Me desperté por el despertador, la alarma daba las siete de la mañana. Hoy era lunes, me tocaba un examen de química. Me levante con un tanto de pereza, los lunes no eran los míos. Caminando hasta el baño con torpeza, me deshice de la ropa, dejándome desnuda.

Al cabo de 10 minutos, salí del baño enrollada en dos toallas una en mi cuerpo y otra en mi cabeza, me seque y me vestí con un pantalón de jean y una blusa de cuadros con unas conversas. Solté mi cabello y lo cepille, me maquille algo sencillo, rímel y brillo labial. No era la típica chica de mucho maquillaje me conformaba con algo sencillo y bonito.

Al terminar eran las 7:45 entraba a las 8:15 en punto, cogí mi iPhone y le envié un mensaje a mi mejor amiga; Camila.

Mensaje de texto

Te espero como siempre, a las 8.

Al enviar le el mensaje, guardé mi móvil en el bolsillo de mi jean.

Desvié con mi mirada la mochila y la colgué en mi hombro derecho y baje las escaleras hacia la cocina donde estaba mi nana, la dama de llaves, desde pequeña. Para mi era como mi segunda madre, ya que mis padres no están mucho conmigo, en casa, siempre están ocupados con sus estúpidos trabajos, digamos que mis padres son ricos, no es por presumir pero, tenemos una gran empresa, por la cual en estos días mis padres están un poco distraídos, muy pensativo.

Pero no le puse interés al tema, ya que no me importaba, eso si, se preocupaban de mi, no me hacia falta nada, siempre atentos conmigo. Salude a Maria, la ama de llaves.

─¿Cómo amaneciste hoy bella niña?─me dijo con su dulce voz, ella me trataba como su hija, ya que no tiene hijos y tiene unos 46 años.

─Como siempre, Maria. Ya sabes que odio los lunes. ─Ella me sonrió con esa hermosa sonrisa y me puso el desayuno delante mío.

Comí lo mas rápido que pude, no me quedaba tiempo, ya que eran las 7:58mp cuando terminé, subí escaleras arriba y lave mis dientes. El claxon sonó, me sobresalté era Camila, bajé y me despedí de nana y salí de la casa para ver un Audi rojo aparcado delante de mi mansión. Camila se estaba retocando en el retrovisador, voltee los ojos en blanco, ella siempre se tiene que ver sexy. Al menos eso lo que dice ella.

Subí al copiloto, y me puse el cinturón, ella volteo a verme y una sonrisa apareció en su rostro.

─Buenos días preciosa. ─Dijo poniendo el marcha el auto.

─No hay de buenos días. Me duele la cabeza de tanto estudiar ayer...─Me sobé la frente.

─Dios, no me digas que tenemos examen. ─Dijo con los ojos tan abiertos que juraría que saldrían en cualquier momento.

─Y ahí vamos de nuevo, ¿No estudiaste verdad?─Dije cruzándome de brazos.

─Sabes perfectamente que yo no soy esa chica a la cual estudia en todos los exámenes que tengamos, y todos sabemos que esa eres tú.

─Se perfectamente que tu eres la chica que va de fiesta a fiesta sin importarle a nadie, y se que eres la chica ala cual siempre saca ceros, Y no se como mierda pasas de curso.

Ella ríe y yo me uno a sus risas contagiosas, la quiero y mucho, pero me enoja que no estudié y que vaya de fiesta en fiesta. Ella aun es virgen al igual que yo, nos prometimos perder la en nuestra noche de bodas, no bebe ni fuma, solo se divierte, pero cuando se enfada se convierte en una bestia salvaje.

Era esa típica chica buena, cabello rubio con ojos azules, como el mar. Buen cuerpo que todo chico desearía, muy divertida y simpática. En cambio yo era esa de ojos grises y cabello castaño y de figura estable resaltaban mis caderas.

Al llegar al instituto nos fuimos a nuestras clases juntas, ya que íbamos en la misma clase. Lo que no sabia _____, era que hoy era sus ultimas clases.

Narrador omnisciente:

Al terminar las clases ______ & Camila fueron a comer en McDonald's, pasaron la tarde entre diversión y risas, fueron a un parque que tenia un río muy hermosa, la atardecer con el cielo rosado y anaranjado, de tanto risas y diversión se les hizo de noche.

Se despidieron y fueron a sus perspectivas casas..

POV _____'s

Una tarde realmente hermosa con mi única e mejor amiga, no tenia muchos amigas solo unas 4 entre ellas Camila...

Al entrar a casa estaban mis padres estaban serios hablando, pero cuando me vieron se callaron de inmediato, no sabia porque, así que no les puse interés, les salude a ambos con un beso en la mejilla y me senté en el sofá.

─¿Pasa algo? les noto algo raros. ─Pregunté con el ceño fruncido.

─No nada hija, solo que...tenemos problemas con la empresa. ─Dijo un tanto nerviosa mamá, conocía muy bien a mi madre estaba distinta en estas circunstancias.

─Bueno yo estaré arriba si me necesitan. ─Dije yendo hacia mi habitación.

Al subir hice las tareas de mañana, al terminar me puse una ropa cómoda para casa. Me supe a mirar la televisión hasta que me llamaron para bajar a cenar..

Maria puso el ultimo plato y se fue, dejándome con mis padres a solas para cenar. Estábamos en un silencio incomodo, hasta que mi padre lo rompió que tan solo con estas palabras mi vida cambiaría.

─______, dejaras de ir a la escuela, dejaras de estudiar y dejaras de hacer todo lo que hacías por ahora. -Dijo serio, abrí los ojos como platos..

─Pero yo quiero terminar mis estudios, quiero seguir con lo que hacia por ahora. -Dije mirándolo fírmamente.

─________, te lo he dicho una vez y no lo volveré a repetir, dejaras los estudios, por problemas en la empresa. ─Dijo mirándome.

─Ami me importa un carajo tu estúpida empresa. ─Mi madre se tenso, nunca falte el respeto a mi padre, era mi primera vez.

─No me faltes el respeto _____, te lo digo porqué la empresa va bajando, y te necesito a ti, si no te necesitara no te estaría pidiendo esto.

─¿Y para que me necesitas ami?─murmure moviéndome incomoda en mi asiento.

─Tu te vas a casar con el hijo de mi socio, para que la empresa tenga éxito y sea más famosa en el mundo, así ganaremos bastante dinero que antes y eso hará que vaya mejor, así de fácil.

Y esa fue la gota que derramo el vaso, No, no y mil veces no, esto no podía estar pasando, no a mi, no podía creer que mi padre el que creí un héroe para mi. Me quiere dar por su estúpida empresa.

─¡No, te estas riendo de mi, ¿verdad papa? ¿esto es una broma? porque si lo es, no hace ni puta gracia!─Grité levantándome de un salto de mi silla.

─____, calmante, cariño. ─Dijo mama en un intento.

─¡¿Qué me calme?! ¡cómo quieres que me calme si tu marido me quiere vender aun desconocido!

─¡Yo no te quiero vender! ¡lo hago por nuestro bien, así que te guste o no, te vas a casar lo antes posible! ─Gritó furioso.

─¿Pero qué dice este loco? ¡Tu no me puedes obligar a casarme con quién te da la gana!─Dije en un intento, en sus ojos se reflejaban furia, rabia y impotencia.

─Me da igual lo que pienses, son ordenes de tu padre y las vas a obedecer si o si.

Miré a mama en un intento de ayuda, pero ella bajo la cabeza negándose, y ya no puede mas, deje que las lagrimas salieran.

No podía hacer nada, lo sabia, y es que joder, mi padre no cambiaría de opinión. Por nada en el mundo. Me seque las lagrimas con el dorsal de la mano, di unos pasos para salir del salón pero su voz me paro en seco.

─Por cierto...Mañana vendrán a firmar los contratos para confirmar y empezar con nuestro contrato, así que _____ comportarte aun que se por una vez en tu vida. Y ponte algo formal y hermosa hija.

Cerré los ojos fuertemente y apreté los puños.

Sin decir nada subí corriendo hacia mi habitación, cerré la puerta de un portazo y me lance en la cama haciéndome una bolita para llorar hasta no poder más, de llorar tanto me quede profundamente dormida, rogando de que fuera una pesadilla. Y no fue así..

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Hola chicaas, aquí esta el primer capítulo ¿Qué les pareció? Espero que os ande gustando porque esto nomas es el comenzamiento de la historia, después viene lo bueno...

Así que votad y comentar que les pareció el primer capítulo.

Besos xx

Mi twitter: @Zahiaa_JBieber