Capítulo 16 "Una confesión"
Yuki: ¿Y bien...? ¿no piensan contestar?
Yuki esperaba una respuesta. Quería saber si de verdad le amaban como para salvarla, ese pensamiento le dio tanta gracia al escucharse decir eso que casi se ríe en frente de los hermanos arruinando el momento.
La respuesta no llegaba, el tiempo se acababa, su hermana en peligro. Todo eso no le ayudaba a calmarse.
Yuki: *suspiro* Qué pérdida de tiempo, me voy al laboratorio
Dispuesto a irse, se retiró de la sala importándole muy poco sus reclamos, ahora tenía cosas mas importantes que hacer.
Sai: No quisiera cuestionarlo amo Yuki, pero... Si sigue así no lograra traer a su hermana, morirá antes de hacerlo
Yuki: El tiempo se agota Sai, además, el hecho de que Yui les tomara cariño, no significa que yo lo haga
Sai detuvo su andar mirando con desaprobación a Yuki.
Sai: Sabe usted muy bien que necesitamos de su ayuda, ella lo hubiera querido así.
Yuki miro con furia a Sai
Yuki: Si claro, si eso fuera así no me hubiera pedido no involucrarlos en esto - dijo sarcásticamente
Sai: Tampoco me fió de ellos amo pero... No cree que... Tal vez... Ella lo haya planeado así
Yuki: Tsk, no digas tonterías que estamos perdiendo tiempo valioso
Asimismo el rubio camino rumbo al laboratorio
Yui (Italia): Ve~ cree que pueda lograr traerme a mi mundo
Sai: ... Es muy poco probable
No le gusto mucho su respuesta, pero ya no quiso insistir mas y entraron la habitación de Yuki, o mejor dicho, el laboratorio.
Ambos miraron espantados el cuerpo de Yuki en el suelo, la rubia estaba asustada. En cambió Sai corrió a el aterrado.
Sai: ¡Amo Yuki! Resista...
Yui (Italia): ¡Ve! ¿Que hacemos ahora?
Sai: *suspiro* Tranquilo solo es un desmayo, lo dejaremos descansar mientras terminamos
El italiano agradeció en un suspiro
Ambos siguieron los planos que había terminado hace unas horas facilitando su construcción en la maquina.
Mientras la rubia dirigía a Sai, una sonrisa se le había escapado
Sai: ¿Y esa sonrisa?
El italiano se sobresalto un poco asustado.
Yui (Italia): *Sonríe* Lo siento, es que... Esta construcción, me recuerda en mis días cuando trabajaba con mis aliados
Sai: Y... ¿Eran muy cercanos?
Yui (Italia): Mucho... En ese entonces le mostraba a Ludwing las mejoras que le hacia a su tanque, tenias que haberlo visto... - río a carcajadas - casi me mata por recomendar ideas absurdas
Sai: Ese Ludwing debe ser muy importante para ti
Yui (Italia): Fue mi primer amigo en la guerra, un gran aliado y sobre todo... un país muy fuerte, el cual le tengo un gran respeto
La conversación se alargo mas de lo esperado, lo bueno era que ya construyeron la parte difícil.
Al amanecer, se acostaron ya exhaustos de su labor, durmiendo hasta el anochecer.
Pasando mas de las ocho, se levantó Yuki con dolor de cabeza
Yuki: (Maldición... Mi cabeza duele como mil demonios)
A su lado, encontró unas pastillas, imaginando quien las abría puesto
Yuki: (A veces te tengo miedo Sai, eres demasiado intuitivo)
Al levantarse, salió de la habitación buscando algo de comer, pero al abrir la puerta, se encontró una gran sorpresa.
Yuki: ¿Y esto? ¿Qué hacen aquí? Deberían de estar en la escuela
En la entrada, estaban los diez hermanos, vestidos de manera casual
Yuma: ¿Qué no es obvio? Queremos traer a la cerda de vuelta, su jardín no se cuidará por si solo
Ayato: Y... ¡Al diablo la escuela! Ore-sama tiene cosas mas importantes
Kou: Sin Mneko-chan, ¡¿Con quien compartiría mi musica?!
Subaru: Tsk... Que problemático se ha vuelto esto - sonrojo - Yo... No le EH regresado su bufanda
Kanato: Sin la comida, ¿Quien tomara el te conmigo y Teddy?
Reiji: Esa humana necesita un castigo por dejarnos a un lado
Azusa: Sin Eva... El dolor.... ya no... tiene sentido
Shuu: La ruidosa aún me debe una pieza de piano
Ruki: El ganado no cumplió las clases que tenía programado conmigo
Laito: Bitch-chan prometió ver mi sonata
Pese a los diferentes motivos de cada uno, recordó que en una ocasión, Ella menciono a los hermanos de una manera en que hasta él se sorprendió del gran amor que les tenia y aun se mantiene...
La primera vez que los conocí,tenía mucho miedo
Nuestra convivencia nunca fue la mejor, varias veces estaba cerca de morir, hasta el día llegue a pensar por unos momentos que ya no seria una carga para ellos y estarían mejor sin mi.
Pero... Cuando llegue a conocerlos mejor, logre ver que ellos en algún momento solo querían que alguien los amara... Hermano, si algún día no estoy presente...
recuerda les que tuvieron y tienen a alguien que los ama con todo el corazón....
Yuki sonrió inconscientemente, a veces el pensaba que Yui era un poco rara al querer a estos hermanos sádicos y egoístas.
Yuki: Entonces, ¿A que esperan? ¿Se van a quedar ahí parados como idiotas o van a entrar a colaborar en la maquina?
Tan rápido como pudieron iniciaron manos a la obra
Reiji, Ruki, Yuki e incluso Shuu se encargaron de los planos de la máquina.
Kou y Laito llamaron a muchos de sus contactos para encontrar las piezas que hacen falta, en especial Kanato y su habilidad para persuadir a la gente con su bipolaridad.
Yuma, Azusa y Ayato junto a Sai recogían los materiales de la maquina, y claro, para comprar Takoyakis por parte de la insistencia de Ayato.
Por último, Italia, este se aseguraba de guiar a Yuki, Reiji, Ruki y Shu en las coordenadas para no correr ningún riesgo en el viaje y así no causar daños en ninguna de las dos dimensiones.
Mientras los mayores estaban ocupados, el italiano se apresuró a escribir un mensaje rápido a Yui sin que se enteraran.
E
llos ya lo saben, y están ayudando a tu hermano lo mas rápido que pueden, a este paso terminaremos pronto así que resiste un poco mas Yui, por favor no mueras antes de estar con ellos...
La respuesta llegó casi de manera inmediata alegrando al italiano
Gracias....
Los chicos de aquí también están buscando una forma de traerme de vuelta. Están muy emocionados por tenerte a su lado... Ludwing no para de preguntar si estas bien y Kiku esta haciendo muchas preguntas del mundo en el que estas...
Ahora puedo estar mas tranquila al saber que mi hermano no esta solo en esto, me llena de esperanza, y..
Buena suerte...
Terminando de leer la respuesta, la guardo rápidamente, pues si algo sabia era que esos chicos confesarían ante aquella chica lo que sienten
Lamentablemente tenía que volver con los mayores si no quería que sospecharan de ella, guardo su libro y fue en camino a ayudar en los planos de la máquina.
Continuará...
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