SAN MARTÍN
Por la mañana seguía sin dar crédito a lo que había pasado la noche anterior. Igual me había cabreado y excedido un poco, vale, sí, lo admito, pero Isis se había marchado, me había abandonado, no se había llevado ni su móvil, no había regresado, no sabía nada de ella...
¿Qué estará haciendo Isis ahora? ¿A dónde habrá ido? ¡Seguro que se fue con el otro la muy...! ¡Aggg! Al final tenía razón. Si es que uno no se puede fiar ya de ninguna mujer. ¡Coño! Me equivoqué, estaba alterado y no pensé con claridad y actué en consecuencia, pero como para irse y no saber nada más de ella en toda la noche... ¿Así como así? ¿Y no volver ni siquiera hoy? Me parece súper injusto y desconsiderado por su parte, yo que se lo he dado todo. ¿Por qué me castiga así? ¡Desagradecida! ¡No es nada sin mí! ¡Qué rabia!
Me estaba volviendo loco de ira por segundos. Cuanto más hablaba conmigo mismo, peor me ponía y más odio le cogía, pero es que la amaba, quería verla de nuevo. Qué sentimientos más raros, contradictorios y caprichosos, ¡joder! Al final decidí que lo mejor sería hablar por el chat con los chicos, necesitaba hablar con ellos y desahogarme o iba a explotar:
—Hola, chicos... He tenido una bronca muy grande con mi mujer y desde anoche que se fue de casa no sé nada de ella.
—¿Qué dices?
—¿Qué pasó?
—¿Cómo estás?
—Pues mal, ¿cómo voy a estar? No sé muy bien, pero creo que se está viendo con otro hombre, o algo oculta, le vi unas cosas que me parecieron sospechosas y al comentárselo se puso histérica. Dijo que era un celoso, que no la conocía, que si la conociese bien sabría que nunca me engañaría, etc.
—¡Hostias! Lo siento Martín.
—¡Qué mal tío! Pero hablándolo seguro que se soluciona.
—¿Quieres que nos veamos todos y lo hablamos mejor en persona?
No sé chicos... Se puso echa una fiera, a tirar todo y se largó corriendo, no se llevó ni el móvil, ni la cartera ni nada, no sé ni si está bien... ¡Joder! ¿Por qué a mí? Pues te lo agradezco, pero hora mismo no estoy de humor para quedar, gracias chicos. Además tengo mucho curro, pero en estos días quedamos para cenar y cogernos una buena juerga, lo necesito para olvidarme de todo.
—Cuando quieras.
—Para lo que necesites, tú sabes.
—¿Enserio es tan grave? Si siempre habéis sido una pareja cojonuda, fijo que se soluciona pronto ya verás, ánimo.
—Esta vez... no sé... lo veo difícil, y por como se puso no sé si podré perdonarla, ha sido muy fuerte, se le fue de las manos. Seguro que luego irá por ahí lloriqueando y haciéndose la víctima, dejándome como el malo de la película. Ya me la conozco bien, como ella sabe llorar y yo no... Pues, ¡hala! Ya tenemos la víctima y el verdugo, y no es así, y me da rabio tío.
—No te preocupes, te entendemos, tienes nuestro apoyo si es así.
—Bueno, siempre hay dos versiones, pero tal y como la pintas... ¡Ufff! Tiene que ser dura tu situación y lo que estás pasando.
—Tranquilo, amigo, todo tiene solución, ya verás y quedará en una anécdota.
—Gracias por los ánimos chicos, me voy a trabajar, a ver si al menos tengo buen día y se me levanta un poco la moral. Gracias, por estar ahí siempre.
—De nada, para eso estamos.
—No hay de qué chaval, arriba esos ánimos.
—No tienes que darlas, verás que mejora el día y pronto se solucionará todo.
Al final por mucho que los chicos me digan nunca me van a entender del todo si no lo han vivido... Ellos llevan una vida fácil y cómoda, sin pareja, sin nadie que intente gobernarles. Hacen siempre lo que quieren y cuando quieren... En fin, voy a ponerme a trabajar que es lo único que me sale bien últimamente, parece ser.
Cualquier día como la cosa siga así, cojo un poco de dinero y me voy a vivir a la otra punta del mundo. Quizá a un país de estos bígamos, donde pueda tener varias mujeres y se vea como algo normal, o alguno de estos donde aún se respete la figura del hombre como antaño, sí, un país así estaría bien. Aquí en España ya se ha perdido todo el respeto por el hombre.
Ahora solo se ven mujeres desnudas luchando por sus derechos y valores... ¿valores de qué? Si van en bolas. ¿Qué más derecho quieren ya? Si pueden votar, trabajar y hacer lo que les venga en gana... No entiendo nada, lo único que sé es que no buscan igualdad, buscan someternos, y eso no se puede permitir. Además, ¿desde cuándo somos iguales? ¡Aggg! ¡Vaya mierda de país! ¡Paso! Me voy al trabajo, ya veré cómo salgo de todo esto, pero esta no se la pienso perdonar a esta tía.
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