An ending
Frisk abrió sus ojos.
Volteo a su alrededor, y notó que estaba en un espacio negro. Sin inicio, y sin fin.
La chica comenzó a gritar los nombres de sus amigos.
Pero nadie vino...
La castaña se sentó en el suelo, esperando algo. Una voz, una señal, un grito, un llanto. Lo que fuese.
Pero nadie vino...
Esto le comenzaba a desesperar. Empezó a contar. Como en aquellos tiempos, donde era una cosa inexistente que solo seguía a Chara para ver morir a sus amigos.
1
2
3
4
5...
El tiempo pasaba, y nada cambiaba.
34
35
36...
Pasaron minutos. Pasaron horas.
1789
1790
1791...
¿Dónde estaban los demás? ¿Dónde estaban sus amigos? ¿Dónde estaba Chara?
La chica se hartó de esperar, y comenzó a caminar. Pasó por paso, sin rumbo, en aquella obscuridad. Caminó, y caminó.
Ni siquiera estaba segura de cuánto tiempo. Intentó un par de veces transportarse a otro lado. Pero no podía. No entendía siquiera la forma que formaba el laberinto de áreas que la podía transportar a otro lado. Solo era una línea recta, pero cuando intentaba llegar a un lado, este desaparecía. No se movía. Desaparecía completamente. Como si esa parte del mundo también hubiese dejado de existir.
Solo seguía caminando.
Hasta que escucho un aplauso detrás de ella.
-inteligente, Frisk, eres una chica muy inteligente. ¡Estoy orgullosa de ti! Incluso si fue con ayuda, pudiste plantarme cara. ¿Qué más puedo pedir?- la chica dio un paso, y las almas humanas, junto con las de los amigos de Frisk, y otra, totalmente desconocida, que no tenía color, se formaron a su alrededor. -ah. ¿Sabes? Desde que morí, nunca tuve un alma. Se sintió bien compartir la tuya. ¡Pero por fin tengo propia! ¿Y sabes lo mejor? ¡Ahora soy como tú!- rió -tengo más de un fragmento de alma. Tanto de humano, como de monstruo. Además, por fin estoy al lado de mi hermano- dijo acercando más el alma sin color a sí misma. -¿no es así, Asriel?-.
Otro brillo cubrió el lugar.
Frisk se cubrió rápidamente los ojos, para no quedar ciega, incluso por unos segundos.
Y cuando los abrió, se sorprendió al ver que estaba en la pantalla de pelea, de una forma parecida a la que había cuando peleo con Asriel.
-Soy yo, el demonio que viene cuando la gente dice su nombre...-.
-Chara-.
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Es un buen momento para poner la canción que está en multimedia
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La menor retrocedió unos pasos. Entonces, usando la misma habilidad de Sans, esquivo un potente ataque que Chara lanzó con el cuchillo gigante.
-¡No escaparás, Frisk!-.
Frisk comenzó a correr en todas direcciones. Los ataques no intentaban dañar su alma. Intentaban dañarla a ella. Corrió a la derecha, resbalando por el suelo para poder esquivar un ataque en vía horizontal que la demonio hizo. De levantó de un golpe esquivando varios pétalos amarillos lanzados igualmente por su enemiga.
-Ni siquiera me importa resetear el mundo. ¡Solo quiero matarlos a todos!-.
Chara levantó la mano con violencia. Entonces cuchillos aparecieron de la nada, y se arrojaron contra Frisk, quien corría en forma de zigzag esquivando con dificultad los ataques de la mayor.
-me sorprendes. Debes dejar de juntarte con ese estúpido esqueleto. Eres demasiado buena esquivando para tu bien-.
La chica con las mejillas marcadas, apareció más pétalos y los junto, haciendo algunas flores, las cuales lanzó a Frisk, quien intentaba esquivarlas, pero no podía, pues estas la seguían de un lado a otro. Entonces una exploto, luego otra, y así, hasta que la más cercana exploto, hiriendo a la castaña.
-Hum, ¿sigues viva? Como te odio-.
De las almas humanas empezaron a aparecer las armas que las caracterizaba. Un cuchillo de juguete, unos guantes de boxeo, zapatos de ballet, una libreta, un sartén, y una pistola. Todas, una por una, intentaban atacar a Frisk, con pocos resultados, pues la chica era bastante ágil. O bueno, no era ágil, pero sabía usar bien los poderes de Sans, y eso la hacía bastante escurridiza.
-¿por qué las almas me atacan? ¡Ellas me ayudaban!-.
-¿no lo entiendes? Te ayudaban por qué sentían empatía de ti. Sabían lo que pasaste. ¡Por eso me ayudan ahora!
Las almas siguieron atacando. Pero todo fallaba.
-¿Aún? ¿Por qué no te rindes? ¡No saldremos de aquí jamás!-.
Más pétalos aparecieron. Algunos se juntaban, los otros ayudaban a las armas a herir a la menor. Una por una. Todos fallaban. Es entonces cuando Chara se hartó y decidió atacar por su cuenta. Las armas retrocedieron y dejaron de atacar cuando Chara empezó a acercarse. Las flores y los pétalos desaparecieron, y solo quedaban Frisk, Chara, y unas enormes armas que eran identificadas por ser semi transparentes, de un color en específico, y brillantes.
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Aquí termina lo bueno, pueden quitar la canción.
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-¡¿por qué?! ¡¿Por qué no te rindes?! ¡¿Por qué sigues luchando?!- Gritó Chara, harta, mientras a su alrededor aparecían cuchillos listos para matar a Frisk.
-¡Por qué estoy cansada! ¡Odio ver a mis amigos morir una y otra vez! ¡No me voy a rendir, no ahora que llegué aquí!-.
Chara, molesta, dejó a una de sus armas atacar. Frisk cayó al suelo de rodillas, con lagrimas formadas por la culpa del dolor que sentía al tener un cuchillo atravesando su estómago. Con dificultad, y gimiendo un poco por el dolor, retiró el arma, abriendo la profunda herida, lo cual la hizo chillar, y lanzó el cuchillo a unos metros de lejanía.
-¿crees poder continuar así?- se burló Chara. -¡wow! ¡La pequeña, inútil, y estúpida Frisk es TAN Valiente!- siguió riendo. -¡Bien! Llama por ayuda, te reto-.
Frisk sonrió, mientras presionaba el botón que decía "ACT" a su lado, mientras presionaba la herida en un intento de hacer que la sangre parase.
*Llamaste por ayuda...
-Pero nadie vino...-.
La sonrisa de Frisk desapareció cuando Chara pronunció lo último después de esperar unos minutos.
-oww, ¿pensaste que alguien iba a venir?... ¡Ja! ¡No seas tonta, Frisk! Estás sola- rió maniática mente al contrario -¡Estás completamente sola! Tán sola, que nadie vendrá, ni siquiera para verte morir- se siguió burlando.
Entonces Frisk entendió.
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-¿Eh? ¿Qué haces? ¿Crees que puedes salvarme?- rió nuevamente -pff, puedes intentar-.
-Es eso, ¿no es así? ¿Por eso odias a todos?-.
-¿A qué te refieres?- preguntó Chara confundida.
-Tienes miedo, Chara. Tú alguna vez llamaste por ayuda, y sentiste lastima por ti misma cuando nadie vino-.
-...no sé a qué te refieres-.
-¿Qué sucedió, Chara? ¿Qué es lo que pasó para que odiaras a todos de esta manera? Tú no odias a los monstruos, ¿cierto? Los matabas por qué querías ser más fuerte. Para deshacerte de alguien más, ¿no? De los humanos-.
Chara pronto se sintió alarmada. Se sintió descubierta y como una torpe. -....te equivocas-.
-¿Qué te hizo odiarlos tanto?-.
Chara guardó silencio.
-y-yo...recuerdo- murmuró para sí.
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Chara nuevamente se levantó del suelo, cuando su padre gritó que se levantara. Otro insulto, y otro golpe llegaron a la conciencia de la pequeña. Todos los días era lo mismo. Llegaba llena de moretones de los golpes que le daban sus compañeros en la escuela, y dormía con cortadas y mas moretones causados por sus padres. Una y otra vez. Ahora mismo estaba siendo jalada por su padre hasta la camioneta que tenían. El señor la obligó a subir con violencia, y partió hasta uno de los lugares más conocidos en el año 1987. Mt. Ebott. Una vez llegaron, la obligó a escalar hasta la cima. Ahí, la chica camino hasta un hoyo gigante, cuando tropezó con una rama.
-¡PAPA!- gritó asustada.
Pero nadie vino...
Una vez cayó en el suelo, estaba desmayada. Tardó unos segundos en levantarse, y aunque aturdida, comenzó a andar, para caer nuevamente en la cama de flores en la que había despertado.
-h-hola- escucho una voz. -¿estás bien?- un chico que parecía una cabra se acercó a ayudarla. -Ven conmigo, te llevaré con mamá, ella te curará- Chara estaba a la merced del chico, así que solo se dejo llevar. Nada podía ser peor de lo que ya vivía. -por cierto, ¿cómo te llamas?-.
-.....- ella no tenía la intención de contestar, pero lo hizo. -Chara-.
-¿Chara? ¡Es un nombre muy lindo! Yo me llamo-----.
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-¡No sabes de qué estás hablando!-.
-Si lo sé, Chara-.
-¡No!-.
Rápidamente los pétalos rodearon a Frisk. Las almas fueron ordenadas a atacar, pero estas no estaban, así que Chara se dejó llevar y siguió atacando con los pétalos.
-¡No! ¡Tú no viviste lo que yo!-.
-¿Qué fue lo que viviste, Chara?- dijo la chica mientras esquivaba con dificultad las cosas.
-¡El odio! ¡Todos decían que era un estorbo! ¡Una estupida! ¡Mis padres me golpeaban! ¡Mis compañeros también!- para este momento Chara ya estaba llorando. -¡Mi padre me intentó matar en la montaña Ebott!-.
-Chara- llamó Frisk, sonriente, una vez que los ataques terminaron por la dificultad de mantener los ataques mientras lloraba de Chara -¿crees que llegue aquí de casualidad? Mi vida era un asco. Nadie sabe esto, pero yo fui a la montaña Ebott....por qué intentaba morir- dijo llamando la atención de la contraria.
-Frisk...-
-Chara, no estás sola. Cuando caíste, estaba Asriel. Cuando moriste, todos los monstruos. Ahora, las almas te apoyan por qué no quieren verte sufrir. Llama por ayuda-.
-....-
*Chara llamó por ayuda...
*Pero....
*Se sorprendió al ver la forma de los monstruos y los humanos aparecer a su alrededor, incluyendo a Asriel entre ellos.
*Todos vinieron...
-Frisk- dijo Chara volteando a la mencionada. -Gracias-.
Frisk la abrazo.
De nuevo, todo brilló, y de pronto estaban en la habitación antes de la barrera. Aunque no parecía ser esta, pues la cama de flores estaba ahí, debajo de ellas.
Chara se separó de Frisk, quien se sentó, y luego acostó con delicadeza.
-¿Frisk?- llamaron los monstruos, quienes estaban al rededor de las dos. Parecían no temerle a Chara. Como si supieran que pasó.
-Niña...levántate, hay que curarte- dijo Sans nervioso.
-¿Mi niña?- llamo Toriel al no ver respuesta.
-¿Humana?- empezaron a preocuparse Papyrus y Undyne.
*Pero no hubo respuesta.
-¿Frisk?- preguntó Chara, poniéndose a su lado. -¿Frisk?- comenzó a sollozar.. -¡FRISK!-.
*Pero nadie vino...
*Lo lograste Chara. Te deshiciste de Frisk, ¡felicidades! Además, todos están de tu lado. ¿Qué? ¿No estás feliz? ¡Deberías estarlo! Mataste a tantas personas en tu egoísmo, hiciste que todos dieran un gran sacrificio. Incluso mataste a quien deseaba ayudar. ¿De qué valió eso si no estás feliz? ¿Qué? ¿Qué quieres resetear? Wow, eres muy egoísta. Incluso después de todo, ¿quieres volver a empezar? ¿No te parece que ya hiciste mucho? ¡Vamos! ¡No pongas esa "Chara"! Nadie podrá salir del subsuelo, y aunque todos estén contigo ahora, te resentirán todo lo que hiciste, ¿pero qué más da?...¿aún quieres resetear? Wow, qué criatura más egoísta eres. Pero, ¿desde cuándo estás tú en el control? Vamos, aléjate de ese botón. Muy bien. Ve, y disfruta tu final verdadero. Después de todo, es lo que luchaste por conseguir. Tranquila, Chara. Sé que disfrutas leer esto una, y otra vez. ¿Cómo lo sé? Los errores podemos ver por todos los lugares, querida. Sé que sientes culpa y enojo. Sé que sientes emoción al leer esto, incluso si es la primera, la otra, o la última vez. Que criatura tan desagradable. Pero no te preocupes, no seguiré blasfemiando contra ti. Está bien. Ya tienes lo que buscabas. Fuiste tú quien puso todo como está. Quien trajo el mundo al caos y la destrucción. Ahora, aléjate de aquí, y no vuelvas. Quedare con los monstruos, después de todo, te tienen miedo, nadie te herirá. ¡Felicidades! Ahora que llegaste al final verdadero, ¡puedes soportarlo con tranquilidad! Y si no es así, lo siento querida, por qué no importa cuánto lo intentes. Jamás. Podrás. Volver.
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