el principio del fin. Con el tiempo creció y ansiaba más poder, y Inadu canalizó la vida en todas sus formas. Su hambre era insaciable, le encantaba el miedo que despertaba en los demás, su gente la conocía como despiadada, insensible y vacía, hasta que esa se convirtió en la característica que la definia, y empezaron a referirse a ella con ese rasgo.— Explicó prosiguiendo de esa forma con la historia de Inadu, la cual a pesar de haber sido una de las criaturas más poderosas sobre la faz de la tierra, había sido olvidada y desprecia por incluso aquellos que habían llegado a venerarla. —El vacío.— Aclaró, explicando por lo tanto de donde venia el origen de su nombre.

—Los mató a todos...— Murmuró Astrid al comprender lo que Davina estaba diciendo, y es que la única forma de hacerse con el poder de otras criaturas era matándolas.

—No porque la hicieran daño o la tratarán mal, solo por diversión.— Explicó, mostrando que los Originales no eran los primeros que mataban por mera diversión, quinientos años antes de que ellos llegarán ya había existido una criatura que lo había.

—Bueno, a decir verdad todos tenemos días malos.— Comentó Klaus con burla, haciendo que ambas le mirasen de mala forma por su comentario.

—¿Crees que esto es una broma?— Preguntó Davina sorprendida de que Klaus estuviera ignorando todas aquellas advertencias, así como del verdadero peligro que suponía para todos el vacío.

—No, pero un poco tedioso sí que es. Que tal si saltas a la parte de la historia que nos podría ser útil.— La pidió, haciendo que Davina le mirase con frustración, ya que la historia de Inadu era mucho más importante de lo que ambos podían llegar a imaginar.

—¿Quieres derrotar al vacío?— Preguntó sabiendo perfectamente cuál era la respuesta de los dos híbridos. —Solo tiene una debilidad.— Les aseguro, captando de esa forma la atención de los dos, ya que aquello les daba una pista de cómo detener a la criatura.

—Ahora mismo cuentas con toda mi atención, ¿cual es?— Sonrió Klaus viendo que habían llegado a la parte que más les interesaba, saber como hacer frente al vacío.

—Tu.— Sentenció Davina mientras se daba la vuelta y miraba a Astrid, la cual la miro confundida, ya que no entendía como podía ser que ella fuera la debilidad del vacío. —Eres nuestra única oportunidad.— Aseguró mirando a la rubia con una expresión de desesperación.

—¿Qué demonios significa eso?— Exigió saber Klaus, sabiendo que si eso era cierto, quien de verdad era el principal objetivo del vacío no eran ellos, sino Astrid y no estaba dispuesto a permitir que la pasara algo.

—No pienso hablar más contigo.— Sentenció Davina agarrando a Astrid de la muñeca para a continuación ambas desaparecer, dejando a Klaus en el mundo de los espíritus completamente confundido y furioso.

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—¿Qué diablos es todos esto?— Exigió Astrid después de despertar, y ver que seguían en la iglesia, pero ya en el mundo de los vivos.

—Es lo que necesitamos si queremos detener al vacío.— Sentenció Davina haciendo que Astrid negara.

—Necesitáis a Klaus.— Garantizó Astrid sabiendo que con él tendrían oportunidad, ¿pero con ella? Una parte de ella no era capaz de matar aunque lo hubiera hecho.

—No, solo te necesitamos a ti y tal vez a Taylor.— Insistió la bruja confundiendo más a la híbrida, ya que no comprendía que relación tenía su hermana en todo aquello.

—¿Pero de que estas hablando?— Quiso saber esperando que Davina resolviera todas las demás incógnitas que Astrid tenía.

—Todo se reduce al linaje, es lo único que funciona contra ella.— Explicó Davina con tranquilidad. —Cuando su maldad se volvió imposible de soportar, las tribus se unieron para derrotarla.— Empezó a decir, prosiguiendo de esa manera con la historia de como surgió el vacío y como fue derrotado por primera vez. —Los sabios de las tribus la capturaron usando cuerdas místicas, pero aún con todo ese poder Inadu era demasiado fuerte, la única solución parecía ser la muerte.— Aclaró haciendo que Astrid comprendiera por qué sus huesos estaban desperdigados por el mundo. —Cuatro de los sabios más fuertes impregnaron un hacha con parte de su magia, cuando el arma estuvo lista confiaron en la madre, la que la dio la vida, para que fuera la que se la quitara. Pero antes de que pudiera matar a su hija, Inadu lanzó un último hechizo.— Relato captando la atención de Astrid, ya que aunque podía imaginar cual de poderosa podía ser, no era consciente de todo lo que Inadu había llegado hacer cuando aún estaba con vida. —Un hechizo impulsado por su propia muerte, una maldición sobre todos los presentes. Los unió a la luna llena para que una vez al mes se convirtieran en las mismas bestias que usaron para cazarla.— Aclaró haciendo que la expresión de la Original cambiará al entender perfectamente lo que la estaba narrando.

—El vacío creó la maldición de los lobos.— Murmuró sorprendida, ya que fue en ese preciso momento cuando se dio cuenta del gran poder del vacío, y a pesar de ya tener un gran poder codiciaba mucho más.

—Llevas la marca de los media luna, igual que ella, que su madre, que maldita se convirtió en la primera licantropa.— Explicó Davina haciendo que Astrid la mirase sorprendida, al ver que por su línea paterna descendía de otra criatura de gran poder. —Los demás se convirtieron en las seis manadas que conoces hoy, pero tu linaje lo comenzó todo y es el único que aún tiene poder sobre el vacío.— Sentenció haciendo que Astrid se quitara el pelo de cara, mientras inspiraba con frustración al ver que una vez más una de sus deducciones parecía haber sido correcta.

—Por eso ha estado cazando a los Labonair.— Asumió comprendiendo por qué ahora quería acabar con sus hijas, con su hermana y con ella. Las cuatro eran las últimas del linaje.

—El vacío te tiene miedo, así como a Taylor. Os quiere muertas, y si vosotras dos morís, solo quedarán dos Labonair.— La recordó esperando que fuera consciente de lo importante que era su papel en todo ello, pues sí ella o su hermana morían, el deber de neutralizar al vacío recaeria sobre otras personas.

—Mis hijas.— Murmuró sabiendo que debía de protegerlas a toda costa de todo aquello, puede que fueran fuertes, poderosas y valientes, pero el vacío no tenía sentimientos por nadie y acabaría con cualquiera que supusiera una amenaza.

—Puedes proteger a tus hijas, Astrid.— La aseguro Davina, sabiendo perfectamente la forma de poder incentivar que la híbrida hiciera lo que ellos querían. —Pero tienes que confiar en mí.— La pidió. —Los ancestros no encuentran al vacío, así que ha poseído un cuerpo. Si la encuentras podrás luchar, tu sangre es su debilidad, úsala. En cuanto tu espíritu quede libre usaré a Klaus para lanzar un hechizo que hará que la encarcele.— Aclaró mostrando de esa manera por qué necesitaba que Klaus y Astrid se reunieran con ella, uno debía de saber la historia y el otro debía de ser usado para acabar con aquella criatura. —Recuerda, no funcionará sino confías en mi.— Insistió haciendo que Astrid se pusiera de pies con la intención de irse, creyendo que podía confiar en Davina. —Una cosa más, Astrid, el vacío lleva detrás tuyo mucho tiempo. Ya te encontró una vez, cuando aún eras humana.— La reveló, haciendo que esta se diera la vuelta y la mirase sorprendida.

—¿Qué? ¿Cuando? Estoy segura de que si hubiera tenido algún encuentro con la psicópata de mi antepasada me acordaría.— Aseguró sin imaginarse que ese encuentro no fue una lucha, pero su presencia sí estuvo marcada por la muerte y el deseo de poder.

—Fue breve su estancia en el mundo, pero poseyó el cuerpo de un brujo, Tyrion. Para tu suerte y la de todo el mundo fue apresado y murió antes de tiempo, debilitando así el poder del vacío.— La reveló, haciendo que Astrid comprendiera porque Tyrion cambió de golpe, porque quería alejarla de todos y porque quería más poder, no era él quien hablaba, sino el vacío que le había poseído para matarla.

—Su ansia de poder..., el sacrificio...— Murmuró al recordar todo, finalmente todo tenía sentido y muy en el fondo se sentía culpable de no haberse dado cuenta, y de no haber podido buscar la forma de ayudarle y de salvarle.

—Sí, por eso fue imprescindible que tu fueras parte del ritual, fue tu sangre y tu poder la que la debilitó por tanto tiempo.— Terminó de decir Davina, hacindo que la rubia suspirase para finalmente salir corriendo sabiendo que debía de hablar, de forma inmediata, con Taylor, debía de saber al peligro al que ella también estaba sometida.

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—¿Qué es lo que ha pasado? ¿Y Klaus?— Preguntó Taylor al ver a Astrid en el punto en el que su hermana la había pedido que fuera.

—Para resumir bastante, Davina ha sido quien nos ha solicitado audiencia.— Se limito a decir, sabiendo que debía de decirla lo básico que Davina la había contado, no tenían tiempo para una explicación extensa. —El vacío fue una bruja, la que creo la maldición de los hombres lobo.— Añadió mientras los dos comenzaban a caminar.

—Si que tiene poder...— Murmuró Taylor sorprendida, ya que aquello era impresionante, aunque también peligroso, aquello solo indicaba de todo lo que era capaz de hacer.

—Hay más, la primera licantropa de la historia fue su madre, fue la primera media luna.— Añadió haciendo que Taylor se detuviera para poder asimilar lo que su hermana acababa de decir.

—¿Nuestra antepasada era su madre?— Preguntó incrédula por lo que estaba diciendo, ya que ni en sus peores pesadillas podía llegar a imaginar que eso pudiera ser posible.

—Y es por ello que solo nuestra sangre la debilita, por eso cazaba a los Labonair, por eso quería que Hope y Eliana fueran parte del sacrificio.— Explicó provocando que su hermana comprendiera porque siempre la habían pedido que se escondiera, por eso su padre murió de forma tan repentina, todo tenia tanto sentido que parecía ser casi ficticio.

—Si nosotras sabemos su punto débil, ella también conocerá el nuestro, y teniendo en cuenta de lo que es capaz de hacer...— Comentó la morena sabiendo que el vacío no se detendría, y que buscaría la forma de acabar con ellas, a fin de cuentas eran las únicas que tenían la oportunidad de hacer algo.

—No voy a quedarme de brazos cruzados mientras esa cosa busca la forma de resurgir de entre los muertos, debemos de matarla y si es necesario quedarnos sin una gota de sangre lo haremos, pero no voy a permitir que vuelva.— Sentenció Astrid sabiendo que si Inadu era peligrosa, ellas harían todo lo posible para volverse más peligrosas y si era necesario más poderosas, pero no podían permitir que volviera de entre los muertos con todo su poder, por que entonces morirían. —Lo que me ha dicho Davina..., destruirá el mundo con tal de saciar una sed insaciable por poder, matará a todas la criaturas poderosas y te garantizó que nosotras seremos las primeras.— La recordó a Taylor, haciendo que esta comprendiera que debían de hacer todo lo posible por impedir todo, a fin de cuentas ellas eran las únicas que tenían la forma de detenerla.

★★★

Supongo que nadie se esperaba que Tyrion estuviera poseído por el vacío, pero las pistas siempre estuvieron ahí.

La sed de poder, el controlar a Astrid, cuatro brujas poderosas en el sacrificio. Venga ya, estaban las señales ahí y nadie las vio.

Aunque no os niego que la historia de Tyrion me vino que ni pintada, porque no planee esto hasta que llegue a la temporada. Pero quienes me habéis leído anteriormente sabéis lo mucho que me gusta hilar todo, esto no iba a ser la excepción.

Bueno, al margen de el bombazo pasemos a analizar el capítulo.

Esta vez lo voy a hacer por personajes, en primer lugar Klaus, mira es que se gana a pulso a veces que le odien aunque sus momentos de humor le quitan seriedad a los problemas (perfectamente podría ser yo también os digo) aun así me encanto escribir la escena donde se pone en modo "porque Astrid esya involucrada, otra vez". De verdad que amo a este par.

Por otro lado Davina, hace entradas ya dignas de un Mikaelson, sin duda aprende ya las tradiciones familiares, y que sea ella la encargada de transmitir esa información... Es que este capítulo fue la leche por todo lo que representaba.

Taylor..., bueno creo que deja claro que esta modo "yo quería una familia normal, no una antepasada pirada", pero todos sabemos que Taylor tiene su carácter.

Y Astrid..., bueno sin duda tiene unos linajes muy curiosos, por un lado Silas y por otro Inadu, creo que justifica bastante bien lo poderosa que es, y espero que de esta manera me vaya alejando de los fanfics convencionales que perfectamente se encuentran en la plataforma. Ya que una cosa es crear una historia atrayente e innovadora, pero además de ello que el fanfic no sea repetitivo es complicado, y espero conseguirlo. Porque en este caso no creo que haga más historias de Klaus.

La próxima semana me temo que no habrá capítulo de Forever And Always, por motivos de tiempo no os podré actualizar, pero el 11 de septiembre habrá capítulo, os lo prometo (además de que ya está editado y corregido)

¿Qué os ha parecido el capítulo?

Os leo ♥️