XXVI
Tengo que admitir. Son siglos ya, y sigo con las mismas ganas de verte. Cuánto habrás cambiado, cuán distinta has de ser. Miserable el tiempo, que todavía no sabe compartir. Te quiero para ahora, como siempre, más que nunca. Te quiero aún así se te caiga el mundo, y se formen grietas en tu rostro. Te quiero para hacerte el amor de una y mil maneras, y de todas ellas hacerte el amor. Pero el tiempo es egoísta, caprichoso y embustero; no sabe de amores simples, hermosos, eternos, aun no ha vuelto a encontrar amores, amores como el nuestro.
Buena noche. <3 Página 14.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro