Acto dieciocho
—¡Ink!— Error despertó agitado, con su mano en su alma sentía un dolor que punza en su pecho.
—Solo fue una pesadilla— Se encontraba en el vacío y a su lado izquierdo no muy lejos de él los restos de sus hermanos, los miró y les sonrió.
—Buenos días Geno, buenos días Fresh—miro las ropas entre el polvo, y aún cuando no había contestación no podía quitar esa costumbre. En vez de pensar en su soledad se quedó sentado pensando en la pesadilla, la cual puede recordar claramente incluso lo sintió muy real, estaba primero solo, sentía que perdió algo y escuchó una voz que lo llamaba y vio a Ink entre la oscuridad suplicando su ayuda, parecía realmente desesperado.
"¿Algo le habrá pasado?".
No estaba seguro, tenía ese presentimiento que lo lleva a dejar volar su imaginación y el peor escenario que se formó es donde aquel ser a quién ha perseguido por estos 5 años lo haya atrapado, solo para hacerlo sufrir.
Se levantó preocupado y abrió un portal al cementerio, escondido entre los árboles para poder evitar ser visto. Camino apresurado para verificar que esté bien tal como todos los días lo ha visto a esa misma hora asomado desde su Antivoid.
—Se que estás bien, lo sé—pero su alma le decía algo distinto y apenas llegó a la orilla del bosque podía ver las flores y el verde pasto, miraba las tumbas y el cielo azul. Sin embargo él, a quien ama con todo su ser no está.
"Debe estar retrasado".
Su mente trata de pensar en algo y lo único que hace es sentarse a esperar, solo y con el puño en su pecho.
"Yo sé muy bien que está bien en su hogar".
"Es muy fuerte y puede cuidarse solo".
Pensó por horas hasta anochecer, pero él no llego, ¿Acaso le pasó algo?.
Desesperado se levantó y abrió un portal para ir al lugar donde él solía mirar todos los Universos al mismo tiempo, piso el suelo con un eco al momento que el agua esparcía sus ondas, pero no lo vio, y aún sin saber que fue de él, siguió mirando entre los lugares que frecuenta y regreso de nuevo. Negó con su cabeza y abrió varias esferas con el toque de su mano, una a una reviso y miró por horas, pero con el tiempo encima de lo que pudiera ser limitado para Ink, se desespero. Todavía faltaban más por revisar, pero sentía que era inútil seguir.
Quizas tendría que ir a su hogar, por más que lo evite ya es hora de enfrentarlo. Así que en contra de su voluntad y con el terror en su alma miró entre las esferas logrando reconocer su hogar, una esfera de colores, sin embargo ya no se veía tan brillante, tampoco con tantos colores, aquello lo asusto, puede que ya sea tarde, que sea su turno de morir. Estiro su mano lo tocó una vez, solo era un segundo toque para poder ir.
—No, no puedo...— estaba asustado de de lo que diría.
—Pero...— su mano temblaba quería hacerlo, presiona su pecho arrugando su playera.
—¡Alla voy Ink!— dió un segundo toque al gritar, en cuanto abrió el portal entro con los ojos cerrados.
Seguía temblando, y se puso más nervioso al no escuchar nada, así que solo los abrio. Él no estaba ahí, ¿Entonces donde esta?.
Debía de saber que le pasó, el terror lo invadió y no sabía qué hacer su luz se la habían arrebatado. No lo quería creer, esto es una pesadilla cruel.
Su mente empezó a divagar, los glitchs empeoraron y su cuerpo empezo a parpadear.
—¿Dónde está... 1Nk#?— su voz empezó a distorsionar.
—¿D0n$*de?— siguió repitiendo hasta que solo grito. Grito el nombre de su amado para quedar en silencio.
Quieto e hincado en el suelo mirando nada en definido, su ojo aún servible empezó a cegarse, casi viendo solo oscuridad y al borde del reinicio algo lo deslumbro.
—¿In$&k?— con trabajo se levantó para mirar más detenidamente el lugar, había hojas tiradas por el suelo unas encima de otras, algunas rotas y otras echas bola y algunas más solo tiradas, pero lo que todos tenían en común, es que son retratos de él, aún que sus expresiones son distintas y su pose igual, en todas esas hojas Ink lo había dibujado, su mente se relajo con cada dibujo que veía, volviendo a la normalidad, siguió caminando sin poder dejar de mirar. Su rostro mostraba la sorpresa pero está se borró al escuchar un crujido, levantó su pie para ver que había pisado un pedazo de vidrio, y de inmediato vio los restos de un frasco dispersado por el suelo al igual que un extraño pero hermoso líquido.
Se agachó notando que brillaba, dando destellos, cambiando y revolviendo todos los colores que existen, lo tocó con su mano para poder verlo mejor.
—Extraordinario ¿no?— Error se levantó para voltear y encontrarse con CoreFrisk, quién le miraba con lástima.
—¿A qué te refieres?— Core miró fijamente a Error.
—Como una mentira y los celos pueden destruir los fuertes lazos— y volteo a ver el líquido en el suelo.
—¿Sabes lo que es?— la entidad asintió a su pregunta.
—Es el color del amor—.
—Ink le pidió ayuda a Gaster después de que se volvieron novios— Error sintió como su alma latía con fuerza, sintiendo la culpa encima.
—Solo debe usar los colores que usa para si mismo—.
—¿Cómo es que no supe esto?— no lo podía creer, Ink jamás lo dijo mucho menos lo noto durante su noviazgo.
—El experimento tardo mucho en dar resultados— Core cerró sus ojos.
—Ink se impacientaba cada vez que debía llevar más colores—.
—Fue algo difícil y agotador para ambos— Error jamás pensó que sería capaz de hacer algo parecido. Ahora más que nunca debía encontrarlo, pedirle perdón, y dejar ese odio de lado.
—¿Sabías que Ink queria formar una familia contigo?—.
—No— tan nervioso, tan temeroso, y todo el tiempo ambos deseaban lo mismo. ¿Porque esto duele tanto?.
—No me dirás donde está ¿cierto?—.
—Sabes que no puedo— Error sonrió y Core se sintió curiosa ante su reacción.
—Al menos se que está vivo— miró de vuelta todos esos dibujos aliviado aún existiendo la posibilidad de que su vida peligre.
—No te disculpaste, así que sigue aqui— aún así su expresión no cambia.
—Y creo que se quien puede ayudarme— se centró en el problema, no era momento de colapsarse, Ink necesita su ayuda.
—Yo lo encontraré, y nadie evitará que lo tenga en mis brazos— de nuevo abrió camino a Haventale.
—¡No lo concientas, sabes que no es asi!— llegó al bosque de Snowdin pero sin saber porque, escuchaba voces.
—Se que esta grave pero por favor deben creerme, yo lo vi— era la voz de Gaster y de Cross pero también escucha a alguien llorar, así que se fue acercando hasta quedar escondido tras unos arbustos y árboles.
—No tienes derecho a reprocharme nada Gaster, después de la forma en que atacó a Dream— se veía furioso y Gaster no estaba tan calmado como era costumbre.
—Si la tengo, he sido el único que lo ha escuchado, no tienen ni idea en lo que se han metido— esto parecía cotidiano, no era la primera vez que los veía discutir.
—Ire a sacarlo de ese manicomio al que le metieron— Gaster se encaminaba a su laboratorio sin embargo Dream lo detiene hipando por el llanto.
—No puedes hacerlo— Gaster se soltó en un arrebato y sacudió su camisa.
—Por favor ya no sigas con lo de Error, nosotros solo queremos olvidarlo— pero Gaster no parecía que lo dejaría así.
—No me detendrán, iré a buscar a mi amigo aún que tenga que hacer otro transportador— Error noto que Gaster estaba por hacer una tontería en cuanto Cross se paró en su camino.
—Bien, si así lo quieres...— Cross saco un cuchillo rojo y Gaster invoco un Gaster Blaster.
—Chicos esto no es necesario— Dream estaba asustado.
—Vete Dream, no tienes que ver esto— pero vio que saco su arco y su flecha apuntando a ambos.
—¡No!— esto se estaba convirtiendo en un campo de batalla. Ya no podía seguir viendo, pero no podría detener a todos.
A menos de que... pero no puede, es muy peligroso para su mente.
"¿Porque siempre me llevan a esto".
En el momento que Cross corrió atacar a Gaster y este disparo fallando, Dream apunto a ambos y soltó una flecha tras otra, al mismo tiempo fue el segundo en que Error deslizó sus huesos levantando una pared en medio de ellos bloqueando las flechas, Cross retrocedió y en un paso más los envolvió entre sus hilos, presionó su mano para destruir el Gaster Blaster del científico y los levantó del suelo.
"Mátalos".
Las voces empezaban a taladrar su cabeza podía hacerlo, era fácil, sin embargo intentaba centrarse en sus recuerdos con Ink y amenorar las voces. Una vez que vio a todos calmados Error se dispuso a caminar hacia ellos agitado por el esfuerzo que le provocaba el estar usando su poder.
Apenas se detuvo miró a todos atónitos, en especial Dream y Cross.
—Esto no es posible— Gaster se relajo y volvió su sonrisa al ver a Error salir de entre el bosque.
—¿Estás vivo?— Dream no podía salir de su impresión.
—Si lo estoy, ahora bola de idiotas...— chasqueo sus dedos y los hilos se aflojaron dejándolos ir. Mientras caminaba hacia Cross y lo tomo del cuello.
—¿Donde esta Ink?— estaba furioso.
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