Nos fuimos todos a dormir, menos Anna y Kristoff. Ellos se quedaron viendo una película cursi. Estaban “aprovechando” de su libertad. Para mí, la estaban desperdiciando.

La habitación era solo por el tiempo en que nos enviaban a la casa. Una de chicas y otra de hombres… bueno, Hiro no era un hombre… digamos que era un habitación de chicos.

En la noche, con las chicas hicimos una “pishamada turra”, ¿Por qué?, porque YOLO…

Fue como una especie de despedida en la que jugamos guerra de almohadas, así a lo putitas, y comimos dulces hasta que Rapunzel y Elsa perdieron su hermosa figura.

A las 12 de la noche, llegó Anna, con cara de sueño.  

-¡Anna!- Mérida corrió a su encuentro y la abrazó como si no la hubiera visto en meses.- ¡Tu cara!, ¿viste una peli de terror?, ¿de acción?, ¿comiste palomitas?, ¿respiraste?, ¿te moriste?...

-¡Basta!- dijo Anna alzando sus bazos. Todas estábamos reunidas con la recién llegada.-Estábamos viendo Bajo la misma estrella y Kristoff se durmió en la parte más triste, y sus ronquidos no me dejaron escuchar una m*erda.

-Bueno, no pasa nada, que en la habitación… ¡hay fiestaca!- Rapunzel destapó una botella de champan y cantamos la canción más turra del mundo: A Charlotte le gusta el Shanpein… (Ah, ok, no es la más turra pero ta).

Después de eso, llegó la ronda de karaoke.

Yo canté Shake It Off de Taylor Swift con mi Hermosa voz de perro pariendo un ternero.

Mérida cantó Chandelier, de Sia. Agradecí a los Dioses que nuestra habitación se encuentre al final del pasillo y lejos de las otras. Los gritos desesperados de Mérida cantando, eran peores que mi voz… Ja…

Rapunzel, cantó Los Wachiturros, de los Wachiturros (da, ¿enserio?), no sé porque, pero de no haberse caído sobre mí mientras hacía tuerck y desafinara a esa nota, sería la ganadora.

Anna y Elsa, cantaron su canción Finalmente y como nunca (REPRISE), esa parte de la película, en la que sin problema podrían haber hablado como personas normales, pero, como trabajaban en Disney, tenía que haber canción.

Obviamente ganó Mérida…

 Nah, ganó Elsa porque Anna se tiró un pedo en medio de la función. Todos nos reímos menos Elsa, que no salía de su estado “estoy-actuando-y-no-hay-distracciones”.

A las 6 nos dormimos todas, rogando para se llevaran a un chico a la casa, antes que a nosotras.

Gracias por leer.

                                                                                                        #FloppyLaLarcha