Narrador omnisciente

Ahí en un cómodo sofá de cuero se encontraba El mafioso italiano más temido, esperando la llamada que le daría buenas noticias. Suena el teléfono y su rostro se ilumina

—bueno —contesta Bianco con una sonrisa en el rostro

—habla el mayor Ruiz, señor Bianco — dice el jefe de agentes del otro lado de la línea

—¿harás el negocio que te pedí? — pregunta el señor Bianco mientras quita con su mano libre una brusca de su caro saco blanco

—ya esta todo arreglado. El caso se cerrará y pronto se harán sucesos de humo para distraer a las personas y que pronto olviden este suceso. Nadie recordará de lo que usted y su hijo son culpados, por lo menos no en este país — le contesta el mayor Ruiz y el señor Bianco sonríe complacido

—bien, por ahora depositare un millón y medio en tu cuenta. Cuando vea que todo ha ido bien y que ya mi hijo y yo estemos libremente en el país, te entregaré el otro millón y medio más, como habíamos acordado —le dice el señor Bianco mientras le hace una seña a su empleado apodado "Perro"

—un gusto hacer negocios con usted, señor Bianco, solo procure usted y su hijo no hacer nada malo por el momento hasta que ya se logre la libertad total y ya no los mencionen — le dice el mayor Ruiz a el señor Bianco

— despreocupese, yo espero también que la condena de mis hombres que fueron capturados sea corta y pronto puedan venir a mi ¿entiendes? — le contesta.

La llamada termina con una despedida formal y con una promesa que pronto terminarían el negocio, el señor Bianco llama a su hijo Josafat y le notifica la buena noticia. También le advierte que no haga nada estúpido, Josafat termina asintiendo, pero en el fondo sabe que no podrá esperar mucho para vengarse de Tormenta Peterson.

Ahmed

Mi cabeza quiere explotar y todo me da vueltas. No puedo creer que esto esté pasando, no ahora, no es justo para nadie.
Esa pobre chica sufrió y sigue sufriendo aún ¿Acaso no podrá tener descanso? prometí poner a esos malnacidos tras las rejas, pero esta nueva orden de mi superior me tiene atado de manos. Ahora debo sacar a Tormenta de su lugar seguro para llevarle a quien sabe donde. No permitiré que ella sepa esto, no puedo hacerlo, la lastimare y se que su miedo volverá al saber que ese tipo estará libre para acechar y volver a destruir la poca felicidad que está construyendo.

No puedo dejar que esto suceda ¡Al menos no la dejaré desprotegida! Voy a armar un plan y la cumpliré mi promesa así me cueste la vida

Porque increíblemente, esa chica me importa demasiado y no entiendo el porqué.

Tormenta

Luego de leer la Biblia, una sensación extraña se posa en mi estómago. Como si pronto algo malo va a pasar y no entiendo porqué. El miedo se instala en mí y me regaño por perder la fe tan fácil

Es solo un malestar

Son cosas de mi mente

No es nada malo

Me lo repito una y otra vez, pero como no quiero sentir esta sensación, hago lo que debi hacer desde un comienzo. Orar.

Me pongo de rodillas y cierro mis ojos, pidiendo:

"Señor, primero que nada te doy gracias por tus maravillas, por tu amor y por las bendiciones que me das, por tu gracia y tu misericordia. En este momento te pido fuerzas y fe, más que nada fe para soportar lo que sea que tenga que pasar, porque aunque se que lo que estoy pasando no es fácil, tu mano siempre me protege, me ayuda y me cuida en todo momento y si por alguna razón me fallen las fuerzas, envíame una ayuda, una señal, algo que no me deje caer y me permita seguir adelante. Gracias te doy Dios mío, te pido todo esto en el nombre de Jesús, amén."

Me pongo de pie y acomodo mi vestido floreado, camino a la puerta para ir por un vaso de agua, cuando la puerta se abre primero que yo y un Ahmed da un paso dentro de mi habitación mirándome fijamente

Tiene la mirada preocupada, lo noto, pero no digo nada

—hola Tormenta ¿te encuentras bien? —pregunta y yo asiento confundida

—si, gracias a Dios ¿y tu? —le pregunto y el se queda pensativo

—muy bien —termina respondiendo y carraspea

—y ¿pasa algo? —pregunto para no decirle directamente que hace aquí

— bueno, vengo a darte una noticia que no se si sea buena o mala —dice y mis alarmas se disparan

No estaba equivocada con la sensación que sentí hace un rato

— desde ahora debes irte de esta casa, empaca tus cosas —suelta de golpe y creo que dice una mala palabra en tono bajo, creo, por tal vez decírmelo bruscamente

Mis ojos se nublan y no se por que, solo se que esto pasa porque algo malo

—algo malo sucedió ¿me encontró Josafat? Dímelo por favor —digo entre lágrimas, derrumbada, pero tratando de quedarme estable

Ahmed se acerca y me rodea con sus brazos, siento el aroma de su perfume y el rápido latido de su corazón, que locamente logran hacerme sentir mejor

—no pasa nada, solo que ahora debes irte a vivir conmigo —dice y yo me separo de él abriendo los ojos muy grandes

Me encuentro desorientada

Creo que no es bueno dando noticias, todo lo suelta de golpe

—¿qué? ¿Por qué? —pregunto casi tartamudeando

El se rasca la cabeza y agacha la mirada

— el jefe cree que estarás más segura conmigo, ya que de los Bianco no se sabe nada y hay un silencio extraño que no significa nada bueno, entonces me pidió que viniera a recogerte con tus cosas para que vivas segura conmigo, en mi apartamento hasta que todo esto pase, claro está — termina diciendo y yo trago saliva

Esto es precipitado, difícil, no se como asimilarlo, sin embargo, no puedo negarme. El desde un principio se ha preocupado por mi y se nota que no me haría daño, se que estaré segura con el, más me preocupa es lo que esto podría ocasionar. Su cercanía unos instantes me pone mal, y no se si sea en el buen o mal sentido, no quiero imaginarme como me sentiría estado con el las 24 horas del día

Esto es muy absurdo

Pero es lo correcto, su jefe se lo ha recomendado y es porque sabe que con Ahmed estaré mucho mejor.

—esta bien, pero mis padres temporales no se encuentran, debería esperarlos? — pregunto y el niega rápidamente

—despreocupate de eso, ya ellos están al tanto. Puedes dejarles una nota de agradecimiento si deseas, no digas con quién o a dónde vas, porque quien quita que alguien malo llegue primero y lo vea. Por precaución, solo se breve —me dice seriamente y la verdad tiene razón

Debo tener mucho cuidado.

Al final, luego de cargar mi ropa y mis cosas importantes al auto de Ahmed, y de dejar la nota de agradecimiento a mis ya no padres temporales y salimos de ahí.

Me siento tensa aún y no comprendo, más chistosamente pienso si debo llamar "papá" a Ahmed

¡ay no que horrible!

Se siente terrible, no, no, solo lo veré como mi amigo y nada más, aunque una cosa también ronda por mi mente y es si Natalia vive con el o lo visita a menudo, seria horrible para mi verlos en alguna escena comprometedora

O simplemente sería horrible verlos juntos, porque tal vez, me sienta un poco celosa ¡que loca estoy! Estoy solo confundiendo un cariño por un amigo que me salvó, si solo eso, yo no tengo cabida para sentir atracción por alguien

Ya no.

Nota:

¿Qué les parece la historia? Estoy complaciendolas y estoy actualizando más seguido.

¿Se dieron cuenta de algo? Tormenta pide por una señal o alguien que la ayude y ¡zaz! Llega Ahmed a su vida.

Pregunta grupal: recomienden un segundo nombre para Ahmed, que caiga con sus raíces antes mencionada. Si alguno me gusta lo escogere y mencionaré a la chica que lo recomienda ¡bendiciones a todas!