[Para este capítulo es importante que relean el final del capítulo anterior. Así entenderán la idea]

“DIVIDE Y VENCERÁS” 
Fue la frase que _____ leyó en primera plana del diario de la mañana.
Logan: ¡___! —gritó desde lejos—. ¡Ya vamosno, se nos hace tarde!
_____ observó su reloj y comprobó que Logan tenía razón. Eran las 9.55 y a las 10.05 salía su vuelo con destino a Los Ángeles. 
Hacía tiempo habían tenido planeado volver a casa para las vacaciones. Y hacía tan solo un par de semanas atrás que ambos habían comprado sus pasajes para el lunes por la mañana.
Estaban muy emocionados porque querían volver a ver a sus familias y pasar un bien tiempo con ellas.
_____ le había avisado a Beca que no estaría por al menos cuatro semanas. Y eso, en parte no le agradó mucho ya que no tendría a su tutora para enseñarle algunas cosas. Pero ______ encontró una solución y le pasó el mando a Cassie, otra tutora bastante buena.
Al llegar a Los Ángeles, todos los estaba esperando con los brazos abiertos. La familia de Logan y la de ____ estaban allí… Y aunque no lo crean, la de Dean también.
Todos eran una gran familia y para todos ellos, Logan, ____ y Dean eran sus hijos pequeños.
Pasaron absolutamente las mejores vacaciones de sus vidas.
¿Y lo mejor? _____ hizo pública su relación con Logan. Salían a todos lados tomados de la mano y se besaban sin importarles nada.
Igualmente, _____ le confesó a Logan que ella hacía eso allí porque no había nadie de Nueva York viéndolos. Y también era porque sabían que Danielle había sido derivada a Nevada, por lo que no había ni rastro de ella en Los Ángeles.
Definitivamente fue el mes más romántico que ambos pudieron tener. Y por primera vez, _____ sentía que Logan era feliz a su lado, mientras que Logan solo podía pensar que finalmente ella se estaba liberando y estaba siendo la chica divertida de antes.

______ estaba sola en su apartamento de Nueva York. Las vacaciones familiares habían terminado y habían tenido que volverse. Pero tenían planeado volver más adelante. Logan había salido a hacer las compras mientras ella había decidido quedarse para arreglar un poco. No había habido nadie en aquel lugar por un mes entero y el polvo se había acumulado bastante bien.
Estaba terminando de limpiar la sala de estar cuando de repente escucha que tocan el timbre.
Rápidamente se dio cuenta de que no se trataba de Logan. Él tenía llave y no era necesario que tocara el timbre. En caso contrario, la llamaría.
Se apresuró a abrir la puerta y al hacerlo se encontró con el rostro de Beca. Traía el cabello recogido en una trenza y tenía una boina entretejida en la cabeza. 
Siempre había admirado el buen sentido de la moda que tenía. 
____: ¡Beca! Que sorpresa.
Beca: ¿Estas ocupada?
____: No, claro que no —se hizo a un lado—. Adelante, pasa.
Beca entró al apartamento y sin que ella se diera cuenta, ____ le escribió un mensaje rápido a Logan diciéndole que ésta estaba en su casa y no podía aparecer de la nada.
____: ¿Cómo vas con tus clases? —preguntó sentándose en el sillón, ubicado frente al que estaba Beca.
Beca: ¡Bastante bien! Creo que me irá muy bien en el examen.
____: Me alegra escuchar eso.
Hubo un silencio incomodo entre ambas. Ninguna hablaba y _____ no sabía que decir o hacer. Finalmente fue Beca quien dio el primer paso.
Beca: Vine porque quería pedirte un favor.
____: Sí, claro. ¿Cuál?
Beca: ¿Recuerdas la vez que fuimos a la fiesta de Reimond? Exactamente en la misma en que me tiraron la piscina.
____: ¡Oh, sí! Lo recuerdo. Te pusiste como loca. Odias el hecho de meterte a nadar.
Beca: ¡Exacto! El problema es que en estos últimos días que tú no estuviste he tenido un par de problemas con mi fobia.
____: ¿Qué pasa?
Beca: Se que tengo que estudiar pero también tengo derecho a divertirme y el grupo de amigos de estudio siempre hace fiestas y demás y… es verano, ya sabes, la diversión es mojarse.
____: Te sientes mal porque todo el mundo entra a nadar, ¿verdad?
Beca asintió con tristeza.
Beca: Y es por eso que siento que me estoy alejando de cierto modo de las personas. ¡Me dicen antisocial! Lo cual es un término mal empleado. Yo soy sociable y el hecho de que no pueda entrar a nadar por una fobia no significa que sea una anti.
____ rio por lo bajo.
Beca: El hecho es que decidí hacer terapia para vencer mi fobia y hace poco encontré a un sicólogo que está bastante en cuenta y que podría ayudarme con mi problema.
____: ¿Pero…?
Beca: Pero no lo conozco. Solo hable una vez por teléfono con él y me da miedo ir sola. ¿Te gustaría acompañarme?
____ se sorprendió por aquella petición. ¿Si tenía miedo por qué no iba con un hombre?
Pero a quien engaña, las chicas se apoyan entre sí. 
Pero a decir verdad, ____ aceptó por el simple hecho de que aquella persona era sicólogo. Quizás él pudiese ayudarla con su miedo. Había logrado desprenderse de él mientras estuvo en Los Angeles, ya que se sentía en su casa y sabía que ninguna de las personas que la rodeaban le harían daño. El problema era que en Nueva York ella conocía a demasiadas personas y tenía miedo. Miedo de que alguna de ellas conociera a Danielle. 
Lo tonto es que en Los Ángeles también podía haber personas así y ella no se preocupo en lo absoluto. Quería andar por cualquier parte del país sin preocuparse de las personas que la rodeaban.
Era como si en Nueva York existiesen las peores personas del mundo.
Si veía que ese sicólogo era bueno, definitivamente tomaría terapia con él.

El edificio era bastante elegante por fuera y también por dentro. Se notaba que las personas de allí eran muy pulcras. Y lo que más le llamaba la atención a _____ era que una persona que viviese allí cobrase tan en cuenta.
Subieron por el ascensor solo dos pisos. Y al entrar en éste, ____ se percató de que tal vez no era tan rato que cobrase barato. 
La recepción era sumamente hermosa, pero aquel piso se veía normal. Limpio pero normal. Para nada ostentoso. 
Caminaron hasta el apartamento número 56 y Beca tocó la puerta. Demoraron solo un par de segundos antes de que la abrieran, y al hacerlo, los ojos de _____ pudieron captar a un bello hombre de cabellos oscuros, ojos azul intenso y una sonrisa encantadora.
Definitivamente no era un viejo, sino que era alguien bastante joven. ¿29 tal vez?
— ¿Quién de ustedes dos es Beca? —pregunto con una sonrisa.
Beca: ¡Soy yo! —dijo entusiasmada—. Ella es solo una amiga.
____: _____ —se presentó a sí misma, extendiéndole la mano.
— Matthew Bomer, sicólogo —le estrechó su mano. 
____: Un gusto —dijo embobada.
Matt: ¿Pasamos?
Eh inmediatamente todos entraron. 
Lo que supuestamente era la sala de estar era una cómoda y agradable recepción. Definitivamente era acogedora, no te recordaba en lo absoluto que estabas en una sala de espera.
_____ sentía que prácticamente podía quitarse los zapatos y arrojarse al sofá.
Donde se supondría que debía de estar la cocina había un escritorio bastante organizado. ____ supuso que se trataba del escritorio de la secretaria, si es que había una.
Toda aquella primera habitación era abierta y tenía varios toques modernos.
En frente a la puerta de entrada se desplegaban dos puertas de vidrio esfumado, dónde supuestamente debería ser la sala para atender a los pacientes. 
Matt: ¿Te importaría tomar asiento aquí mientras atiendo a tu amiga?
____: No claro que no —dijo sonriendo.
Matt: Estupendo —le devolvió la sonrisa—. Pasa por aquí Beca —le indico por dónde y ambos desaparecieron por la puerta.
Por alguna razón _____ notó que la puerta no se había cerrado del todo. Había quedado entre abierta y eso, para ella, era una oportunidad estupenda. Podría escuchar la consulta y evaluar que tan bueno era aquel Matthew. 
Se sentó en un cómodo sofá de un cuerpo negro y paró el oído. 
Bastaron con que pasaran quince minutos para que ______ se diera cuenta de lo maravilloso que era.
Las palabras, la forma de hablar, los consejos todo, absolutamente todo lo que decía era asombroso. Era muchísimo mejor que Susan… Bueno, tal vez no tanto pero _____ sentía que se llevaría muy bien con él. 
Una hora exacta estuvieron Beca y Matthew hablando. Al salir, los tres bromearon un poco e inmediatamente se despidieron y salieron de allí. 
_____: Am… Beca —dijo para detenerla. La joven se volteo de inmediato.
Beca: ¿Qué sucede?
_____: Me gustaría preguntarle algo a Matthew…
Beca: ¡Sí, claro! —dijo interrumpiéndola—. Te espero abajo —e inmediatamente se dirigió al ascensor. 
_____ volvió a la puerta del apartamento y toco. No paso mucho tiempo antes de que Matthew apareciera.
____: ¡Hola! —dijo animada.
Matt: Hola —pregunto algo desconcertado—. ¿Se olvidaron de algo?
___: Oh, no. Es solo que quería venir para hablar con usted.
Matt: Por favor, tutéame. El usted me hace sentir viejo.
___: Okey —dejo escapar una risita—. El punto es que me gustaría tomar terapia contigo. No lo sé, siento que podrías ayudarme con mi problema.
Matt: ¿Se puede saber qué problema es?
____: Es difícil de explicar, pero todo se resume en un miedo. Un miedo provocado por una amenaza que recibí hace tiempo. 
Matt: Amm… Bueno, en ese caso no sé si…
____: ¡La chica ya no está aquí! —Agregó rápidamente—. Ella no puede hacerme daño pero siento que todo el mundo me observa y pueden llegar a lastimarme. 
Matt: Okey, sí ya veo. Creo que sí tiene que ver conmigo.
____: Estaría muy agradecida si podría ayudarme. En verdad necesito tu ayuda Matthew.
Matt: Llámame Matt por favor. Siempre se los pido a mis pacientes. No me gusta que me llamen por mi nombre completo.
___: Okey… —dijo un tanto desconcertada.
Matt: Mañana tengo un espacio libre a las dos, ¿te parece bien?
___: ¡Sí! —habló entusiasmada—. ¡Por supuesto, sí!
Matt: Muy bien. Te veo mañana.
____: Adiós… ¡Y gracias! 
Matt: A ti —y cerró la puerta.
_____ dejó escapar un suspiro. Finalmente encontró la ayuda que tanto estaba buscando. 
Finalmente podría liberarse de su miedo y ser feliz junto a Logan.

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