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08: Algo más

Cuando llegaron a la casa, Yibo aún se mantenía serio, no dijo absolutamente nada, ¿cómo se enteró de la situación? definitivamente el chófer de Xiao Zhan le dijo, y no es como si fuera un soplón, era su deber porque al final de cuentas, él trabajaba para Yibo, no para Xiao Zhan.

Y aunque Xiao Zhan estaba algo preocupado por lo que fuera a decir, estaba más preocupado por las heridas del Alfa.

Jamás lo había visto comportarse de esa manera, nunca lo había visto siendo un completo animal, porque si de esas vamos, Wang Yibo destruyendo todo en la tienda le había dado mucho miedo, un comportamiento así jamás había sido visto por Xiao Zhan. Sin embargo, tampoco estaba en condiciones de alejarse de él por temor, así que simplemente cedió a ayudarlo en cuánto estuvieron en casa.

La habitación del Alfa seguía con ese peculiar aroma a él, y eso hizo que la cabeza de Xiao Zhan diera vueltas y se sintiera asfixiado.

JiYang hubiera querido acompañarlos y ayudarles, pero sabía que sería un estorbo en una relación que no era suya, así que simplemente se fue después de llegar a la casa.

Yibo se dejó caer al pie de la cama, con sus manos aún lastimadas que parecía como si no le doliera un solo dedo, Xiao Zhan se mantuvo de pie en la habitación.

-Yo... realmente no robe nada, solamente quería comprar un regalo para mi madre, su cumpleaños está cerca y... sabes que no soy de comprar cosas como joyería para mí, todo era para mí mamá, no quise ocasionar un problema.

-¿Ellos te hicieron algo?- Yibo no le pidió explicaciones -, los policías, ¿hicieron algo más que revisarte?

Xiao Zhan negó, no obstante se vio tan inseguro al momento de hacerlo, como si tuviera miedo de ver la reacción de Yibo al enterarse que en realidad lo vieron semi desnudo.

-Dime la verdad, no pienso enojarme contigo porque no es culpa tuya- Yibo volvió a decir -, solamente estaba... preocupado por ti.

Xiao Zhan volvió a negar, se dirigió a uno de los cajones del mueble de Yibo, lo abrió encontrándose con el alcohol y un par de vendas para curarlo, las tomó y aún con un poco de duda se acercó hasta el Alfa. Wang Yibo solamente lo vio moverse de un lado a otro, sin quitarle la mirada de encima pudo observar como su omega tenía su rostro demacrado en preocupación.

Y por un segundo se sintió feliz de saber que estaba preocupado por él.

-Te ayudaré con tus manos- el omega se sentó a su lado, ni siquiera lo miró a los ojos, pero Xiao Zhan no lo hizo porque la comisura de estos estaban húmedos y brillantes, no quería flaquear y llorar cuando sus ojos se conectaran.

El Alfa no dijo nada, solamente le tendió una de sus manos para sentir como el chico a su lado comenzaba limpiando sus nudillos con mucho cuidado, la respiración de Xiao Zhan estaba agitada, él se sentía intranquilo y no tenía idea del porqué. Tal vez era porque realmente estaba preocupado por Yibo, o tal vez era porque nunca imaginó que la primer persona que lo viera tan indefenso y casi desnudo fuera un Alfa completamente desconocido, y no Wang Yibo.

Durante esos minutos el Alfa no se quejó de estar siendo curado con alcohol entrando entre las grietas de sus nudillos, incluso aunque ardiera y doliera demasiado, sentía que estaba anestesiado y tal vez su anestesia se trataba de Xiao Zhan.

Podía notar lo nervioso que estaba su omega, y una ligera sonrisa apareció en sus labios.

-Listo, ya quedó- Xiao Zhan habló, tratando de tomar la otra mano para comenzar a curarla, sin embargo en esos momentos la barbilla del omega fue alzada, y por fin sus ojos se encontraron con los de alfa.

Sintió sus manos temblar y su pecho subía y bajaba más rápido, no sabía en qué momento la distancia entre el Alfa y él se había reducido tanto. A lo mejor era porque no le había prestado atención.

Xiao Zhan estuvo por protestar, decirle que necesitaba curar la siguiente mano, pero sus palabras no lograban salir y mucho menos cuando sintió la respiración del Alfa demasiado cerca de sus labios.

Por un instante pensó que Yibo iba a devorarlo y no supo porque no se apartó, estaba hundido, estaba acabado.

Sin embargo, sus labios nunca se juntaron, porque Yibo se había arrepentido, con sus manos temblando y su cordura de regreso, lo único que pudo hacer fue separarse un poco más y en vez de dejar un beso en sus labios, solamente dejó una caricia con la yema de sus dedos.

Se alejó de él, levantándose de donde estaba y dijo: -Puedes quedarte aquí, yo tengo algo que hacer.

El omega no pudo formular palabra alguna, estaba avergonzado y anonadado por lo que casi había pasado. El Alfa salió de la habitación dejando una vez más a Xiao Zhan solo.

El omega no preguntó a dónde iba, simplemente guardo las cosas y se dirigió a su habitación, queriendo tomar una ducha para poder acostarse a dormir un rato.

Pero no contó con la idea de que durante esos minutos y horas que pasaban, la imagen de su Alfa parecería constantemente en su cabeza, recordando a la perfección lo que antes estaba por pasar.

-¿Por qué diablos no hiciste nada para impedirlo?- Xiao Zhan se quejó consigo mismo, acomodado entre las suaves sábanas de la cama se hundió en ellas para ocultar el leve sonrojo de vergüenza -. Ahhh sólo esperó que se encuentre bien- murmuró antes de cerrar los ojos para descansar un rato.

Iba a ser de tarde para cuando despertó, no creyó que podría dormir tanto tiempo, pero el sol que se veía desde su ventana ya comenzaba a esconderse entre los árboles, se estiró en la cama y se levantó algo adormilado.

No sabía si Yibo ya había regresado, así que salió de su habitación para volver a la de él, sin embargo se percató de que esta estaba completamente vacía, al parecer el Alfa aún no regresaba a casa.

Soltó un fuerte suspiro y bajo lentamente hasta la planta baja, no pudo encontrar a nadie merodeando por los pasillos ni nada de eso, así que decidió ir a la cocina para buscar algo de comer.

Encontrando una cesta llena de verduras y un poco de carne en el refrigerador, decidió sacar un sartén y comenzar a preparar algo de comer, cortó las verduras rápidamente, los rábanos y la lechuga fueron cortadas finamente mientras en el sartén se freía unas cuantas tiras de carne, después dejó caer las verduras en el para seguir cocinando.

Se sentía a gusto sobre todo cuando estaba solo, así que se tomó su tiempo para cocinar. Pero de un momento a otro, escucho la puerta principal abrirse con fuerza, la casa estaba en completo silencio por lo que se podía escuchar la discusión de las dos personas que habían entrado.

-No debiste haber hecho eso- JiYang le reprendió -, está bien que estés enojado, pero no deberías tomar venganza contra la familia de los oficiales, ¿sus hijos y su esposa que tienen que ver? ellos no tienen la culpa de tener un padre y esposo tan hijo de puta.

-¡¿Y que querías que hiciera?! ¿Qué me quedará tan normal sabiendo que se metieron con mi omega?- Yibo soltó una risita, caminando de un lado a otro con notable frustración -, no no, claro que no. No se las iba a dejar tan fácil.

-¡No te entiendo! Hemos sido amigos por tantos años, pero no logró entender tu retorcida cabeza- JiYang se quejó, saliéndose de sus casillas para enfrentar al Alfa -¡No eres así! Sí, te puedes enojar con esas personas, puedes matarlas si quieres, pero no involucres a terceros en esto, ellos no tienen nada que ver, ¡son niños, por dios!

-¡No les hice nada! ¿Okay?- gritó el Alfa -, no les hice nada a pesar de que quería hacerlo, no iba a lastimar a unos niños ni a una mujer inocente.

-No, claro que no, ibas a traumarlos de por vida matando a su padre frente a sus ojos, ¿eso es mejor?- el omega negó rápidamente -, no debe ser así, por favor no seas el monstruo que todos creen que eres. ¡Incluso Xiao Zhan piensa que eres así! ¿No te duele siquiera un poco? ¿Por qué no buscas cambiar por él?

-¡¿Y qué ganó con eso?! ¡estoy jodido! ¿No lo entiendes?- Yibo estaba desesperado, ambos lo estaban que no prestaban atención a la persona que los escuchaba de cerca -, estuve jodido desde el primer momento en que vi a Xiao Zhan, ¡¿creés que soy feliz siendo lo que soy estando con él?! No tienes ni puta idea, no tienes idea de cuánto me duele saber que él está casado conmigo, podemos ser parejas predestinadas, y tú mejor que nadie sabes lo feliz que fui al casarme con él, pero todo este tiempo he vivido con una mezcla de sentimientos buenos y malos, porque soy feliz con ese omega pero a la vez tengo miedo, porque no soy una persona segura para él, no soy lo que él se merece, él debería estar con alguien mejor.

-Exactamente por eso es que deberías cambiar- JiYang se cruzó de brazos frente a él -, si estás tan enamorado de él, deberías hacerlo.

-Ahhh- el alfa suspiró profundamente -, no es fácil... no lo entenderías, ni tú ni nadie.

-¿Entender qué?- JiYang volvió a preguntar.

-Tantos años, desde que nací fui educado de una manera diferente, a ti te enseñaron a ser fuerte, pero a mi me enseñaron a ser un animal, ¿estaba bien golpear a un niño de 8 años? no, claro que no, pero mi padre no comprendía eso. Mi madre, las únicas veces en las que pude abrazarla eran cuando papá no me encerraba estudiando su estúpido patriarcado. Su ideología de ser el Alfa dominante perfecto, no sabes cuántas noches pasaba encerrado siendo educado a su manera, me llenaron la cabeza con demasiadas estupideces, si ahora tengo una pizca de conciencia sobre mis actos, es porque solamente intento ser una buena persona para Xiao Zhan, pero a veces siento que nunca seré suficiente, y tengo razón, porque no puedo huir de lo que realmente soy.

-No eres un animal- JiYang dijo, sintiendo un poco de tristeza por él -, eres una persona, tienes sentimientos y emociones, y estás enamorado del omega que te aborrece. Sé que es difícil, porque es cierto, fuimos educados de diferente manera, pero sólo esta vez hazlo por tu omega.

Xiao Zhan sintió un nudo en su garganta, también sintió su corazón doler demasiado fuerte, tanto que creyó que podría morir. Tantos años estando juntos, años en los que le dijo cosas dolorosas, Xiao Zhan sabía que Wang Yibo tenía sentimientos, pero lo que él nunca supo fue que en realidad ese Alfa estaba enamorado de él. Ahora se arrepentía de todo lo que alguna vez dijo estando bajo el control de su enojo.

Porque Song JiYang tenía razón, Wang Yibo no era un animal, él no era ese estúpido jefe encargado de matar y controlar todo a su antojo, Wang Yibo era su Alfa, le pese a quien le pese.

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