Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

El hombre casi perfecto (Pt. 1)

ME ENAMORÉ

—Es más que obvio que Tom está enamorado de ti—me decía mi mejor amiga, Alexis, con notable frustración en su voz.

Ambas entramos al recinto y suspire con pesadez. Venía oyendo el discurso de "Tom está enamorado de ti" desde hace un par de meses. Todos esos meses se repitieron en el auto cuando veníamos en camino al auditorio.

—Estás loca, tiene un mes sin hablarme

—Zoe, está enamorado de ti, tal vez se dio cuenta que tú no le correspondías así y no puede ocultar sus sentimientos por ti y para no verse demasiado obvio no te habla. Lógica masculina—se cruzó de brazos y me miró orgullosa de su explicación "lógica"

— ¿Y eso en que semestre de Psicología de lo enseñaron? —pregunté con una sonrisa burlona.

—En la clase de la señora Peterson—se encogió de hombros como restándole importancia—. Por favor, Zoe, incluso tu mamá opina lo mismo.

—No, las dos me quieren con Tom que es diferente.

—Harían bonita pareja.

— ¡Ahí lo tienes!

Ella me tomó por los hombros y me miró a los ojos.

—Tom está verdaderamente enamorado de ti.

Gemí con fastidio.

—Alexis, Thomas ni siquiera me habla.

—Debe tener una explicación lógica, Zoe.

—Tal vez que está demasiado ocupado con su "nueva amiga" —dije asiendo comillas con los dedos y me crucé de brazos.

— ¡Solo quiere ponerte celosa! —Exclamó con frustración—. Es la táctica número uno de los hombres. Los celos. Los malditos celos.

—Alexis—tomé su rostro entre mis manos y la hice que me viera a los ojos—, uno: reprobaras psicología con esas ideas; dos: Tom y yo solo somos mejores amigos.

—Te equivocas en ambas—suspiró con pesadez mientras miraba hacia el techo—. Te arrepentirás de esto, pero para eso están las mejores amigas, cuando te des cuenta, después de patearte el trasero, te ayudaré— ambas entramos al lugar donde sería el concierto—. Bien, ¿dónde está el sexy dios?

Miré mi celular para revisar el último mensaje que Tom me había mandado antes de venir hacia acá.

—Dijo que nos tenía lugares en la tercera fila.

—Perfecto, así sentiré el sudor de mi amado pelirrojo—reí ante el bobo comentario de mi mejor amiga—. No puedo creerlo. Un concierto de Ed Sheeran. Las entradas estaban agotadas desde hace meses, ¿cómo las consiguió?

—Su nueva amiga resultó ser amiga íntima de Ed.

—Ay no—hizo una mueca de desagrado—. Esa... mujer anda detrás de los huesitos de tu Tom.

—No es mi Tom.

—Claro que lo es si está enamorado de ti.

—Alexis, no quiero volver a oír la cantaleta de "Tom está enamorado de ti", ¿está bien?

Mi mejor amiga puso los ojos en blanco y siguió con su camino.

—Como quieras.

—Además, no creo que Tom sea tan idita para ser algo más que solo amigos.

Al estar cerca de la tercera fila, inmediatamente pude divisar a Tom, debido a su altura era muy fácil sacarlo de entre la multitud. No sé, por qué, pero siempre se me había sido fácil encontrar a Tom aun en la multitud, incluso sabía que él estaba ahí. Era como algo que nos unía, algo invisible, pero lo sentía. Al ponerme a su lado toque suavemente su hombro y él inmediatamente volteo con una enorme sonrisa. Sentí un aleteo en el estómago cuando sonrió y nuestras miradas se encontraron.

— ¡Qué bueno que al fin llegaron! —exclamó Tom y se inclinó para dejar un beso en mi mejilla y no pude evitar estremecerme. Igualmente él dejó un beso en la mejilla de Alexis—. Chicas, les quiero presentar a alguien—fue hasta ese momento en que me di cuenta de que una despampanante rubia, alta, piernas largas, estaba al lado de él. Maldición. No—. Ella es Taylor. Taylor Swift. Mi novia.

Aquellas dos simples palabras me cayeron como un balde de agua fría ¿Novia? ¿Tan pronto? Mi miraba pasaba de mi mejor amigo a su... novia. Ni siquiera podía parpadear pensando que había visto Tom en aquella mujer. Sí, era hermosa y tenía una buena voz pero... no era la mujer con la que me hubiera gustado ver a Tom.
Sentí un codazo que me logró sacar de mi estupor.

—Oh—eso fue lo único que pude articular de momento y me forcé a decir un: —. Felicidades.

Todos nos quedamos por un largo momento. Alexis solo veía a la rubia con un infinito desprecio y ni siquiera se esforzaba por disimular. Tom y yo solo nos veíamos a los ojos, él esperaba alguna otra reacción de mi parte y yo solo estaba ahí, parada como idiota preguntándome ¿Por qué? Vi como Taylor se acercaba a Tom y lo tomaba por los hombros en gesto posesivo y dejaba un beso en su mejilla. El rojo carmín de su labial había quedado en la piel de Tom. Él sonrió con incomodidad y yo solo seguía viéndolos. Sentía mi estómago revolverse y una opresión en mi pecho que me estaba dificultando la respiración. ¿Por qué me estoy sintiendo así de mal?

—Favor de tomar sus asientos y despejar los pasillos—dijo una voz—. El concierto comenzará en breves momentos.

Tom y Taylor se corrieron dos lugares para dejarnos espacio a Alexis y a mí. Ocupé el asiento que estaba enseguida de Tom y suspiré con pesar. ¿Qué me está pasando? Tom se inclinó hacia mí y al aspirar su aroma sentía como si al fin el aire pudiera llegar a mis pulmones calmando el dolor que sentía en el pecho.

—Lamento no haberte dicho antes y tomarte por sorpresa. Sé que estas molesta por eso, pero quería decírtelo en persona.

Ni siquiera quería voltearlo a ver, no estaba parada pero sentía que mis piernas estaban temblando. ¿De verdad estaba molesta por eso? No, ni siquiera me sentía molesta.

—No estoy molesta, Tom. Solo, como dijiste, me tomó por sorpresa.

—Zoe—susurró mi nombre y sentí su aliento cosquillear en mi oído haciéndome estremecer. Me giré para verlo y nuestras narices se estaban rosando. Mi corazón se aceleró y yo me perdí en el azul de sus ojos—, realmente lo lamento.

Había algo en su mirada y en su tono de voz que me decía que se disculpaba por otra cosa y no por no haberme hablado de su novia.

No supe que decirle, solo sentía mi corazón latiendo con tanta fuerza que creía que en cualquier momento se me saldría del pecho. ¿Qué es todo esto que estoy sintiendo?

—Se llama amor—dijo Alexis mientras se metía una papa frita a la boca.

Llevábamos dos horas en McDonald's con nuestra "terapia". Desde que el concierto de Ed Sheeran había acabado a las 1:00 am. Gracias al cielo el McDonald's más cercano estaba abierto las 24 horas del día. Tomé uno de mis nuggets y lo sumergí en el barbecue sintiéndome demasiado confundida aun.

—No lo entiendo, es mi mejor amigo—metí el nugget en mi boca.

—Zoe, nena, eso no impide que haya sentimientos de más que amigos entre ustedes—tomó su refresco y le dio un sorbo.

— ¿Por qué ahora? —pegué mi frente en la pesa mientras me quejaba con gemidos.

—El amor siempre ha estado ahí, pero a veces estamos tan seguros de algo, creemos que nunca se ira. Como te había dicho "la táctica número uno de los hombres siempre son los celos". Además, la señora Peterson me enseñó algo muy importante.

— ¿Qué? —alcé la mirada.

— "Los celos son la dinamita perfecta para el amor"

Puse los ojos en blanco y negué con la cabeza.

—Debes estar bromeando y no sé cómo fue que la señora Peterson logró ser maestra de Psicología.

—Es la cuñada del director—dijo Alexis encogiéndose de hombros mientras le daba una mordida a su Big Mac.

Negué varias veces con la cabeza.

—Volvamos al punto.

—Sí, tus sentimientos por Tom—miré a Alexis con fastidio—. Por favor Zoe, siempre han parecido una pareja o dime, ¿acaso hasta ahora has sentido ese cosquilleo y que se te acelere el corazón?

—Pues...

—No me digas nada, tan solo... recuerda.

Me recargué mi silla mientras cerraba los ojos un momento y a mi mente llegaba un sinfín de recuerdos con Tom.

Odiaba levantarme temprano y más en mi cumpleaños. Pero Tom quería festejarme y pasar un momento a solas, así que me había invitado a desayunar a mi restaurante favorito.

Mientras esperaba un mensaje de Alexis llegó y desbloqueé mi celular. Con una gran sonrisa le contesté el mensaje. Sentí que, de pronto, unas manos cubrían mis ojos con suavidad. No tarde en adivinar que era Tom. Lo supe cuando su dulce aroma y su cálida presencia me envolvió.

—Feliz cumpleaños, gatita—susurró en mi oído y sentí un aleteo en mi estómago que me hizo estremecerme.

Sentía las lágrimas calientes bajar por mis mejillas al evocar más recuerdos al lado de Tom. Momentos íntimos, pequeñas caricias que siempre me habían hecho estremecer. La manera en que nos comunicábamos y nos entendíamos sin usar palabras. Solo me bastaba con una mirada para saber lo que él estaba pesando.

Teníamos una amistad muy profunda o tal vez esto se había convertido en algo más sin darnos cuenta. Un recuerdo más vino a mi mente.

—Vamos, Zoe. Ayúdame a ensayar este dialogo—me suplicó Tom.

—Tienes años actuando. ¿Cómo podría ayudarte? Yo sé de actuación lo que tú sabes de dibujo.

— ¿Quieres decir que dibujo pésimo? —preguntó Tom alzando una ceja.

—Tom, tus corazones parecen traseros.

—Está bien, no se dibujar, pero tú si has actuado.

— ¡Fui un arbusto en el jardín de niños!

—Solo necesito que leas el dialogo femenino. No necesito nada más.

—Tienes que estar bromeando—suspire con pesadez y me levanté de mi asiento—. Dime que tengo que hacer.

Tom se levantó emocionado y corrió hacia las escaleras y bajó con la misma velocidad con un montón de papeles en sus manos. Me lo entregó abierto como por la mitad.

—Se me dificulta un poco el final de esta escena. Mi dialogo es largo y siento después de mirar tanto tiempo intensidad me gana la risa. Tú no tienes que hacer gran cosa, solo mírame a los ojos y no hagas gestos, por favor.

—Está bien—le di una rápida leída al guion para no trabarme demasiado al estar leyendo. Cuando me sentí lista asentí con la cabeza diciéndole a Tom que podía iniciar.

—Abby, por favor—suplicó Tom de una manera en la que hizo que mi piel se erizara—. No te vayas, cariño.

— ¿No lo ves, Joe? No somos el uno para el otro. El destino siempre nos está poniendo trabas. Tal vez... nos equivocamos.

— ¡No me importa! Tú y yo estamos destinados para estar juntos, Abby. Sé que sientes lo mismo que yo.

Me giré para darle la espalda tal como lo indicaba el libreto.

—No sé de qué me estás hablando. Yo no siento nada por ti. Tal vez sí, pero solo es amistad.

—Sabes perfectamente de que estoy hablando, Abby—me tomó por los hombros y me giró para hacerlo ver a los ojos—. Sé que sientes algo por mí y no, no es amistad. Sé lo que es la amistad, pero júralo que nunca había sentido algo así por alguien más. Niega que siente esta conexión que hay entre nosotros—sentía mi pecho subir y bajar por mi respiración que se estaba acelerando y mis piernas temblaban ante la mirada de Tom—. Tal vez la vida nos ha puesto tropiezos porque lo que es verdadero y duradero necesita ser probado y pasado por fuego. Si no sientes nada, entonces dime, ¿por qué tiemblas ante mis caricias? —Tom me acarició la mejilla y yo no pude evitar estremecerme—. En tus ojos veo la verdad, no me puedes mentir. Me amas, Abigail. ¿y sabes por qué sé que me amas? Por qué yo...—vi que Tom tragaba saliva, sus ojos estaban llorosos y podía sentir mis lágrimas quemar en mis ojos—te amo.

No pude evitar jadear y me estremecí al sentir que Tom y yo estábamos compartiendo el mismo aire, sus labios estaban tan cerca de los míos y yo no podía dejar de mirarlos. Sentía alguna clase de electricidad en el aire y solo tenía deseos de estar más cerca de Tom y de... probar sus labios.

— ¡Ya llegue! ¡Traje Sushi! —entró Alexis gritando y Tom y yo nos separamos de golpe.

—Alexis—miré a mi mejor amiga con los ojos abiertos y ella esperó pacientemente por mi declaración—, hace tiempo que estoy enamorada de Tom.

— ¡Aleluya! —exclamó alzando las manos.

—Pero... ¿qué puedo hacer? Ahora él tiene novia y...—comencé a balbucear pero Alexis me detuvo.

—Lucha por él. Que tenga novia no es el fin delmundo—dijo Alexis con una sonrisa traviesa en los labios.     

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro